BS_1953_09

Ficha

Título
BS_1953_09
Descripción
Boletín Salesiano. Septiembre 1953
Fecha
1953.09
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BOLETIN
SAUSIANO
SiraiMBIU 1953
Núm«rp 9

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S e n Ledos elloy mu y c o n c e i d o s por ios ioetoros de la vi da do n u ns t i o S¿inlo Fin*
íi. dor. E L R E Y CARL.OS A L B E R T O lo apj'o.io tmieliisimo y lo a yu do oeanomic.unnnli
S IL VI O P E i . l ICO, vi duloo 0‘ r r i l n r d«' " L o mió priptjiotji", f ue su aníiíja y conhdunto. CAVOl JR. a p o s a r d.' mj . u i u a . i o n pc liUca, so h o m o s i r m p i c con la amiM.ui
d^ B r u Bos en. r i A T T A Z / l , a u l o r do lamo.^as loyor. o a u l r a la; C oi u í Ui d a d o s rrliqies a s , l u r prraií.anuuUc el ípto ííí mu; ro a congoj ó a Don B u s c o ia iundíieion de íj
^ . irdad S a l e . l a n a .

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O B R A S

S e p tie m b re 1953

DE

D O N

B O S C O
N úm ero 9

AUGUSTAS D I R E C T R I C E S
XI
En los finales del discurso papal a los Cooperadores Salesianos se multiplican los motivos
de agradecido co m ent^o a la bondad del Pontífice. El de este mes nos parece excepcional,
7 se nos antoja algo así como una revelación del beneplácito divino a la idea genialísima de
San Juan Hosco en relación con el apostolado de los seglares. Que el Papa está satisfecho, como
él mismo lo declara sin rebozo, es decir que lo está Dios. Cooperadores Salesianos, lenhorabuena
Satisfecho Nos mismo, y contento del bien que sembráis y de los frutos que recogéis,
todos nuestros augurios... son por un mayor incremento de vuestra Pía Unión en nú­
mero y en fervor.
La Pía Unión de Cooperadores Salesianos ha recibido con esas palabras la más solemne
confirmación de la divina benevolencia que en sus respectivos tiempos, con toda su alma pa­
ternal, expresaron y reiteraron cinco Papas:
Pío IX, queriendo ser el primer Cooperador y aprobando los Estatutos.
León XIII, erigiéndose en persoixal protector de la Pía Unión.
Pío X, distinguiéndola como miembro excepcional de ella.
Benedicto 2 ^ , enriqueciéndola con nuevos privilegios.
Y Pío XI, canonizando al Fundador.

El Padre Santo está satisfecho del bien que se hace y de los frutos que se recogen. Pero,
conocedor de los vaivenes que la vida impulsa a las mejores obras de apostolado, desea que
el bien hecho y los frutos recogidos cobren carta de naturaleza perenne. Para eso les dedica
«todos sus augurios», traducidos, como es lógico, no en votos estériles de etiqueta humana,
sino en oraciones fervientes, que, a buen seguro, no serán meras plegarias verbales, sino que
subirán al cielo enriquecidas con los méritos de su inmensp trabajo por las almas y de sus pe­
nitencias, que dicen que son inauditas.
Confiad, queridos Cooperadores, en la oración impetratoria de Pío XII y haced de modo
que tanto él como los sucesores suyos, lo mismo que sus gloriosos predecesores, puedan com­
placerse siempre en realzar vuestro apostolado con testimonios expresivos de la divina com­
placencia.
PORTADA DE ESTE NUMERO.—-El calendario litúrgico salesiano, por
benigna concesión de la Sagrada Congregación de Ritos, desde este año va
tiene agregada la fiesta del nuevo Papa Beato de la siguiente manera:
SEPTEMBER.—Die 3 B. Pii X, Pp. et C., Soc. nostrae Cooperat. DupL
Que significa:
Septiembre, día 3: El Beato Pío X, Papa y Confesor, Cooperador de la
Sociedad Salesiana. Oficio doble.
Los mncbísimos sacerdotes devotos que tiene este Pontífice pueden cele­
brar su misa dicho día en cualquier altar de Salesianos o Hijaé de María
Auxiliadora.

153 —

Entre aliñas cultas y Tpiadosas es corriente el
ajirmar que la doctrina de nuestro eximio Pa­
trono, no menos que el modo de presentarla él.
parece escrita como para nuestra edad. Cierto
es. Porque si en todos los siglos hubo maesíros
de espíritu que se amoldaron maravillosamen­
te a su tiempo, el Santo de la dulzura casi nos
hace pensar que se adelantó a él, como al suyo
San Juan Bosco. Tan ejicazmente' de ahora son
las páginas salesianas que difícilmente se acer­
can a su valer de actualidad las obras que van
saliendo afines al pensamiento de San Fran­
cisco.
En las páginas de nuestra revista irán apare­
ciendo mensualmente fragmentos de esa doc­
trina, con lo cual ellas se enriquecerán y los
lectores tendrán a su disposición medios de
arribar a perfección, sencillamente, entre los
deberes complejísimos de la hora presente.
AMOR DIVINO Y HUMANO
Asi titulamos nosotros, —por señalar algún
epígrafe— los conceptos que ahora siguen. Muy
oportimos los creemos para esclarecer un pun­
to de espiritualidad sujeto en la práctica a inex­
plicable confusionismo. San Francisco lo dilu­
cida con claridad tan absoluta que, leídos y
meditados bien esos párrafos, ninguno puede
dudar que amor verdadero es el fomentado por
la razón y la fe, con meta en los mismos se­
nos de Dios, pero reflejable en las criaturas
cuando se las busca por Dios y se las goza
ante los ojos de Dios. Dice el Santo:
El hombre ama por la voluntad, con lo que
el fin de su amor es de la misma naturaleza
que su voluntad; pero su voluntad es espiri­
tual; por eso la unión que busca su amor es
también espiritual, tanto más cuanto que el co­
razón, asiento, y fuente del amor, al unirse a
las cosas temporales, no solamente no serla

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-

perfecto, sino que, por el contrario, quedarla
envilecido.
Esto no quiere decir, Teótimo, que no exla­
tan en el hombre ciertas clases de pasiones, las
cuales, como el muérdago, que se desarrolla
en los árboles parasitariamente, nacen dd
amor y entre el amor; pero ni son el amor ni
parte del amor, sino excrecencias suyas, no
sólo ineptas para conservarlo y perfeccionarlo,
sino también grandemente nocivas, porque lo
debilitan, y, si no se tiene gran ctiidado, lo
arruinan totalmente. He aquí por qué:
Conforme nuestra alma se emplea en mt^oi
número de operaciones, de la misma natura­
leza o de naturaleza diversa, lo hace con me­
nos perfección y fuerza, pues siendo limita­
da su virtud operativa y debiéndola aplicar a
diversas mansiones, vese obligada a repartir­
las con tanta menor eficacia cuanto mayor
sea su múltiple actividad. Y así, los hombres
que se entregan simultáneamente a varias co­
sas deben dedicar menos energía a cada una;
no se pueden considerar exactamente los ras­
gos de una misma persona por la vista y jun­
tamente escuchar la partitura de una armonía
excelente, ni observar al mismo tiempo la fi­
gura y el color ni prestar atención a otra cosa
cualquiera si somos dados a hablar con de­
masía.
Y no es que yo desconozca' lo que se dice
de César y que niegue lo que asegura Oríge­
nes de algunos otros personajes, a saber, que
podían prestar atención a diversos objetos; pero
todos reconocen que, cuanto a mayor número
de objetos se aplicaban, menor era la inten­
sidad con que lo hacían. Hay diferencia entre
ver, oír y saber más, y ver, oír y saber mejor;
el que ve mejor, ve menos, y el que ve jnás,
no ve tan claro; un poderoso entendimiento,
aplicado a muchas cosas, es menos fuerte y ri­
goroso que aplicado a un solo objeto. Pues
bien, cuando el alma emplea su virtud afec­
tiva en diversas suertes de operaciones amo-

.Aspecto p a rc ia l d d
s a l ó n d u ra n te el
a cto oficial c e l e ­
brado en el te a tro
O lim p ia c o n oca­
sión de la s B odas
de P la ta de la s Eacu ela s P ro fesio n a­
les S a le sia n a s de
P am p lo n a

