Título

BS_1928_01

Descripción

Boletín Salesiano. Enero 1928

Fecha

1928.01

extracted text

I

Año XLIU.

Número 1.

ENERO, 1928

BOLETÍN SALESIANO
R E V IS T A D E L A S O B R A S

DE DO N

BO SCO

S U M A R IO : CaHa del Superior General a los Cooperadores Saiesianos. — La Palrona de los Coopera*
dores Saiesianos. — Novena a Dña. Dorolea de ChopKea. - Lluvia de Gracias. — Don Juan Branda ha
muerto. — Tesoro espiritual. — De nuestras M isiones: Rio Negro: D e la selvas al Colegio. — Culto de
M aría Auxiliadora: La Virgen de Don Bosco (XVI). * Gracias, - Por intercesión del Vble. Don Bosco. Invocando a Domingo Savio. — Por el Alando Salesiano: Argentina: Peregrinación a Lujan * Montevideo :
Homenaje al P. Pittini - Valencia: Visita ilustre. — Al vuelo: Alicante - Bem al - Cotacachi - La Pampa Lima * Medellin - Punta Arenas - Salta - Santa Tecla - Valparaíso. — Los que mueren.

Carta de nuestro Rvdmo. Superior General
a los Cooperadores Saiesianos
Turín, I® de enero de 1928.

brantos, que hubieran podido hacernos
zozobrar, si no tocáramos con mano a
cada momento la asistencia de Dios y de
su Santísima Madre, Marfa Auxiliadora.

Amados Cooperadores y
Beneméritas Cooperadoras:
Os confieso francamente que esta vez
he deseado con ansia que llegara este
Dejad que brevemente os recuerde las
momento, por la importancia de las co­
sas que he de comunicaros, alegres las desgracias que nos han herido, por permisión del Señor,
unas, tristes otras,
las cuales os dirán
cuya mano amorosa
una vez más que la
besamos también en
la adversidad.
Obra de Don Bosco,
En primer lugar
al igual de todas las
varios de nuestros
obras humanas, sin
excluir aquellas en­
edificios han sido
teramente dedicadas
presa de incendios
a la mayor gloria de
más o menos graves.
La nueva Casa para
Dios y a la salvación
formación de per­
de las almas, tiene
sonal, que con tanto
que soportar de vez
en cuando graves
sacrificio había sur­
tribulaciones.
gido juntoal Colegio
Manfredini de Este
El nuevo año se
nos presenta bajo los
{Italia), fué pasto
mejores auspicios;
de las llamas. Igual
suerte le cupo al
pero durante los agran taller-escuela
ños de 1926 y 1927
Noesfro Superior Gcaeral. Rvdmo. D. F. Rioaldi
sufrimos tales que- catre los niños del Colepo Salesiano de Caorgoé (Italia). de carpintería y eba-

Dolorosos pruebas^

1

nistcría de nuestra Casa de S . Pier d'Arena,
junto a Génova; también quedaron com­
pletamente destruidos, la parte principal
de nuestras Escuelas Profesiortales de 5 evilla (España), la Iglesia y dos cuerpos
de edificio de Watsonwille (Estados Unidos)
y la Iglesia parroquial y Colegio de Trelew,
en el territorio del Chubut (Rep. Argentina).
Estos siniestros nos causaron graves
pérdidas materiales que en su mayor parte
gravaron sobre nuestra Obra; sin embargo,
por gracia especial del Señor, no tuvimos
que lamentar ninguna víctima, ni en el
personal ni en los asilados.
En cambio en San Carlos de Ancud
(Chile) se incendió el palacio episcopal
pudiendo a penas salvarse el obispo saíesiano de aquella ciudad, Mons. Abraham
Aguilera que, además de la desgracia
materia!, sufrió la pena mucho mayor de
ver perecer entre las llamas a su secretario,
el sabio y santo salesiano Rdo. Meltzer, que
con gesto heroico, había penetrado en la
iglesia ya pasto de las llamas, para salvar
el Santísimo.
Este triste episodio me hace recordar
la pérdida dolorosa de muchos otros her­
manos y de un número todavía mayor de
beneméritos Cooperadores y celosas Coo­
peradoras, que durante este año han de­
jado este destierro y por los cuales hemos
ofrecido al Señor abundantes sufragios y
que aprovecho esta ocasión para recomen­
dar a la caridad de vuestras oraciones.
Entre estas pérdidas permitid que haga
mención de la del valeroso veterano de
nuestras misiones, c! ejemplar y celoso
D. Juan Bálzola, fallecido en la Prelatura
Apostólica de Río Negro, último campo de
sus apostólicas fatigas y de las no menos
sensibles de D. Julio Bar¿er/s, Catequista
General de nuestra Congregación y de
ü . Juan Branda, por D. Bosco enviado
a fundar las Casas Salesianas de España,
fallecidos el pasado noviembre a la edad
de 8i y 85 años respectivamente.
Ni escasearon otras pruebas.
Los misioneros de la indicada Prela­
tura, a causa de una baja excepcional del
río, tuvieron que sufrir graves priv'aciones
ocasionadas por la interrupción de la na­
vegación y sin duda, una de las causas de
la muerte del querido P. Bálzola, fue
la repetida y prolongada falta del conve­
niente alimento.

También los Misioneros del Matto
Grosso pasaron grandes estrecheces, a
causa de la devastación, completa de sus
residencias, llevada a cabo por un grupo
de revolucionarios y aún hoy día reclaman
urgentes y generosos auxilios.
A estos tristes episodios hay que añadir
los prolongados sufrimientos que afligen
a nuestros hermanos de la China, donde
todas las residencias misioneras del CuangTung, a causa de las vicisitudes de la
guerra civil y de las frecuentes incursiones
de los piratas, han visto paralizada su
obra evangelizadora.
También nuestro pobre Orfanato de
Shanghai, por el cual estuvimos mucho
tiempo con grande ansia, supimos luego
que en parte fué destruido y que los mi­
sioneros y huerfanitos que han podido
quedar en él, se ven obligados a vivir en
contacto con enfermos del cólera, en la
parte que ha quedado en pié, convertida
en Lazareto militar.
Como veis, no nos han faltado tribu­
laciones; pero gracias a Dios estas no han
disminuido ni el celo ni la buena voluntad
de los nuestros, por lo cual damos gracias
y bendecimos al Señor.

/ímifemos a Don Bosco!
í Y tenemos muchos otros motivos para
elevar a Dios un himno de gracias!
En primer lugar por la continua y par­
ticular asistencia con que protege la Obra
de Don Bosco. No puedo ocultaros, oh
queridos Cooperadores y buenas Coope­
radoras, que, en un sitio o en otro, nos
encontramos a menudo con graves estre­
checes; pero al fin la Divina Providencia
no deja nunca de ayudarnos. Cuanto más
pienso en esto (y este pensamiento se
hace cada día en mí más insistente) tanto
más me convenzo de que, entre las grandes
maravillas actuales de la Divina Provi­
dencia, no es la última la de proveer lo
necesario para la Obra Salesiana que cada
día va ensanchando su campo de acción.
Y la consecuencia que espontáneamente
viene a mi alma es siempre la misma: Es
Don Bosco quien sigue viviendo en medio
de nosotros y que nos socorre en todas nues­
tras necesidades.
Por eso llenó de consuelo mi corazón
el ffrande acontecimiento del zo de febrero

del pasado año: la lectura del Decreto sobre
¡a heroicidad de ¡as virtudes de nuestro Vble.
Fundador. Detenido en Turín por una
ligera indisposición, no tuve la dicha de
asistir a la solemne ceremonia, pero tam­
bién yo experimenté, como el más lejano
de los Salesianos y de los Cooperadores,
la misma conmovedora emoción de los
que estuvieron presentes, al oír que el
Vicario de Jesucristo hacía resaltar, como
la Obra de Don Bosco «aún no transcurri-

Asamblea junto a la tumba del Padre, en
Valsálice; y en la grande alegría que expe­
rimentó toda la familia salesiana al ver
elevado al honor de la Sagrada Púrpura
al 2° Cardenal salesiano, Emmo. Mons.
Augusto Hlond, arzobispo de Gnesen y
Poznan y Primado de Polonia.
Pues bien; si queremos que el espíritu
del Vble. Don Bosco siga paternalmente
velando sobre la Obra Salesiana, nosotros,
sobre todo ahora que ya la Iglesia ha

Quifo (Ecaador) — Grupo de ñiños del Oratorio Festivo que hicieron la primera Comunión.

dos 40 años de su muerte, extendida por hablado, hemos de estudiar con afecto
todos los países y anclada en todas ¡as e imitar con solicitud sus virtudes.
playas, es verdaderamente sicut arena in
No hay duda, como también observaba
littore maris» y que «todo este magnífico Su Santidad, que no todos pueden gozar
y maravilloso desarrollo se debe directa de tan gran abundancia de divinos favores;
e inmediatamente al Vble. Don Bosco, que que no todos pueden literalmente imitar su
continúa siendo el Director de todo; no perfección y eficacia de obras, pero todos
sólo el Padre lejano, sino el autor de todo, podemos seguir en ¡a medida de nuestras
siempre presente, siempre actuante en ¡a fuerzas aquella vida completamente entre­
inmutable eficacia de sus normas, y sobre gada a obras de caridad y a ¡a oración *.
todo de sus ejemplos*.
También vosotros, oh amados coope­
Esta continua presencia de Don Bosco radores y celosas cooperadoras, que sois
en medio de nosotros, la hemos visto y los bienhechores y amigos de las obras
casi diría que la hemos palpado, en cada y misiones de Don Bosco, tomadlo como
una de las nuevas fundaciones que, durante modelo y maestro; entrad decididos en
el pasado año, se llevaron a cabo; en el el vasto campo de trabajo que él os ofrece
fervor y actividad con que los Directores y proponeos como lo hemos hecho noso­
de nuestros Oratorios F ^ iv o s de Italia y tros,
aún debiendo necesariamente que­
de gran parte de Europa se reunieron en darnos a gran distancia”, hacer todos los

días, en beneficio vuestro y de vuestros
semejantes, todo el bien que podáis. De
esa manera Don Bosco seguirá viviendo
en sus hijos y en sus Cooperadores y lo
tendremos a nuestro lado en todas nues­
tras necesidades.

La Causa de BeatiBcoción
de una Cooperadora Saleslana.
Así lo hizo aquella ejemplar Coopera­
dora Salcsiana que Don Bosco apellidaba
Madre y que contribuyó grandemente a
la fundación y desarrollo de nuestras
Obras en Barcelona (España), Doña Do­
rotea de Chopifea, Vda. De Serra, que
llevó a tanta perfección el ejercicio de la
caridad en favor de los pobres, que ha
merecido que durante el pasado año fuera
iniciado el proceso diocesano para su
Causa de Beatificación; hecho que debe
llenar de consuelo vuestro corazón, amados
Cooperadores y celosas Cooperadoras, y
animaros grandemente no sólo a imitarla,
como modelo perfecto de cooperación
salcsiana, sino también a invocarla en
vuestras necesidades para que, con la-i
gracias obtenidas por su intercesión, tenga
curso rápido y favorable su Causa de
Beatificación.

Los fundaciones de 1927.
Otra prueba de la asistencia especial
del Señor en favor nuestro, ha sido el haber
podido llevar a cabo, a pesar de las pre­
sentes dificultades, gran número de nuevas
fundaciones. Llegan a sesenta, entre las
de los Salesianos y las de las Hijas de
María Auxiliadora, las nuevas Casas, que
la Obra de Don Bosco ha podido abrir
durante el pasado ano. He aquí su simple
lista con la indicación de la finalidad de
cada una.

a) fundaciones So/esianas.
En Italia; Una Escuela agrícola para
la formación de coadjutores misioneros
agricultores en Cumiana (Turín) — Un
Oratorio Festivo en Tolentino e internados
de segunda enseñanza en Temí, Chiari y
Rovereto.
En E spaña: Unas Escuelas gratuitas

en Alcoy — Una Casa de formación salesiana junto al Templo Nacional del
Sagrado Corazón de Jesús, en el Tibidabo
(Barcelona) y un Colegio de Misiones en
Asfudillo (Palencia).
En F rancia : Una importante residencia
en Tilly (Dep. Seine-et-Oise) para regentar
3 parroquias, varias Iglesias públicas y
unas Escuelas populares. Un internado
con Escuelas de segunda enseñanza y de
Artes y Oficios en Caen (Normandía).
En B élgica : Un Instituto con Escuelas
Elementales, de segunda enseñanza y
Profesionales en Spy junto a Namur.
En A lemania : Un Oratorio Festivo en
Lüstenan-Linz.
En T checoeslovaquia: Un Instituto
con Oratorio Festivo en Frysták y una
Parroquia con Oratorio Festivo en Vrable.
En H ungría : Un establecimiento con
Oratorio cotidiano e Iglesia Pública en
Ujpesf y un internado con Escuelas ele­
mentales y complementarias en Visegrad.
En B rasil : Un Oratorio Festivo en
Río Janeiro.
En el P erú: Una escuela profesional y
agrícola en Puno Salcedo; otra de la misma
índole en Jucay Pumamarca y la dirección
del Seminario de Chachapoyas.

En el E cuador: Una Parroquia y un
Oratorio Festivo en Rocafuerte.
En V enezuela : Otra Parroquia y una
Casa para formación de vocaciones en
Caracas-La Vega.
En los E stados U nidos : Una Casa de
formación en Richenoud.
En C uba: Otra Casa de formación en

Guanabacoo.
En el C ongo B elga : Una nueva resi­
dencia misionera, con asistencia religiosa
a numerosos centros, en Hahyelo y una
grande escuela para los indígenas en
Thiushenda.
En la isla de T imor (Indias Holandesas)
una nueva Misión, con Escuelas profesio­
nales en Dilly.
En A ustralia ; En el estado de Victoria,,
junto a Melbourne, la Escuela agrícola de
Rupertswood, con una grande extensión
de terreno.
En C hina : Un internado con Escuelas
profesionales y Oratorio Festivo en Hong~
Kong.
Finalmente merecen especial mención
las residencias fundadas en los nuevos

campos de misión confiados a los Salesianos en la Prelatura Apostólica de Porto
Velho en el Brasil y en el Siam meridional,
que comprende una gran parte de la pe­
nínsula de Malaca, donde hemos abierto
ya una Casa en la ciudad de Bonxang.
¿Cóm o no ver la mano de Dios en este
extraordinario desarrollo de la Obra saicsiana?

renda) — Bella Muro (Potenza) — Monserrato (Ca§liarí) y Termini (Palermo) y
volvieron a Gioia dei Marsi, donde las
esperaban desde 1 91 5 sus generosas her­
manas sepultadas por el terrible terre­
moto.
En E spaña abrieron escuelas y Orato­
rios Festivos en Madrid, en el barrio de
Tetuán y en Almasuer (Toledo).

