Título

BS_1948_04

Descripción

Boletín Salesiano. Abril 1948

Fecha

1948.04

extracted text

R E V I S T A DE L A S
OBRAS DE D O N BOSCO
AñoLXI - N.' 4 - Abril, 1948
•lili... .

S U M A R IO :
Don B o sc o y la ense­
ñanza pro fe sio n al__
Un excelente t e x t o
catequístico
escoiar.
Efem érides secular*es.
Noticiario S ale sia n o:
E sp a ñ a (Cofii, M á la ­
g a ); E xtran je ro (C h ile, Canadá, F ilip in as,
M é j i c o , Argentina,
It a lia )— De nuestras
M isiones.— E l T em plo
que profetizó D o n
Bosco. — C ró n ica de
gracias. — In M e m o riam.— L a m a ra villo ­
sa obra de- un Coad­
ju to r Salesiano

Biuíao - Deusto. — Vista
general de las Escuelas
Profesionales Saícsianas,
delAdas a ia munificencia
de un Insigne Cooperador
Salesiano

DON BOSCO Y LA ENSEÑANZA PROFESIONAL
fonnación profesional ha venido a p o *’
noi*sc en ])rimer plano en nuestra Patria.
Demos gracias a Dios por ello y pidámosle
guío e ilumine a cuantos con la mayor buena
voluntad y recta intención nos ocupamos y
])reoüupauio3 por la educación del obrero.
(!on grtui acierto nuestro Fundador fué
nombrado Patrono y Protector de las Ksouclas de Formación Profesional creadas
y tan acertadamente encañizadas por la
‘■orrespondiente Pireoción General.
A.siini.snio van siendo cada día más milueroaos los (Centros de juventud obrera
con diversos fines específicos que toman a
Don hosco por titular y Protector.
No. so hace-todo ello sin sobrada razón,
pue.'í pucos santos })uéden presentar más
títulos para serlo/de los obreros, y muy es­
pecialmente do loa ^obreros jóvenes.
Ahí estii, jiara'confirmarlo, su vida en­
tera: hijo do trabajadores, y de trabajado­
res pobres, transcurre su niñeé y adoles­
cencia ocupado día y noche en las duras
faenas del campo (ganadería y agricultura)
y prueba todos los sinsabores y amarguras
ilel aprendiz de ciudad, recorriendo la de
Chieri de uua herrería a un bar, de aquí a
una sastrería, a una zapatería, etc., al mis­
mo tiempo que estudia, y todavía halla,
tiempo y energín.s para aunar y oi^anizar
a sus compañeros en una sana y provecho­
sa Sociedad de amigos que llama «Sociedáil
do la alegría».
Llegado al sacerdocio casi por su propio
y único esfuerzo (apoyado y sostenido, cla­
ro está, j)or la gracia ilo Dios y el poder ilo
la Sonora), entrega sus energías, su expe­
riencia, su tiempo, en una palabra, su vida
entera, con cuanto puetle y vale, a la reilención de la juventud, y para ello crea primeramento sus faiuosos Oratorios Festivos;
luego inicia las Escuelas Xocturnas, tan ex­
tendidas después por toda Europa, y, final­
mente, ix'aliza su sueiro dorado, la gran ilu.sión de su espíritu genial: las Escuelas Pro­
fesionales.
Don Poseo, en esto, no fué propiamente
un precursor ni un iimovador en el sentido
absoluto de la palabra: lo que hizo fuó aco­
modar a los nuevos tiempos principios y
prácticas que forman parte integrante de
a

L

oO —

la.misi6n social de^a Iglesia Católigaj de la
que fué siempre paladín esforzado y humil­
de y amante hijo. Puede, sí, decirse que es
el creador de las Escuelas Profesionales
como se conciben hoy.
La obra de las Escuelas Profesionales,
concebida en toda su amplitud desdff im
principio por nuestro Padre, fuése, sin em­
bargo, desarrollando paulatinamente, co­
mo por etapas, que, al decir del mismo San­
to, pueden reducirse a cuatro principales.
Comenzó primeramente por mandar a
.sus muchachos a talleres de la ciudad para
que aprendieran el oficio, al modo como
tienen todavía que hacerlo al presente mu­
chos niños, de nuestras vüias y ciudades.
Los inconvenientes eran tan,graiul^/y los
buenos resultados obtenidos .-tan esoaso.s,
que no paró hasta conseguir montar en ,su
Ijropia casa los'varios talleres, dando co­
mienzo-así ! una segunda etapa.
Contrató maestros, a quienes se dio au­
toridad de jefes de taller, a.signándose al
mismo tiempo un módico salario a los mu­
chachos. Los tales maestros (í^alvo, como
siempre, honrosas excepciones) trataban,
según costumbre general de entonces y no
del todo abolida ahora, trataban, decimos,
a los mucha<--ht«lcomo a pequeñ^esclavo.s,
los sust.vaían a la influencia de
Bosco
y alteraban el horario a su gusto y capri­
cho, según conviniera a sus intereses persoyales. Por otra parte, no había manera
do lograr que cumplieran lo estipulado cu
el contrato sobre h rramientas y material
de trabajo, pérdidas y ganancias, etc.
Entonces Don Bosco tentó una nueva
prueba dando un paso más adelante: asu­
mió toda la responsabilidad moral y admi­
nistrativa, dejando a los maestros sólo la
obligación de enseñar el oficio. Pero tam­
poco este sistema dió resultados satisfac­
torios, pues los maestros, temerosos de
verse desbancados y ensombrecidos por
sus mismos alumnos, de propósito abando­
naban a su suerte a los muchachos más
aventajados y mejor dispuestos, si es que
no les hacían la vida imposible, a fin de que,
hastiado.^, abandonaran el aprendizaje.
Finalmente, cuando algunos de éstos, a
pesar de los pesares, llegaron a un grado

Lejos de obrar Don Bosco al ustilo de
suficiente de pi-epai'ación técnica y pedagó­
los
de la «a.cera de enfrente», quienes sue­
gica, e inspirados por Dios y avasallados
por el extraordinario dominio que el Santo len echar por delante un libr^jo (más o me­
ejercía, especialmente sobre los espíritus se­ nos plagáao de errores, falsos principios y
lectos, determinaron «quedarse siempre con utopías) para luego obligar a la sociedad a
Pon Bosco», pudo ést-e comenzar la cuarta que «velis nolis» experimente en su propia
y deiinitiva etapa en el desarrollo de sus carne y espíritu la bondad de sus teorías
Escuelas Profesionales, es a saber: Escue­ fantásticas, Don Bosco trabajó él personal­
mente, con toda intensidad, a la par que
las de foraiación obrera, pero de formación
con toda acreiiida<l, en la implantación y
completa, integral, debjoven en su habili«lad manual, en su inteligencia y en su vo ­ triunfo de sus Escuelas Proh'sionales; y
sólo treinta años después, en 1880, poco
luntad, mediant-e centros cuyos principios
antes <le su muerte, asesora(U) con la expe­
y piréticas pedagógicas so basan en la más
riencia y el consejo de los mejores de sus
pm-a tradición cristiana, y cu)'OS maestros,
hermanados entre sí por el vínciilo del mis­ hijos espirituales, reunidos en el IV Capi­
tulo General de la nueva Congregación Samo ideal sobrenatural y de la vida común,
se entregan a su labor aJ impulso de una vo ­ lesiana, se atrevió a dictar un conjunto do
cación específica y guiados por un sistema normas, pocas, pero fundamentales, (]U(>
vinieron a ser la «parva chárta» de las Es­
de educación que a mi tiempo les encauza,
cuelas Profesionales Saleñaiias.,
defiende v alienta.
MIU11 rii M

Dos n u e v o s m i e m b r o s d e l C a p í t u l o S u p e r i o r
E l K vd m o . ’d . Pedro Ricaldone, TV Sucesor de Stui
Juan Bosco en. el gobierno do la Congregación Salesiana, ha tenido a bien nombrar dos nuevos miembros
para el Capítulo o Consejo Superior, que reside en l u rln, en la Casa
E l nom ljramieftto ha recaído en
los Rvdm os. D. 'A lb in o Eedrigotti y D . Modesto B e­
llido, Inspectores Salóeianos de Atójíco y .Madrid, res­
pectivam ente.
.
„„
Don Modesto Bellido es liarlo conocido en -nuoOTra l ft'
triii^ lío sólo en el ambiento salesiftno» sino en el e<lucatív o y ofióial, pues ha sido miembro ^ t i v o do va n a s
Juntas V Ürganizactohos con fines religioBO-euUurales.
C iia n d o eoroen^ó la Cruzada española, ocupaba el cargo
do D irector do nuestro Colegio do Segunda Enseñanza
de >fataró íBareeloha), y gracias a su ofertada goatiou
i'iudíoronévitar en gran parto los perjuicios que en pere«i-.
ñas V edincios hubieron do sufrir otros centros simiUros
Habiendo logrado huir dcl dnfierno rojo*^ permaneció
durante unos meses en Francia, p a m desde allí ayudar
más ÍHcilinente a los «alesianos quo llegaban a la na­
ción vecina procedentes de la r-ona ro ja e:^anola.
A l fundarse ou el cur.so i937-3« las
sionales Salesianás de Deusto (B ilbao), p . M o d e lo f ^
nombrado Consejero Profesional para la o rg a n ií^ io n
Je la en.señanza, pasando al año siguiente a dirigir las
también Escuelas P ro f^ io n a le s Salesianas ‘J? ^

i »

^

la G„«>rra de Liboración.

volución ro ja había convertido en rumas. L a labor d a sa rro ll^ a p w

‘u na Inspectoría diezm ada por la muerte y con
a

honor concedido
- o , i,a-

mine y dé el m ayor acierto en su nuevo cargo a entrambos buperiores.