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Monumento a Nuestra
Señora de la Merced,
bendecido e inauj;ura*
do por el \*enerable
don Miguel Kúa en la
finca Martilodolas, de
Barcelona. Destruí tí o
por los rojos, fué re­
edificado j bendecido
de nuevo en el pasa­
do curso

rosas, es lógico que su actividad, así dividida,
sea menos eficaz y perfecta. Los hom br^ rea­
lizamos tres clases de acciones amorosas: es
pirituales, racionales y. sensuales. Cuando el
amor actúa sobre estas tres cosas, su campo es
más amplio, pero menos intenso; cuando se
dedica a una sola, es más reducido el camp<j,
pero más intenso. ¿No observamos cómo el fue­
go, símbolo del amor, obligado a salir por la
boca del cañón, produce fuego más resplande­
ciente que si se le hiciera salir por.dos o tres
aberturas? Pues siendo el amor un acto de
nuestra voluntad, quien quiera tenerlo, no so­
lamente noble y generoso, sino fuerte, vigoroso
y activo, es menester que reprima su poder y
fuerza en los limites de las operaciones espi­
rituales; quien pretendiera aplicarlo a las ope­
raciones de la parte sensible o sensitiva del
alma, debilitaría las operaciones intelectivas en
que radica el amor esencial.
Los filósofos antiguos admitieron dos clases
de éxtasis: uno, que nos lleva por encima de
nosotros mismos; otro, que nos pone por de­
bajo, como significando que la naturaleza del
hombre está entre la de los ángeles y la de las
bestias, participando de la primera en lo que
tiene de intelectual, y de la segtmda, en lo que
tiene de sensitiva. Pero el hombre puede, me­
diante el ejercicio de su vida y por un cui­
dado continuo de si mismo, modificar y cam­
biar esta medía condición. Aplicándose a las
acciones intelectuales y adiestrándose en ellas
se hará más semejante a los ángeles que a las
bestias; si se aplica a las sensuales, descenderá
de su medía condición, aproxÍmándo~3 a las
oestias. Y pc:^uo éxtasis no es otra cosa crue
salirse tmo de sí mismo, por cualquier parte
que se le considere, estamos ante i*n ve*dadero
.'Xtasis. Les que. atraídos por las de’iciis divi­
nas e intelectuales, se dejan arrebatar el ta ­
razón hacia esos derroteTos, están realmente
fuera de sí, por encima de su propia natura­

leza. ¡Venturosa salida de sí mismos, con lo
que se levantan a un estado más <ioble y su­
blime, convirtiéndose en ángeles por la opera­
ción de sus almas! Mientras permanecen hom­
bres por la sustancia de su naturaleza, deben
ser llamados ángeles humanos u hombres an­
gélicos. Al contrario, los que, atraídos por los
placeres sensuales, ponen todo el alma en su
goce, descienden de su medía condición a la
de brutos, y merecen ser llamados tales por sus
obras, aunque continúen siendo hombres por
su naturaleza. ¡Desgraciados, que salen fuera
de sí para entrar en condición Inmensamente
indigna de su estado natural!
A medida que ei éxtasis es mayor, o por ele­
vamos o por degradamos, más estorba al alma
volver a sí misma, dificultándole las operacio­
nes contrarias al estado en que se encuentri,
de forma que esos hombres angélicos, que se
extasían en la contemplación de Dios y de laf
cosas celestiales, pierden por completo, mien­
tras dura el éxtasis, el uso y la atención de
ios sentidos, el movimiento de todas las ope­
raciones externas, pues el alma, para aplicar
su poder y actividad de manera más completa
y más extensa hacia el objetivo divino, los re­
tira de las demás facultades, dedicando todas
sus energías a aquel punto terminante. Igual­
mente los hombres bestiales, arrebatados por el
placer sensual, y más cuando en sentido ge­
neral se habla, pierden el uso y el cuidado
de la razón y del entendimiento, pues su des­
graciada alma, para saciarse de goce en el ob­
jeto sensual, se aparta de las operaciones espi­
rituales. engolfándose en las brutales y bajas.
Imitan así místicamente, los unos, a Elias, arre­
batado a lo alto por un carro de fuego entre
ángeles; los otros, a Nabucodonosor, embruu^cido y relegado a la condición de fiera.
fsTratado del Amor de Dios». libro I, capí­
tulo X.)
.

166 —

EL

E S P IM IT U D E D O N B O SC O
E N U N A E X P O S IC IO N S A L E S IA N A

Honramos nuestras columnas con el siguiente comentario del gran periodista madrileño
admirador de la Obra Salesiana Francisoo Casares, aparecido en «La Hoja del Lunes» de
ia capital de España, con motivo de una Exposición Profesional en las Escuelas de Atocha.
• « •

Contemplo absorto, admirado, los trabajos. En la amplia nave se hallan expuestos por or>
den de cursos. Cada muestra, cada realización, se acompaña de una ficha, con la fotografía
del alumno y una «gráfica* explIcatlTa de su aprovechamiento cultural y laboral. En los muros,
dibujos, croquis, láminas que hicieron los mismos discípulos salesianos. Todo ello en las escue*
las de la ronda de Atocha —hoy avenida del General Primo de Rivera— de ios Padres Salesia*
DOS, los directos y fieles herederos de Don Rosco. £1 padre Rufino Encinas me va explicando.
Y los maestros de cada uno de los oficios y talleres completan la información. Se trata del estneno ilusionado de ios dos centenares y medio de muchachos que cursan allí su aprendizaje.
Admirable labor, cristiana y fervorosa asistencia a la obra educativa y de formación de futu­
ros hombres, so la puede denominar, sin exageración. Ingente.
Hace cien años ahora, Don Roseo fundaba el Oratorio. Ño estaba aún concluida la casa.
No Importaba. Había lo suficiente para instalar las aulas, el dormitorio, el comedor. Los mnohachos acudían a los talleros en otros lugares. Había que evitar el desplazamiento. Las bue­
nas costumbres, la educación religiosa, podrían relajarse. Y el Fundador, con auxilio de algu­
nos bienhechores, adquirió los utensilios precisos. Se montó el primor taller: el de zapatería.
Después, *1 de sastrería. Se eligieron los maestros. Había comenzado la gran tarea salesiana
de formación profesional. En este año de 1958, un siglo después, ol Estado español reconoce
su eficacia, proclama oficialmente su mérito. Este es el significado de la orden de 12 de mayo
pasado del Ministerio de Educación Nacional, que concede validez académica y oficial a las
enseñanzas profesionales obreras de las Escudas Saleslanas del paseo General Primo de Ri­
vera. Celebración simbólica y gozosa de ese espaldarazo es la exposición de los trabajos del
alumnado do la benemérita Instl.tudón.
Del primero al último curso, los pequeños artesanos se esfuerzan en un noble afán de su­
peración. En la labor de cada alumno se aprecia la exactitud de los ejercicios propuestos. Y
después, un objeto, una realización que significan ol deseo entusiástico de llegar a más. Así,
el certamen es una magnífica muestra de sucesivo perfeccionamiento. Los maestros son todos
salesianos. La dirección superior, a cargo do los religiosos, también. El espíritu de Don Rosco
preside toda la obra. Las especialidades aparecen allí artísticamente expuestas. Ajustadores,
torneras, forjadores, en la parto mecánica. Después, carpintería, tipografía, sastrería, zapa­
tería. He tenido ocasión —y alegría— de ver con detenimiento todo ese conjunto. Manufactu­
ras que pueden atribuirse a verdaderos artífices: cada una de las naves nos ofrece la sorpresa
4e una impresionante suficiencia. Así, en la galería que presenta todo lo que es mecánica, con
las pruebas elementales y las de categoría superior, so pueden contemplar una verja que os
alarde de elegancia, de buen gusto, con su traza señorial. Y un coche, un automóvil, entera­
mente fabricado en aquellos talleres. Y en la sección de imprenta, folletos, libros, papeles co­
merciales, carteles, con un sentido experto, admirable, en el manejo de los colores y la más
bella üpogiaffa. El taller do imprenta tiene máquinas rotoplanas, minervas, cajas —con una
extensa colección de tipos— y otras máquinas, pero faltan todavía las linotipias. Todo llegará.
El taller de sastrería y el de calzado representan una manifestación insuperable de estas arte­
sanías. Muchos prelados encargan sus ropas a este taller. Y en el de zapatería nos dan una sin­
tomática noticia: el cardenal Tedeschini pide su calzado a los Salesianos de Madrid. En cuanto
a la ebanistería, el dormitorio que me muestra el padre Encinas puede muy bien exhibirse en
el escaparate de una de las mejores tiendas de muebles de la capital. No se trata de ensayos, de
tímidas expresiones de un aprendizaje. Lo que hacen estos alumnos es una rasante auténtica
de venladera superación.
• • •

iQué nos dice todo estoí jt^ué lección se desprende de esta original exposición? Es la efleacU de los métodos de enseñanza. Está plenamente justificada la concesión que ha dispuesto
el Ministerio. No es una gracia que represente protección o testimonie simpatía. Los títulos
y los certificados se ven avalados por una confirmación y un refrendo qno se han ganado a
pulso. La obra de Don Rosco florece, se ensancha, liega a las más satisfactorias cniminaclones.
Por ttxla España hay escuelas saleslanas, talleres de formación profesional, fábricas de hom­
bres. En estas escuelas de Atocha se elaboran voluntades y se crean entusiasmos. La singula­
ridad es evidente. Es el amor al prójimo y la caridad cristiana lo que determina el impulso, lo
qne inspira la tarea de cada día. Y así, ai mismo tiempo qne los 250 internos y los que cursan


15S

SANTA CRUZ DE TENERIFE:
El Excmo. y Revmo. Sr. Obispp
df la diéceslB, doctor Pérez Gá*
ceres, bendice la noeva máqui­
na de imprimir «Hispania». en
las Escuelas Profesionales Salo>
sianas, siendo padrino el señor
Director de la Caja General de
Ahorros

el aprendizaje de los distintos destajos
en marcha, acuden otros centenares de alumnos
externos, y los de los Oratorios dominicaíes, si^rniendo, con fidelidad inquebrantable, las orien­
taciones de Don Bosco. El reconocimiento es importante, signilicatiyo. Pero no lo es menos
el haber nombrado —disposicidn dictada en 1950— a San Juan Bosco Patrono de todas las
Escuelas Oficiales de Enseñanza Profesional obrera de España. Si, para las demás, el nombre
y el patrocinio del Santo Fundador ha de ser norma y estímulo, es Idcrioo que para las que son
continuidad de la obra personal de aquel apóstol de la caridad y el bien representen un man­
dato, una fe y una conducta.
La exposición ha sido muy visitada. Y celebrada. Lo merece. Síntesis de actuación —pro­
fesoral, de una parte; de ejercicio formativo, pictórico de ilusión, en los discípulos, de otra—,
pocas conjunciones de tanto valor expresivo, muestra de un abnegado esfuerzo y de una com­
petencia especifica, pueden ofrecerse. Es una aportación a los propósitos y las directrices de la
España de hoy, en la que el sentido inseparable de todo empeño y labor ha de ser éste, ju sta ­
mente: subir, superar, perfeccionar.