Asfudillo (EspaRa) — Los aspiranles misioneros que inauguraron el nuevo Colegio Salesiano de Misiones
haciendo concebir los mejores esperanzas.

b) Fundaciones de /as Hijas
de María Auxiliadora.
También la Congregación de las Hijas
de María Auxiliadora ha añadido un gran
número de obras a las ya existentes.
En Italia : aceptaron el Orfanato del
Buen Pastor para niñas en Macerata. —
Un Colegio con externado y jardín de
infancia en San Cataldo (Caltanisetta) y
otros jardines de infancia, obradores y
Oratorios Festivos en Sale-Casteinuovo
(Tarín) — Croda Vercellese y Chesio (No­
vara) — Ziano in Val di Fiemma (Trento)
— Barco (Reggio Emilia) — Lucca (Toscana) — Casfelnuovo dei Sabbioni (Flo-

En I nglaterra se encargaron de la
Dirección de la Escuela elemental muni­
cipal en Farnborugh.
En Polonia se les ha confiado la D i­
rección interna del Instituto municipal
de Lódz.
En E gipto se han encargado de la asis­
tencia doméstica del Instituto Don Bosco
en Alejan.lría y de la Escuela Colonial de
Bliópolis (Cairo).
Eñ los E stados U nidos han abierto
una nueva Casa en New York con escuelas
parroquiales.
En C uba un Colegio con obrador y
catecismos parroquiales en Nuevitas.
En C hile otro Colegio con externado,

Oratorio Festivo y Jardín de infancia en
Valparaíso.
En C olombia un Colegio para la Co­
lonia Italiana en Barranquilla.
Ademas para recordar el primer cin­
cuentenario de su primera expedición a
América han entrado en las misiones de
Mérida y Son Cristóbal en Venezuela;
han abierto una Casa en Santa Rita del
Araguaya (MattoCrosso-Brasil); una CasaMisión en Ayacucho y otra con Oratorio
Festivo en Juliaca {Perú) y se establecic-

Ved como se ensancha el campo confiado
a vuestra caridad, oh Cooperadores y Coo­
peradoras de Don Bosco; a vosotros toca
cubrir los enormes gastos diarios que uno
obra tan compleja supone; vosotros sois los
que habéis de venir todos los días en ayuda
del Sucesor de Don Bosco para la formación
de nuevos sacerdotes, coadjutores y misio­
neros, necesarios para continuar las obras
iniciadas y para poder atender, las más
urgentes, a lo menos, de las peticiones que
de todas partes ¡o agobian y que vienen de

Quito (Ecuador) — El ediricio en construcción para el Oratorio Festivo.

ron también en Puerto Napegue entre los
pobres indios del Chaco Paraguayo,

"No dejéis de ayudarnos cada dia'\
Con las nuevas fundaciones enume­
radas llegan a mil cien las casas dirigidas
por los Salcsianos y las Hijas de María
Auxiliadora, en uno y otro hemisferio;
mil cien Centros donde se trabaja en el
nombre y con el espíritu de Don Bosco
y bajo el manto protector de María Auxi­
liadora, para la educación cristiana de la
Juventud, para la asistencia de los emigra­
dos, para la conversión de los pueblos
todavía salvajes o idólatras. Un de^anrollo
tan extraordinario, mientras por un lado
os hace ver la particular asistencia del
Señor sobre la Obra salesiana, por otro,
os dice:

personas tan estimables, con palabras tan
conmovedoras, que es una verdadera pena
tener que rechazarlas. Pensad también en
los gastos extraordinarios que debe afrontar.
Durante el pasado año han salido de Tarín
165 entre misioneros y aspirantes al Aposto­
lado y bien sabéis ¡o que cuestan los viajes
hasta los más lejanos continentes. Y sabéis
también que no basta enviar a esta o a aquella residencia de misión un cierto número
de Salesianos y de Hijas de M aría Auxi­
liadora, sino que hay que proveerlos perió­
dicamente de los medios indispensables para
el mantenimienTO de los huérfanos, para
vestir a los neófitos, para edificar capillas
y residencias y para avalorar la predica­
ción, con el remedio de tantas miserias ma­
teriales que afligen a muchos de aquellos
pueblos.
Y no sólo para las misiones, sino aún

entre nosotros se siente ahora más que nunca
!a falta de ¡a caridad. ¡Cuántos niños, en
nuestros países, huérfanos y abandonados!
A lás puertas de nuestras Casas llega dia­
riamente un gran número que, muchas veces
por falta de medios, deben ser rechazados.
Y sin embargo es urgente la necesidad de
acogerlos, mantenerlos y educarlos durante
varios años, para que puedan llegar a ser
ciudadanos cristianos y laboriosos».

Para 1928.

Devoción a Mario Auxiliadora.
No me resta sino haceros una especial
recomendación para el año 1928. El 17
del próximo mayo se cumplirán los 25
años de la Coronación Pontificia de Mario
Sma. Auxiliadora. Muchos de vosotros

Madrid (España) — Los dos mÜ niños del Oralorío Festivo en ano de los peüos

He aquí oh buenos Cooperadores y ca­
ritativas Cooperadoras lo que debe de­
ciros el gran desarrollo de la Obra de Don
Bosco.
Por lo tanto yo sólo añadiré: « Acor­
dados todos ¡os días de nuestras necesi­
dades, ayudadnos a mantener y a educar
a los niños de nuestros colegios, a formar
numerosas vocaciones de sacerdotes, de coad­
jutores y de misioneros, a sostener las obras
iniciadas y a fundar otras nuevas y no du­
déis que Don Bosco os obtendrá del Señor
la más cumplida recompensa en esta y en
la otra vida.

recordarán el grande espectáculo de fe
que Turín contempló en aquellos días y
supongo que a todos os complacerá el
saber que no queremos pase desaperci­
bida una fecha tan memorable.
El Vble. Don Bosco cuándo vió acer­
carse la fecha de la aprobación pontificia
de la Congregación Salesiana, que debía
señalar el principio de su difusión, quiso
antes levantar un gran templo a Aquella
que había sido la inspiradora de su Obra
y que debía continuar siendo su Madre
y protectora. Y efectivamente: bajo el
manto de María Auxiliadora la Obra de

—

8

algún homenaje en honor de nuestra ce­
lestial Protectora.
Llevad siempre con vosotros y difun­
didla entre vuestros amigos y conocidos,
la medalla de M aría Auxiliadora y en todas
vuestras necesidades acudid a Ella con
la Novena recomendada por Don Bosco,
i) para cumplir un deber.
teniendo presentes aquellas palabras de
z) para atraer muchas almas a su de­ nuestro Vble. Padre:
« En estos tiempos, haciéndose sentir de
voción.
un modo especial ¡a falta de medios mate­
3)
para impetrar y merecer de Ella gra­
cias especiales para cada uno de nosotros riales para educar en la fe y buenas costum­
en particular y para la Obra salesiana en bres a los jovencitos más pobres y abando­
nados, la misma Santísima Virgen se ha
general.
constituido en su especial Protectora y por
Por el Programa de festejos proyectados, eso obtiene a sus bienhechores y bienhechoras,
conoceréis mi vivo deseo de que, doquiera multitud de gracias espirituales y aún tem­
Y la siguiente
existen casas Salesianas, se celebren Con­ porales extraordinarias
gresos locales, Regionales y Nacionales so­ explícita promesa:
« Los que deseen gracias de M aría Au­
bre el culto de María Auxiliadora, como
preparación y adhesión al X I Congreso xiliadora ayuden a las Misiones Salesianas
Internacional de Cooperadores Salesianos y estén seguros de que las obtendrán.
Pedid también, en circunstancias espe­
que se reunirá en Turín en el próximo
mayo para tratar del mismo argumento. ciales, la Bendición de M aría Auxiliadora,
Mi antecesor Don Miguel Rúa de ve­ según la fórmula que hace 50 años aprobó
nerada memoria, 25 años hace, al anunciar el Papa León X l l l , a instancias del Vble.
el acontecimiento de la Coronación Pon­ Don Bosco, y que se encuentra en el
tificia de María Auxiliadora, escribía estas Ritual Romano. El cincuentenario de esta
palabras: Para nosotros M aría Auxiliadora Bendición, con la cual se han obtenido
tantas gracias extraordinarias, debe ani­
lo es todo. Ella es quien inspiró y guió pro
digiosamente a nuestro Don Bosco en todas marnos más y más a practicar y a difun­
sus empresas; Ella es quien sigue todavía dir esta devoción, tan acepta a la Celeste
otorgándonos su maternal asistencia, de ma­ Patrona de las Obras Salesianas, la Virgen
nera que con toda razón podemos repetir de Don Bosco, María Auxiliadora.
Acoged benignamente, oh amados Coo­
con Don Bosco que todo lo que tenemos y
hacemos lo debemos a María Auxiliadora. peradores, estas mis exhortaciones y no
¡Amados Cooperadores! Preparaos para tardará en llegar el día en que todos ten­
hacer también vosotros todo lo que po­ gáis que exclamar: También nosotros pal­
dáis para honrar y hacer amar a María pamos cada día la maternal protección de
Auxiliadora. Haced que su imagen tenga M aría Auxiliadora sobre nosotros y sobre
un puesto de honor en vuestras casas. nuestras familias, en todos nuestros asuntos
Haced que en vuestros labios resuene espirituales y temporales.
Con esta esperanza, os renuevo la pro­
todos los días y varias veces al día su ¡aculatoria, enriquecida con indulgencias: mesa de teneros todos los días presentes
María Auxilium Christianorum, ora pro en mis oraciones y en las oraciones de las
almas por vosotros beneficiadas y me pro­
nobis.
A los Rvdos. Cooperadores sacerdotes feso con profunda gratitud, oh amados
les recomiendo propaguen, doquiera sea Cooperadores y beneméritas Cooperadoras
posible, la piadosa práctica del 24 de cada
Vuestro humilde y afmo. servidor
mes, e invito a todos los Cooperadores a
FELIPE RINALDI Pbro.
ofrecer en aquel día, aún privadamente.
Don Bosco se ha ¡do consolidando y di­
fundiendo por el mundo entero.
Pues bien; nosotros queremos apro­
vechar esta ocasión para manifestar a la
Reina de los Ciclos toda nuestra devoción
y gratitud y esto:

- = 35^

-- *

I

1

La Patrona de los Cooperadores Salesianos
Al hablar de
Dorotea, como de los demás Siervos
de Dios, nos importa hacer constar que no queremos en
manera alguna contravenir a las disposiciones pontifls
d as, ni atribuir a ningún hecho una autoridad superior
a la que merece un simple testimonio humano, ni p r o
venir el juicio de la Iglesia, de la cual, a ejemplo de
Don Bosco, nos gloriamos de ser obedientísimos hijos.

Todas las entidades y profesiones buscan
algún Santo o Santa que haya ejercido
su profesión o alguna parecida para hon­
rarlo c invocarlo como Patrono y, en la
medida de las propias fuerzas, imitarlo.
Como ya saben nuestros lectores por

anteriores números del Boletín (i) Dios
nuestro Señor ha querido que, a ios 50
años de la fundación de la Pía Unión de
los Cooperadores Salesianos, uno de ellos,
la Sierva de Dios, D ña . D orotea de C hoP i T E A , mereciera por sus virtudes, que se
iniciara el proceso canónico para su bea­
tificación; de manera que, si, como espe­
ramos, la Iglesia la eleva al honor de los
altares, los Cooperadores tendrán un mo­
delo seguro a quien imitar, una intercesora poderosa ante el trono del Altísimo,
( 1) v a s e

Bol. Sal.:

IX , 19 2 6 — 11-lV-VIl-lX, 19 2 7 .

Córtese por donde indican las líneas y dóblese para poner en el Devocionario.
jOh Santo Espíritu de amor y caridadl que
nos enseñasteis por el Real Profeta, ser di«
ch.'isos y bienaventurados los que se emplean
constantemente en socorrer a los pobres y
necesitados, pues les librará el Señor en el
día de la muerte; por la santa muerte que
concedisteis a vuestra sierva Dorotea, que tan
caritativa fué con los pobres, concedednos
las gracias que os pedimos en esta novena,
y la gracia de las gracias que es la persea
veranda final en vuestro amor. Amén.

NOVENA
A LA SAN TÍSIM A TRINIDAD
poro alcanzar los divinos favores
por la intercesión de lo Siervo de Dios

Padrenuestro, Avemaria, Gloria.

jOh Trinidad Santísima. Padre, Hijo y Es*
piritu Santo!, que en vuestra fíel sierva Doa
rotea nos dejasteis un modelo acabado de
Cooperadón Salesiana, tanto por la santidad
de la vida, como por el espíritu de caridad
cristiarxa que animó todos sus actos, conce<
dednos la grada de cumplir, a imitadón suya,
los deberes de esta Pía Unión a la cual per»
tenecemos (o deseamos pertenecer) y dignaos
otoi^arnos la grada que os pedimos en esta
novena si es para mayor gloria de Dios y pro=
vecho de los pobredtos de lesucristo. Así sea.

Salve Refina.

® ®

0

m la» p e r s o e e * ijme abfeagaa aigmea
gracia qae ta comamiqacm a la RedaceJOa d d B o ie fia
Salí, w aiu . V ia C ollolcago S i - Toriao (109) Italia
y a! V ictp o t talador d e ¡a Camaa, el Phre. Salesiaao
D. JmUém Mautma. Eacwclas S a lea ia a ^. A parta­
do t7 S - B a r r l r i e i F tpai» a l eami deberéa eariar
faiab:éa las Hatonat para la Camaa de RtaH£caciáa.
S e a y frc i

DSa. DOROTEA D E CHOPITEA,
Nadó en Santiago de Chile el 4 de
junio de 1816. A causa de ¡a guerra de
¡a independencia de las colonias ame­
ricanas. toda su familia se trasladó a

10

salida de su misma Asociación, la que
mejor que nadie podrá llamarse la Patrono
de los Cooperadores Sahsianos.
Es necesario, pues, que los Coopera­
dores del mundo entero tengan especial
empeño en conocer la vida (2) de esta mo­
delo de Cooperadores Salesianos, a quien
Don Bosco apellidaba Madre, que estudien,
para imitarlos, sus ejemplos de caridad
heroica, que la den a conocer sobre todo
a aquellos a quienes Dios ha concedido
abundancia de bienes de fortuna; pues
muy bien se puede presentar como una
Santa millonaria y su vida como el modo
único y seguro para que ¡os millones no
obstruyan ¡a entrada del Cielo a los que
los poseen.
Pero sobre todo debe ser un empeño

(a) Un modelo de caridad ■ Dña. Dorotea de Cho^
pitea por el P. ¡. A leg r e S. J. — Editorial Litúrgica
EspaAola, Cortes $ 8 i « Barcelona (España).