-5 1

El Capítulo comienza por determinar con
tras un examen de prueba y se confiará su
precisión el fin perseguido *por loa Salesiainstrucción a maestros prácticos.
nos al ocupaiBo de los muchachos apren­
4.a- Un Superior dará una lección sema­
dices: «E l fin que se propone la "Sociedad
nal de Urbanidad.
Salesiana al acoger y educar a los mucha­
chos artesanos es formarlos de tal manera,
que al salir de nuestras casas, terminado
7.® Cuando el muchacho, concluido el
el aprendizaje, sepan un oficio con que ga­ aprendizaje, quisiese salir del Centro, reci­
narse honradamente la vida, estén bien
birá un certificado en el que se hará cons­
instruidos en la Religión y posean los co­ tar con claridad su aprovechamiento en el
nocimientos culturales proporcionados a
arte u oficio, el grado de instrucción y la
su estado».
buena conducta.
El Capítulo dicta a continuación reglas
El I V Capítulo General no se conforma
prácticas y concretas para que las Escue­ con que nuestros muchachos posean su ofi­
las Profesionales Salesianas alcancen el tri­ cio, sino que quiere saquen de él todo el
ple objetivo del fin que se proponen. Véan­ rendimiento posible, a fm de mejorar cada
se, como ejemplo, algunas de (^stas reglas
día más su situación social. Vayan en con­
u ordenaciones:
firmación de lo dicho algunas de sus deter­
1.
*^ Todas las tardes, al terminar el tra­minaciones:
bajo, dése una hora de ciase, y para los más
«Secúndese en lo posible la inclinación de
retrasados, otra después de la Misa de la los muchachos (ahora diríamos «su vocación
Comunidad hasta el desayuno.
profesional») en la elección de arte u oficio.
2.
» Se formulará un programa escolar ... El Consejero profesional y el maes­
para todas nuestras Casas de Artesanos y se tro de arte dividirán, o bien se ajustarán,
indicarán los libros de texto para las clases. a la división previamente hecha de jos
8.*' Los muchachos serán clasificados
ejercicios en series progresivas para los co-

Bilbao-Deusto, -Visín <7Ptiffroí det taller-escuela de mecánica, sección de máquinas
52 —

?

Bilbao-Deusto.— 7'«iíer-esc«eia de carpintería de las E'scuelas Profesionales Scdesianas

rreepondientes cursos o grados, por cada
uno de los cuales d e b e rá pasar sucesiva
y ordenadamente los alumnos de tal ma­
nera, que al concluir el aprendizaje se ha­
llen en posesión completa de su oñcio.
... N o se puede determinar la duración del
aprendizaje, pues no son las mismas las difi­
cultades en todos los oficios; pero pued§ se­
ñalarse como regla general la de cinco años.»
Las determinaciones del I V Capítulo Ge­
n eré no fueron, ciertamente, definitivas.
liOs Capítulos siguiente (recientemente se
ha celebrado el X V I), y muy especialmen­
te la labor extraordinaria realizada.por los
Superiores que han ostentado el cargo de
Consejeros Profesionales Generales de la
Congregación Salesiana, han dado a nues­
tras Escuelas Profesionales tal impulso y tan
sabia y experimentada organización, que
se comprende sin esfuerzo el éxito rotundo
por doquier alcanzado.
En algunos Estados, incluso en Estados
no católicos, nuestras Escuelas Profesio"^lales han sido equiparadas a las Escuelas
oficiales del Gobierno, con el reconocimien­
to de los certificados expedidos y el derecho

a subvenciones proporcionadas a tenor de
las leyes. Citemos como casos más recien­
tes la Argentina y el Siam, según hicimos
saber en las páginas de nuestro B O LE TIN .
Como quiera que nos dirigimos preferen­
temente a nuestros. amadísimos Coopera­
dores y bienhechores y a aquellos a quienes
el Señor moviere a inscribirse como tales,
terminaremos con las siguientes palabras,
pronunciadas por San Juan Bosco en Lyón,
en 1883, ante un selecto auditorio: «¿Sa­
béis dónde está la salvación de la sociedad?
—pr^untó. el Santo, y tras breve pausa
continuó— ; La salvación de la sociedad,
señores, está en vuestros bolsillos. Estos
mudiachos, recogidos en el Patronaje osostenidos por la Oeurre des ateliers, esperan,
vu ^ tra ayuda.»
Acom odarlo las palabras de Don Bósco
al momento actual de nuestra Patria, les
diríamos a nuestros bienhechores: «Ayudad
a la obra de formación obrera contribuyen­
do especialmente al sostenimiento de nues­
tras Casas para Maestros artesanos. Esta
es la gran necesidad del momento, y en su
solución estriba un halagüeño porvenir.»
—

Ó3

Un excelente texto catequístico escolar

C

OPIAMOS literalmente de Orlentoción
C<ríequÍ8Ílca. revista hispanoamerica­
na de Pedagogía Catequística, que se
publica en Barcelona bctjo el patrocinio del
señor Obispo y la dirección del doctor Tusquets:
«La Oiicina Catequística Central de los
Padres Solesionos, que radica en Torino, en
la calle Cottolengo, publicó un texto escolar
de Catecismo,. dividido en cinco grados y
basado en el texto de Pío X.
» n éxito que estos tojnitos lograron en
Italia, varias de cuyos dióces;'e los han adop­
tado pora texto de escuelas primarios y
calequesis parroquiales, ha movido a las iiliales que dicha Oficina Central tiene en
casi todos los países a traduclrlois acomo­
dados al espíritu y circunstancias de cada
nación.
sHctce pocos meses nos tocó el turno, y
apareció la adaptación eepanola, editada
por lo Sociedad Editora Ibérica (Alcalá.
164. Madrid), ba}o la dirección de la Cen­
tras Catequística Salesiana, de Madrid.
>Se titula Mi Catecismo. Como en la edi­
ción italiana, consta de cinco tomitos^ que
corresponden a jo g cinco grado® cíclicos del
Catecismo de Pió X. Su presentación e® no­
table. ccn hermosa portada y numerosos y
muy infantiles dibujos, a varias tintas, y su
precio muy modesto paro lo que hoy se es­
tila: Tienen, respectivamente, 64, 70. 9B, 104
y 112 páginas, y cuestan 3, 3,50, 4 y 4,50
pesetas, en rústico.
«Como en todos los textos sensatos, están
divSdidojB en lecciones, y en cada una de
ellos encuentra el alumno: una exposfcfón

precisa, breve y amena, de las respuestas;
el texto de- éstos; un interrogatorio para ver
si entendieron bien, y una práctica. Excep­
túase el primer grado —delicioso juguete pedc^ógico—, en el cual se prescinde de las
recuestas. A l final de cada libro, salvo en
el primor grado, como acabamos de indicar,
se compilan todag sus respuestas p<n'q m a­
yor fadlidad del repaso.
»Es evid.ente que estos libritos van a
prestar un magoifico servicio en aquellas
diócesis emanólas cuyo Catecismo sea el de
Pío X. Pero precisamente por esto suscitan
de nuevo el anhelo de que Es>paña posea
un Catecismo único, para que textos como
éstos valgan para la nación entera.
••Creemos que el texto único no debiera
coincidir exactamente con el de Pío X, de
cuyas ventajas e incpnvenientes nos hemc^
ocupado en más de una ocosión. No seria
difícil mejorarlo ccn la colaboración de los
que desde hace muchos años estudian el
problema en muchas diócesis 'de España y
teniendo a la vista los ejemplos ds allende
nuestras fronteros.
»Y menos lo sería llegar a una fórmula
qus permitiese confiar su edición a la Cen­
tral Catequista Salesiana; la revisión (cuan­
do fuere indispensable, por ejemplo, ol de­
finirse un dogma) a un Comité Nacional de
Pedagogía Calequistica. y su administración,
e incluso los versiones o acomodaciones
regionales que hiciesen falta, a los Secre­
tariados Catequísticos diocesanos.»
ÍOrienfación Ccrtequísffca,
número die isnaro-marzo de 2548.1