EPI LOGO DE UNA
DOSCIENTOS M INEROS CON
MARIA AUXILIADORA
E l §<’ñor D irector de las recien fundada;
Escuelas de Puertollano, en una deelaraciór
donde nos hace ver su sentim iento p o r el he•dio involuntario de no h a h er ro n tríh u id n a li
cstad'stica de la fiesta de M arta A uxiliadora, pnblicada en el núm ero an terio r, nos d ice: cY es
muy sensible que p o r eso el m undo salesiano uo
hayo sabido que en la p rim era procesión d ed i­
cada p o r P ucrtoliano a nuesira V irgen, doscieutoa m ineros iban escoltando su bendita imagen,
devotos y conmovidos.»
Con gusto quilam o? ese pesar aJ buenísim o don
Santiago IHáñez.
UN BARRK) MADRILEÑO. TODO DE
MARIA AlíXILIADORA
O tro digno D irector, en tre loa que h an sentido
tanto no h a b e r rem itido respuesta al módulo
—porque no lo recibió, dice él, a p esar de que
el aervirio de ^ionreos español es el m ejo r del

ESTADISTICA

mundo—, ha sido el P. Aniceto S anr Yagüe, que
en la poblad.sim a b arriad a de C uatro Cam ino,
rige muy acertadam ente unas Escuela» populares
de más de m il alumno». Creemo» en la sinceridad
de su» sentim iento» p o r conocer a fondo su es­
p íritu apostólico m ariano y sacerdotal y por lo»
rTflejos llegados & esU Redacción del fervor con
q u ' en »u ca,sa $• honra a la Santísim as Virgen.
Y S F V ll I

.

Tam bién el .señor D irector de la .Santísima T rin i­
dad. don Francisco G am arro. en am able y cordial
visita que tanto le hemos agradecido, nos h a ex­
presado su pesai ante la omisión com etida por
algún secretario suyo que traspapeló la estadís­
tica. Y ha sido verdadera lóetima. porque sólo lot
datos de esta casa hubieran elevado las cifras p u ­
blicadas de m odo increíble. Que no en vano Se­
villa es la tie rra de M aría Santísim a y la iglesia de
la Santísim a T rinidad, ju n to ron la cated ral hispa­
lense. son los tem plos más m arianos de toda la
cindad del Betís.

157 —

1

NOTICIARIO
A LCüY . E l 11 del pasado junio bendijo el se­
ñor D irector del Colegio Salcsíano un banderín
de Domingo Suvio pura unu cenluria de F alan ­
ge, asistiendo el señor gobernador civil de A li­
cante y autoridudes locales. A padrinó el acto la
st'ñora V'iecus, viuda <le Oliver.
Con esté m otivo se h abía convocado un con­
curso literario bajo el títu lo : «Domingo Savio,
ejem plo de juventudes», babictuio correspondi­
do el p rim er prem io al ex alum no cireulisla A l­
varo Soler Sanjuán.
SANTA CRUZ DE T E N E R I F E .- E l dinam isuto del celoso P. D irector, don A ntonio Espinosa,
tiene en continuo m ovim iento snlesiano a la isla.
Uno de loa barrios más populares —el D uggi- ,
bulló en am or a M aría A uxiliadora los últim os
días de mayo con verbena, procesión, actos cucarísticos y benéficos. E l Cuerpo P ericial de A dua­
nas celebró suntuosos actos a su P atrona, la V ir­
gen de Don Bosco, Pocos días después e l ExceIcntisimo señor Obispo de T enerife bendijo nue­
va m aquinaria p ara la im prenta de las Escuela»,
V como final de curso se dedicó un bom enaje ca­
luroso a los M ártires de la Inspectoría Bética.
En todos los actos tom a p arte activa la notable
Itanda de música, form ada })ur los niño» y jove.
nes del centro, tan hábilm ente dirigida p o r el
coadjutor snlesiano don E dclm iro López.
MADRID (R onda de A to c h a ).--E l «B oletín Ofteial dcl Estado» e.-tpañol bu publicado una orden
m inisterial por la que se eniu-cde validez ofiei.il
a lu enseñanza profesional que .se cursa en esta»
Escuelas do Artos y Oficios. La noticia no.» llena
tie aatlsfucoión. pues supone ’mereoidn recompen.<B a los heroico» trabajos que en tre jóvenes bu-

y

SALESIANO
m ildes viene haciendo hace m edio siglo la pepularísim a y m adrileña casa de A tocha.
ORENSE.—E sta vieja fundación salc.siana, que
ec va rem ozando y superando p o r mom entos, ha
celebrado solemnísimas fiestas en ho n o r de Ma­
ría A uxiliadora, dignas de recuerdo especial a la
distancia de los meses transcurridos. P o r vez j>rim era la im agen bella de nuestra V irgen recorrió
las calles de Orense, presidiendo e l O bispo dioce­
sano, D octor Tem iño. H ay vivas ansias p o r ver
term inado eP tem plo en construcción, que alb er­
gará m illares de devotos a los pies de la M adre
y R eina oelestiaL Q ue E lla p rem ie, como sabe,
los incansables esfuerzos del señor D irector, don
E m ilio Alonso, y de sn ejem p lar com unidad saleCADIZ.—Se ha inaugurado una vistosa E xpo­
sición de A rtes y Oficios que viene siendo visitadísim a p o r incontables personas, e n tre las rúale,»,
m uchos técnicos de las d istintas em presas, tan
num erosas en la capital gaditana y su puerto.
S E \‘ÍLLA (Saiilísinia T rini<lad.- T am bién en es­
ta ciudad andaluza, sede de la Inspectoría B étira.
las E.»euelas Profesionales han p rep arad o al p ú ­
blico una lucida Exposición en el centro de Is
población con lo.s elem entos que luego contribuiran
la gran Exposición N acional. Los elogios
de los m uchos miles de visitantes a los trabajo»
presentados y n las estadísticas elocuentes son
clara m uestra de cómo Sevilla hace justicia a los
Hijo» de Don Bosco con su estim a y adm iración.
MONTILLA.—O tra Expo.sicion Profesional, con
elem entos de la de Sevilla, ha circulado p o r esta
eiudiül tan salesiana, en tre los sincero.» plácemes
de la población y pueblo.» de alrededores.

-

A L C o Y ;
Banderín de la
Centuria « D o ­
m i n g o Savio»

SANTA GKUZ DK TENERIFE : Bandft de mú*
sica de las Escuelas Pro­
fesionales S a l e s i a n a s ,
corso escolar 1952-1953

LA OROTAVA.—Hemos recibido una am plia re ­
seña de las fiestas de M aría A uxiliadora, que sen­
timos no pu b licar p o r falta de espacio, lo que
hemos creído su p lir en la ^ la d is tíc a general ex­
puesta en nuestro m ím ero de agosto. Felicitacio­
nes y enhorabuenas m erecen los Salesianos de es­
ta bellísim a región canaria, que, en los cor' .años que llevan situados, han conseguido eche
raíces tan hondas la devoción a nuestra Santísima
Madre.
MADRID (L a P alom a).—É l M inisterio de T ra ­
bajo h a concedido la M edalla de P lata del T ra ­
bajo al señor D irector de esta Institución Sin­
dical, que regentan los H ijos de Don Rosco des­
de hace varios años con tanto aplauso de todos.
Felicitam os cordialm ente al P. Esteban R uiz, tan
benem érito de la Congregación Salesiana.
B \RCELO NA -SA RRIA. - - E n la fiesta de la
Unión recibió el antiguo alum no de estas Escue­
las don Juan O bré la M edalla de T rab ajo , que
ha m ercrido p o r su lab o r de cincuenta años entre
nuestros aprendices. Presidiendo el acto, con
otras altas autoridades, el lim o, señor Delegad.)
del T rabajo en Barcelona, don Francisco C atalá.
le im puso la preciada condecoración e n tre los
aplausos de sus amigos y com pañeros. E l señor
O bré atribuyó todo a l Sistem a E ducativo de Don
Rosco, m ientras m uy emocionado evocó los nom ­
bres de sus viejos m a u tro s. figuras de prim er
orden en las filas españolas de la Congregación
SalesianaTÜ R IN (C asa M adre).—C ontinúa nuestro Reve­
rendísim o R eetor M ayor haciendo su p a tern al vi­
sita a las casas de Italia . D urante los últim os m e­
ses h a recorrido veinticuatro lugares, dejan d o et>
todos el suave recuerdo de su paso y el bené­
fico regalo de su bendición. Haga e l S eñor que
pronto le podam os recib ir en nuestra P atria , que
tanto desea h onrarle y trib u ta rle sos hom enajes
filiales.
CATANIA.—Se celebró el I Congreso M ariano
de la ciudad, cuyos actos finales fueron la erec­
ción de un m onum ento público a H a ría A uxi­

liad o ra y la extensión de su culto litúrgico a to ­
da la ArchiditSccsis.
COGHABAMBA (Bolivia).-—E l Obispo diocesa­
no b en d ijo la nueva capilla del Sem inario d ed i­
cada a M aría A uxiliadora, como delicado obse­
q uio a los Salesianos que diez años hace d i r í a n
este centro de form ación eclesiástica.
ROMA.—Se inauguró la Iglesia dedicada a San
Ju a n Bosco en C inecittá (C iudad del C ine) ron
m otivo de la p rim era fiesta qtie este gran subi.rbio rom ano dedicó a M aría A uxiliadora. E n ePa
celebró su Misa de Oro el Rvmo. don F id el Giraudi, Ecónomo G eneral de la Congregación.
MILAN.—E n Sesto S. Giovanni, la C iudad del
T rabajo, se bendijo la p rim era p iedra de u n fu­
turo grau edificio p a ra Escuelas Profesionales, co­
co recuerdo del centenario.
LL SAl.VAUOR,—Se celebraron solenmes actos
conm em orativos de la llegada de las H ijas de
M aría A uxiliadora a las repúblicas centroam eriMAR.ShLLA.
T uvieron lugar diversos actop a ra reco rd ar los setenta y cinco años de la
fundación, p o r Don Bosco mismo. <le varias r a ­
sas en esta región. E l Rvmo. Rector M ayor p re ­
sidió las fiestas.
ALEJANDRIA (E g ip to ). -Un antiguo alum no
salesiano de veinte años, enferm o hace siflc; anode un ínal m isterioso y dolorosísim o, h a manifes­
tado al P apa que ofrece sus f>adecíniícntos por
él, como ^m isionero del sacrificio». Pío X II le ha
contestado que pide p o r su intención y le agra­
dece mucho su oferta.