Barcelona en 1819. A los 16 años con­
trajo tnatrimonio con D. José M*. Serra,
con quien vivió por espacio de 50 años
como modelo acabado de todas ¡as vir­
tudes, y especialmente de ¡o caridad con
los pobres, tanto en vida de su marido,
como en los nueve anos que le sobrevivió.
En la gran transformación que e.xperimentó Barcelona en el siglo xix, fué la señora
providencial enviada por Dios para que
¡a Ciudad Condal pudiera figurar entre
las ciudades más caritativas del mundo.
Pasan de 70 los colegios, hospitales y
asilos que fundó o ayudó a fundar. La
Congregación Salesiana, en particular,
le debe la fundación y desarrollo de las
Escudas Profesionales de Sarriá, de
las Escudas Populares gratuitas de
Hostafranchs y del Colegio de Santa
Dorotea para las Hijas de María Au­
xiliadora. Y las cuantiosas limosnas que
todas estas Obras suponían las hacía a
pesar de tener cinco hijas, a las que
Cilucó cristianamente e inculcó sus prin­
cipios de caridad y amor hacia ¡os pobres.
Después de una vida santísima, llena
de actos de abnegación, murió en Bar­
celona el 5 de abril de 1891, a los
75 años de edad, rodeada de sus hijos,
nietos y bisnietos, a quienes guió siempre
por el camino del Cielo.

de todos los miembros de la Pía Unión,
contribuir a la glorificación de esta Sierva
de Dios, pidiendo todos los días que el pro­
ceso iniciado para su Causa de Beatifica­
ción prospere y especialmente invocándola
en todas sus necesidades y trances apu­
rados, para que la lluvia de gracias, que
se van obteniendo por su intercesión, au­
mente más y más, a medida que aumente
nuestra fe y confianza y formen, junto con
sus virtudes, la peana de gloria que la
eleve, así lo esperamos, al honor de los
altares.
Don de Dios significa el nombre de Do­
rotea. El regalo que el Señor os envía, ama­
dos cooperadores, para el año 1928, es
esta ejemplar Cooperadora Salesiana para
que la conozcáis, la imitéis y la invoquéis.
Para facilitar su invocación publicamos
aquí una Novena, enriquecida con indul­
gencias por varios Sres. Obispos y con
la cual se han obtenido ya numerosas
gracias de las que entresacamos algunas.

000 ® 0 © 0000 ® ® ® 0000 ® 0 ® 0 ® ® ®
NOVENA.
Por la señal...
Acto de contriciÓB.

lOh Padre Eterno! que por el Profeta Isaías
nos mandáis repartir nuestro pan con el pobre y
necesitado y que en el corazón de vuestra sierva
Dorotea infundisteis un tan grande amor de
madre, no sólo para su numerosa familia, sino
también para todos los que se hallasen en
alguna necesidad espiritual o corporal; por
aquella gran caridad con que por amor vuestro
socorría a todos los necesitados, mostraos pro»
pido a las súplicas, que en mi favor os prc»
senta y escuchad mis plegarias, concediéndome
la gracia particular que os pido en esta Novena.
Padrenatsirú, Avemaria, Gloria.
|Oh Hlio Divino y Señor Nuestro Jesucristo!
Vos, que en ai día del luido diréis a todos los
que han empicado sus bienes en socorrer a los
pobres y necesitados, que todo lo que con ellos
hicieron con Vos mismo lo hicieron; por las
ntuchas veces que vuestra sierva Dorotea os
sirvió en los pobres durante su vida, glorifis
cadla ahora después de su muerte, a fín de
que pueda servir de modelo a los que han
recibido de Vos con abundanda los bienes
de la tierra, y concedednos la gracia que
por su intercesión os pedimos.
Padrenuestro, Avemaria. Gloria.

i

LLUVIA D E G R A C IA S
atribuidas a la intercesión de la Sierva de Dios
Dña. DOROTEA D E CHOPITEA
B arce »ONA {España). — Era por el mes de
Julio del año 1924 cuando me vinieron a buscar
para confesar a un joven que se estaba mu­
riendo. Tenía una pulmonía que se había ido
alarg;ando con varias complicaciones, de tal suerte
que el médico Dr. Cornudella creía imposible

santitad y cuya vida se estaba entonces leyendo
en el comedor de nuestro Colegio.
Al día siguiente comenzó la mejoría de! en­
fermo y al terminar la novena estaba ya casi
del todo bien. Actualmente goza de perfecta
salud.
Octubre 1925.
J acinto A legre S . /.
B arcelona (España). — A primeros de enero de 1925 se estaba muriendo, de una llaga

Panfa Arenas (Chile) — El clero infantil del Colegio SaleMano.

que saliese de aquella enfermedad y que en caso
de salir quedaría completamente tísico. Tenía
este joven un tío jesuíta en este mismo Colegio
del Sagrado Corazón de Jesús de Barcelona,
que entonces estaba fuera de la cuidad, predi­
cando y aunque había de llegar pronto, no se
creyó prudente aguardar a que volviese, pues
estaba el enfermo' tan grave, que se temía mo­
riría aquella misma noche.
Como se trataba de un joven piadoso, no
costó mucho trabajo hablarle de Sacramentos,
que se le administraron en seguida y que él
recibió con gran fervor y piedad.
Luego le propuse comenzar una Novena a
U Santísima Trinidad, para alcanzar la salud
por los méritos de Dña. Dorotea de Chopitea,
que por su gran caridad con los pobres había
muerto hacía ya algunos años, con fama de

en el estómago, el Director del Colegio de San
Luís Gonzaga, uno de los mejores colegios
seglares de segunda enseñanza de Barcelona.
Cuando se le administraron los últimos sa­
cramentos la esposa del enfermo dijo al sacer­
dote que lo asistía, que era el P. Alegre, de la
Compañía de Jesús; Hemos consultado los
mejores médicos, Rosell, Pont, Gallard, PuigSureda y todos nos dicen que para que pueda
vivir se necesita un milagro.
Como el P. Alegre sabía que a este enfenno
se le podía hablar con toda claridad le dijo;
Dicen que para que pueda V. vivir se nece­
sita un milagro y ese es el que nos hace falta
para la glorificación de Dña. Dorotea de Chopltea, tan caritativa con los pobres ¿Quiere que
comencemos una Novena?
Inmediatamente, dijo el enfermo; y aún

I
12

prometo que si alcanzo de Dios el beneficio de
la salud trabajaré para su Causa de Beatificación.
Los nueve días siguientes, cuando el Padre
Jesuíta iba a verle, llevaba consigo la recomen­
dación dcl alma creyendo que debería hacér­
sela. El enfermo vivía solo de inyecciones. Le
entró un gran deseo de que le hiciesen la ope­
ración. El confesor, consultado, respondió que
se la hicieran, siquiera para que muriera a gus­
to. La hizo el Dr. Puig-Sureda. Para ello fué
preciso Inyectar el enfermo sangre de su hijo
Manuel, pues con tantos años de enfermedad y
con tantas hemorragias, apenas le quedaba. Mo
debió quedar el Doctor muy satisfecho de la
operación cuando al terminar dijo que debería
repetirla a las tres semanas y a las hermanas que
le preguntaron qué le habrían de dar cuando des­
pertase, contestó: — Nada, porque no despertará.
Despertó sin ningún dolor y en seguida pidió
alimento. Al poco tiempo podía sentarse a la
mesa con su familia y comer como ellos.
Pero sufrió en los primeros días una compli­
cación. Era el 5 de febrero y al día siguiente,
todos los alumnos de su Colegio fueron a co­
mulgar, como lo hacen todos los primeros vier­
nes en honor dcl Sagdo. Corazón de Jesús.
Aquel día quedó el enfermo completamente
curado. Era el día de la fiesta de Santa Doroteo,
V'irgcn y mártir.
JO - IX - 1927.
A. }. P.
M adrid (España). — Mucho me place ver
como en el Boletín Salesiano se promueve la
devoción a la que fué gran Cooperadora salcsiana, la caritativa y virtuosa dama Dña. Dorotea
de Chopitea. También yo me considero deudor
a Ella de una gracia cspccialisima:
Hallándome en delicadísimo estado de salud
qub hizo temer hasta por mi vida, invoque
dej un modo especial para obtener la curación,
si era conforme a la voluntad de Dios, a
su fiel Sierva Dña. Dorotea de Chopitea, por
cuya intercesión sabía que se empezaban a
obtener cu Barcelona gracias señaladas.
Con sentimientos de gratitud y de admira­
ción hacia la primera Cooperadora Salesiana de
España he de confesar que, en contra de lo que
la ciencia pudo en un principio prever, fui re­
cobrando la salud hasta poderme entregar de
nuevo al trabajo no ligero que la obediencia
me ha confiado.
¡Ojalá que el conocimiento de las virtudes
de Dña. Dorotea se extienda por doquiera y
que crezca la conlianza en su poderosa interce­
sión, para que podamos ver cuanto antes ele­

1

vada al honor de los altares a esta ejemplar Coo~
peradora salesiana!
15 de noviembre de 1927.
M arcelino O laechea , Pbro Salesiano.
Inspector de la Provincia Céltica.
Encarecemos mucho a nuestros lectores y espe­
cialmente a los Cooperadores Salesianos se re­
comienden a la intercesión de Dña. Dorotea y
lo aconsejen a otros, invitándoles a publicar la
gracia, a enviar alguna limosna para su causa de
beatificación y a hacerse cooperadores Salesia­
nos, si todavía no lo fueran.

CONDICIONES
para formar parte de la Pía Unión
de los Cooperadores Salesianos.
1 ) Haber cumplido los 16 anos de edad.
2) Gozar de buena reputación religiosa
y social.
j) Procurar en sí y en los demás un ideal
de vida cristiana según el espíritu de caridad
y mansedumbre propio de Don Bosco y pron¡over en la medida de las propias fuerzas,
por medio de la oración, de la prestación
personal, de la propaganda y, si es posible,
de la limosna, las obras de la Pía Sociedad
Salesiana: Oratorios Festivos, Escuelas de
Artes y Oficios, Colonias Agrícolas, Es­
cuelas gratuitas, Misiones, etc.
4) Hay concedidas gran número de in­
dulgencias plenarias y parciales, para cuya
adquisición basta rezar todos los días un
Pater, Ave y Gloria a San Francisco de
Sales con la jaculatoria: Sánete Francisce
Sales!, ora pro nobis.
5) Organo de la Pía Unión, que cuenta
con unos 500.000 asociados en iodo el
mundo, es el Boletín Salesiano, que se edita
en Turín en diez lenguas: italiano, caste­
llano, portugués, francés, inglés, alemán,
yugoeslavo, ihcecoeslovaco, polaco y lituano.
Pora recibirlo basta solicitar su envío a la
Casa Salesiana más próxima, o a la Casa
Madre de los Salesianos [Via Cottolengo 32
Turín-Italia). No tiene precio de suscripción,
pero se agradece una pequeña oferta para
contribuir a ¡os gastos de impresión y envío.

fundadas por el Vble. Juan Bosco. — No deben faltar en
L ^ C i- L U ia o V - . a i U l l l . a s > ,
hogar de Cooperadores Salesianos o de exalumnes.
De Buenos A ires hemos recibido la entrega N. 522 correspondiente al mes de Octubre de 19: 7 .
Se titula: Aiorgarits Bosco y narra la vida ejemplar de la Madre de nuestro Vble. Fundadi r.

15

¡El Rvdo. D. Juan Branda ha muerío!
n. en Nizza Monferrato (lialia) el 1 5 - V - 1842
^ en Turín el 23-XI-1927 a los 85 años de edad.

¡Salesianos de Es­
por la misericordia de
paña! ¡Llorad, rezad
Dios, por los méritos
y consolaos!
de Jesucristo e inter­
¡Cooperadores Sa­
cesión de M aría San­
lesianos de España!
tísima ».
Acompañadnos en
Pero consolémo­
nuestro dolor, unios
nos, porque ha muer­
a nuestras plegarias,
to un santo y hemos
participad de nuestro
adquirido un protec­
consuelo.
tor más en el Paraíso.
Si, lloremos; por­
Esta fué la exclama­
que acá en la tierra
ción espontánea de
hemos perdido a uno
cuantos con él con­
de ios salesianos más
vivían en la Casa
ancianos, confidente
Madre y admiraban
y amigo del Vble.
todos los días su
Don Bosco, por él
humildad verdadera­
escogido para ser el
mente extraordinaria,
fundador de la Con­
el rigor consigo mis­
gregación Salcsiana
mo y la mortificación
en España, hacia la
llevada hasta el ex­
cual conservaba un
ceso, la piedad pro­
amor tan grande que
funda que hacía de
no podía hablar de £1 Rvdo. Don Juan Bta. Branda, a lo« SO aRos.
él un alma en conti­
en ocasión de las bodas de oro de su 1* Misa.
ella sin conmoverse;
núa oración y unión
las casas de Utrera,
con Dios y la caridad
Málaga y Sarria le deben la vida y en que ardía en su corazón, que le hacía
ellas derrochó los tesoros de su actividad rezar diariamente por cada uno de sus
juvenil y de su celo por la gloria de Dios hermanos, y con la cual acogía a inuy la salvación de las almas. Un sentimiento merables almas en un verdadero apos­
de gratitud debe humedecer nuestros ojos tolado como confesor, caridad que fué
en llanto. Son los hijos que lloran ante la causa de su última enfermedad, que
el cadáver del padre.
en tan pocos días lo arrebató a nuestro
Y recemos; porque es el único obsequio afecto; pudiéndose decir de él que, como
que ahora podemos hacerle, pues aunque buen pastor, díó la vida por sus ovejas.
esperamos que su alma no lo necesita, Podemos pues invocarlo y encomendarnos
con ello cumplimos un deber, le mani­ a él con confianza, sobre todo los Salefestamos nuestro amor y satisfacemos un sianos y Cooperadores Salesianos de Es­
vivo deseo suyo, por él manifestado pocos paña por quienes él sentía tanto afecto.
días antes de su muerte, en el que sin duda Quien estas líneas escribe, que ayudó a
fué su último escrito y que por dicha amortajar su cadáver, apenas terminado
nuestra conservamos: « A todo he renun­ el piadoso servicio, arrodillado a su lado,
ciado excepto a la caridad de los pocos que estrechando sus manos todavía calientes,
me conocieron para que quieran encomen­ le pidió con todo el afecto del alma por
darme a Dios a fin de que me libre del Pur- cada una de las Casas, de los Salesianos
Satorío, al que espero ir después de mi muerte, y de los Cooperadores de España, para

»4

que él sea desde el Cielo, como el ángel
tutelar de la Obra Salesiana en aquella
Nación, a donde le envió el mismo Don
Bosco, para echar los cimientos de su Obra.
Este pensamiento debe llenar nuestra
alma de consuelo, en medio de la aflicción
que su muerte no puede menos de cau­
sarnos.