Han dado
comienzo las obras de lo

UNIVERSIDAD OBRERX" SALESIANA
en Güadolajaro, para la formación de Moestro de Artes y Oficios, técnica,
pedogógiCQ y religiosomente capacitodos para educar los nuevos generacio­
nes de obreros cotólicos que lo Potrio, lo Sociedad y la Iglesia necesiton si
el mundo ha de mejorar. N o rehúses tu óbolo generoso a una obra de tal
importoncla

i

EFEMERIDES SECULARES
DON BOSCO EN 1848,

ti

Sucedió una vez que. pasando pm- unos m a i\es de las .afueras ,he la rwdud. ¿fio /o,h u m
-panría" que Irayiha su -i^nn de
i;*';' *
¡a de otro suburbio. S«ji ih'ín. se k's arerró y.
.‘^atwtámtoles xonrirjdes, les p reíP o M :
^
__fttj-' ,-Se tivi'in asuntos sc.rH^s. th.
- I n u ió n le dn vela en esle entierro:' Slyo
mídante su ramino respondió desrnrodomrntc
" 'T o l referimos a (a existencia d-. n«mcH.s«x
lino dedos ''conspiradores".
__
a..Híiacionc6 iio juvniluJ g m
I ,'.
1 por ynf* »ie conte.sUus ron ín¡ discoilc,ifi ^•roedle" tm labm rte jerga que nosotios tía
s'M'* Crei haber saludadt} a un gnt¡m de amigos.
— ¿Vo amigo de (os curas.'- replicó d olio,
■cuitas y ésl'is se subdk'ulian. a vsu 'i'f- en fía thaciendo una mueca.
más o menos nwncrosas.
^
- ¿So sabes quidi es esle cura? -4e dijo en
han por su cuenia. ora se uman en fornmUihU.
voz baja un comjHiñcro—-. ;i:s imn Uos(^>:
— ¿ r a mi qué me importa?— exclam» el m-'c hallafHi mrUml.men^e en rs$ol<mie muchacho, profiriemlo a conlhiUíu-tón uno
lado de guemi contra todas ¡as otras;
^
de los más gnoseros insultos. _
‘
rirms y batailas er<«i, más que dtartas, coiUmua. ,
__¡¡Jola! — replicó el comi)añero en voz alta— .
por un ’ guHame allá es<^
^
¿Qué te tws creído? ;.ly de ‘il Rí le f'iDas al
aue meíTiara ofensa oíyttna precedente :>t tm respeto a Don Hosco! Como digas otrg palabra,
^¡ma dciuctrns tales
te abro la cabeza.
.
terse idea de ellas guien no ¡as hubiera prt
)■ ítnaniaivio el puno cenado hizo Mleman ac
saldado, e Ínitírvenú/Ji jmíífs
querer jmner por oloa su amenaza. CalUi el «»¡aneados y azuzados por mozalbetes, -y. en oca­
voiwíir tanto más ruaido que rm que buena
siones. por ciertas personas mayores.
parle de su.h compa^n-ros .se (üsponian a fa-tyr
Üon Hosco IriUó de mil mudos y mancios U
d.r su eo;tiríiu'<ot/f. ¡ates casi lodos hahioil Ido
■Jpedir las <j>ele.is y (nüniL-.^,
alguna vez /rf Oratorio.
iHÜes V se preocupó no poco por liaici algún
Hl ¡>a.nJo fes ¡ireguntú la roHsut'l.i- su ultima, u-in
] t T ' a a g u L . s , >„relu-e. " ‘ “ ■'“ “ '‘“ ■ / " S ' i : ;
a lo.t de otro barrio; calmó sus ánhnos hadenprírnerameiUc ¡mr atraer y aficimiM ^
dolfs w r que la ofensa yur dedoji haher ir d los menos ilcpravados o a los m<d
lá/to no tenia wipi/rhanhi; Jes reronhi que el
prodigándoles favores y moslrmdose
JilvUw SíUvmior, ¡HT.'.eguiflo y eoiulenmlo n muerde m h o espcvuü Juicui los más indinados a ta.
le. no se defendM, nuat^lo ron una sola pala­
bra hubiera ¡ifwlkito <ícs/iuc/t a sus enemi.i'^-.
’ ^^i*etKOtUrar por las calles de la ciwUid a
i,H "jtamia-. •lcs¡més de esrtuhnr eti sUejf io
g.uL d T ¡ T l a l í sujetos, muchas veces ya con.
a Don Hosco, le arompiñó'-imr un buni hecho y
'lieiuidos por el Tribuiud de Menores a casUtpn
se despulió Ivis j>ro)iicler Ui ^uumienda.

g~l. ojnl^ieiUe ite f/uerra gue se respiraba en
F Italia vino a aumentar la frecuencia de ai
amos sucesos y escenas -propios rie ios m bnrbios de las gian^-les viwli^ies. tioiuk- hhí-'
atnLia. ordimriaiieiUc, in gente mait^nle y io^
„mWn«'/*os ¡/ Vinz-tílieles <iegencra^fos. o poa>

n-m<x¡r
la aMgua
'•
rtles y daba cmi algún jefe de banda,
o
furzal^. con. arte y exquisüa candad, por hacerL
reflexionar y oitartarles de aqueíla.-^
uenarosas tj iíi/i/A«dodo»' compañías.
^ Je eda manera no era exlraño que conlase en todiLs las -pandas" con
.os "aiidgos-, que si bien no a-aluünm uc
resolverse a una vida más orrfciwd^ 5 ^ íúui verdadero afecto hncia el Sardo. >in
rmbarqo. en más de «na ocasión tuvo que
a;najaar kisuUos y grose^^as. y ^
.H ltm n ir de una manera que b*en potiñamos llamar heroica.

íu :- BOSCO visila a una
perlas callejeras. Del film
ríe leyenda )

ün hombre

;Uc ;-i> Memorias biogriificns. Tomo Hl, ciipílUlo XXXI.;

ESPAÑA
Nueva A roh ioofradía de M a r ía
A u x iliad ora
OOfN (Málaga).— Un día de triunfo para Ma­
ría Auxiliadora ha sido el rteJ 15 del mes de
fobrern. on que en este bello pueblo malagucñ >
ha entrado con felicísimos auspicios la Virgen
de Don Bosco para quedar doQnit^amente eslablcolda la Archlcofradía.
*
A esto objeto vinieron el Padre Superior del
Colegio Saleslano de Málaga, Rvdo. D. Luis
Pefla, y la Junta en pleno de la Asoclaoldn de
Antiguos Alumnos Saleslanos.
La Parroquia do San Andrés ha sido la des­
tinada para que en olla figure esta nueva Con­
gregación Mariana, que ha sido acogida por todo
ül pueblo con enorme simpatía. Su celoso Pá­
rroco, don Francisco Lanzart, ha puesto a nues­
tra disposición todas sus energías, todos sus
fervores, y el pueblo lo ha respondido.
A las 4,30 do la larde, e! Grupo Artístico de
los Antiguos Alumnos llevó a escena la obra de
Muflón Seca "pastor y borrego” , siendo un éxito
artístico y de laquUlaje. Se vló el teatro coinplelamento lleno, y el público quedó complacldl.shno do la actuación de los artlsitas. El dinero
recaudado so ha destinado a engrosar la sus­
cripción para adquirir una estatua.
A las seis de la tarde, en la Parroquia de
San Andrés, tuvo lugar un acto simpatiquísimo.
La Iglesia estaba completamente llena. Se rezafl Rosarlo. Interviene el coro femejnlno de la
Parroquia, que interpreta escogidísimas compo­
siciones a dos y tres voces. El Padre Superior
de los Saleslanos de Málaga prcmuncia unas en­
cendidos palabras sobre la detvoclón a María
.\uxiIladora, sobre ]a Archlcofradía. Se tiene la
Bendición Mayor con S. D. M.
l>or último, llene lugar la Imposición de mcda'llas a las nuevas Arciiloofrades, que en gran
número se acercan, mientras por vez primera
so deja oír el "Rendidos a tus plantas", en me­
dio de un feiTor emocionante.
lia quedado constituida la JunUi Dlrcoliva,
compuesta por celosísimas señoras y señoritas,
las cuates han sabido dar rápido impulso a esta
devoción, que tan pronto ha prendido en el
corazón do l«to Coln.
Plácemes, especiales merece el citado señor
Párroco de
Andrés y la seflora viuda de
Muñ(p*, doña Ennrnadón Lorlgulllo, que se ha
desvivido por implantar la Archloofradla, y la
señora Presidenta, doQa Ccnecimlán Bustos.
Que María Auxiliadora proteja y bendiga a
lodo el pueblo de tl'4n, que ha sabido rwlbírla
tan oaballerosanuni?, y lo eobíje siempre bajo
su maternal m.mli*.