E n nuestro m ím ero del próxim o octubre, como
preparación a la gran Exposición Nacional de
-Artesanía Salesiana, ofreceremos a nuestros lec­
tores u n rep o rtaje gráfico de las exposiciones lo­
cales celebradas en Cádiz. M adrid y Se^'illa, agre­
gando lo que nos vaya llegando sobre e] p a r­
ticu lar de las demás Escuelas Salesianas de Ra-

paña.

159 —

LA

COKGÜEG ACIOH
-

E "Pí

CUMPLIO

VEINTICINCO

V A L E M A

celebrar las bodas de plata de ¡a Con*
P ARA
sfrcgación salcslana se llevaron a efecto una

set le de actos, preparados por un Comité de Ex
Alumnos Salesianos y los profesores del Colegio
Santo Tonkás de Aquino.
El Comité organizador se componía de los si­
guientes miembros: Dr. Jacobo Sénior C., Dr.
Mfonso Delgado U., Dr. Mario Urda-eta Araújo,
Dr. Antonio Biiccño, Dr. J. del C. Vlloria.
Fueron invitados previamente los siguientes
huéspedes de honor: Etoemo. monseñor Iturriza,
antiguo director del Colegio; Exemo. monseñor
Carda, nuevo, ttblspo salesiano; Rvmo. Padre Ins­
pector, don Pedro Tantardini; Muy reverendo Pa­
dre Isalas 0}eda, encargado nacional de los ex
alumnos, y los antiguos directores: muy reve­
rendos padres José Casazza, Amadeo Cocdtl, En­
rique Weidemann, Alberto Panelera y Rónrulo
Sénchez.
Fue lamentable que los invitados de honor, de­
bido a perentorias obligaciones que requerían
su presencia en oftros sitios, no pudieron asistir
a estos fíístejos, donde eran reclamados ptw la
sociedad y amigos de la Obra Salesiana.
El 14 (te junio, a las seis, el R. P. José P-inaffo- delegado especial del P. Inspector, ceJebró la misa de comunién por las intenciones de
los cooperadores, sodas de la Archicofradia de
María Auxiliadora, ex rJumnos y bletWtechores de
la Obra Salesiana en Valera.
El celebrante habló a los asistentes sobre el

160

ANüS

( V E N E Z U E L A )
desarrollo de la Obra Salesiana en el mundo y
lo» dió abundantes datos estadísticos de la misms.. Alabó a ios cooperadores p::r el bien cum­
plido hasta la fecha y los animó a continuar
A las siete, el R. P. Amadeo Cocchi, antiguo
director del Instituto, celebró la misa de comu­
nión para los alumnos del Colegio, solemniza­
da con escogidos motetes eucaristiccs; recor­
dando sus buenos tiempos, con su estilo sencillo
c interesante, ex]Micó ei evangelio del día a ios
alumrws del plantel, que se acercaron en pleno
al b'jnquete eucaristico..
A las nueve tuvo lugar, en la Iglesia Matriz
de Valera, la Misa Solemne en acción de gra­
cias por todos los favores reca>idos de la Pro­
videncia Divina durante lets pasados veintkincit)
años. La ce l^ ró el Ilmou Monseñor Dámaso Cardozo. Vicario interino de Valera.
El coro del Colegio Salesiano, bajo la dlrecció.i del P. Alejandro Incao, interpretó, de ma­
nera espléndida, la misa “Laus Tibí, Christe**,
de Federico Caudana. con acoarpañamiento de
orquesta. Lm asistentes quedaron entusiasmados,
tanto que se han solicitado ios servicios del mis­
mo coro para varias Fiestas en la parroquia.
Al terminar la misa se organizó el desfile
en el Colegio, y de alli partió rumbo a la pla­
za Etolivar, en ei orden siguiente: el bastón de
mando, la banda m ilitar del Colegio, compues­
ta (le doce tambores, dooe cornetas y dos paros
(ic platillos; nutrida representación de alumno^

VALERA <V «M m cU ): Lee atonm oa de laa E csclac


SALESIAKA

Salesianaa en



bom eiuije a

B olírar

VAl^RA (Venezaela): Un niomenio del home­
naje a B<dfvar en el Colegio Salesiano

Jci Colegio, con una banda terciada del hombro
izquierdo a la cintura, donde se lelac **Salesianos” ; el Unto. Monseñor Dámaso Cardozo, el
el P. José Pinaffo, delegado de! R. P., iní>pe<:l®r»
P. Amadeo CocchI, Director más antiguo del Co­
legio, residente en Venezuela, y el actual Direc­
tor del mismo, P. Jesús A. Díaz; la corona de
lamilia; la memoria de los Salesianos y ex
fiores naturales; la numerosa representación de
alumnos muertos, e hizo votos porque los Salos Antiguos Alumnos Salesianos, entre los cua­
lesianiOs desarrollen C2da día más su obra en la
les se destacaban muchos profesionales; varios
ciudad
de Valera para bien de la sociedad y
que ocupan importantes puestos en la sociedad
de la clase' humilde.
valerana y honorables obreros especializados,
El “Mono MllianI” , como se le llrmaba de
Al llegar a la plaza Bolívar, el desfile se dualumno, fué muy divertido en su disertación y
puso alrededor de la estatua del Libertador
prox'ocó
mucho la hilaridad de la concurrertcla*
y lá banda del Colegio deleitó con una de sus
El P. Coochi lomó la palabra p-’.ra felicitarse
mejores m arché.
por el feliz éxito de los ex alumnos, manifestar
Acto seguido, el Dr. Mario ürsianeta Araújo,
cómo habían sabido sacar provecho de la edu­
Presidente de la Asamblea Legislativa del Esta­
cación salesiana, y dar gracias t mbién por la
do de Trujilio, tomó la palabra para agradecer a
buena acogida y el apoyo económico y moral
los Hijos de Don Bosco lodo el bien que ha­
bían hecho en la ciudad de Valera durante los que siempre h bía prestado la Sociedad Valerana a la Qangregación Salesiana.
pasados veinticinco años. Exaltó a la Congre­
Alguien prepuso elegir la mesa directiva de
gación Saleslana, donde se ha formado un escua­
la Asoci'ción de ex Alumnos Salesianos en Trudrón de prrfesionales y jóvenes que han triunfa­
iillo, y ya prontos a hacerlo, el anfitrión invitó
do en la vida merced a las enseñanzas recibida-!.
a gustar la deliciosa ternera, por lo cual se
En sus frases se mostró valiente y decidido ca­
aplazó ptara otro día.
tólico, ferviente hijo de la Iglesia.
Todos regrosaron satisfechos y hondamente
Seguidamente, dos exalumnos .depositaron la
conmovidos al constatar el cariño y la gratitud
ofrenda de flores ante la estatua del Padre de
la Patria, se reanudó el desfile, se hizo lue^o ■que guardan los ex alumnos a la Institución Sa­
un recorrido por las principales calles de la
lesiana.
ciudad y se regresó al Colegio, donde se brin-.
Al dia siguiente se celebró una Misa en su­
dó por la prosperidad de la Congregación Safragio de los Salesianos, ex alumnos, cooperaIcsiana.
aotes y archioofrades muertos durante los veln-Luego, en la h'cfenda San Franclsqulto, en
ticlnco años.
Mendoza Fría, propiedad de don Alberto MalA la memoria de todos vino en seguida el
donado Lnbastida, se sabtM-eó la ternera a la lio­
recuerdo del P. Oonestar, tan querido en Vanera, ofrecida por los ex alumnos salesianos a
Icra, donde transcurrieron sus días dedicado a en­
sus antiguos profesores.
señar el Cateclsnvj y mantener alegres a los ni­
Mientras sC a s { ^ la carne, en amena chor>i,
ños del Oraicrio Festivo, a enseñar por medio
los ox alumnos contaron sus pequeñas aventuras
de pintorescas comparaciones y eÍcfiH>los la páescolares, y result'ba grato el ver ron qué ca­
itíira de Dios y a dirigir las almas en el con­
riño recordaban sus tiempos de colegio, al QíK- fesonario.
Por eso su entierro fué una apoteo­
cieseaban, si fuese posible, volver como aiumsis.
i>os para vivirlos de nuevo.
EsperamiTs que también en los años venidt
Luegn vinieron los brindis. El orimero qut
ros, por intercesión de María Auxiliadora y Don
hab’ó fué el Dr. Víctor Rocha Cazorla, quien
Bosco, siga Dios derram a'do sus bendklones
.evocó el celo, la abneg*cl6n y, sobre todo, la
sobre la Obra Sa’esiana en Valera y que la sOam?.bindad de sus antigoo« n>aes»ro«; la dtveciedad la siga apoyando como hasta el presente,
rión a Marta Auxiliadora, adquirida en ^ claus­
para que pueda ayucíar al cíesarrollo cultural,
tro del Colegio Salesiano, practicada -lespués en
religioso y cívico de la ciudad.
su vida y enseñada por él a los miembros de su

CADEN A SA N TA DE ORACIONES
Duranie el mes d e septiem bre, según la fe liz iniciativa d el últim o C apitulo General Solesiono, corresponde la cruzada d e oraciones por ¡a Familia SaleMÍana. a las tÍKUienU>*
Inspecínrias:
Del 6 al 13, Brasileño d e San Alfonso.
Del 13 al 20. Brasileña d e San Juan Bateo
D el 20 o 27. CenSroemericana.
D el 27 al 4 de octuBre, Colombiana.