Los dafos de su vida.
Poco conocemos, desgraciadamente, de su
vida, que sin duda hubiera sido grandemente
edificante para todos sus hermanos y que ha­
cemos votos para que llegue a escribirse. Y a
esta ignorancia ha contribuido sin duda cl pro­
pósito que él había hecho de vivir ignorado,
como él mismo lo manifestó en cl escrito antes
citado, cuando le liabíamos rogado que para
consuelo y edificación de los salesianos de Espa­
ña, quisiera manifestarnos los recuerdos de su
vida: « M i intención fué y es hoy día la de vivir
ignorado lo más posible tanto en este residuo de
mi vida, como después de muerto *.
Nació en Nizza Monferrato (Italia), el 15 de
mayo de 1842. Se ve que ya desde su juventud
sentía la vocación de trabajar en pro de la ni­
ñez, pues en su misma casa había organizado una
especie de escuela nocturna para los niños del
pueblo.
En el pleno vigor de la juventud sintió el
ideal del sacerdocio y consultando con su párro­
co esta su ihtención, el buen sacerdote le acon­
sejó que se fuera con Don Bosco a Turín, donde
¿ste había dado comienzo a una obra extraor­
dinaria en favor de la juventud pobre y que
además facilitaba a los de edad ya avanzada
el llegar a ser sacerdotes.
El joven Branda no se hizo sordo al divino
llamamiento y el día 24 de abril de 1868 entraba
en el Oratorio de Turín a la edad de zóanos.
Don Bosco lo recibió con gran bondad y se
manifestó complacido por la adquisición hecha.
Emprendió en seguida con gran fervor los estu­
dios de latín, ya que él había seguido los estudios
de ciencias y tenía cl título de delineante, y en
cl mes de setiembre del mismo año, fué admi­
tido en cl Noviciado de lo que todavia no se
llamaba Congregación Salesiana sino »que­
darse con Don Bosco *.
De manos del mismo Don Bosco recibió el
hábito clerical cl día' 4 de octubre de 1869,
y fué luego con D. Pablo Albcra a abrir la Casa
do 5 . Pier d'Arena, siendo ordenado sacerdote
cl t2 de abril de 187?.
Por encargo dcl mismo Don Bosco estuvo
después al frente de las nacientes Escuelas Pro­
fesionales de Artes y Oficios en cl Oratorio
de Turín, y de aquel tiempo conscr\amos dos
cartas que Don Bosco le escribió desde Roma

en enero del 77 y en marzo del 78, que son
una prueba de la grande estima y afecto que
el Vble. le profesaba.

Su acción en España.
Cuando se trató de introducir la Congrega­
ción Salesiana en España Don Branda fué el
escogido por Don Bosco para la delicada misión.
Al enviarlo a España en octubre de 1880 Don
Bosco le dijo estas palabras: * Ahora vas a abrir
la Casa de Utrera, pero permanecerás allí poco
tiempo; una señora de Barcelona nos llamará y
nos dará todo lo necesario para fundar una grande
Casa Téngase en cuenta que Don Bosco de­
cía estas palabras cuando la gran Cooperadora
Salesiana de Barcelona Doña Dorotea de Chopitea, de la que hablamos en otro lugar de
este número, no sabía ni que los salesianos
existieran.
Dos años permaneció D- Juan Branda en
Utrera, desde 1881 al 1885, durante los cuales
encaminó la fundación del Asilo de San Bar­
tolomé de Málaga. Estando en esta ciudad re­
cibió la carta en que Dña. Dorotea la pedía
una fundación Salesiana en Barcelona, a donde
llegó en marzo de 1883. Allí dió vida y forma
a las Escuelas de Artes y Oficios, intervino en
la fundación del Colegio de las Hijas de María
Auxiliadora y en la de las Escuelas Populares
de Hostafranchs; fué objeto de uno de los he­
chos más portentosos de la vida de Don Bosco,
que se le apareció corporalmente estando a)
mismo tiempo en Turín; y lo recibió más tarde
en Barcelona, donde se le tributó una acogida
que tuvo los caracteres de una apoteosis. Hasta
que en 1889, después de la muerte de Don
Bosco, fué llamado a Turín para ser sustituido
por cl Rdo. D. Felipe Rinaldi, actual Superior
General de nuestra Congregación.
De esta época de su vida son dos cartas que
tenemos en nuestro poder, las cuales creo que
serán dcl agrado de nuestros lectores, pues se
refieren al origen de nuestra Obra en España.
La primera es de D. Juan Branda desde Málaga
a Dña. Dorotea y la segunda del Vble. Don
Bosco a Don Juan Branda cuando éste era ya
Director de la naciente Casa de Sarria. Dice
así la primera:
San Bartolomé - Asilo de pobres niños huér­
fanos - Málaga - ¡n Carde lesu - 4 de octubre de
1882.
Sra. Dña. Dorotea Chopitea Vda. de Serra.
Barcelona.
Muy Sra. mía y de toda mi mayor considera­
ción, Acabo de recibir su apreciada carta de V.con
algún día de retraso por haberme ausentado de
Utrera. Hállome en esta dando la última mano
para venir y tomar la definitiva administración
y dirección de este pobre Asilo, que estando ya
para hundirse, la Divina Providencia nos llamó

i

15

desde los primeros días de nuestra llegada a España,
y sólo con nuestra influencia y compromiso de
proveeer el personal lo más pronto , haciendo de
vez en cuando una visita, se alcanzó que ¡os buenos
sacerdotes que estaban a su cuidado no ¡o de­
samparasen.
Se reunieron fondos para levantar la Obra,
se aumentó el número de asilados hasta 6o niños
y ahora por la generosidad de dos señores, D. Fran­
cisco Mitjana y Sr. Saria, hay Casa para más
de 200. Los recursos para mantener y vestir a los
niños se hallan en fondos que dieron piadosas
personas, después que nosotros hemos aceptado el

de los talleres y Escuelas en las poblaciones ma­
yores según su exigencia.
Le enviaré a V. unos Boletines por los cuales
llegará a conocer mejor la marcha de nuestra
Congregación y su tarea.
Los medios para levantar una Casa como ésta
de Málaga son ¡os mismos que ¡os expresados arri­
ba. S i hay fondos para todo sin necesitar limos­
nas fijas mensuales, mejor] mas convendrá siem­
pre dejar abierta ¡a puerta a la caridad de todos
los que quieran concurrir.
Para empezar no se necesita una gran Casa]
bastaría una regular con su Capilla para ¡os PP.

EJ cad6ver de D. Juan Branda en la cafMlla ardiente.

asilo, y en suscripciones de limosnas mensuales
para pagar ¡os gastos de comida, etc.
Por fin de mes llegarán de Italia, algunos que
pedí y con otros que ya están preparados en Utrera,
se vendrá a dar desarrollo a esta Casa] puede
causar dilación el trabajo de los albañiles, pero no
será cosa de mucho tiempo.
Aqui tiene V. casi expresada ¡a forma y ¡os
procedimientos de nuestra Institución. Nuestro
objeto son los niños pobres en favor de ¡os cuáles
se abren escuelas de día, de noche y Oratorios
Festivos. Los más abandonados y ¡os que nada
aprovecharían en ¡as Escuelas, si no viniesen asi­
lados, para estos se abren Casas que se ¡laman
Hospicios, Asilos, Patronatos y Oratorios, pero
por variar de nombre en nada varían en la sus­
tancia, a saber-. Instrucción y educación es ¡a
misma en todas. Sólo puede aumentar el número

m

y pora los niños. Nuestra Congregación para
abrir Casas no exige pago para sus individuos,
sino sólo lo necesario para vivir y vestir. Los in­
dividuos que componen una Casa son sacerdotes,
acólitos y seglares, maestros de artes y oficios]
ellos se multiplican según las exigencias del Ins­
tituto.
Hay que reflexionar que Barcelona es una de
¡as poblaciones más importantes y por ¡o tanto
se debe colocar el Instituto en una localidad capaz
de grandes ampliaciones, sin gastos de destrucción.
Tenemos muchos pedidos para abrir casas en
España, pero mi Superior General Don Basco
me dijo que pronto me llamarían de Barcelona
y que allí tendremos que levantar una de ¡as
mejores Casas de Beneficencia. ¿Será V. ¡a esco­
gida por Dios para levantar esta Obra? Yo le
daría la enhorabuena y desde luego 'mande para

lÓ
otros pormenores a su atento y humilde servidor
y Cap. que se repite de V.
J uan B randa Pbro.
P. D. Me tomo ¡a libertad de enviarle el di­
ploma de Cooperadora nuestra y si las piadosas
personas que ayudarán a levantar la Obra quieren
aceptar lo mismo, V. me mande los nombres que
se les mandará luego de Utrera.
Como se ve esta carta era contestación a la
primera que había escrito Oña. Dorotea, soli­
citando la fundación de una Casa Salesiana
en Barcelona, hace 4 ; años.
La de Don Bosco parece escrita en un año
en que el cólera afligía a la ciudad de Barcelona.
Dice así traducida literalmente del italiano;
M i querido Don Branda.
Los diarios van publicando como el cólera os va
cada día amenazando más. Es una prueba que
Dios nos hace. Tenemos con nosotros el antídoto.
Sepámonos servir de él. Pero servios de él y re­
comiéndalo todos los días: María Auxilium Christianorum, ora pro nobis, tres veces, frecuente Co­
munión y una medalla de Ella sobre la persona.
Por lo que a ti se refiere, ofrécete para recibir
a los que quedan huérfanos del cólera, mientras
quepan en tu Casa.
Dirás a la familia de los Sres. Chopitea que
Don Bosco ruega y hace rogar a todos sus niños
huérfanos, todos los días en Ja Santa Misa según
todas sus intencionas y que les agradezco mucho
la caridad que nos hacen.
S i las cosas públicas lo permiten nos veremos
y trataremos de nuestros asuntos, que no son pocos.
Entre tanto empieza a enviar a Don Rúa una
nota de todo lo que te será necesario para el año
venidero y haremos lo posible para proveer las
cosas necesarias para trabajar para la mayor
gloria de Dios.
M i salud va mejorando y puedo encargarme
de algunos asuntos más especiales.
María nos ayude a todos, nos proteja, nos de­
fienda de todo peligro del alma y del cuerpo; pero
rogad también por mi que os seré siempre en J . C.
afmo. amigo.
Turin 10 de agosto 1885.
Sac. J uan B osco.
Esta carta la escribía Don Bosco seis meses
antes de aparecerse prodigiosamente a Don
Branda, 8 meses antes de su ida normal a Bar­
celona y poco más de dos años antes de su
muerte, acaecida en enero de 1888.
O fro s cargos.
Vuelto a Turin D. Juan Branda, fuó Prefecto
en las Casas de San Juan Evangelista y de Valsálice; luego fue enviado a la ciudad de Chieri
donde levantó una gran iglesia a María Auxi­
liadora: mas tarde en 1001 fué envidado a u-

rich (Suiza) como Director y encargado de la
Misión Italiana, que los salesianos regentan en
aquella ciudad, donde permaneció hasta el año
1907; en 1909 lo vemos encargado de igual
cargo en la ciudad de Diedenhofen (AlsaciaLorena), donde permaneció durante el tiempo
de la Guerra Europea, respetado por las auto­
ridades alemanas, que tenían en él toda la con­
fianza, desempeñando importantísimos servi­
cios en pro de sus connacionales y desplegando
todo su celo en la asistencia a heridos y mori­
bundos. Finalmente acabada la guerra en 1918,
a la edad de 76 años, fué destinado a la Casa
Madre de Turin donde ha llevado durante
estos últimos nueve años la vida más ejemplar,
edificando a todos por su humildad, y por su espí­
ritu de mortificación, rehuyendo toda distinción
y todo cuidado, por su piedad, que se manifes­
taba en las largas horas que pasaba en la Ba­
sílica de María Auxiliadora oyendo cinco o
seis misas cada día (él celebrada siempre la
primera, a las 4 y media de la mañana, verano e
invierno) y haciendo todos los días el ejercicio
del Via Crucis y por la caridad heroica, con que
se prestaba para el ministerio de la Confesión,
siendo confesor regular de varias comunidades,
viéndosele a menudo salir, a pesar de sus ochenta
y más años, a pié por las calles de Turin en lo
más riguroso del invierno para ir a ejercer su
ministerio, habiendo sido, sin duda ésta, la
causa ocasional de su rápida enfermedad.

Los úHimos días.
En efecto, el último viernes de su vida, día
18 de noviembre, había ido según su costumbre
a confesar a la numerosa Comunidad de Hijas
de María Auxiliadora del barrio de San Pablo,
en uno de los extremos de Turin. Al volver a
casa se sentía postrado de fuerzas, pero su ca­
ridad y espíritu de sacrificio no le consintieron
dispensarse de hacer aún tres etapas en favor
de un enfermo y de otras dos almas a quienes
había prometido que iría a confesar. Pero él
mismo decía que aquel esfuerzo le había hecho
caer: había contraído el mal que en 5 días
había da arrebatarlo a nuestro afecto.
Sin decir nada a nadie, continuó haciendo su
vida ordinaria, a pesar de sentirse con un mal
más grave que sus habituales y raras indispo­
siciones, en la esperanza de que su fibra robus­
tísima superaría también esta vez el mal y
por su constante preocupación de no molestar
a nadie; el sábado confesó todavia regularmente,
pero el domingo, entre la debilidad producida
por la dieta y los avances del mal, su aspecto
manifestó lo que su espíritu de mortificación
no había querido manifestar. El acusaba una
bronquitis junto con un ardor en el estómago
que le hacía apetecer cosas frías. La ilusión de
algunos momentos de alivio y su afán por ce-

17

lebrar la Santa Misa, hicieron que, a pesar de
las repetidas instancias de los que lo rodeaban,
se levantara todos los días a las cuatro para ce­
lebrar su misa en la Basílica a las cuatro y me­
dia; así hizo el lunes, el martes y el mismo
miércoles día de su muerte.
En dicho día el que escribe estas lineas lo
encontró a las cinco y media en el retro-altar
de María Auxiliadora, dando gracias después de
la misa y rezando todavía el breviario; asistió
también a la primera meditación de la comuni­
dad y después de ella se disponía a volverá su
cuarto; como su aspecto era de gran postración,
lo acompañé a través de los patios y al llegar
a la escalera (su cuarto estaba en un segundo
piso) tuve que levantarlo grada por grada, has­
ta llegar a su cuarto en donde pareció que,
sentado, quedaba más tranquilo.
Después de comer uno de los salesianos que
acudían para servirle lo notó sumamente aba­
tido y le preguntó cómo se encontraba. Sólo
entonces confesó que se sentía muy mal. Lla­
móse enseguida al Director de la Casa Capi­
tular, Don Luis Nai, y como el enfermo con­
servaba por completo la lucidez de mente
pudo reconciliarlo por última vez y darle la
absolución sacramental. Después de la cual
quedó como amodorrado. Fue su tranquila y
rápida agonia; se le administró la extrema un­
ción y la bendición papal y a los pocos minutos,
a eso de la una y media de la tarde, entregó su
alma a Dios. Como dijimos aquella misma ma­
ñana había celebrado la santa misa y se había
administrado el Viático con sus propias manos.
María Auxiliadora y Don Bosco lo quisieron
a celebrar en el cielo el día 24.

consumido por un largo tifus, desahuciado por los
médicos y agonizante desde varias horas, y otro
caso más grave todavía, - seguidos y precedidos
de visiones espirituales, revelacirnes, predicciones
efectuadas, etc.».
El niño desahuciado y moribundo de tifus
curó instantáneamente con una bendición de
Don Branda y el caso más grave a que se refiere
es el siguiente, que nosotros oímos de sus mis­
mos labios pocos días antes de su muerte: Fué

Hechos extraordinarios»
Como notamos al principio fué voz general
en el Oratorio «Ha muerto un santo *. Y todos
narraban los motivos de edificación que de su
vida habían tenido. Por nuestra parte podemos
decir que sentimos esta muerte como la de los
miembros mas queridos de la familia. Tanto
más que había llegado quiza el momento en que,
cediendo a instancias de personas para el muy
estimadas, para mayor gloría de Dios, se hu­
biera decidido a manifestarnos él mismo los
hechos de su vida, que con gusto hubiéramos
ofrecido a nuestros hermanos y a los Coope­
radores de España. Pero Dios quiso se cum­
pliera su deseo de vivir y morir ignorado.
Y creemos que su vida hubiera ofrecido cosas
extraordinarias pues como él mismo dice en
su ultimo escrito antes citado: * Resuena fuerte­
mente a mi mente la sentencia de Jesús'. *Vi a S a ­
tanás cayendo como un rayo del Cielo* cuando los
discípulos narraban los prodigios que habían
obrado en su misión, viendo yo miserable obrarse
una perfecta curación de un alumno nuestro,

Saofa Teresa en oración deUnte del Jesú s atado a la
columna, hecho esculpir p o r ella misma después de
una visión. - Reprodoccióa de la que D. J . Branda
tenía en sn cuarto.

enviado a asistir a un enfermo grave de un pue*
blecito cerca de Turín. Pero cuando llego al
pueblo fueron a recibirle dtciéndole que había
llegado tarde. El enfermo había fallecido hacia
algunas horas. Pidió sin embargo que le dejaran
ver el cadáver para rezarle un responso y subió
acompañado de los parientes y del cura del
lugar, al cuarto donde se hallaba el cadáver.
Tomó una de sus manos entre las suyas y em­
pezó a rezar el De Profundis. Mientras rezaba
notó que aquella mano se iba calentando y le
pareció oir una voz que le decía: « Llámalo
que viene *. Don Branda lo llamó por su nom­
bre tres veces y el cadáver abrió los ojos y ma­
nifestó gran satisfacción de ver a su lado al

i8
sacerdote salesiano. Por !a expresión de sus
o{o3 y de sus palabras Don Branda rogó al cura
y a los parientes que los dejaran solos. Al cabo
de un rato volvió a llamarlos, todos pudieron
ver todavía con vida el enfermo, despedirse por
última vez, y a los pocos instantes era de nuevo
cadáver.