Solem ne entroniznoión de M a r ía A u x U
liadora
El día Sí' de tJt.To <•.'
s:*iaaimnnrnle la Imagen de María ..Auxiliadora en
. 'las nutv-as ofic¡na>r lr,ítkl£Ki.\s ñor
Am' :í!r>í Ge.
66^

NOTICIARi d
■ I <1 i 1 1 1 1 1 l . l

111 1 M I » » 4 M W

ncrales de la Compañía Hlspano-Americana de
Seguros, sefiores Gampoy y Narváez, Hermanes,
ai Director deJ Colegio Saleslano ofició en la
ceremonia, terminada la, cual dirigió unas bre­
ves palabras a los presentes, quienes fueron de­
licadamente obsequiados por los señores Campoy
y Narváez. Que María Auxiliadora le dé acierto
y bendiga sus trabajos.

EXTRANJERO
C H IL E
Nueva D ió c e sis con O bispo sale slan o
PUNTARENAS.—Su Excelencia Reverendísima,
Monseñor Cándido Rada, Saleslano, hasta, ahora
Obispo do San Carlos de Ancud, ha sido tras­
ladado a la Diócesis de Puntarenas. de reclenif
creación, nacida del apostolado de los Misione­
ros Saleslanos en aquellos últimos confine^ del
mundo.

CANADA
R áp id o s p ro gre so s «le la Obra Sate sian a
JACQUET 5UVER.— pesar de ser muy poco
el tiempo que los Saleslanos llevan en esta p >blaoión, los progresos son muy consoIadore.s.
Cuentan con el apoyo Incondicional del •«eñor

................
R e c o r d a m o s o n u e stro s le cto re s q u e p o r o se r
n o m a n e ra lo s O b r o s y lo s M is io n e s ; e s p re c iso esf
p u e d e g o z a r d e lo s fa v o r e s e s p írltu o le s c o n c e d id o
L os c o n d ic io n e s so n : 1.® H o b e r c u m p lid o lo s d¡«
y civil. 3.® E sta r e n g r o d o d e p ro m o v e r p o r s í o pt
o lo s M is io n e s d e lo S o c ie d o d S a le s la n o .
Lo U n ió n n o o b lig a e n c o n c ie n c io n¡ im p o n e cu<
p u e d e n p e rte n e c e r o e llo lo s fa m ilia s p r iv o d o s y r
p o d r e s o su p e rio re s, re sp e ctivo m e n te .
P o ro c o n su lta s, o iríjo n s e a la D ire c c ió n d e l B O l
'r e p r e s e n t a c ió n d e l S u c e s o r d e S o n Ju e n Bosco.

en casi tres millones de dólares. El Qobicrai>
filipino comprendió al punto la importancia Ue
la Obra, no sólo como instrumento pasajero do
distribución de auxilios, sino oonm organización
para dirigir y extender la acción benófiOii de la
Iglesia Católica en el seno de la Joven Repú­
blica.
Una de las primeras atenciones de la G. W. O.
fué la reapertura do las escuelas, venciendo
para edlo toda suerte de obstáculos, reconstru­
yendo edificios, habilitando otros y reorganizan­
do la Asociación Católica de Educación, que en
junio del pasado año tuvo su primera asamblo^i.
a la que asistieron 700 delegados.

SALESI ANO

M E J IC O
Obispo y del Párroco; los niños, de condición
muy humilde, son dóciles y tienen muy buena
voluntad. Los sacerdotes son bien vistos por ia
población y pueden vesUr de talar, no sólo en
casa, sino también por la calle. La gente siente
hambre de la palabra de Dios y Uena la iglesia,
incluso a la hora de Vísperas de los domingos.
No se conoce el divorcio y reina la caridad entre
los heles, especialmente hacia ios pobres y aban­
donados, que, cuando son niños, se ven adopta­
dos a porfía por las famhias católicas.

F I L I P IN A S
M agn ífica labor del Delegado A postólico
La revista América publicó, hace algún tiempo,
un largo informe, reproducido luego por el Osi>enfalore Romano, en el que se emaltece la la­
bor desarronada por el Delegado Apostólico en
Filipinas, su excelencia rerverendísima Monseñor
Pian!, Salesiano.
Se refiere de un modo especial a la vasta
empresa fundada por Su Excelencia con la ayu­
da del Padre John Harley, Superior de las Mi­
siones Jesuítas de PlliplDas, -con el título de
C. W . O. (organización del bienestar católico),
que recibió el apoyo incondicional de los cató­
licos americanos; tanto, que en poco tiempo
llegaren a las islas más de dos millones y me­
dio de lii'.os de material de socorro, valorados

sr C o o p e ro d o re s S c f e s ic n o s n o b o sto b e n e fic ia r d e o lg u estor oficjolm e n ie ín sc rilc s e n !o Fíe U n ic n . S ó lo o $ í se
idos p o r lo Ig le s io o lo F a m ilia S o le sic n o .
diectíéis oñ o s. 2.° G o z o r d e b u e n o r j p u t c c ió n r e lig io s o
p o r otros, c o n o ro c ic r.e s, lim o sn o s y tro b e jo s, le s O b r a s

;u o lfljjlgu n o d e in sc rip c ió n ni p e rió d ic o . P o r lo m ism o,
religiosos, institutos y o s o c io c ic n e s , p o r m e d io d e lo s

z

O lE T IN S A L É S I A K O , A íc o ió , 164, M o d r id , q u e tie n e lo

|

i

L a O b ra de D o n B o sc o resurge pujante
Como se sabe, ha mejorado mucho la condi­
ción de los católicos en esta querida nación,
hija de España, y como la Madre, digna de
llamarse la nación de los mártires de Cristo
Rey.
Hoy no existe propiamente persecución; pero
las leyes que aquélla impuso siguen vigentes,
si bien go se cumplen en muchos de sus ex­
tremos. Esto da lugar a situaciones curiosas,
tales como las que vamos a referir:
£1 pueblo desea con ansia la educación reli­
giosa de sus hijos; una escuela de religión so
ve al punto llena de alumnos a rebosar. El dosprecio hacia la escuela laica es tal, que los
mismos funcionarios gubernativos son ios pri­
meros en enviar sus hijos a las escuelas diri­
gidas por religiosos.
En una escuela se presentó de Improviso oi
Inspector, mientras la Hermana (vestida de se­
glar) enseñaba el Catecismo. Las niñas hicieron
desaparecer rápidamente el Catecismo; poro la
monja no tuvo tiempo. Viendo el libro abierto
sobre la mesa, el Inspector preguntó, fingiendo
severidad:
— ¿Qué libro es ése?
Y la Hermana contestó con amable sonrisa:
— Un libro que estudió usted de pequeño,
que decir tiene que allí acabó todo.
Otro Inspector creyó apuntarse algún mérito
excepcional sorprendiendo a una religiosa en el
momenlo rn que (contra lo dispuesto en la'^
leyes) dirigía Jas oraí’ íone» en común de sus
alumnas en la iglesia vecina a la escuela. La
autoridad escolástica entró y tomó eslenlo junto
a las niñas. Le reconoció al punto U religiosa,
y dirigiéndose a las alumnas, les dijo:
—Ahora, niñas, como buenas cristianas que
somos, rezaremos un Avemaria por nuestro se­
ñor Inspector, que se ha dignado esta mañana
hacemos una visita; pediremos per él. por sus
hijitos y por todas sus intenciones, a fin de que
el Señor le bendiga.
Las niñas rezaron la oración a coro, mientras
por las mejillas del Inspector corrían dos grue­
sos lagrimones.
— Si

I'Jl Siipcrlor Haleslíiiio qi.io nos envia hi rc la «•Irtn, a] v isila r uno do nuoslros Centros. íu é
roülbídü por lodos 1<« alum nos reunidos, y uno
lie Hlfw luyó un edlido saludo de blenvenidn.
Al oírle, preguntó al 'iJiredor de la Casa:
—H¿íjiié d iría la autoridad cscoidsMca si llegaso en c¿le momento?
— (Nada diría — respondió cj iJlia-rlnr
pnr>
oso murJiaeJu) es el h ijo del Jefe escolástico de
1.1 zona.
L a üliru Saleshmu en Méjico, fundada hanclncuenl.i años, llegó casi a doapareei.T durante
1.1 persecimlón. Prlm eraniento Ijieron e xp u lsa ­
d os los s.icerdoles extra n jero s; (lesjuiés so vie ­
ron irhligados a oeuUtU'se y a huir los naeiona.es. NuesiLros CiMdjulores sO'¡luvieron oi aposloimlo sakvsiano del niejm- modo (jiie puilienm.
I’.) mismo IM'i'siiieiilc Callos rospeló Jos Colei/in.Salosiiinas. reeomHdenüo la obra bonéllca i|ii.
IbvvaJi.m a cjiíki en favo r de los hijos de: ipmh.n.
"A éMos no me los locjiiéls", flu'diia ordenado.
M.U larde vino d despojo eoniplelo. y el Co_Idemo w u p ó los fU alro guindes Ccnlro^ de Mé­
lico, Moreliu, llU .iilalaiala \ l ’ iot>:a. Los Jiuli'•'¡.Hios que lograrim i.erm aim cer en el país si.¡s'U.eron >y- iii;.«.on i-u r.i'a-. iiaelii-u aiir-.