La bella oiudad eerrana, donde Maris
Auxiliadora r e i n a
con Indlscntlble so­
beranía, celebra to­
dos los años un ori­
ginal concurso de
escaparates e l 24
de m a y o . Ofrece­
mos varias pinto­
rescas muestras de
este curioso acon­
tecimiento J u n t o

El «paso» de la Vlrgt

Un sapatero remendón de viejo cufio Que no
puede trabajar sin la Virgen salesiana

R O N D A , PO R M A R I

Un c i c l i s t a ,
alumno cincuen­
ta a ñ o s hace,
que viene de le­
janas tierras- a
la fiesta de las
bodas de oro de
su colegio. Ya
está en el puen­
te de «Las Ven­
tolas»

Un slmolacro de la procesión da la
fifu ias «

coo 1m totoe Ae
las dos veoersílaa
Unsie n e s que de»f i l a n snnabneote
por IM M iles de
diclia poUaoióa, en
raya p l u s prineip sl se xeaoevs, de
r^reso. l a eossasraoióa p le n ísim a
a la V i r g e n de
Dom Bosoa

Trjftn en la eaUe

m A U X IL IA D O R A

•|V lda. dniziira y esperansa nuestral», parece
deeir este escaparate de ana afamada confite­
ría a la «Estrella de los Mares», con ese barco
todo becbo de caramelos

San Joan Boaoo. Ue T a d o en
triuafo por iM
a l n m n o s ma>

> saetta a la plaaa d d Ayuntamleate coa
«satoaafrvilca»

I'ÜK TlEhRAS DE MISIONES SALESIANAS
Im presiones d el viaje que, con destino a las
Misiones, ha escrito para nuestra revista el ciérigo don Luis Iriarte, residente hasta la fecha
en e l colegio de Orense, ju n to con su compañe­
ro don /Agustín ÍMpez.
\

ilorest... Llegamos al Pueyo, de a llí a L izur, y
autovía p ara M adrid, tras una despedida emorionante que nunca olvidaré.
Me re u n í con Agustín. A l día siguiente, la des[>edida final. La m adre y los fam iliares de mi
com pañero lloraron m ucho. Les prom etim os vol­
ver p a ra can tar nuestra p rim era Misa. E l tren
*'chó a a n d a r; yo m e acurruqué en m i puesto
y pronto quedé dorm ido. A grutín, no. E ra na­
tu ra l; acababa de despedirse.
£1 domingo ?, B arcelona a la vista. Desde el
tren vimos el T ibidabo. Sin tiem po p a ra subir,
oímos m isa en la preciosa iglesia de Sarriá,
donde estuvo Don Bosco. Pensé en la futura
iglesia de Orense y en las pobres capillitas m i­
sioneras. '
Al m e d io d ú , ¡adiós, m ad re E spaña!

Mirntruts a»Utíu a loa internos en el oomedor,
recibí la noticia do m i p a rtid a p ara las Misio»
nes. La recibí con m ucha alegría, agradeciendo
al Señor tan inm erecida gracia.
Siem pre recordaré a esos buenos muchachos
de O rense a quienes tan to q u ería. E llos m e rega*
laro n e l crucilijo de m isionero y im a im agen de
la P ilarica, M adre de la fe española. Los de
cuarto, como recuerdo de la tie rra gallega, me
dieran un hórreo en m iniatura.
U ltim o d ía de m ayo. Después del desayuno,
al tren, con Agustín. Fotos de u n am bulante, lá ­
A l e n tra r en F rancia nos quedam os casi soloe.
grim as de los que se quedan, em oción en los que
¡Cómo sonaba la filarm ónica de A gustín! Llaga­
nos m archam os y ... sentam os en O rense p a ra am a­
mos a M arsella lloviendo. U n ab ate nos da las
necer en M adrid.
señas de los Salesianos. Acogida fratern al, bue­
E n la estación esperan los padres de Agustín,
na cena, y a d o rm ir, creo que en la mUma ca­
mi colega de apostolado. Nos reciben m uy serios.
ma de Don Bosco, que visitó M arsella varios ve«Va a hal>er m uchas lágrim as», m e d ije. O í­ CCS.
mos misa en las Escuelas de A tocha y pasamos
¡Qué buenos y atentos son estos Salesianos!
el día saludando a nuestros com pañeros de trie ­
Acom pañados p o r u n o de ellos, cam biam os los
nio.
-billetes, nos vacunam os y faoliu-amos los baúles.
Luego pensé que ten ía que p a rtir, como San
El p re f « to apostólico. M onseñor C lerk, ex p u l­
Francisco Javier, sin despcdimi<' de mía padres.
sado de C hina, que h abla español, nos acom pa­
Ofrecí de antem ano el sacrificio a Dios p o r to­
ñó todo el día. Nos despedim os de la V irgen del
dos los mi.sioiieros, no sin pensar cuánto h ab rían
Mar, y al barco, que zarpaba al m ediodía.
do su frir aquéllos al recib ir m i p rim ero carta,
E n el mismo cam arote vamos tres salesianos,
que j>royectaba escribirles dewlc F ilipinas.
pues en M arsella se nos u nió un sacerdote del
Pero, contra to d a p r o is ió n , en m edio dio
Brasil llam ado don Generoso, que honra a su
arreglam os los visados de los pasaportes y el
nom bre. Nos ha caído como agua de mayo p a ­
Señor se conform ó con la intención de m i enor.
ra nuestra cartera casi vacía.
m e M crificio.
Somos trece m isioneros en el barco, de diver­
Al día siguiente, otra vea el tren. A las die^
sas instituciones.
Pam plona. De allí a m i pueblo, en eoche de lí­
Saliendo del p u erto , nos escoltan las gavio­
nea. E'neontré a m i p a d re en el hu erto y con
tas. Luego, agua y cielo, cíelo y ag u a; n i barcos,
él rae fui a casa. De mis diez herm anos faltaho
ni pájaros, n i tie rra ...
JoM*. Los nueve saltaban de alegría. Me acerqué
Oímos misa y comulgamo.-« en el cam arote,
a la e.scuela, donde hab lé a los mucliaehos, v ocultos como en' m arin as catacum bas. Según va
luego, a descansar de tan tas emociones.
avanzando el buque, llevamos a C risto a l O riente.
Al día siguiente, Corpus, ayjidc en la misa
Trabam os conocim iento con iin grupo de eJii*
cantada y a.«istí a la procesión. Tuve el gusto de
nos paganos, un sacerdote jesu íta, cliino tam ­
saludar a m is antiguos amigos. P o r la tard e, pa-,
bién. y una fam ilia de m isioneros protestantes.
seo ron el señor C u ra; luego, en la iglesia, en
Día 12, Cesta del Sagrado Corazón. M ientras
ves de D octrina, hab lé a los niños sobre las I^íiayudo la Santa Afisn. vuelo de aaviotas m e hace
siones y ellos hicieron la visita m isional que
sospechar como a Colón que rondam os tie rra . Me­
acostum bran cada mea.
dia h ora después la isla de C reta a la vista. ;.Con
La siguiente fué m añanita de lluvia. Acom­
qué ansias m iram os! P ero ¡qué tie rra más árida,
pañado de mí padre y m i herm ana J o ^ f a . nos
carente de toda vegetación.
ptisimoa en cam ino después de com ulgar. N o oeAsistimos a la procesión del Sagrado Corazón
aó de caer agua en todo el cam ino. Fué itna
V yo llevo m uy. ufano m i crucifijo de m isionero
bendición de Dios. ¡La deseaban tan to los lab m ¡O jalá lo lleve tam bién dentro del corazón!
! ‘3 l