E¡ úlfimo regalo del Cielo.
Una gracia especial obtuvo el P. Branda del
Cielo un mes antes de su muerte. Era el día
14 del pasado octubre. D. Juan Branda estaba
rezando las primeras vísperas de Sta. Teresa
de lesús de quien era grande devoto y de la
cual tenía encima de la mesa entre otras, una
piadosa imagen, no lejos de la cual había un
vaso con flores ya medio marchitas.
Mientras rezaba, nota que una parte de aquellas flores empieza a crecer en el vaso diri­
giéndose luego el tallo horizontalmente, por
más de 20 centímetros, hacia la imagen de
Sta. Teresa, en frente de la cual empezaron a
brotar hojas verdes y flores fresquísimas que
cubrieron toda la imagen de la santa y el fenó­
meno fue creciendo durando toda la vigilia y
el día de Santa Teresa. Don Branda hubiera
querido que alguien fotografiara el fenómeno,
pero las condiciones de luz de la estancia no
lo permitieron. Hizo que lo presenciaran el
Prefecto de la Casa Capitular y un profesor
en ciencias naturales, el cual hizo muy bien
observar que, aún suponiendo un resto raro
de fuerza vegetativa en aquellas flores, era
completamente antinatural que se hubieran
desarrollado en dirección contraria a la luz
del sol.
Como a Don Branda el hecho le pareció dis­
puesto por Dios para honor de Santa Teresa
lo describió detalladamente y lo ha dejado entre
sus papeles. Terminaba la narración con estas
palabras: ¿f/oórá querido el Señor solamertte glo­
rificar a su santa el día de su fiesta? Y nosotros
añadimos: ¿No habra querido el Señor dar a
Don Branda pocos días antes de su muerte,
una señal de su complacencia en él, escogí'ndo
para ello el día de Santa. Teresa, la Santa
española por excelencia?
Salcsianos y Cooperadores de España, vuelvo
a deciros: [ Llorad, rezad y consolaos! Pedid a
Don Branda que proteja a nuestra Congregación
especialmente en España, donde él, esparció
su semilla. V pidamos a Dios que siga enviando
a la Congregación Salesiana miembros del
temple de Don ]uan Branda, que sepan realizar
en si y en ios demás el ideal de Don Bosco.
R. I. P.

iO íro grande hijo
de Don Bosco nos deja!
Cerrada ya la presente edición, el día 24 de
noviembre, a los 10 y media de la noche, moría
a la edad de 81 años, después de larga enfer­
medad, el Rdmo. Dr. D. Julio Barberis, Cate­
quista General de la Congregación Salesiana,
uno de los más antiguos y preclaros hijos de
Don Bosco.
De él procuraremos decir en el próximo nú­
mero. Entre tanto oremos e imitemos.

Los Sres. Cooperadores Salesianos, cumplien­
do los requisitos de costumbre, pueden ganar.
Indulgencia plenaria:
1. El día que se inscriben en la Pía Unión.
2. Una vez al mes, a elección de cada cual.
5. Una vez al mes, asistiendo a la conferencia.
4. Asimismo, una vez al mes, el día en que
hagan el Ejercicio de la Buena Muerte.
5. El día que por primera vez se consagren
al Sagrado Corazón de Jesús.
6. Siempre que hagan Ejercicios Espirituales
durante ocho días seguidos.

Además, los siguientes días:
1.
2.
6.
18.
19.
23.
2y.

Mes de Enero.
Circuncisión del Señor.
Smo. Nombre de Jesús.
Epifanía.
Cátedra de S . Pedro en Roma.
La Sagrada Familia.
Los Desposorios de María Santísima.
Conversión de S. Pablo.

Mes de Febrero.
2. Purificación de María Sma.
22. Cátedra de San Pedro en Antíoquía.
También pueden ganar otras muchas indul­
gencias plenarias y parciales y gozar de varios
privilegios, como puede verse en el Reglamento
o o Cédula de admisión a la Pía Unión >, a la
cual nos remitimos.
N ota : i ) Condición para ganar las indulgen­
cias concedidas a los Cooperadores Salesianos
es la de rezar todos los días un Pater, Ave y
Gloria con la jaculatoria: Sánete Francisce Salesi,
ora pro nobis; — 2) Los Cooperadores que por
enfermedad o convalecencia no puedan ir a la
iglesia, podrán ganar las indulgencias arriba
expresadas rezando en su casa cinco Pater, Ave
y Gloria.

i

r
RIO NEGRO (Brasil)

De las Selvas al Colegio
(Final de la relación del misionero sal. D. A. Giaccone).

Religiosidad. Episodios conmovedores.
-

,

I

I
I
^
I

Los indios de estas regiones son indiferentes y fríos para las cosas de religión;
no tienen prácticas ni ceremonias espe­
ciales; pero los niños, especialmente los
más pequeñitos, aprenden pronto a rezar
y sienten el benéfico influjo de la religión
He aquí algunos episodios.
En diciembre del año pasado, habíamos
recibido a un huerfanito, indio taríano,
que tendría unos lo años, atacado de un
mal tan grave en una pierna, que no podía
dar nisiquiera un paso. Permanecía con­
tinuamente en la amaca y sus mismos com­
pañeros se encargaban de llevarle la co­
mida.
Una tarde, durante el rezo del santo
Rosario, salía yo de la iglesia y siendo ya
oscuro tropecé con algo que me pareció
un saco de arroz; hasta que con ?ran ma­
ravilla me di cuenta que había tropezado
con el pequeño enfermo.
— ¿Q ué haces aqui? le pregunté.
— He venido a ver a Dios — respondió
con toda franqueza.
El pobrecito había llegado hasta la
puerta de la Iglesia, arrastrándose con
el auxilio de las manos, pues la pierna no
le permitía ni siquiera estar de pie. Lo
tomé en brazos y lo entré en la Iglesia.
A causa de la oscuridad no pude observar
los gestos de maravilla y las demostra­
ciones de alegría que ciertamente hizo,
viendo satisfechos sus deseos. Pero mien­
tras tanto pensaba entre mí: ¿Quién habrá
hablado de Dios a este indiecito? ¿Quién
le habrá indicado que aquí está Dios, si
en las malocas no saben nada, ni hablan
nunca de cosas de religión?
Indagando un poco supe que otro niño
le había dicho lo que había en la Iglesia
y lo que en ella se hacía todas las noches;

y él, apesar de hallarse enfermo, no había
podido resistir al deseo de ver con sus
propios ojos aquellas maravillas.
Para contentarle, todos los días cuando
íbamos a la Iglesia, dos compañeros lo
tomaban y lo conducían a ella. Después
le hicimos unas muletas que usó durante
dos meses hasta su completa curación.
Este huerfanito fué. bautizado el día de
Pascua, hizo la primera Comunión el día
de María Auxiliadora y ahora sabe ya
ayudar a misa. Imagínese Sr. Don Rinaldi,
qué consuelo para nosotros ver tales pro­
gresos después de sólos siete meses de
permanencia en la misión.
Para la Novena de María Auxiliadora,
preparé en el dormitorio, sin decirles nada
anteriormente, un altarcito y por la noche
antes que entraran los niños hice encender
dos velas. Cuando los niños llegaron, se
quedaron con la boca abierta y no cier­
tamente por el mérito artístico del altar
que era sumamente pobre, sino por poder
contemplar el hermoso semblante de nues­
tra Madre Auxiliadora. Un niño piraiapuya
apenas vio el altarcito se volvió hacia mí
y sonriendo me dió un estrecho abrazo.
Era la expresión de su alegría. Es super­
fino añadir que rezaron y cantaron con
tanta devoción que parecían novicios.
Otro indiecito tucano todos los días de
la Novena, sin que nadie le dijera nada,
iba en busca de flores para adornar el
altarcito y hacía la entrega por la noche
al terminar la oración y el canto. Era un
pequeño obsequio que quería hacer a la
Virgen antes de acostarse,
Y Dios nuestro Señor oyendo las ora­
ciones de nuestros indios nos ha conce­
dido también gracias especiales y hasta
ha obrado prodigios.
Cuando la terrible sequía y baja del
río, que nos hizo estar cuatro meses sin
recibir nada de Manaos, viendo tan de
cerca la terrible perspectiva del hambre,
atribuimos a las fervorosas e inocentes
plegarias de nuestros indiecitos el haber
superado aquel período tan terrible sin
graves consecuencias. Varías veces nos

I

20

sucedió no tener más alimento que para
el día; los niños invocaban a la Virgen,
hadan visitas a Jesús Sacramentado en
g;rupos y el alimento llegaba.
Una mañana teníamos ya la olla en el
fuego, pero no había en casa ni un pescado
ni un poco de carne (a los indios les gusta
mucho la sopa de pescado). Pues bien a
las nueve llegó un indio con un enorme
tapir, que nos proporcionó carne abun­
dante y buena para ocho días. ¿Quién
lo mandaba? La Providencia.
Los mismos extractores de goma, tanto
colombianos como brasileños, que ve­
nían hacia el bajo Río Negro en busca de
alimentos, pasando por nuestra misión se
extrañaban de ver en nuestra Casa a jo
niños y preguntaban como podíamos ir
adelanto cuando ellos con dinero,' mer­
cancías y miles de kilos de goma, no te­
nían que comer. La respuesta era siempre
la misma: — i La Providencia oye las
oraciones de nuestros indiecitos y hasta
ahora no nos ha dejado faltar ni harina
de mandioca, ni pescado, ni carne de caza!
Un día llego un colombiano empicado
de una gran Sociedad de extractores de
goma y después de sal-.darme me dijo
muy secamente; Padre, tenga la bondad
de venderme o de prestarme tres cestos
de harina de mandioca, porque tanto yo
como el personal de guardia morimos de
hambre. He recorrido varias malocas en
busca de harina y no he encontrado y
entonces he pensado venir hasta Taracuá
con la esperanza de que V. me socorra.
— Lo siento mucho y me causa una
pena enorme no poder socorrer a V. y a
sus compañeros, pues también nosotros
nos hallamos en las mismas condiciones:
tenemos harina para dos días y después...
si la Divina Providencia no nos ayuda
no sé como nos arreglaremos.
— Pues entonces, Padre, mande estos
chicos a sus malocas.
— ¿ Lnviarlos a sus malocas y cerrar
la misión? De ninguna manera. Antes
dejaríamos las clases y trabajos del campo
o iríamos quien a cazar, quien a pescar,
quien en busca de frutas y de hormigas.
En aquel momento salían los niños del
comedor e iban a lavar sus platos al no.
— Niños, les dije, pedid hoy con mucho
fervor a San José que nos envíe harina.
Si, si, Padre — respondieron en coro.

El Colombiano hizo una mueca de des­
confianza y luego añadió;
Yo sin comida
no regreso; me esperaré aquí y si hay
harina para V. la habrá también para mí...
— Haga lo que le parezca; le contesté
algo resuelto; pero V . ve que yo no puedo
satisfacerle.
Los niños hicieron su oración todos
juntos y en voz alta y aún añadieron el
canto de una copla.
Al cabo de una hora los niños corren
hacia mí gritando: Pai, P ai! San José
nos envía harina; venga, venga al puerto!
Efectivamente acababan de llegar dos
canoas de indios Desana, procedentes
del alto Tiquié, que habían hecho 14 días
de navegación para traernos 14 cestos
de harina y recibir en cambio un poco
de ropa para cubrirse.
A los gritos de alegría de los niños acu­
dió también el Colombiano y yo le dije;
— ¿V e V.? La Providencia o, como
dicn nuestros indiecitos, San José ha
enviado harina. Ahora con mucho gusto
le cedo a V. una parte; tome V. los tres
cestos que pedía y dé gracias a Dios que
nos ha enviado el sustento necesario.
— Muchísimas gracias, Padre; me voy
verdaderamente conmovido porque he
visto claramente que Dios escucha las
oraciones de estos pobres indios y ahora
comprendo como pueden V d s.ir adelante
en estas apuradas circunstancias.

El Clero irífaníil Modelo de monaguillos.
-

¿ Y qué le diré, amadísimo Padre, del
porte y seriedad de estos niños cuando
sirven al altar? De los 65, ya 25 saben
ayudar a misa y todos desean grandemente
salir de ciriales en la Bendición. Es in­
decible el consuelo que nos causa el ver
a veces a salvajitos de 8 ó 9 años llegar a
la misión, dar muestras de espanto y te­
rror a su primer encuentro con el misio­
nero y luego, al cabo de dos meses, ver a
aquellos mismos niños vestidos de sotana
y roquete, sirviendo al altar como unos
angelitos. Su compostura y devoción son
dignas de todo encomio. Nosotros mismos
nos admiramos de ver tales progresos en
estos hijos de la Selva y quiesiéramos que
nuestros amados superiores y nuestros
generosos bienhechores los vieran para ha­
cerse una idea clara de la trasformación que
la gracia de Dios obra en estos corazones.

21

Un domingo una niña llevó a la iglesia
un pequeño mono. Durante la función
el mono se escapó y empezó a hacer pi­
ruetas alrededor del altar hasta que co­
giendo la puerta salió fuera. Pues bien:
mientras los indios que asistían a la fun­
ción se esforzaban por retener la risa y
alguno no supo contenerse, los niños que
ayudaban a misa, permanecieron reco­
gidos y serios; tan penetrados estaban de
la solemnidad del acto que hacían. Bastaría

He aquí los frutos recogidos durante
este año y las halagüeñas esperanzas que
nos hacen concebir estos niños. El campo
es de tierra virgen; aquí no entró el paga­
nismo con sus supercherías y supersti­
ciones degradantes, ni el protestantismo
con sus promesas de dinero y auxilios
materiales. Son salvajes en estado primi­
tivo. La gracia de Dios y el sistema de
Don Bosco obtendrán abundantes frutos;
pero hacen falta misioneros y misioneras.