AclUcllniQiite. a pe-ar di' !,i ese.isej; di* peleo­
na:. ;.i Obra Saleslana se- da sam dl.i cu unos
Ire.nl.i cenlro-: dltv, iglesia'S. once oJMlorio- íi sUvos y ili.irlos; doce eseiielas exjern.as; una
IMIM i,nio"HO'. y oll-a jiara as'p¡i';,ii!: s. K^Ui ÚIMma, Ino.ipaz de d.ir c.ibida a l.inlas vck'ueioncs
<‘»mo aciidetr. lemleá una llliul qi»e ■ jiermilii’á recili.i
l"ese;,-iili>s aspirajite.s a la vida Sitie'*^.,111..

Muy s ’ nlllcallvo is; d iJiecliu de que o¡ lépí-ciqi.ido ’ii.-¡le,uio <0 dú'igiiya linánimeitienli' al
Medor Mayor de Jos Salin^laitos.'sUpUiuindo..' , u .
vie pe--n,iil a nuedi'as Obras, h! IV .<ueesor di‘
Don IJosco aeogiu Livorabli-iiinib' la p.-1101011 \
dirigió un encendidu ruego al Capduly r.em-'iMj, reunido en Turin. pidinulo a lo^ Provinr'i
los de lod.i 1.1 Ci^ngregaclón d vaerliteio de „ 'ífiitios do Io> mlenibri>s de .suj, n>prr;A-.s
p e d o r U s o l’ ri-vitidas. para enviarliK a M,.j¡ro.
Huegi) que. acrpl.idii con eiilusia.suin, 1 ,., eieiiriiZallo u p o n d s e poi^ ivlira.
Adonde llegan los .'í.l:e^¡a^lr^ s«‘ v n o-.-r.-dí«los per

<lc M.irí.t

r.iina de l»on Hosco \ i,,..-

Xuxili.iiloya.

A R G E N T IN A
T ra sla d o de los restos del Padre
V espignani
Cun^diendo Iik aniiontes <ie>eo> m.inirevUdi»h m lo s u v e s por los C.H .peradnvo v Antiguo\lmumvs
de ¡a A'-genttíia. fueron
iias!.tdadi>s rit'sde Haití a Hílenos Air.-s ).» n'>b w mori.iles <ld por tantos año- Superior de la
Ol*ra Sídeslana en la UopiMiliiM Argentina. Hevej'tndisim o Pon José Vespignani. para ser eiilerradiis honoríficam ente en la cripta de la b a -

oS —

síHca de María. Auxiliadora en jiuestra Parro­
quia bonaerense de San Carlos.

IT A L IA
E l m in istro de T ra b a jo habla
de O o n Bosco
-IIOlMA.—L a iiutdic d d i de íc.brcro, como coninamionlo de las flesla.s- de Sun .liiun 'Hiwco,
i:l Ministro d e Trabajo de lUlia, A. Fanfani, diliglé) lii paliiiliru por la radip ai pueblo italiano
para honVar al “Sanio df'l Iraliajo y de los Inib»jadurcs". Recordó brevemente cuanto Don Ros­
co hizo en el campo del iruhajo y pn bien de
la clase, otjrera y de lo.s cmlgradO'S.

E l em bajador del Líb ano ante la S an ta
Sede v isita una C a sa S ale sia n a
SAN SE\ ERÜ.7 - 1EI día 1(1 de enero so dignó
v;-itai' iiUesi'.a (jasa de Osla ciudad el .embaja­
dor del Líbano ante la Sania, Sede,, don Antonio
J.ibrc. noUible escritor e incansíi-ble apóstol <le
i.i Acción Católica. El. ilii-lre visiUinie,.. dirigió
la palabra a los alumnos, diciéncloles, entre oD*as
cosas: “ Estudiar la doctrina.de Jesucristo sig­
nifica, además de seguir;;:., ^marla. honrarla!..
Sin vida interior no es posible Ja Acción CatóJ'o nti, (kbe quedar como
un don person.d, sino, que del)i’moti íuiepr par­
tícipes a los demás mediaiiH; las oin-as. Tanlo
se nos da cuanto damos.”

¿Recibe Ud. nuestro
suplemento misionol

j
:

^ ^ tíu e fU u d % i 4 i A n e i a ?
Se publica cada dos meses, con
dieciséis páginas y gran profusión
de ilustraciones

|
;
:

Tres son sus fines:
Acrecentar el amor hado las Misiones...
Dpr a conocef las Misiones de la
familia Salesiana, eminentemente misionera.
Recabar auxilios espirituales y materiales pora estas mismas Misiones.

j
;
I
:

N o se contenten con leerla. Envíe­
nos alguna limosna. Propogue la
Revista. Búsquele bienhechores.

\

*
\

DE N U E S T R A S M I S I O N E S
IS L A D E T im O R
Los misioneros salesianos ■saUeroti de Lisboa,
zumbo -a esta isla, el áS de junio d>; ¡'j4u, y
llegaron a JDHi el
(de sepl'unnbrc Miel
'tibo. üvninle la iravesia hiñeron esaila en Ciuziad del Cabo, .donde fueron earh'iosasnen'lc reñbklos >j hospedazios f^ r los üaiesUmos.
Áclualmenle son tres sacerdotes y euoLro -voculjutorvs ios hijos, de Don Dosco gao trabajan
z\K- aquellas iliUUudes. Su siUiui es ó¡>iijna y se
hallan llenos de enlusiasmo para detlhoarse con
íoila su alma a la evanyñizañón. de los in~
dajenas.
:
.
.
En espera de una organización definillvá ¡((.f
su trabajo, Don Vighoü y .el coadjutor español
HoTi jM03b .Iranda se‘ kan
a disposición
del Obispo, que les ha encoi-gado de mn inter­
nado diocesano. Los otros Salesianos. aliendcn n
nn'extermuto. tazubién dé la diócú.sis, ' cuyo .edi­
ficio- había sido destndáo 'jm- las bombas y los
''iqiioos. Tiencii Íresclénto.'< niños, de los cuales
vn-centesuir ño son aún crisüunós.'
Entre lauto, estwtim el "ieluin"-, esto es, la
l<-ii‘j ua indigena más extendida en el país, y
i-in poniéndose en conlacio. ñ>n el pueblo, ¡la
de tenerse en cue.nta que la obra nüsinuera ha
•^aftido 7nuchisinw a causa de la guerra.
Pe los <T»ínie«/o« J/ní 7raí/f/flíííey, sólo treintaiiiU son rrlstknws. Los 'calenimenos son' niuclii'ó/íük<. y Trn cmla 'lia en nurneni'i: de Uil znanem, que 'bien puede decirse que la iconversión
di’ la ida
.<< /o eíít'srirÍH dé Emer m ayir fiiií7M',"0 .‘ir nii -ionci i>s.
Ejl l/¡ iirz.sa se idi-zeiTzi un gifiii dr'e,’i tfr
conoersiones; y si se le pregunta a (dyuno:
". Eres cr'i.’-lianoT". se oyi‘ ztr OizUzmiio z'.'-la -i rsmu’<la: " íotlaña no", que indb’ti W fPeH aniieiid> de serio.
•4ttíi se acuerdan de nuestros llcnnojws zjw
(-• í'i ■
ji . .1 /-; i '.í los Orfzs é7 ai .Vj . y se halla
ñfiUtnle exlemUda la (ícr-'wtón a Marut Auj-diaLa fundacUin de e¡uk¡ uryenle necesulati es.
'in dw.Ui. UU’/ Esruelo Igntada, pues ¿a ayrP iütura es la vida de Timor. Lo.s /zrinñpiles prodactus son: cereales, café, té, miuleras preñai ‘ Z- .