Ayuda a las Misiones S a le s ia a a s ,
enviando lus limosnas al Secretariado
de las mismas: Alcalá, 164 - Madrid
Al m ediodía de San A ntonio hacem os escala
en Port-Said. B ajam os a ver la ciudad. C iudad do
casas bellas. Los hom bres, rostros negros o tosta­
dos, visten en gran p arte háb ito talar. T odos se nu*
antojan santones, con su turb an te y su hopalanda
blanca, negra o p ard a. Las m ujeres llevan la
cara tapada. N o hay tranvías n i trolebuses; co­
ches de caballos los sustituyen.
Topam os con u n e n tie rro : carroza fu n eraria
preciosísim a, con relieves de ángeles y rem a­
tad a en cruz. aA quí hay católicos», nos dijim os.
Airosos caballos arrastrab an el vehículo; venía
detrás e l cortejo, hom bres casi todos. A ambos
lados, jin etes sobre briosos corceles. P recedían
a todo la cruz y ios ciriales, seguidos del preste,
anciano copto de largas barbas. Todo en gran
silencio.
La catedral, herm osa, m oderna, clara, muy
lim pia. La rodean varios colegios católicos, uno
do ellos, salesiano; de esto últim o nos en tere­
mos luego y p o r eso no pudim os visitarlo. CerI d, y a lo largo de la ciudad, muchas m ezquitas que
DO DOS atrevem os a franquear. Los «fieles» se
descalzan a la puerta.
Paseando p o r las calles a la ventura, nos co­
lam os p o r un barrio de gente m aleante y todo
el m undo que no lo era se alarm ó, avisándonos
en seguida que nos alejáram os. Nos m etim os en
nn parq u e donde una banda de m úsica tocaba
piezas árabes. ¡Q ué sim páticos los negritos ju ­
gando con sus pistolas p o r los ja rd in e si Quizá
tem 'an el alm a blanca... U n grupo de ellos nos
saludó y entablam os conversación m uy amistosa.
H ablam os el esperanto y, bien que m al. no.s en ten ­
demos con todo el m undo. Bueno, eso de es­
peranto es que íbam os jun to s u n cliino, u n b ra ­
sileño y dos españoles, que e n tre todos ch ap u ­
rreaban inglés, francés, portugués, italian o , chino,
castellano y hasta latín , y hasta sriegn.
D espués de cen ar nos disponíam os a v isitar a
nuestros H erm anos de Egipto, pero nos advir­
tieron en el b a rro que de noche sólo rccorriéntm os calles céntricas, p o r la costum bre que es­
tos angelitos tienen de asaltar a todo extran­
jero.
E l paso del C anal de Suez es lento, debido
a que unos buques deben d e ja r paso de
vez en cuando a otros. Sólo se ve el azul m a­
rino y la blancura m orena del desierto. A ve­
ces param os en n n lago en can tad o r: ¡Sugestivo
cuadro! U n. círculo de agua ceñido d e una au­
reola de arena clara. U nos barcos en el agua,
gaviotas ne.grazcas volando y algún gzupo de
eameOos pisando perezosam ente sobre la aren*.
E l 15 de ju n io pa.samns el M ar R ojo. Sus aguas
son ta n azules c<Hno las de la costa gallega, pero
el calor recuer d a, sin quererlo. Ia« llam as eier-

uas. £1 P ad re brasileño rep ite oon m a n ía : « ¡
es el in fie m o t» Yo parezco una esponja em pa­
pada en sudor, estru jad a sin cmiipasión. Todo el
(lía, agua y sol, dos islotes enanos y calvos, unas
palom as que cruzan el m ar, peces saltadores de
cuando en ru an d o ... En este infierno no hav
más vida.
Pero mi crucifijo de m isionero a la vista ca
una fuente de agua fre.4ca en m edio de ta l calor.
Mi único alivio p a ra esta.s angustias es {vensar
en cuánto sudó C risto p o r las almas. P orque ni
ventiladores, n i baños, ui rt'frescos, ni el mismo
hielo, que de todo hay a bordo, pueden a p a r­
ta r de nosotros c.sta prueba del Señor. Si cin­
cuenta veces m e m udara, cincuenta muda.4 em ­
p a p a ría d e sudor.
E l calo r arrecia ’a m edida que avbtam os tie­
rra . Todo el día nos h an cortejado las gavio­
tas. Descubrimos m uchos islotes y las costas de
S om alia: roca y arena<
E l 18 hacem os escala en D jib u ti, ciudad po­
b re y h ab itad a p o r negros. ¡Q ué pena m e d a l
Todas las calles llenitas de hom bres —4anto co­
m o niños en im colegio salesiano— a pecho des­
nudo, descalzos, con im p antalón corto. M ujeres,
D) un a. Todos venden alg o ; uuos llevan u n m a­
nojo de p itillo s; otros, p ap el de c a rta ; otros, me­
dio k ilo de cacahuetes. No sé como viven. Al ofre­
cer esa m ísera m ercancía, parece q u e pid en lim os­
na con su cara triste.
No he visto iglesias. Es fácil que no haya m i­
sioneros. Yo DO he visto ninguno ¿ P o r qué ha de
hab er tantos hom bres .sin que nadie les hable
de D ios?

• • •

De nuevo al barco. El golfo de Aden es una
b alsa: la m a r está tran q u ila y el sol luce ma­
jestuoso. E n la lejan ía em ergen las costas de
.4 ^ c a . tv8 entrada en el Oceáno Indico se apre­
cia senrihlem ente. Estam os en cu bierta viendo
unas carreras de caballos. Vamos a d e ja r atrás la
pu n ta del Cabo G uard afu í: a las seis ya es de
noche. Unos delfines nos siguen. I.os passjem s,
abandonando ron la vísta a los caballos, m iran
a estos peces. Comienza un fuerte viento monzóm E l vaivén es g ran d e; llueve al reves: del
m a r a l cíelo. La m ayoría se acuestan m areados
antes de cenar. Yo resisto. E s divertido v er a la
gente huyendo del com edor a los cam arotes. Al
final quedam os ilesos unos diez.
Amanece y continúa el balanceo nada grato.
N inguno de los tres sacerdotes que van a bordo
se ha atrevido a celebrar. Pasam os la m añana
cobijados en la cam a. E n el com edor rein a ab­
soluto silencio; se ve que n adie está a gusto. Hoy
toda la música es española. ¡Qué alegría!
E l 21, San L uis Gonzaga. Q ueremos h acer fies­
ta. p ero no h ay hum or. ¡C uánto h e pensado to ­
do el día y toda la noche en m is orensanosf
Ceno solo. Mis com pañeros se han m areado mu­
cho. Agustín y el P . Generoso h an pagado foerte trib u to . Yo sigo bien y eon m uchas ganas de

nostar.
¿Cuándo llegarem os p o r fin a Colom bo?
166 —

S I L U E T A S DE
COOPERADORES
S AL E S I A NOS

Don Lorenzo Fonseca y Rico
Eru <U*üci>n(li(-nle tic tin infanzón de la Moi.taña. Sud antepatiadod hubian idu al Nuevo R ei­
no de G ranada con el A rzobíapo V irrey. Su en­
com ienda lo había locado en la aSabána» de
Bogotá o Valle de loa A lcázares fé rtil y dilata­
da vega que, p o r recordarle al A delantado J i­
ménez de Quesuda su h u erta granadina, dio
nom bre a toda la región, llam ada p o r eso aNtieva (Granada».
E n las tierras asignadas, que m ansam ente a tra ­
vesaba el río Serrezuela, trib u tario del Punza,
levantó una cfaacienda» de carácter agrícola-peouaria £1 m ejo r trigo, las m ejores p atatas y los
m ejores maíces se cosechaban en «La E speranzas, nom bre con que el infanzón bautizó su
propiedad. P ara el cultivo de la s tierra s, para
recreo de sus habitantes y tam bién p ara e l tr a ­
to y comercio con los poblaciones vecinas y, en
especial, con la capital del V irreinato, puso h a ­
tos de ganado bovino y caballar. ;Q ué h erm o ­
sos ejem plares de acaballos sabaneros» se c ria ­
ban allí! ¡Y qué bueyes resistentes a la fatiga
y proveedores de carne!
E n el centro de la hacienda construyó una
gran casa de dos pisos, con su elegante m iradqy su capillita muy mona. De cuando en cuando
**lgún sacerdote secular, v más frecuentem eo»''
algiín fraile o algiin p a d re de la C om pañía de
Jemi.o, iban a decir la Misa y tam bién a d a r a l­
guna m isioneita a los trab ajad o res de «La Esperauza».
Poco a poco se fué form ando alrededor de la
casona u n grupo de viviendas. Y cuando la In ­
dependencia. ya se había form ado a llí un p u e­
blo de agricultores y cam pesinos que, p o r cru ­
zarse en él tres carreteras, le llam aron, con más
o menos propiedad, «Tit'S Esquinas», nom bre
que la R epública trocó p o r el de «Mosquera»,
para h o n ra r la m em oria de uno de los genera­
les de la Independencia v P residente de la R e­
pública de Ib Nueva G ranada, más tard e «Co­
lom bia».
La casona colonial (>rnnanccía allí, im ponen­
te y m ajestuosa, en m edio de las m uchas casi­
tas que se levantaron como p ara hacerle corte,
en calles m uy bien tra ta d a s y —cosa rara en­
tonces
m uy anchas.
T os señores de Fonseca seguían cultivando ?n«
tierra;^ obteniendo los m ejores trigos, las m e ­
jores t>atatas. los m aisales m ás opulentos, los enballos más prim orosos y las vacas más leeher.*is.
E ran queridísim os y respetados de todos. .\un
en las épocas m ás turbulentas, y en m edio" de
tas violencias políticas más feroces, la fam ilia


166

fué reíjpetada, y respetadas fueron sus p ro p ie­
dades.
A principios de este siglo el descendiente del
infanzón,' p ro p ietario de «La Esperanza», se lla­
m aba don Lorenzo Fonseca. La vasta hacienda
se h abía dividido, como era n atu ral, creciendo
los herederos. A é l le h ab ía tocado la casa co­
lo n ial y buenos trozos de tierra , en que seguía
trab ajan d o al igual que sus mayores.
No plugo al Señor darle descendencia. A la
m uerte de su señora se sintió dem asiado solo en
aquella casa, p ara M osquera, inm ensa. Y como
se enteró de que los Salesianos an daban bus­
cando dónde p o n er su Noviciado, porque ya sus
colegios daban bastantes vocaciones, se adelantó
a ofrecérsela.
«Todo se lo doy a Don Bosco y a M aría .Au­
xiliadora con sumo gusto. ¡Qué. m ayor felicidad
p ara m í que b rin d a r este paloinarcito a las ave­
cillas del gran Santo!»
U na condición p u so : que le p erm itieran usu­
fru c tu a r hasta su m u erte e l aposento donde te­
n ía su escritorio, y que, p o r poderse aislar com­
p letam ente del resto de la rasa, no daba m o­
lestia alguna.
A unque tenía u n a casita eu e l c u n p o . dividió
con u n biom bo el aposento y tras é l colocó su
cama. A com er ib a a casa de una sobrina >pie
vivía en el mismo pueblo. Y sólo de guando en
cuando lograban los S uperiores del Noviciado
q u e aceptara una invitación. N o q uería ser mo­
lesto n i a lte ra r en lo m ás m ínim o la vida dé la
com unidad.