Ecuador — Grupo de jíbaro» cristianos, presentados por el P. Crespí al Presidente de la República
que dejaron en la Capital óptima impresión.

este solo hecho para demostrar la seriedad
con que toman las cosas de Dios.

frecuencia de Sacramenfos.

El día de Navidad, de Pascua y de María
Auxiliadora del año 1925 hicimos las priTieras admisiones a la primera Comunión
y ahora puedo darle ya la consoladora
noticia que desde enero hasta agosto de este
año se han distribuido 3.138 comuniones.
Como ve, amadísimo Padre, nuestros
pequeños indios comulgan casi cada día;
y es por eso que Jesús triunfa en estos
corazones salvajes, de los cuales esperamos
poder sacar más tarde hasta vocaciones
religiosas.

Necesitamos buenos coadjutores que se
ocupen de los trabajos materiales para
que los sacerdotes podamos ocuparnos
más libremente de la instrucción religiosa,
i Ah! si tuviéramos medios y personal,
podríamos albergar e instruir solo aquí
en Taracuá más de 150 indiecitos, sin
contar los de los demás centros de Misión
donde nos esperan con los brazos abiertos
para entregarnos los hijos.
Bendiga, amadísimo Padre, a estos sus
hijos dispersos en estas impenetrables
selvas y en particular a quién besándole
la mano se siente feliz al poderse llamar
in Corde jesu afmo. hijo
A n t o n io M . G

ia c c o n e .

La Virgen de Don Bosco.
X V I.

María Auxiliadora muestra el porvenir
de la Congregación a Don Bosco, y
le envía una vocación extraordinaria.
Un sueño maravilloso.

En el mes de setiembre del mismo año
en que el Santo Padre aprobó la Pia Unión
de los Cooperadores Salesianos (1876) Don
Bosco tuvo durante los ejercicios espiritua­
les un sueño maravilloso:
Se le apareció de nuevo aquella celestial
Señora que repetidas veces había ya re­
conocido como la Madre de Dios, la cual
dirigiéndose a él le dijo: — Ven que te
voy a mostrar los triunfos de la Congre­
gación Salesiana; sube sobre esta piedra.
Era una piedra situada en el centro de
la interminable llanura en que nos hallá­
bamos. Subí pues sobre aquella piedra
y procuré abarcar con la mirada toda
aquella grande extensión. Había en ella
muchedumbres de hombres de todas las
razas y nacionalidades. Ví tanta gente que
no creo haya actualmente tanta en el
mundo.
Comencé a fijarme en los primeros que
se presentaron ante mi vista. Vestían como
nosotros; yo conocía a los de las primeras
filas y había multitud de salesianos que
guiaban grupos de niños y niñas; mas
atrás se veían otros con otros grupos y
después muchos otros que ya no conocía
ni podía distinguir, pero que formaban
una multitud inmensa. Hacia el Sur ví
aparecer Sicilianos, Africanos y multitud
de pueblos que no conocía. Y siempre
guiados por salesianos de los cuales co­
nocía sólo los de las primeras filas.
Vuélvete de este otro lado, me dijo la
Matrona; y se presentaron a mi vista mul­
titud de otros pueblos con vestidos dife­

rentes de los nuestros; quienes cubiertos
de ricas pieles, quienes con capas que pa­
recían de terciopelo de varios colores. Y
así sucesivamente me hizo mirar hacia
los cuatro puntos cardinales. Entre otras
cosas ví en Oriente mujeres con ios pies
tan pequeños que a penas podían andar.
Pero lo más curioso del caso es que en
todas parte veía Salesianos que condu­
cían grupos de niños y niñas y seguidos
de una gran muchedumbre de pueblo.
Los de las primeras filas los conocía, pero
a la mayor parte ya no, nisiquiera a los
misioneros.
Entonces mi celeste guía tomó la pa­
labra y añadió: — Mira y considera. Tu
ahora no entenderás todo ¡o que te digo, pero
fíjate bien. Todo lo que has visto es todo
mies preparada para ¡os Salesianos. Este
inmenso campo en que te encuentras es el
campo que va a ser confiado a tus hijos. Los
Salesianos que ves son los trabajadores de
esta Viña del Señor. Muchos de ¡os que
trabajan tú los conoces; pero luego el hori­
zonte se ensancha hasta donde puede abarcar
¡a vista y no los conoces ya. Y esto quiere
decir que no sólo en este siglo sino en los
siglos venideros los Salesianos trabajarán en
su propio campo.
¿Pero sabes con qué condición podrá ¡legar
a verificarse todo lo que has visto? Te lo
voy a decir. M ira: es necesario que hagas
grabar con caracteres indelebles estas pa­
labras que han de ser como el lema de vuestro
escudo, vuestra divisa, vuestro distintivo:
E l trabajo y la templanza harán flo ­
recer LA C ongregación S alesiana . E.stas
palabras las harás explicar, ¡as repetirás,
insistirás sobre ellas, harás imprimir un
manual que las explique y que haga com­
prender bien como el trabajo y la templanza
son ¡a herencia que dejas a la Congregación
y que estas dotes formarán su mayor prez
y gloria.

i

23

Una vocación extraordinaria.

El Conde Don Carlos Cays, Presidente
de las Conferencias de San Vicente de
Paul y diputado del Congreso Subalpino,
habiendo quedado viudo y no teniendo
más que un hijo ya casado, quiso consa­
grar el resto de su vida a la práctica de
obras buenas y con este fin hacía frecuentes
visitas al Vble. Don Bosco, de quien era
entusiasta Cooperador y amigo.
La mañana del día 23 de mayo de 1877,
víspera de la fiesta de María Auxiliadora
fué, según su costumbre, al Oratorio para
ver a Don Bosco. La antecámara del siervo
de Dios estaba llena de gente. El Conde
tomó asiento junto a dos personas que
pronto llamaron su atención. Eran una
pobre mujer y su hija de diez u once años.
La niña se deslizaba a cada instante ya
hacia un lado ya hacia otro, sobre las ro­
dillas de la madre, que la sostenía como a
una masa inerte y gruesas gotas de sudor
inundaban su rostro.
Pasado un rato levantóse la madre dió
un profundo suspiro y sosteniendo a su
hija que apenas podía moverse, se dirigió
hacía la puerta de salida.
— 6 Porqué os vais sin haber visto a
Don Bosco? le preguntaron los que allí
estaban.
— i Ah! respondió; no puedo aguardar
más tiempo. Mucho siento que no me
sea posible ver a Don Bosco, a quién que­
ría pedir sólo una bendición para mi hija.
— Refirió en seguida como la niña, des­
pués de terribles convulsiones, había que­
dado paralítica, con la mano derecha sin
movimiento alguno y tan débiles las pier­
nas que no podía tenerse en pie, ni siquiera
estar sentada. Agréguese a esto, terminó
diciendo que desde hace un mes, ha per­
dido el uso de la palabra.
En efecto, a las preguntas que a la en­
ferma se hacían solo respondía con mo­
vimientos de cabeza, sin articular ni una
sílaba. El Conde Cays propuso a los cir­
cunstantes que dejaran pasar a aquella
pobre mujer apenas saliera el que estaba
hablando con Don Bosco, a lo que acce­
dieron todos de buen grado.
No cabía la menor duda de que sin un
milagro aquella niña no podía sanar al
menos instantáneamente. Asaltóle en esto
un pensamiento al Conde Cays e invo­

cando en su corazón a la Santísima Virgen,
concibió el propósito de hacerse salcsiano
si veía salir a aquella niña curada del
cuarto de Don Bosco.
Instantes después ábrese la puerta y
entran la madre y la hija.
Apenas la madre hubo expuesto a Don
Bosco su dolorosa situación y la enfer­
medad de su hija, el Vble. la exhortó a
tener fe en la bondad de María y haciendo
arrodillar a la madre dió a la pequeña
enferma la Bendición de María Auxilia­
dora y la invitó a hacer la señal de la Cruz.
La niña iba a hacerlo con la mano iz­
quierda y Don Bosco la atajó enseguida
diciendo:
— No con la izquierda, con la derecha!
— Es que con la derecha no puede,
observó la madre.
— Déjela que pruebe. Y volvió a re­
petir la invitación.
La niña obediente levanta el brazo pa­
ralítico y hace la señal de la Cruz como si
no hubiera tenido nunca ningún mal.
— Muy bien dijo Don Bosco; has hecho
bien la señal de la Cruz pero sin decir las
palabras. Ahora repítelas conmigo: En
el nombre del Padre... etc. Y la niña, que
desde hacía un mes no podía pronunciar
palabra, suelta la lengua, repite la señal
de ia Cruz, acompañándola con las pa­
labras y como fuera de sí se pone a gritar:
— ¡Mamá! la Virgen me ha curado. Al
oir que la hija hablaba la madre lanzó un
grito y se puso a llorar de alegría.
— Ahora que la Virgen te ha devuelto
el habla, continuó Don Bosco, da!e*en
seguida las gracias diciendo de corazón
un Ave M aría. Y la niña la rezó con toda
claridad y con gran devoción.
Pero no bastaba. Había que ver si era
capaz de sostenerse en pie y de caminar
sin ser sostenida y Don Bosco la invitó
a que se paseara por el cuarto.lo cual
hizo la niña sin dificultad. La curación
era completa.
Entonces la afortunada niña, no pudiendo contener por más tiempo los sen­
timientos de gratitud que llenaban su co­
razón, abrió la puerta de la antecámara,
se presentó a los que esperaban que la
habían visto pocos minutos antes contraída,
paralítica y muda y con una desenvoltura
superior a su edad y con acento que pa­
recía inspirado, dijo:

24

— Señores, den conmigo gracias a la
Sma. Virgen, pues con un acto de su gran
misericordia me ha curado! Vean Vds.
como muevo la mano, como ando y como
hablo; ya no siento mal alguno.
Aquella aparición y estas palabras pro­
dujeron un efecto indescriptible: todos
rodeaban a la niña; quien rezaba, quien
lloraba y quien exclamaba: — i Oh gran
Dios! iOh María! Qué milagro ¡Oh niña
afortunada! El mismo Don Bosco estaba
tan impresionado que temblaba de pies
a cabeza.
Después de trascurridos algunos mi­
nutos concedidos a la curiosidad y en­
tusiasmo de los presentes, la agraciada
y su madre fueron a postrarse ante el
Altar de María Auxiliadora y más con las
lágrimas que con palabras le dieron gra­
cias por el favor obtenido.
El Conde Caye no necesitó más para
asegurar su vocación: — La Virgen ha
hablado, pensó; esto me basta, yo soy
salesiano. Y al entrar poco después en el
cuarto de Don Bosco: — Había venido,
dijo, para consultarle sobre mi vocación;
tenía todavía alguna' duda, pero ía Virgen
me la ha quitado por complete. Y después
de darle a conocer la condición que había
puesto, añadió: — Si Don Bosco me
acepta, yo soy salesiano. — Venga enho­
rabuena, repuso Don Bosco y será acep­
tado formalmente.
— Con gusto vendría mañana mismo
que es la fiesta de María Auxiliadora, pero
algunos asuntos que me quedan por arre­
glar me impiden venir hasta el día 26.
— El 26 es el día de San Felipe Neri,
concluyó Don Bosco; y este Santo tan
devoto de la Virgen le obtendrá, así lo
espero, la perseverancia hasta el fin. El
Conde mantuvo su palabra y el 17 de se­
tiembre de aquel mismo año vistió la so­
tana y el 20 de setiembre del año siguiente
recibía la consagración sacerdotal en la
Catedral de Turín a los 66 años de edad.
Vivió todavía en la Congregación Salesiana hasta la edad de 70 años edificando
a todos con sus virtudes y muriendo en
olor de santidad.

GRACIAS
DE MARÍA AUXILIADORA

A jelo M alferit {España). — Encontrán­
dome muy empeorada de una enfermedad cró­
nica que me aquejaba, recurrí a la Virgen Au­
xiliadora pidiéndole auxilio y que por inter­
cesión del Vblc Don Bosco me concediera la
salud. Le ofrecí una limosna para las Misiones
Salcsianas y otra para el Colegio Salesiano de
Valencia.
Agradecida a la Virgen por haberme resti­
tuido la salud tan deseada, cumplo lo ofrecido'
y hago publicar la gracia, agradeciendo a la
Virgen Auxiliadora tan señalado favor.
Setiembre de 1927.
Una Cooperadora.
C hoNE (Ecuador). — Desde seis meses me
encontraba postrada en el lecho con una enfer­
medad tan grave que la ciencia médica había
inútilmente agotado todos sus esfuerzos. El
sistema nervioso estaba completamente ago­
tado hasta temerse que perdiera la razón.
En este trance me dirigí con toda confianza
y segura fe al patrocinio de Maria Auxiliadora,
pues tengo la dicha de ser Cooperadora salesiana, impetrando de ella mi salud, en atención
sobre todo a mis tiernos hijos.
La celestial Señora se dignó oirme, restitu­
yéndome milagrosamente la salud, por lo cual
le estaré eternamente agradecida y envío una
limosna en favor de los huerfanitos del Vblc.
Don Bosco.
Junio de 1927.
R aquel

de

G arcía .

Idem, — Una persona muy digna de aprecio,
estaba prisionero en manos de los jefes ene­
migos; siendo él también militar era muy di­
fícil su libertad.
Comenzamos un triduo de misas cantadas
en honor de nuestra madre Maria Auxiliadora
para que nos alcanzara la gracia y ¡oh prodigio!
al poco tiempo vimos cumplidas nuestras espe­
ranzas.
Hoy cumplo lo ofrecido de publicar esta
grande gracia y de enviar una limosna para
las Obras del Vble. Don Bosco.
Julio 1927.
B. de R.
Cooperadora Salesiana.
C hivata (Co/om6io). — Habiendo mi madre
caido gravemente enferma y agotado todo re­
curso humano y viéndola ya en estado agónico,
acudí con todo el fervor de mi alma a la Sma.
Virgen María Auxiliadora. Principié una No-

i

2?
vena y le ofrecí una limosna y la publicación
de la gracia en el Boletín Salesiano, si le volvia
la vida a mi madre.
Y oh bondad Divina, sin haber concluido
la Novena, empezó la mejoría hasta llegar a
la completa curación. En agradecimiento a tan
gran favor envío una limosna para su Santuario
de Turín y recomiendo a todos que acudan a
tan buena Madre con gran fe.
8 setiembre 1927.
B elabm ina R íano .