C H IN A
Deszit hacia mucho tiempo deseabaii nuestros
^f-<iar,,:ros fundar la Obra Sales'iana en uno de
mñs pobres suburbios de Pekhi. La.< difieran grandes, ^ la primera y mayor
de
í t fnd’i dr 'bnc
• • '
•
- r-?-'-. y i - '- 'f - i f ,•!
fjli .'■■■v-/--í1/.« "i
un señor caíótl-ri. iajahién inzUyezm. qju- p ireca

querer vender una casa. Fuerwí a visUatlc, y
tes retífíió u»i hijo drl señor, esludi-mie de Ihv'chtíleraiiO. 'El ;jovñudto'se llenó de alegría ztl ver
a los .Misioneros y les' acompañó a visiíor la
casa en cuestión, que aa una antigua pagozUi.
y. tuilui'aimcnJ.c, 9W se prcstídHi a ser fácUntenh'
iidapladzi jHira colcgiv. Peco próJñmn a ella tui
bia un ¡ndiu con aiguzuis habUacHinrs aizaiuUinmlzis. J.os ¿'(Uesianos las pidiet'on en lOTiemUt.
dazulo a enlmuher que c<mtab>in con ¡zoco dinero.
El ¡ziuchurho sonrió, y le.\ nscyzm'z que su paizó
no ¿es pediría -ziada. En efecto, a(¡ael señor /e>
recibió con gran cariñu, les presentóasu fuinilui.
zjnce, eziirc hljczs e lUjas, y les dipi: "Pueden
.cenic cuairdo^ quiez-an. Esas luxlAlacioncs tienen
entrada, iiu.lepezuiienlc y están dasde aho>'a z¡
disposición de ustedes por—todo el^fleznpo que
las neoesiíezu £i celebran la Satiln .Misa, jiokdI i-.os
iremos ron frecuencia a oiría. Pidan a Don /fos­
co. que nos -proteja a m i y a m i familia y nos
obtenga un buen sitio en el Cieio."
Con, el auxilio kJe ios Antiguos-.zllumnos y de
Uis hijos dél cuno, nuestros Misioneros se dispusieron a repazar los'despez-feclos de armella
r'tviczula. /'or crW<ife.s, papel recio; ol ¡laviincnlo
de tierra... Pero m<ia de lodo esto les asustó.
.S« bienhechor /«■-> ¡zroreyó ilr aigiums silUis, mxsns. escobas. rsUo-ns... L'n Puzln- ile la l'.uit'ersidad t'iziólir-¡. que hizbhi sWo rnjteUón mllUídr
, de las fuerzas uor(cajnez-iz:ana.s. les regaló algu­
nas iniizilas. cla i"''. ■•'ierras, boles dr l•nns^•r^1a...
I n dia se eTu-oiUrw ■■'o con el Sujzerior de /os
Pmlres /?f'»r'f/íciln/..s. f/u'ien. enJeraibz de su -s<lunrion. les'd ijo: ‘‘E<(á bu-n. >'o jspemba a un
grupo de znonjes que debiuu llrgzir qiur estos
di'zs: prio iiir rnz’unirazi gue tzir^liznin unos seis
Jzie'Ses en eslar aquí. ICji-/hh a 7i«í's/r« cnszi g
cueniezi con Ttosofrn.s ¡zara eitnnlo zu'Z'esUczi." \t
din siguiente fué en personn o rMítzr ii los núes.
Iros, y quedó azlzniruiho al rontempbu' zi los .intiffUZ’S Aluziizizts. unh'ersUtzzi’Ks en su iziuyor ¡un­
te, ocupazlos en barrer el suz-lo, ilziqiizzr puerlus
y vexíanas y otros humildes quehaceres. Quedó
izsíiñi^iiio Oílmiriulo doi ro/or /Zp nuz’slros Uerznanos. que no se urredrazi jzor tener que d/u’mir en aquellas míseras habUaciones, enrarail'is
al norte, ron un frío que, de hecho, llegaba a
. l l■z•r.s z! remlp gradf,s bajo reriz.
Los iiíÑon zz/zne.nzaroti a nraulir en buen nú­
mero. Los intiguos .ifwiinos. pzr stz paule. zUsde d st'djado al me'Hz'xiía dei dzjmingo ejznvirtieron
las Casa salesbma en su propia rasa. La í)izriz
esta/zn en marcha. Ei zsujzerior dz- Dts Pazirei, ¡¡encdiefin'zs y id dueñzz zje la viñendzi. jujilzitiif't'Zr con otiiZ.s ^per.'^onziji de bum ronzzón. si­
guen ayuz'bznzlo a la inz-ipieníe funziacUzn, que
ya c'^Tnienza a tm-ar con la mano los frutos
T€'^‘ iiñón entre ios pcdjrcs halAlantes ilz- aquel
suburtAo áe Pekín.
—

I

59

El Templo que profetizó Don Bosco
E

S una mañanita rosada y primarerol del
año 1887..., el Innee que t l ^ e a ür
Pascua de Pentecostés.
En ia escalinata de la Iglesia de Son José
(«Josepets») de Gracia, en Barcelona, unos
obreritos, buenos cristianos, osí como quien
no da importancia a la oosa, se hablen, se
comunican el pensamiento, « e animan... y
emprenden la subida o l Monte Santo del
Tibidabo, en cuya cumbre emobon de cons­
truir los Solesionos una copUlIta dedicada
al Sogrodo Corasón de Jesús.
Senderito adelante, meditando las penas
de Jesús camino de otro monte. Y a han lle­
gado a la dma. El pánotama es magnifíco;
la ciudad comienza a despertar y a encen­
der los mil incensarios de sus fébiicos y
talleres... Los sencillos romeros no dejan
ioscinor sus ojos con bellezas creadas, cuan­
do han subido a honrar ol Creodor.
Reúnen ramilletes de flores silvestres v

60

—

dejan en la copillita una guirnalda de bo­
lones y de pétalos, porque no pueden deJorls sus corazones, que el de Jesús amante
aocd>a de robarles. Y bajan luego fervorosos
como log tres del Tabor. ]Qué bueno es es­
tar lejos del mundo y cerca de Diosl
A sí se fimdó la llamada Romería del
«Rom»,
A l año' siguiente se aumentó la comiti­
va, y ol otro mucho más, de tal manera, que
hoy cuenta con una legión de romeros fer­
vorosos, sacrificados, constantes.
Pasaron los años y se comenzó a intro­
ducir la costumbre de que cada peregrino
se llevase el ramo desde su coso. Hoy día
la Romería está constituida de una forma
total y orgánico.
El 19 de mayo de 1906 se. celebró con.
gran solemnidad la bendición del precioso
estandarte. El acto tuvo lugar en la iglesia
de San José ds Grada. A l día siguiente fué
llevado en procesión solemne a lo capilla de
la cumbre.
Con esta ocasión los romeros estrenaron
también su insignia: la imagen (del Sagrado
Corazón de Jesús, con. los brazos abiertos
sobre uno cruz bizantino, en cuyos extremos
se leen astas palabras en relieve: Adveniat
— Regnum — Tumn — Romería del •Rom».
Actualmente se sigue este orden: Triduo
de preparación en las iglesias de Barcelo­
na para mejor disponerse a lu Comunión
General que se hace en la, iglesia de San
José, desde la cual solé el cortejo que se
encamina monte orriba rezando el Rosario
y las Estadonss del V ia Cnxds. Una vez
los romeros sn la cumbre, comiema la M i­
sa solemne con sermón. Por la tarde se reza
el Trisagio ante el Señor de manifiesto y
se do la Bendidón con S. D. M.
La Romería tiei^ preferentemente sentido
ds e>q>iodón. Almas a los cucúes el Señor
ha inspirodo tal amor y ha atraído con tal
fascinadón, no pueden menos q[ue sentir un
ocendrado cariño, una espedal predilecdón
por lo Obra d e f Templo Nadonal Expiatorio,
por la Obra del trono del Divino Corazón,
que corona ya como foro luminoso la cum­
bre del Tibidabo.
La primera limosna paro el Templo la
dieron los sodos de la Romería del «Rom*.
Nadie les puede quitar este honor, que les
da nombre de nobleza y alcurnia en la Cor­
te mística del Palado Nadonal del Cororón
de Jesús, nobleza y alcurnia que han man­
tenido y mantendrán con la generosidad y
brillantez que les caracteriza.

TiBiD^BO (Baroelona).—Xcflbfl de llegar vna peregHnación al Templo .Vocionoi Expiatorio
del Sagrado Corazón de Jesús

CRONICA DE GRACIAS
SAN JOSE DEL VMÁJE (C á d ia ).^ o y gracias
al siervo de Dios Don Felipe Rinaldi pw haS>er
obtenido del Señor la salud para un hermano
mío, Antiguo Alumno Saleslano, gravíetoamente
enferme desde hacía unos meses. Profundamente
angusUada, ofrecí al siervo de Dios resar una
Novena y p\ibUcar la gracia, cosa que hago aho­
ra. llena de graUtud.—^
María Ramírez,
vicia de las HH. de M. A.
HORCAJO DE SANTIAGO (Cuenca).— Por mu<^os años que el Señor nos conceda de vida,
jamás dejaremos de dar gracias a María Au­
xiliadora por dos señaladísimos favores que tan
buena Madre nos ha concedido en este año en
dos apuros de familia. De cumplirse los prondsUcos de los hombres de ciencia, dos hogares
se hubieran quedado sin madre. Como en todas
nuestras necesidades, acudimos a María Auxi­
liadora e hicimos novenas con promesa de man­
dar una limosna para su culto y publicar los
favores. Hoy, llenas de gratitud, cumplimos lo
prometido, al mismo tiempo que pedimos a la
Virgen de Don Hosco sfga dispensándonos su
protección.— C. y B. Carda.