SANTA CRUZ DE TENERIFE; Los alumnos de las Escuelas Profesionales Salesianas que han
terminado su aprendizaje en el último curso, con las autoridades locales
dem ostraba la verdad de la p alab ra de Jesús:
A la Misa ib a todos los días, y con m ucha fre*
«B ienaventurados los pobres de espíritus».
cuencia, tam bién a la función de la tard e. CoC uando uno de los m aestros que h ab ía vivido
muljiaba los doming<is. Su confcnsor e ra e l P a­
en el Noviciado desde el día de su fundación
dre M aestro de Novicios.
recibió la obediencia de trasladarse a Europa,
Cuando le em pezaron los achaques de la
y fué a de.spedirse de don Lorenzo, éste le d ijo :
edad, había días en que no podía levantarse
«Eapere u n mom ento». Y abriendo su caja fuer­
tem prano, y como esto le privaba de la Santa
te sacó doce onzas de oro españolas -y se las
Misa y él «no quería ser gravoso», rogó al Di­
entregó « p ara ayuda de las costas de viaje».
rector le p erm itieran hacer u n agujerilo en el
Como el p ad re le pusiera algiin rt^paro contestó
entarim ado de la capilla p ara poderla o ír desde
rie n d o : «No m e las he do llevar a la eternidad.
au cama.
Usted o sus herm anos pucilcn llevarlas a E spa­
Don Lorenzo era todo un señor, lodo u n cris­
ña. o 8 I.ondres. y sacarles más provecho del
tiano. A m aba la miisica, gustaba d e l teatro , se
que c».lán haciend^ en este, cofre».
recreaba en el d ep o rte ; m ontaba elegantem en­
No hay duda de que aquellas m onedas eran
te a caballo, sabía m an ejar e l tronco de jacas,
recuerdo de fem ilia: eorrespondtnn a varios r u ­
y en las fiestas del pueblo sabía rejo n e a r un
óos y H diversa» épocas.
toro. Gozaba inm ensam ente viendo las grandes
partidas de juego que organizaban los novicios y
estudiantes, que desde la capital iba a visitarles
Su últim a enferm edad y su m uerte fueron las
cada mes pasaba con ellos el día.
de
un religioso ferviente: un tum or canceroso
¡Cómo se desvivía entonces don Lorenzo p ara
que aum entó terríblenicnte sus dolencias y al
regalarlos! E staba enterado de las necesidades de
mismo tiem po sus mérito.-. Su m avnr con-oelo
la casa, y como un pad re ayudaba a rem ediar­
era así.slir a la Santa Misa, que a diario « ce­
las.
lebraba en su mismo aposento, p o r concesión ’j Las prim icias de sus cam pos eran p ara e l N o­
pecial. V com ulgar en ella. E l 11 de ju n io de
viciado ; los prim eros sacos de p atatas, el p ri­
1911. día de la Santísim a T rin id ad , su devoción
m er costal del tric o : de cuando en ruando un
predilecta, a Ins tres de In tard e, le entregó su
becerrito o un cordero.
herm osa alm a a Dios. La cám ara ard ien te fue
A ejem plo suyo, y acaso p o r su insinuación,
visitada como en rom ería y la población enotras fam ilias contribuían al sostenim iento de
tera asistió a su entierro.
aquellos jovencitos, que p o r estar en la edad del"
T.a casona sirvió m uchos año» de N o v ic ia ^ .
crecim iento y ser M osquera tin clim a fresco, -'eHoy. considerablem ente am pliada, allwrga a lo*
nían siem pre u n excelente ap etito . E n los p ri­
estudiante» salesianos de Filosofía y a un buen
meros años una m odesta fam ilia proporeionaha
núm
ero de aspirantes.
eratuitam e.nte la leche necesaria p a ra esa veinUna elegante capilla, dedicada a M aría Auxi­
tcna de persona.*,
liadora. sustituyó a la antigua. Cum pliéndose
Eti sns últim os años, don Lorenzo hacía meahora los cincuenta años de la donación de os­
dilación con los novicios, asistía a la lectura
le descendiente de infanzones españoles a nuejiespiritnal y comulgaba todos los días.
tros H erm anos de Colom bia, tenem os sumo gus­
Se h ab ía ido desprendiendo de todo, hasta de
to en h o n ra r nuestras páginas con el recuerdo
los más caros lecuerdos. Todo J»ara la Iglesia y
del ínsusne C ooperador Salesiaoo.
para el Noviciado. Y todo con aleg n a taL que
>67 —

INSTITUTO CAPITALIZADOn ESPAÑOL, S. A
(I C E S A)
Está en marcha la creación de la Sociedad Capitalizadora
del Antiguo Alumno Salesiano.
Tres meses han de ser suficientes para cumplimentar el
acuerdo de la Asamblea Nacional.

SE NECESIIAN CINCO MILLONES DE PESETAS NOMINALES. QUE SUPONEN

TRES

MIEEOTíJES

E F E C T I V O S

10.000 acciones, de 500 pesetas nominales cada una. con un
desembolso del 60 por ciento.* 300 pesetas por acción.
SUS PROPOSITOS SON:
l.° Dar una renta saneada al capital acciones.
3.®

Estimular el ahorro en todo Antiguo Alumno.
Proporcionar al Antiguo Alumno ventajas de
orden social, que de otro modo no podría conseguir.
J C £ S i4 es una obra comúR en la que
va empeñado ei honor de todo Antíj^uo
A/umno. Una empresa financiera al sei vicio
del bien común y del bienestar privado.

COMPROMISO DE SUSCRIPCION
INSTITUTO CAPITALIZADOR ESPAÑOL, S. A.
(IC ESA )
D.

.....................................

•on domicilio en
fc

compromete a siucríbir

calle

- _______

n. _

acciones de ¿o o pesetas nominales con el desem'

bolso del 6o por ciento (300 pesetas electivas).

El desembolso habri de eiectuarse a partir del primero de octubre de 1953(Finna)

Envió


16f

«oompromiso» al Sacratahado Nacional da AA. AA. Salaaianoa, Fanaofior, MdADRXD

1

CRONICA
' ............ ........
_________

DE

GRACIAS

A trib u id as a M a ría A u x lllodoro, S an J u a n Bosco
y d e m á s s a n to s y sierv o s d e Dios s a le s ia n o s

SAN JO SE DEL VALLE (C ¿di*).—Al deapedirtne hace catorce añoa de m ú padres, llam ado
por Dios a l sacerdocio saleaiano, ellos m e vieron
p a rtir ■con alegría, porque daban generosamente
un h ijo a Dios, pero con la preocupación de
que ta i vez no asistieran en la tie rra a m i prime*
ra Misa. Desde entonces no h a pasado d ía sin que
fervorosam ente haya venido pidiendo a María
.Auxiliadora les conservara la vida h asta fecha
lan suspirada. Hoy, p o r la gracia de Dios, h e es­
calado las gradas d el altar, y m is ancianos p a ­
dres h an visto la luz resplandeciente de este día,
que lo hem os celebrado, sin fa lta r uno con ellos,
todos los herm anos y fam iliares m ás próximos.
Agradecido a nuestra Santísim a M adre p o r fa­
vor tan alto, cum plo la prom esa que hice sienjo niño de publicarlo a su debido tiem po, y doy
tam bién gracias p o r m uchas otras fineza.^ reci­
bidas d e sus manos d u ran te el período de mi
formación sacerdotal.
José González Gómez, S. D. B.
Don Ju an Manzano, d irecto r del Colegio Ma­
yor «H ernando Colón», de Sevilla, y su señora
suscriben lo siguiente, que atribuyen en sus efec­
tos consoladores, a la Im ndad de Don F elip e Rioaldi.
FjI 10 d el pa.<>ado octubre una bicicleta atro^ l l ó a nuestra h ijita , de cinco años, M aría ; re­
cogida totalm ente sin sentido y bañada en snugre que brotaba de dos anchas y profund.is herida-t en el p arietal izquierdo, fue trasladada in ­
m ediatam ente a u n equipo de urgencia, y de allí
a la Clínica Santa I.sat^el. que dirige el doctor
Cortés, de tanto renom bre en Sevilla y en toda
E spaña; el diagnóstico no pudo ser más f^emm ista : ro ta la elavírula dereeha. gran conm o­
ción cerebral, ro n abundante derram e interior,
-in posible intervención quirúrgica p o r el mo(nento, dado el estado gravísim o de la n iña. A n­
te la im potencia de los m edios hum anos, enconmendam os la cosa a nuestro gran p ro tecto r il'>n
Felipe R inaldi. cuya re liq u ia colocamos con to­
da confianza y te b ajo la alm ohada de la p a ­
rien te. M inutos m ás tard e el doctor llam ó al
neurólogo señor Sanm artín, y ambos de aroerdo. procedieron a pu n zar a la n iña, com proban­
do el enorm e derram e cerebral y la extrem a gra­
vedad d el caso. P ero inesperadam ente se vericó tan salndable reacción, q u e ' médicos y en­
ferm eras. llenos de m aravilla, declararon tratarse
de u n caso verdaderam ente prodigioso. La pe­
queña todavía pasó una sem ana e n tre la v id a y
ia m uerte, sin que los doctores se atrevieran a
intervenirla. P ero lentam ente fue recobrándose,
y a los pocos días se levantó sana, sin reste de
leriÓD al|Euna. H a transcurrido cerca de nn ano