Dan también gracias a María Auxi­
liadora:
A bía de la O bispalía (España). — Marta
López, Ignacio López y Julián Herraiz por fa­
vores recibidos y envían una limosna.
A lbarical (Venezuela). — Las distinguidas
familias de Francisco y Aristides Martinez Ojeda
atribuyen la singular curación de una parienta
suya a la maternal bondad de María Auxilia­
dora y envian una limosna para las obras de
Don Bosco.
C a li (Colombia). — Rita Clemencia Murcillo hace celebrar una misa por gracia recibida.
— Lorenzo Calderón y envía una limosna por ha­
bar curado sin consecuencias de un grave corte
que sufrió. — Natividad Vivas, Leónidas Colla­
zos, Alfonso Sánchez Llanos, Tomás Joaquín Zapala, Lorenzo Calderón, Ernesto Herrera, Ro­
sario Franco de Prado, Margarita Vallecilla,
María Jesús Salcedo de León, Francisca Ara­
gón de Cuevas, Teresa Cuevas Vásquez, Vi­
centa Córdoba de Vega, Mercedes Alvarez,
Rosalvina Ordóñez de Reina y la Rvda. Superiora del Convento de la Merced tributan
gratitud eterna a la Virgen de Don Bosco y
mandan una limosna.— María Lazo de García,
por la curación de su hija Ofelia de tres años
de edad y hace decir dos misas en acción de
gracias.
C arcagente (España). — Joaquina Sanchis
y envia una limosna para los huerfanitos.
C assá de la S elva . — Dna. María Bous de
Adroher y envia una limosna.
C errito (Colombia). — Ramón Tascon,
Leónidas Rengifo, Gertrudis de Ocampo, Climaco Reyes, Carmen R. de Reyes y envian una
limosna para los huerfanitos.
C hone (Ecuador). — Balbina de Rodríguez
por haber curado de fuertes dolores de estó­
mago y envía una limosna. — Macario G u­
tiérrez, Silvia de Tortorclli. — Maria Luisa
Castro Rosario Aveiga M . y J. A. y envian una
limosna.
Hostalrich (España). — Juan Soler de Vidal
por tres gracias especiales alzanzadas de María
Auxiliadora hace celebrar tres misas, ofrece
tres cirios y entrega una limosna para las mi-

Los A ngeles (Estados Unidos). — Mer­
cedes Campanelli y Ascensión Cano y envian una
limosna por haberse visto libres de una grave
aflicción.
M aracaibo (Venezuela). — Camila de Riera
y envia una limosna por un favor recibido.
M edellin (Colombia). — La familia Bermudez Echeverri por haber obtenido la salud
del padre gravemente enfermo.
M éjico . — Beatriz Barthez, por una gracia
recibida.
O rgañá (España). — Un devoto de María

Auxiliadora y envia una limosna.
S an A ntonio (Ecuador). — Angela M . de
Minaya, por haber obtenido una gracia y envia
limosnas para misas.
S anta T ecla (El Salvador). — Adela Dueñas
Mendoza, Nieves de Castillo, Joaquina Rosales,
Enriqueta de Bonialla, Vicenta L. de Acevedo
y Lcandra de Vaquerano y envíen una limosna
por especiales favores recibidos.
S ocorro (Colombia). — Adolfo Ardilla, por
una gracia muy señalada y se hace cooperador
salesiano — Zoila de Gómez Pereira y envía
una limosna.
T iple (Colombia). — Pedro Celestino Va­
lencia y Federico Montenegro mandan aplicar
una misa en acción de gracias. — Magdalena
Rengifo de Saldaña y envía una limosna por
haber obtenido una buena cosecha a pesar de
haber muy malos presagios. — María Saldaña
de Valencia por una gracia señalada.
V ico (España). — La familia Tapias, por
haber obtenido la salud de un miembro de la
familia. — M . Mendez por haber salvado de
naufragio a una embarcación cargada de pesca.
— Lina P. Sierra por la curación de ^ hijos y
envia una limosna.
Z a p a t OCA (Colombia). — Tilia de Ortiz por
una gracia especialísima y envia una limosna
para los huerfanitos de Don Bosco.

Por intercesión
del Vble. Juan Bosco.
C a li (Colombia). — En los meses del pre­
sente año ocurrió una curación casi instantánea
por intercesión del Venerable Don Bosco.
Un domingo, hora en que salíamos de almor­
zar, sucedió que una de nuestras pequeras se
vió acometida por un violento dolor entre espalda
y pecho que parecía quererla asfixiar. Al prin­
cipio nos pareció cosa pasajera; pero luego alar­
madas porque parecía que se nos moría nues­
tra pequeña, acudimos al facultativo, quien
prescribió exención y quietud para la enferma.
Luego aumentando nuestra angustia por la

2Ó
gravedad de que daba muestras la enferma,
acudimos sin demora al cielo en busca de con­
suelo más oportuno, invocando por intercesión
del Venerable Don Bosco a María Auxiliadora
y aplicando al propio tiempo una estampita
de dicho Siervo, al cuello de la niña. El efecto
no se hizo esperar pues vimos a la enferma al
principio calmarse poco a poco; luego darle el
acceso muy fuerte pareciéndonos que ya expi-

Juan Bosco, pidiéndole que, si convenía, re­
cobrase mi hijo mayor el empleo prometiendo
publicar la gracia una vez obtenida.
lOh bondad del Vble. D. Bosco! A los seis
días de haber empezado el rezo del Sto. Ro­
sario mi hijo era admitido en el mismo puesto,
remediándose así en algo mi penosa situación,
por lo cual guardaré eterna gratitud y hoy gus­
tosa cumplo lo prometido haciéndo público el
favor.
5 de Octubre de 1927.
C onsuelo A lfonso

de

C onstantin

CiUDADELA (España). — Hallábase mi padre
gravemente enfermo y ya casi desahuciado de
los médicos, cuando de repente perdió el cono­
cimiento. En tan apurado trance acudí a Don
Bosco prometiendo que si recobrababa la razón
publicaría la gracia. La cual no se hizo esperar.
Mayo 1927.
Jaim e G uitart .
CÓRDOBA (Argentina). — Agradece a Don
Bosco la curación de un sobrinito y envía una
limosna para su Causa de Beatificación.
C. B.

Invocando
a Domingo Savio.

£1 Siervo de Dios Domingo Savio, en un coloquio
con el Ven. Juan Bosco. le manifiesla su vivísimo
deseo de hacerse sanio.

raba, siendo éste el último por que luego desa­
pareció radicalmente.
Hoy nuestra pequeña, a Dios gracias goza
de buena salud.
Gracias sean rendidas al Ciclo, a María Auxi­
liadora y a su Gran Siervo, el Vbic. D. Bosco.
agosto, 20 de 127.
M. P urificación de J esús . Priora.
C amacüey (Cuóa).
Hallándome sola con
tres hijos a que atender y alimentar y en angus­
tiosa situación, al mayor de mis hijos le deja­
ron cesante en el empleo que ocupaba. Después
de tres meses de inútiles tentativas para hallarle
trabajo, tuve la inspiración de rezar el Rosario
todos los días poniendo por intercesor al Vble.

P unta A renas (Chile). — El 7 de Agosto
del presente año, caí gravemente enfermo de
una bronco-neumonia que me llevó a las puertas
de la eternidad. La fuerte tos que tenía y la
alta y continua fiebre que me aquejaba, eran
insensibles a los efectos de la medicina, ocasio­
nándome no poco malestar, especialmente du■ rante las noches, las que pasaba en vela, sién­
dome imposible conciliar el sueño, ni aún por
una hora. Una noche después de un fortísimo
acceso de tos, me sentí desfallecer por la vio­
lencia del mal, y no podiendo de ninguna ma­
nera cortarla o siquiera disminuirla, acudí
lleno de fe y confianza a la intercesión de Do­
mingo Savio, prometiéndole publicar la gracia
si me alcanzaba de Dios la curación y me li­
braba de aquella tos violenta y obstinada; y ala­
bado sea Dios. Domingo Savio me eschuchó
en cl acto. Aquella misma noche la tos me
cesó del todo, la fiebre me bajó de golpe, pude
dormir y a la mañana siguiente me sentí bas­
tante bien. Seguí reaccionando día a día hasta
sanar completamentey e neontrarme ahora me­
jor que antes, gracias a la potente ayuda del
Santito de Don Bosco. Agradecido cumplo la
promesa de publicar la gracia.
17 - 1 \ - 28.
J uan B. O lave V.
Pbro. Salesiano.

1

REP. ARGENTINA. — Peregrinación anual
de los Exalumnos de Don Basco a Lujan. —
Cinco trenes especiales ocuparon los antiguos alumnos de ¡os Colegios de ¡a capital, — Una
manifestación de vida y entusiasmo digna de
todo encomio y de imitación es la peregrinación
de ex-alumnos que con creciente éxito se ce­
lebra todos los años, al Santuario Nacional de
Ntra. Sra. de Lu)án. He aqui como la reseña el
importante rotativo « La Nación * de Buenos
Aires ensunúmero del día lodel pasado octubre:
*
El viaje.
• Un éxito significativo, tanto por la calidad
como por el número de los concurrentes, obtuvo
la peregrinación que los ex alumnos de los co­
legios salesianos efecturaon ayer al santuario
de Lujan. Participaron en el acto, además de
los ex alumnos de los colegios del Sagrado Co­
razón, de la Merced, Santa Isabel y Nuestra
Señora de Laguarda, establecidos en La Plata,
Ensenada, San Isidro y Bernal, los pertene­
cientes a los distintos establecimientos de ia
obra que funcionan en la Capital, todos los
cuales aportaron un numeroso contingente de
peregrinos. Los ex alumnos pertenecientes a
ios colegios metropolitanos partieron en cinco
trenes que salieron de la estación Once de Sep­
tiembre en las primeras horas de la mañana,
el t®con 7 11 pasajeros, el 2® con 522, el
con
558, el 4® con 598 y el y® con 680, con un total
7.057 pasajeros, viajando en el último el director
espiritual de la peregrinación, R. P. Jorge Serié;
el nuevo inspector de la Obra Salesiana en los
Estados Unidos, sección Este, R. P. Ricardo
Pittini; los directores de los centros Reverendos
Padres Tavani, Correa Llanos, Ortega, Doylc,
Silva, Santolini, Picabea, Paglicrc, Brctt, Rizzi,
Esandi y Muras y los miembros de las comi­
siones superiores de la Asociación.
L a llegada.

A la llegada de los trenes respectivos a la
estación Basílica, en Luján, se organizaron va­
rias columnas precedidas por las insignias,
banderas y estandartes de los centros, con el
concurso de las bandas de música de los cole­
gios Pío IX, León X III, Don Bosco de Buenos
Aires y La Plata y de los Exploradores de Santa
Catalina.
La Comunión y el Credo.

Organizadas las columnas, los peregrinos se
encaminaron por las calles Colón y San Martin

hacia el santuario, donde los Rdos, Padres Se­
rié, Silva y Pittini oficiaron misas de comunión
general, recibiendo, además, otros sacerdotes U
confesión de una buena parte de fieles. Luego,
y por primera vez, a la terminación de la úl­
tima misa los ex alumnos, bajo la dirección del
R. P. Silva, cantaron « El Credo» de Dumont,
que supuso la reafirmación de los sentimentos
cristianos que animan a la juventud católica. La
parte musical fué interpretada por los coros de
los Centros Costamagna y Santa Cecilia, bajo
la dirección del R. P. Cozzaniga.
Fesfival y Baaquefe.

Concluido el oficio los peregrinos se diri­
gieron al campo de sports instalado en el Colegio
de los Hermanos Maristas, donde dos equipos
formados por elementos pertenecientes a cen­
tros de la Capital y de la Provincia disputaron
un partido amistoso de foot-ball, venciendo los
últimos por cuatro goals a cero.
Después del partido la mayor parte de los
concurrentes se reunió en un almuerzo fraternal
que fué servido en el Hotel de La Paz, y c! cual
transcurrió en un ambiente de grata cordialidad
y franca camaradería. A los postres hicieron
uso de la palabra, para referirse a la índole de
la acción que desarrollan los establecimientos
educativos de la Obra de Don Bosco, el coronel
Carlos Smith y los Sres. Barousse, Vinzio,
Vizbal Semperio y Meissegeier y los presbíteros
Pittini, Valera y Serié.
Este último invitó a los concurrentes al acto
social que en seguida se realizaría en el local
del Descanso de Peregrinos.
Acío social.

Acallados los aplausos con que la concurren­
cia recibió las palabras del presbítero Serié,
los comensales se dirigieron al salón de actos
del Descanso de Peregrinos, donde inició la
serie de discursos D. Amadeo P. Barousse,
quien díó cuenta de la cantidad de delega­
ciones presentes, entre las que figuraban re­
presentaciones de las Inspectorías del Sur,
de la Patagonia, del Norte, de San Francisco
de Sales, de San Francisco Solano, de Rodeo
del Medio, Rosario, San Nicolás, Uribelarrea,
Huetel, Santa Rosa de Toay, Trinidad, etcé­
tera. En seguida el Sr. Barousse expresó que la
comisión organizadora había dispuesto el envió
de telegramas de salutacón a S . S. Pío X I, al
presidente de la República, Dr. Alvear; al go­
bernador de la Provincia de Buenos Aires.

28
Dr. Valentín Vergara; al nuncio apostólico,
monseñor Cortesi; al arzobispo de Buenos Ai­
res, fray José María Bottaro; al rector mayor
de la Orden, R. P. Felipe Rinaldi;al consejero
de la congregación, R. P. )osé Vespignani; al
obispo de La Plata, monseñor Alberti, y al cura
rector de San Cristobál, R. P. Reverter; por la
cooperación prestada para el éxito del acto.
Tan pronto como cesaron los aplausos que
saludaron las palabras finales del discurso del
Sr. Barousse, hablaron sucesivamente los se­
ñores Carlos Smith y Próspero Utraigos, cuyas
oportunas improvisaciones fueron igualmente

era Inspector del Uruguay y Paraguay, el Rvdo.
D. Ricardo Pittini, para el mismo cargo, en una
de las Inspectorías de los Estados Unidos.
Eran tantas las simpatías de que gozaba
entres los salesianos, alumnos, ex alumnos y
Cooperadores, que al primer sentimiento de
pena al ver partir a un superior tan querido
sucedió el de la conformidad, sólo al considerar
la voluntad de Dios manifestada por la orden
de los superiores y el mayor bien de la Congre­
gación, por la que todos, como el mismo Padre
Pittini, guardan todos sus entusiasmos. Y en­
tonces surgió espontánea, para dar desahogo

Moníevideo — Aspedo del banquete de Cooperadores y Exaluronos. en obsequio del P . Pitüni.

muy celebradas. Cerró el acto el R. P. Serié
con una elocuente arenga, exhortando a los ex
alumnos de Don Bosco a proseguir sin des­
fallecimientos en la obra emprendida.
Despedida.
Finalizado el acto social en el Descanso, los
concurrentes se dirigieron al polígono de tiro,
donde presenciaron los concursos organizados
entre los distintos centros y cuyas alternativas
fueron seguidas con visible interés.
Una vez concluido el concurso de tiro, los
peregrinos retornaron al santuario, donde el
R. P. Pittini pronunció un sermón de circun­
stancio después de lo cual el R. P. Serié im­
partió la bendición con el Santísimo, con lo
que terminaron las ceremonias del día » .
M ONTEVIDEO (Uruguay) — Honrando a
un digno hijo de D . Bosco. — La voz de la
obediencia ha destinado al que hasta hace poco

a todos los corazones, la idea de dedicar al
Padre amado un homenaje que, si bien fuera
imperfectamente, manifestara el amor que to­
dos le profesaban.
Y el homenaje resultó grandioso y digno.
La Comisión de la Asociación nacional de
Ex-alumnos pensó que nada mejor que una
gran Comunión General, podría ofrecérsele.
Y todos los que pudieron respondieron como
un solo hombre. El acto dejó en todos, la más
dulce emoción que luego en el desayuno exterio­
rizaron entre otros el Sr. Carlos Du Prc, Pre­
sidente de la Federación de la juventud Cató­
lica y los Sres. Lanaro y García Ares en nom­
bre de los Ex alumnos.
A mediodía, en ágape familiar, mas de 500
ex alumnos y Cooperadores rodeaban al P. Pit­
tini, pudiéndose decir que todo el Uruguay y
Paraguay estaban representados. Estaban allí
el Exemo. Sr. Arzobispo Mons. Aragone, el
Dr. Juan Zorrilla de San Martin el inmortal

29

cantor del T abaré , el capitán de Navio Con­
forte, el heroico aviador Larre Borg-es, repre­
sentantes de todas las jerarquías y clases sociaJes, todos unidos en la idea de honrar a un di­
gno Hijo de Don Bosco que, con los métodos
y cualidades del Padre, tanto bien había sem­
brado en la gloriosa república Oriental, en el
generoso Paraguay y aún entre los indios del
Gran Chaco.
A los postres habló en nombre de los Salesianos el P. Luis Héctor Salaberry, el Dr. )osé
Miranda en nombre de los ex alumnos. El Dr.
Canzani historió la proficua labor del P. Pittini en la Federación de la Juventud Católica
Uruguaya diciendo que a él y a Mons. Cama-

P. Pittini, ilustró su múltiple labor y deteniéndo­
se especialmente en su entusiasmo por las mi­
siones dijo que como en el T abaré «el beso de
Blanca había hecho venir a los españoles, sería
el beso del Indio paraguayo el que traería de
nuevo al P. Pittini a nuestras tierras * y tcm^inó
diciendo; «separación no es olvido y ni él ol
vidará, ni será olvidado».
Habló después el Exemo. Sr. Arzobispo que
fué saludado con una interminable salva de
aplausos. Dijo que hablaba en nombre de la
Arquidiócesis y manifestó su pesar por el
alejamiento del P. Pittini, a quien, glosando
una frase de León X III, llamó un brillante
de su mitra.