M.\LAGA.—Hace días cayó enfermo de grave­
dad mi ünioo hijo. Eo tan apurado trance, co­
rrí, como de costumbre, a los pies de mi buena
Madre María Auxiliadora, suplicándole devolvie­
ra la salud al niño, que desde el día de su
naclmienlo lleva en el cuello su medalla. María
Auxiliadora oyó • mis súplicas, y hoy veng#
a ofrecerle dos velas' para que se consuraaa
delante de su bendita Imagen, ya que mi hijo
se encuentra perfectamente bien.—Ana Trigue­
ros de la Torré.
MADRID.— Habiéndole salido a mi hijo Antonio
unos malignos granos en la cara, y viendo que
no se curaban con los remedios de la ciencia,
acudí a María Auxiliadora, prometiendo dos mi­
sas en su altar. A ios pocos días le desapare­
cieron los granos de una manera que nos dejó
a todos admirados. Qumplo lo prometido y no
ceso de alabar a la Virgen Santísima por su
bondad maternal.—Saíoador Hernández Sagrado.
a z o t a n d e l a j a r a (Toledo).—Muy agra­
decida a María Auxiliadora por un favor reci­
bido. cumplo la promesa de publicarlo en el

— 6i

IlüLKTiK SAiLfiSIANO y enviar una lltnoüjia, ro«•ándnla siga favorecMndome con su poderosa
lolorcPsIiOn.— Ijonfí\na Moreno.

obras de beneficencia y a varios Institutos reli­
giosos, entre los que se cuenta, la Gongr^aoión
Salesíana. La menciona'da señora ?e sintió este
año afectada por una serio de enJermedades aS^SJj.'VMAíNOA.— 'Habiendo recobrado nn liljo la
cual más grave, que,' unidas a su avanzada edad
salud por Intercesión de In Siinllslma Virgen
de selenta.y jnáá años, hacían temer seriaimenMoH l Auxiliadora, cumplo la promesa do pu­
te por su existencia, tanto'más cuanto .que esos
blicarlo • en‘-el nOLKTlN
para ma­
males se moslraban rebeldes al tratamiento de
yor honra de la Santísima Virgen, y envío al
la ciencia. Devota, de San Juan Rosco, en cuya
mismo tiempo una limosna para las Obras Sa- •
parroquia so halla su domicilio, tanto olla como
lia n a s .— Teresa Avilo.
sus pulientes
enootnendaron con fei'vor ¡il
valioso patrocinio del Sanio,- rozando en su ho­
S-MiAM/XINOA.— Rosa Serrano da gracias a Ma­
nor varias novenas y recibiendo los Sanios Saría Auxiliadora por favores concedidos, y envía
crajuentos. Oj-ó benigno San Juan Ro.sco l.ns s ii-,
una limosna para las Obi'is Salcsianas.
plicas de tantas almas buenas,’ y contra toda esidMUMHiA ;,Argcnllna). — San .luun Hosco fia ■•pw’unz.1, fueron íicsaparootendo los doldres. has­
dado fii eslos días una nueva prueba do su v.tta.que pudo'luTllarsq la paciente completanionte
¡indonln unte el Ironn do Dios, cofislguioncio la sa,
restai>!wida. Llena efe gratitml a San Juan Ros­
iiul do la sedorn doña María Teresa de Porndndi'Z
co, se trasladó a su cripta para oír la Santa
l’onre, lJl^l•lnguida dama do lA sociedad eordu-Misa y .cnniuigái''en- coinpañía de-'^is famllialic^a, vinculada jifn- su caridad a minu-rosas
res.— La Dirceción <IH Colpijio Saiesiann “Piio X ”.

IN ME MO R I A M
D(X\ JOSK GARCIA RODRIGUEZ.— Rogaqjos
a- los loclores del HOLBTIN se'sirvan encoanendfU’ a Dios el alma do este distinguido Coope­
rador Saleslpno, modelo de caballeros cristianos.
Ituon padre de íamilia y muy amante de la
Obra de Don Rosco, a la cual favorecía siempre
con gran afecto por todos los medios a su :ilcanqc. La Comunidad del Colegió''Süesiano'tj^l'
Nu’c iir» ííenora del. Carnu'n fUtrera). agradeclilí
e l t ^ RÍis^f>légarVíá al-*Cl&1o*^pítrrf'qtíe el Sofld^
recompense al finado todo el bien que hizo (>n
vida.
DGX P.\SCr.VL SERIU DE HDl'ARrU. Y DE
r.liGPI’rii-V.--lU'cienIcmcnto ha fallecido en Rarcolona i'síc ilustre Cooperador Saleslañó tras penos¿i (lidcitciá; en iV qUc-'dló Idm'slraS dC .Ctllfi.éanle roignaclón rrislianu.
Éru el fiit.ido ftletó-do «oiuella vorK'i'ábio dúmii
(jui’ se llamó ijnñ.i Doixdea lii* Ctiopltea. cuyo
[iroecsd do healincaclón só halla Ch cili'so. CahalleroAte iv ’.i'vantes virtudes, fuó alevosanii'iiie
pe:’seguldo durante la domlna-rión roja, sufrien­
do cruel cautiverio, como Irritos sus dottUivs, y
perdiendo a dos do sus hijos, .losó Oriol y Fer­
nando, vilmcíite asesinados por los marxistas en
Hruñula. íus relovantcs dotes pe’rsonuíles y su
ejemplar senclUc* de trato le hicieron merecer,
do cuantos le .conocieron, un lesUmonío unáni­
me de oonsldea'aclón y ivspoto.
El acto dcl sepelio constituyó una sentida mantreSlaclón de duelo.
OTIR^ 00(.>P£JRADORES DIFUNTOS; Don An­
tonio Montero Cabrera, don Ignacio Felló Torné,
don Fixlerico de la Cuadra y Sainz de la Maza,
62

.Manuel Ruiz y Díaz déTaTSerna y don José Ji­
ménez García (de Utrera).
;En- diciembre último piisadn falleció en Fi- j
güeras (Gerona), confortada con los San-to,s Sacrairfcntois y la Rendición Apostólica, divíía 'liu'resa Garcia. viuda de Miljáns. Pertenecía' a 'la
Pía Unión de Cooperadores Salesianos, por la
cual sintió siempre vivo entusiasmo,- favorecién­
dola según sus posil)ilidadcs. A sus hijos y dimás fíiniilia nuestro más sentido pésame.
En Corona, el .12 de enero, entregó su otm i
al Señor Iji distinguida y pipdosa'señora doña
Juila Vergés y Rarris de Quintana,, di^jués df.
íúdicr recibid» lós’Sant.íos'^acramentbs y la Ren­
dición Apostólica. Elevamos oraciones por Ja di­
funta, que con tanto eníusiasrn.0 miró y favo­
reció durante varios años' la Obra Salesíana 'cn
Gerona. A su apenado esposo, don Alberto, iiijos
y demás familiares, nuoslni más .sentida' rnmi''lencla.
^
'
.

R. I. P.
L A M A R A V IL L O S A O B R A
D E UN C O A D J U T O R S A L E S IA N O
{ V(«ne de lo pógino 63)

•f

du Siin José. La última noche llegó sudoroso
> feimil. Se fue al leclio si-n cenar. Esa inadrngada. el que dormía en la celda de al lado o^'ó
ipie lo llamaban. Era Don Carlos, que decía:
"Me rnueiu. me muero...” El Hermano corrió
.luxilíarlo. Vinieron los demás religiosos. Fueron
por el níódico. Pero éste llegó tarde. El edema
pulmonar no había esperado. A' el viejo lucha­
dor entornaba serenamente sus ojos a la luz de
esta vida para abrirlos, a los resplandores de la
eternidad.

U MADtVIUOSA OBRA DE UN CDADJUT08 SALESIANO
(Copiamos del dÁar'w ”E l Pueblo”,
lie Buen&ü Aires, el- siguiente aHMdo.
debido ú. la plwna del Bvdio. Don- Raúl
Entraigas.)
.UIfcJ unos días corrió por e! cable, como un
■gélido lllo de alfanje, Ja noticia inesperada:
Carros Gonci ha muerto...
Conci ha muerto apresuradamente. Como vi­
vió. El vivió sus setenta ahos densos. Naciii
allii, en •el Tirol, donde la gente es recia y el
alma -.ibre. Tema por. eso don Garlos a!gf> de
interaaoioñaJidad que le sentaba bien a é!, quo
era ciudadano de-todas las patiias. Conocnl da
Soledad de Don Sosco y la ,amó. Siguió , ai
inae>U‘0 turinés con la fidelidad con que sirvió ,
ai Divino Maestro de Xaziu’et. Hizo ;os votos
perpetuos a Jos veinte años. A l .simiente llegó .
;i UiK'nos Aires.
Hombre inteligente, se percató que liubia que
aparejarse para las luchas que' se avecinaban;
Y después de cerrar el taller de Upografia. se
vda d D on ’ C a r ^ devuivurdu íilji’os .•’d t lítír.dura. dé hfetorá y . de sbciólogíaJ
Y llegaron las horas de pruefea. Utópicas idevas
libertarias, quiméricos 'sueños^e igualdad, lan­
zados con la catapulta de una própaganda bien,
organizada en pueblos bambrlentos, 'prcndí*<i
coino el cardo ruso en la-pampa generosa.-Y’ de
ahí los mítines, las- iiuelg.is. el sabotaje, ele. Y
como'cbnsecuéncia, el odio a los de arribo, fue-,
ran éstos clérigos o laicos, mitrados o curas de
misa y olla. Era necesario salir por los fueros
de la verdad. No era posible que el pueblo 'fue­
ra miserablemente engañado. Fué entonces cuan­
do salieron a la liza varios sacérd'otés argenti­
nos, jóvenes y valientes, ©lyas jnwiUU’'^ '
tuaclones ha de recoger la liistona. Y treparon
a las tribunas callejeras río pocas veces, entre
¡os silbidos éstrldenics de loá adversarias. ¡ Qué.
J¡ampos, aquellos! Ua spvcra silueta del sacer­
dote, dibujándose austera sobre una multitud
que se Iba amansando a medida que e] \pit)í>
iba domeñando la turba, y la verdad se oiiría
camino por éntre los breñales de los prejuicio?.
surgieron De Andrea. Franccsoíii. Napal. Y
junte a eülos, los seglares. Necesitaijan homlircs
de pelo en pecho que les acompañaran en la
lid gloriosa. No faltaron jóvenes animosos, a
quienes tanto debe el catolicismo argentino, que
.‘Izarou su voz, vehemente y sonora, como la
de un apóstol. Pero eran pocos. Y la lucha era
cada vez más enconada. Y la polémica, más
incisiva. Habí? que echar mano de todos los
elementos de orden. Y' así salió a la* caJle Carlos
Conci, a enseñar también él, con las manos
manchadas de tinta, pero el alma llena de fuego,
la verdad de Cristo a los obreros criollos.
El honhre tenía pasta. Poeta nascilur, oraior
fit (el poeta nace, el orador se haccl. Nuevos
estudios, nueva eiperieacta. buenos maestros,
acabaron por formar del humilde religioso sale-

H

siano un notable orador de bandeada. Para los
obreros no había* cosa mejor. BHós cnliendcii
a los que les hablan en su lenguaje. Don Gar­
ios tenía,' schre todo, el fuego sacro del após­
tol.-Sinceramente piadoso, calla lúañana Inv^l.i
lU'Vülamonle su •'Hstitaeión; a.*ií iiumlnalvi su
monle. Luego cCrAmlgiiba á dliU’io; asi cahleíriia
su corazi'in.
Deslíe erilonoos encontramos asociado a Dua
Carlos Conci en todas las grandes realizacioni"'
del catoliidsnio argenlinó. En l ‘.U!> colabora cu
la fundación de la Unión Popular G.itóllca Avgeiilina. 1..I' vemos al Jado di- .Monseñor Do An­
drea én aquedla histórica colecta que tan esi>léndidos resultados dió jiara el’ iHiuilIlirlo de
las'clases sociales en pugna. En-1920 os elegldf»
presidente de la Junta Central d e : los Círculos
Católicos de Obreros. En 1925, el Gobierno argentiiió le designa delogado obrero en represen-'
tación de todos, los. trabíyadqres del país a j a .
Conferencia Internacional del Trabajo en CineUro,
Mi»y
r«.*V t
' .->T . . s r\
£ji Gir^bra-,: siempre qtie 5 ia i^ iavitaoiones;
jríbtncoTares, Te cn'^abaíf la r j^ a s ^ r a monsieui^’
Conct y para madame ConcL ¡ Y'Cir.sonreia bajo
sus bigotes!' ¡Si imaglhárian eílós’ que monsicur ^
Conci era religioso! En Gind.ira aprendió muciio'
y se vinculó' con* obreros da.,todos h>s ooioros..
Vuelve a. nuestro país,' y ’ áe le- encaiga üe'
, ln.5 ex ahwnnos. Y' allí Conci ronov'ó su juven­
tud, como las águilas. Entre jóvenes tornóse
joven. Y como antes llrengaba .< las mas.is ol)r<;, roí oii . la caye, a!i"ra .arenga a la "muciia*• eliíwla de Don Bosco” — como decía él— con
idériV^q. feivor í .éoh L misma elocuencia jila—
licamenie suya, ¿nlonecs fué cuando se ilcdU'ó
^lé* lirténsamenfft 'a esóT^ljlr. Los Ponliflces ro~
manos y
cuesHún >si/chi', Venladcs y hechgs.
Ajntnies 'de socioDigia irrl*íí<i»a. El Papa y Ja
HnnuiniHad y El ‘ -¡Ui, culfiHrn -lai
••ItnijMmct|wli-?.
En 1931 i<a?ó a l.i «lasa saksiana do Hosarlo.
Otro campo iiAgnfüeo para sus actlvidadi-s s í i clal9.*Cl4iam^.. El año pasado, o! .Eminentislmo
Cardenal Caggiano, que lo honraba con su eouñunEH sin medida, trijole de Roma una conde­
coración ponüflcia: Conci llevaJia sobre su p e d io
¡a medaJta “ Pro Eeclei-ia rt Ponüñce". .
Entre los grandes amores de Don Garlos <--taba el amor al Papa. El fué uno de 'los ma-i
entusiastas propulsores de Ja Fiesta del Pajia
en el país. Sus Übros respiran amor al Ponlíflee. En sus conferencias alusivas al Vicario; df
Cris*.'; se superaba a sí mismo. Actualmente, no
obstante sus setenta años, estaba, por Indicación
de su Prelado, empeñado en una campaña in­
tensa. a fin de conseguir una suma muy grande
para enviar al Pontíflcc con el fin de socorrer
n los hermane*? hambrientos de Europa. Estas
Viltlmas noches solía llegar externado al Colegio
(Sigue en la pógíno 67)
—

63

BIBLIOGRAFIA
Obra nueva, iníeresaníe
“ frOMILIARIO DaMlNICAL Y FESTIVO", por 6¡
Muy Reverendo Padre Felipe Alcántara, de la
S. Saleskna.
Ooe tomos, tamaflp 22.5 x 16, de magníílca pre.
eeniaclón, encuadernados en pegamoid, sobre
cubierta a colores; 1.132 páginas, 160 sermo­
nes. Precio: 50 y 60 pesetas oa<da tomo, res­
pectivamente. Librería Saleslana, BaroelonaSarrlá.
Contiene esta obra dos homilías de cada una
do las Dominicas del alio, más dos de cada una
de ios fiestas de precepto y una de aquellas
fiestas quo, por su rito especial, desplazan el
oficio del do-mlngo. Es, por tanto, de grandísima
utilidad para cuantos se dedican a la vida paH>ii >■•1MI

iH M-M4H4ri.i I un1111n I n I

BIBLIOTECA

rroqulal, pues la doble serle de sermona daa
facilidad para variar anualmente la hoinüfa sia
incurrir en las mismas repeticiones.
Ofrece, además, el “ HaMILIARIO FESTFW"
abundancia de temas para toda clase dé seranonos. Basta ojear el Indice alfabético qué hay
al fin de la obra para encontrar materia abun­
dante de pláticas, conferencias y temas de for­
mación para Círculos de estudios.
Suficientemente conocido es el Padre Alcánta­
ra, quo nos o fr^ e hoy tan primoroso trabajo,
para que nos detengamos en mayores conside­
raciones. Su solo nombre es ya garantía bas­
tante del éxito que deseamos y esperamos h*
de alcanzar.
La parte tipográfica es cuidadosa, como le son
los trabajos ejecutados en las Escuelas Salesíanas de Barcelona-Sarriá. .
Mn u il H|lli I

11^1 M I f I I I I I

EDUCATIVA

Publicada bajo la dirección d el P. Rodolfo Fierro, Salesiano
TOMO S

PUBLJ G A D O S :

I. SIGUE TU ESTRELLA - II. ¿TU QUE QUIERES SER?' - III. DE NIÑO A
HOMBRE - IV. SOIS DE CRISTO - V. |MANOS A LA OBRAI - tVI. APRO­
VECH A TU V ID A - V il. C A R A AL PORVENIR
SECCION

FEMENINA

VIII. LA NIÑA EN EL COLEGIO
En prnparacién o tr«t dos obras para aeñoritas
Estos tomltos no se han escrito para niños,
sino para jóvenes que puedan y quieran aer algo
más que un slmjple número en el gregario ejérello de los aburridos de divertirse. Pero no se

CADA

EJEMPLAR,

1 4 M I M I l« - l I> | M

LECTURAS C A T O L IC A S
de San Juan Bosco
Aparecen mensualmente e a
forma de elegantes tomltos de
oion página».
Sus asuntos, que de ordinario
forman lomo completo, son va­
riados y amenos, siguiendo la
tradicional costumbre de dicha
iublloaclón, al alcance de todas
as inteligencias.

f

Susoripolón para 1948: 20 pes«as.

han escrito para que los lean sólo ellos. Las
educadores. Jos padres de familia y los sa a »dotes hallarán en la BIBLIOTECA EiDUCATIVA
un arsenal maravilloso de dIrooUvaspedagógiaae.

900 P A G I N A S .

SIETE

PESETAS
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