Bernal (Arg.) — La escoianía del Colegio Salesiaoo que dió un tnagniíko concierto de solo canto gregoriano.

cho debía la Federación su vida. Hablaron
también los Sres. Conci y Pilar Cabrera siendo
muy aplaudidos. El P. Pittini visiblemente
emocionado, respondió a todos demostrando
cuanto ama y amará al Uruguay donde ha
pasado 34 anos de su vida.
Número hermosísimo del homenaje resultó
la Academia de la tarde. Hablaron el Sr. Jeró­
nimo Zolesi, dignísimo ex alumno, profesor de
la Universidad y actualmente presidente del
Círculo Católico de Obreros, el Rvdo. P. Julio
Baqué que pronuncio en nombre de los salesianos un sentido discurso que terminó con
estas palabras: * Adiós, Padre, idos contento,
que os lleváis el cariño y la gratitud de todo
un pueblo que resignado y triste estrecha tem­
blando vuestra mano y la besa con amor *.
Merece párrafo aparte el gran Zorrilla de
San Martín que con su elocuencia sencilla por­
que sale del corazón y sublime a la vez porque
sale del corazón del gran Poeta moderno de la
lengua castellana, habló de la personalidad del

El P. Pittini procuró de nuevo contestar a
todos con voz velada por la emoción, agrade­
ciendo aquel homenaje que resultó verdade­
ramente cordial e imponente.
También la Federación de la Juventud Ca­
tólica dedicó al P. Pittini una sesión de honor
y la ciudad de Paysandú no quiso quedarse
atrás en este himno de gratitud, dedicándole
un hermoso acto académico en el Teatro «Flo­
rencio Sánchez».
Deseamos al digno Hijo de Don Bosco un
fecundo apostolado en su nuevo campo de
acción y en su nombre agradecemos desde es­
tas columnas una vez más los homenajes que
se le han tributado.
V A L E N C U (Esp.). — Visita ilasíre. — El
día 13 del pasado noviembre las Escuelas Salesianas de esta ciudad se vieron honradas con
la visita del Sr. Alcalde, Marques de Sotelo,
acompañado por el Marqués de Villagracia y
por los tenientes de Alcalde Sres. Alapont y

30

Núñez Moreno. Visitaron las dependencias del
colegio quedando sumamente complacidos, pasando después al teatro donde fueron objeto
de un sentido homenaje por parte de los alum­
nos, ex alumnos y salesianos, que agradecieron
su dignación. Antes de salir del Colegio el Sr.
Alcaide y sus acompañantes oraron unos ins­
tantes ante el altar de María Auxiliadora.
Al día siguiente, hablando con un periodista,
hizo el Sr. Alcalde las siguientes manifesta­
ciones;
« Esta clase de Instituciones honran de ver­
dad a Valencia; realizan la obra más eminen-

AL VU ELO
ALICANTE {España). — Una especial ala­
banza merecen los antiguos Alumnos de Ali­
cante que se han suscrito con un donativo
mensual para la fundación de una beca destinada
a ¡a formación de un futuro misionero alicantino.
Que cunda ese ejemplo, pensando que Don
Bosco quería que sus primeros Cooperadores
fueran los ex alumnos.

Punta Arenas (Chile) — Durante el discurso de Mons. Arturo Jara, en la ceremonia de la inauguración
de la lapida de la nueva calle Fagnáito,
teniente social que pueda imaginarse y merecen
cumplidamente la simpatía de todos los valen­
cianos. Allí se congregó una nutrida represen­
tación de todas las clases sociales, pero especial­
mente de los elementos populares que consideran
aquel local como una prolongación del hogar.
Allí se distraen los niños y los grandes y hay
tal cariño y compenetración entre todos que
dentro de la Casa de los Salesianos son todos
hermanos; y ese sentimiento no desaparece al
trasponer el umbral de aquella Casa bendita,
sino que perdura y contribuye grandemente a
que luego, en la vida ordinaria, no muera esa
amistad que se inició en las aulas salesianas.
i Una Obra grande muy grande es la que
realizan esos salesianos!».
Agradecemos vivamente al ilustre represen­
tante de la Ci udad del Turia tan halagüeñas frases.

BERNAL (Argenf/no). — La Revista *Pax»
de los Benedictinos de Buenos Aires da cuenta
de una velada musical exclusivamente gregoriana,
celebrada en el Seminario Salesiano de Bernal el día zt del pasado setiembre para conme­
morar el X IV Centenario de la fundación de
la Abadía de Monte Casino. Entre otras cosas
dice: < La ejecución del canto tan expresiva
y el movimiento tan seguro y a la vez elegante
hicieron la admiración de los presentes. Sin­
ceramente: No estábamos acostumbrados a oir
cantar la melopea gregoriana con tanta maes­
tría por una masa coral bien numerosa por
cierto». Nos ha gustado sobre manera el suelto.
Don Bosco que tanto hizo para promover en
sus colegios el canto litúrgico, habrá escuchado
desde el Cíelo las melodías de Bernal con gran
fruición.

i

r
51
CO TA CAC H I (£ci/at/or).
Una impor­
tante mejora de esta población quedará para
siempre unida al nombre de nuestro Vble. Fun­
dador. E! entusiasta Cooperador Salesiano,
Don José R . Morales, después de amargas luchas
y penosos sacrificios, ha logrado llevar a feliz
término la construcción de una Via de comu­
nicación que une las importantes poblaciones
de Quiroga, Cotacachi y Otavalo. Como uno
de los fines de esta importante via era facilitar
el establecimiento de los Salesianos en esta
ciudad fue encomendada su construcción a Don
Bosco y el éxito, después de tantas dificultades,

peradores salesianos y de la Obra de María
Auxiliadora para las vocaciones y el de hacerse
activos Cooperadores salesianos.
Idem. — Con sentimientos de profunda gra­
titud hacemos constar con sumo gusto que
en la sesión del día 17 de setiembre el Vene­
rable Concilio Límense VI H, a propuesta del
limo. Mons. Pedro Pascual Farfán, resolvió
por unánime acuerdo elevar al Santo Padre una,
súplica pidiendo que se proceda cuanto antes a la
Beatificación de nuestro Vble. Padre Don Bosco
y del Vble. P. Claret, fundador de los benemé-

Salía (Arg.) — El Arzobispo de Buenos Aires. Mons. Boflaro y los Sres. Obispos Mons. Campero,
Mons. Piedraboena y Mons. Orzali. durante el homenaje que se les (ríbuló en el Colegio Salesiano.

se atribuye a su poderosa intercesión. Por eso
se le ha puesto el nombre de Via * Don Bosco ».

ritos Misioneros del Inmaculado Corazón de
María.

LA PA M P A {Argentina).— Por primera vez
y guiada por los PP. Salesianos, el día 24 del
pasado octubre, una nutrida peregrinación acu­
dió desde la lejana Pampa al Santuario de Luján,
siendo la admiración de todos por su fe y pie­
dad. A los pies de la Patrona de la Argentina
le encomendaron sus hogares y sus haciendas.
En la función de despedida les dirigió la pa­
labra el Rvdo. Sr. Inspector, P. Jorge Serié.

MEDELLÍN (Co/om6id). — Aprovechando
la visita del Sr. Inspector P. Bassignana un
grupo de 28 ex alumnos de varios Colegios sa­
lesianos residentes en Medellín fundaron, el día
2 del pasado octubre, un nuevo Centro, con gran­
des manifestaciones de entusiasmo y amor a
la Obra Salesiana. Resultó elegido presidente
D. Manuel Alfonso Gómez. Deseamos al nuevo
Centro vida larga y próspera.

LIM A {Perú). — Con grande entusiasmo,
el día 22 del pasado agosto celebraron los ex
alumnos el Día del Colegio. Entre otros acuer­
dos tomaron el de participar activamente a la
labor de la Asamblea Salesiana, que se tenía
que celebrar al domingo siguiente con motivo
del Cincuentenario de la Fundación de los Coo-

PUNTA A R EN A S {Chile). — Con solem­
nidad extraordinaria se celebró en esta ciudad
el 1 17° aniversario de la Independencia Nacional.
Una de las ceremonias más solemnes fué el
cambio de nombre de las dos antiguas calles
de Arauco y Aconcagua que en adelante se
llamarán de Mons. Fagnano y de José Nogueira.

•52

Con tal motivo toda la prensa dedicó preciosos
artículos laudatorios al valeroso hijo de Don
Bosco, tan benemérito de la civilización y con­
versión del extremo Sur del Continente ame­
ricano y al que tanto debe aún materialmente
la ciudad de Punta Arenas. En una tribuna
levantada al efecto se colocaron las autoridades
haciendo uso de la palabra el Sr. Gobernador,
coronel Don Carlos Vergara y el Sr. Obispo
Salesiano, Don Arturo jara Márquez, quien
hizo el elogio de las virtudes de Mons. Fagnano,
antecesor suyo en la Vicaría Apostólica de M a­
gallanes.

« Luis N a i» de reciente formación está formado
por ex-alumnos de la Escuela-Talleres. Hace­
mos con gusto la aclaración, porque supone
en quien la ha pedido entusiasmo y amor por
la organización de ex alumnos, que deseamos
ver siempre más próspera y activa.

SALTA (Argentina). — Con solemnidad
extraordinaria se celebró en esta población el
X X V aniversario de la Coronación de las vene­
radas imágenes del Señor y de la Virgen del M i­
lagro; nuestros Colegios de Tucumán y Salta
tuvieron gran parte en los festejos con un grupo
de 700 niños, que dieron alto ejemplo de piedad
y compostura especialmente durante la gran­
diosa misa de comunión general, celebrada en
«1 atrio de la catedral, contemporáneamente,
por los tres obispos Mons. Campero, Mons.
Piedrabuena y Mons. Orzali. Fué uno de
aquellos espectáculos que aumentan la fe de
los pueblos.

Dr. Eloy González.
El 19 de julio del presente año volaba al Cielo
en Cerrito (Colombia) el alma del Dr. Eloy
González.
Fué un ferviente cristiano, Cooperador Sale­
siano entusiasta y activo Decurión, cargo que
le fué concedido por el venerado Don Miguel
Rúa, Sucesor de Don Bosco, de santa memoria.
Lo recomendamos vivamente a las oraciones
de todos los Cooperadores.

Don Miguel Bofanch Badia.

SAN TA TECLA (El Salvador). — Cinco
días, desde el 14 hasta el 18 de setiembre, de­
dicaron los Colegios de Santa Tecla, de Santa
Ana y de Ayagualo a la celebración de un Con­
greso del Sagdo. Corazón de Jesús y a la clausura
del Año Aloisiano. Un bien combinado pro­
grama de actos religiosos, académicos y recrea­
tivos hizo que resultaran días verdaderamente
llenos y que trascurrieran con gran satisfacción
de todos. Presidentes honorarios de los Feste­
jos fueron el Exmo. Sr. Presidente de la Re­
pública, Dr. D. P ío Romero Bosque y el Cónsul
Gral. de Italia, Sr. Dalio y entre los miembros
del comité efectivo figuraban el Cura Vicario
de Sta. Tecla, D. Salvador F. Revelo, el Gober­
nador del Departamento, D. Benjamín Arrieta,
el Comandante militar, Gral. D. Gilberto Barahona, el Aleada de Sta. Tecla D. Paulino Cea,
D. José Parker, Presidente de los Cooperadores
Salcsianos y Dña. Emma de Sol, Presidenta de
las Cooperadoras.

Falleció en Cassá de la Selva (Gerona-España)
el 19 del pasado octubre. Era padre del celado,
de los Cooperadores Salesianos de aquella loca­
lidad al cual presentamos nuestro más sentido,
pésame. Su muerte fué verdaderamente cris­
tiana y edificante.
Una oración sobre su tumba.

V A LPA R A ISO (Chile). — En el número de
setiembre, habíamos dado la noticia de la Fun­
dación del Centro de Ex alumnos Don Luis
Nai * en forma que podía hacer creer que era
el primer Centro del género en la importante
ciudad. A petición de un entusiasta socio del
Centro » PIO X » con gusto hacemos constar
que este Centro de ex alumnos de la Sección
Comercial del Colegio Salesiano, existe ya
desde 6 de agosto 1905, mientras que el Centro

Pensemos ahora en hacer buen empleo de las
riquezas, pues de lo contrario ' se convertirán en
agudas espinas que nos atormentarán en punto de
muerte.
Ven. J uan B osco.

/Recordad en vuestros sufragios
B arcelona (España).— Dolores Puig'- - Emilia Cazes y Carbonell. — Gertrudis
Vieb.
...
C ali (Colombia). — Dionisio Lenis.
C armen (Colombia). — Ricardo González.
T iple (Colombia). — Rosario Valencia de
\ 'ázquez y Jesús María Bonilla.

Coa tprobmdóm de U emloridad echslásliea .
Gerente-. D. DO.WENICO GAR.NERI.
E»lablcc'irak«(o Tlp. it« U Sociedad Editora lateraacioaal - Ti
Corsa Regioo .ktmrgher’ lm. ÍT4.