__ . ..

sin novedad desagradable, continúa alegrando
nuestro bogar y recordándonos con su robustez
cuánto debemos a Dios p o r mc^dio de m ñH
Siervo.
■DAN T A M B IE N G R A C IA S Y E N V IA N U M O SN A
A M A R IA A U X IL IA D O R A
Don Carlos Sánchez, de M adrid, p o r babee
curado a u n h ijo suyo de catorce años, enfer­
m o del pecho y ca.<ii desahuciado de los naédicos.
P o r conducto de don E m ilio Alonso, director
salesiano de Orense, doña J . A. S. M. y doña
P . V. M., que atribuyen a la Virgen sendas cu­
racionesD oña E rnestina A isina, de B éjar, p o r un fa­
vor recibido en b ien de u o h ijo suyo.
D oña Angeles del Rio, de Ronda, p o r a liria
de afección a la garganta.
Doña Francisca G uerrero, de Ronda, p o r el fe­
liz éxito de una intervención quirúrgica.
Don P ed ro M olina, de Cam pillos, p o r un favoc.
Don Ju a n R odríguez R uis, de La Línea, por
h a b er sanado de la garganta.
A S A N JU A N BOSCO Y B E A T O
DOMINGO S A V iO
Doña C. G„ p o r medio del señor d irecto r d ri
Noviciado Sairsiano de M ohem ando, don A nto­
nio G. de \'in u e u .
A S A N T A M A R IA M A Z Z A R E L W
Doña
m onde,
grave a
le bajo

M aría Campa, m aestra nacional de Vaap o r h a b er sanado de enferm edad muy
doña M aría Montero, después de poner­
la alm ohada una estam pa de la Santa.
A N U E ST R O S M A R T IR E S

BfADRH): D esde hace bastante tiem po he ve­
nido encontrándom e en estado de extr ema gra­
vedad y precisando de diversas intervenciones
qnirúrgicaB.
£1 13 d e diciem bre de 1948 fu i som etido a la
p rin iem intervención, «trepanación del oído
recho». Al p arecer no quedé bien, y en los arÚM
sucesivos h e venido padeciendo m olestias y tras­
tornos sin cuento en todo m i organinno. lle g a »
do 8 la caíd a total de pelo, cejas y barba. C o »
saltados diferentes doctores de diversas especiaiidades. diagnosticaron la existencia de un focn
infercioso que no era posible localizar. Así he
venido hasta a b ril del año actuaL en que m i gra­
vedad llegó al extrem o. H ube de gu ard ar eatM

^

oía, catando hasta tres días sio coDocimíeoto j
lenirudo inm inente otra intervención quirúrgica,
Nuevos análisis dieron como resultado la existeneiu de un foco de m eningitis, que fué com ba­
tido desde el p rim er m om ento con inyectables
y drogas de nueva preparación.
Precisam ente, al renovarse los prim eros sínto­
mas de la gravedad, había recibido algunas estam pitas de los M ártires Salesianos. i*or otra
parte, personas de m i afecto me d ijeron que h a ­
bían comenzado a rezar p o r m í al m á rtir DON
FELIX GÜNZAIJEZ, y yo mismo comencé a tefocarle. Me cucoiueiule Uimluéu ul m a n ir eu
las oraciones de la t^ominiidaU ue ftalesuiiios.
Alumnos, Antiguos Alumnos y Archicofrade.s de
M aría A uxiliadora del Colegio de Atocha.
Efectuada la punción el 17 de a b ril, parecie­
ron am inorarse los efectos de la m eningitis, pe­
ro volví o tener otra recaída el 29 del mismo
mes, p o r lo cual decidió el médico que visitase
de nuevo a diferentes especialistas. Según sus in ­
formes se preeisaba u n rá p id a intervención q u i­
rúrgica, pues decían tratarse de un ocolesteotom a de tipo gigante- con interés en los nervios
del cerebelos. Se acordó la operación p ara el 9
de m ayo. Micjilras me llevaban al quirófano, no
cesaba de re p e tir: ('M aría A uxiliadora, rogad
{lor m í. Don Félix González, rogad p o r mi.»
i o d o resultó m uy satisfactorio, viéndose que
liastaba con u n a intervención, la Irepanacñón y
punción en el cerebelo, ya que, según los an áli­
sis, no sería necesaria la operación en el ceroM o y sí sólo uno lim pieza general en los fo­
ros afectados. Tampoco hubo com plicación algu­
na en los días siguientes, ni siquiera la prc.vísta
de qued ar con la boca torcida. E l 16 p u d e ser
dado de alta en el Sanatorio, y hasta el p n w n Ic no he vuelto a sen tir la m enor mole.stÍH ni el
más ligero trastorno. Muy agradecido a Don Fé­
lix, publico la gracia y envío una limo«nn para
ayudar a los gastos de su R ealifienrión.
/Intoníu López Alvarez
M.4DU1D: Me encontraba en el A spirnntado
de las H ijas de M aría A uxiliadora, de M adrid,
ruando se me presentó un caso de adenitis os­
cilar aguda, extendiéndose la inflam ación pro­
ducida p o r gran parte del pecho. Se me a p li­
caron varias dosis de penieilina sin que se no­
tara la m enor m ejoría, por lo que el médico c re ­
yó necesaria una intervención quinirgiea.
En estas condieione.s eom ener. en com pañía de
una com pañera, tina novena al m á rtir salesianu

PON JUSTO JUANES SANTOS. Al tercer o cnarto día noté cómo dism inuía la inflam ueión, y al
term inarla, casi hab ía desaparecido p o r com ple­
to. Pocos días después m e encontré perfectam en­
te bien, sin que. hasta la fecha, y han pasado
ya siete « ocho meses, m e haya vuelto a resenlir lo m ás m ínim o.
A gradecida, publico la gracia anim ando a to­
dos a recu rrir en sus necesidades a este m á rtir
de Cristo.
hlÍ9ema Alvares.


1.7.0

M A D R ID : Desde m is prim eros años siento puxlicular afecto a DON EN R IQ U E SAIZ, p o r la
deuda de gratitud que tengo p a ra con él,, ape­
nas en tré en el O rotario de Atocha.
P o r eso nunca he dejado de encom endarm e a
su intercesión desde que recibió la palm a del
m artirio , y siem pre he visto palpablem ente su
valiosa prntcccióu.
En ab ril últim o se convocaron en la C aja de
A horros y M onte de P iedad, de M adrid, de don­
de soy em pleado, dos plazas de de cajero prim ero,
siendo yo ayudante de C aja; m e p re p a ré y le en­
com endé el resultado de la oposición, obteniendo
efectivam ente el núm ero uno en tre los doce oposi­
tores.
P ero .tI mes siguiente, en mayo, se convocarou
nueve plazas de oficiales prim eros, en la que
competíam os cincuenla y dos empleados, y aquí
sí que, francam ente, no m e consideraba con la
suficiente p reparación al lado de u n a g ran m a­
yoría que lo h ab ía hecho concienzudam ente. E dcom ende nuevam ente el a.«unto a Don Enriciue y
aprobé con el m lm ero nueve.
No salgo todavía de m i asom bro y veo c larí­
sim a la intercesión de m i valioso protector.
M ientras pongo el granito de arena de m i li
mosna y oraciones p ara ayudar a su causa de
Beatificación, anim o a lodos a re c u rrir a su íiitcrccsión.
Francisco A rnanz Herrans:
SALAMANCA: A eonsecnencia de una m uela
be tenido a m i niña de trece años bastante m al.
sin llegar a cosa desesperada. Según los médieoí
ha sido de m ucha consideración la enferm edad,
pues .se l<“ infectó la boea. inflam ándosele de m ñera extrao rd in aria toda la parte izquierda del
carrillo, hasta p o r encim a dcl ojo, que no podía
ab rir. Luego se le pasó la infección a Ig otra
parle de la cara, y casi en la mism a proporeirm .
inflam ación. E.sluvo algunos días con nn tr.?tam icnto de acucilina, y cuando ya iba cedien­
do la inflam ación alrededor de los ojos, el espeeialistn de la boca, que la visitaba m añana y
tarde, d ijo que la cosa era grave, pero d ió es­
peranzas de que con laS inyecciones se pudiera
vencer bien. .Sin em bargo, aquella tard e ocultó
el peligro que había p ara la garganta, y yo, sin
saberlo, p e d í en mi visita al Señor, p o r interce­
sión del M ártir Salesiano DON HELIODORO
RAMOS, satisfactoria solución. A la m añana sip iic n lc . cuando el especialista volvió a casa, d i­
jo que In tard e a n terio r m archó preocupado por
ad v ertir que existían principios de una angina
lubi. P ero afirm ó que entonces el peligro h a ­
bía desaparecido. La hinchazón fué bajando le n ­
tam ente a base de penicilina y estreptom icina.
Hoy la niña se encuentra perfectam ente bien. Dot
craeias. pues, a este M ártir Salesiano v publico la
gracia.
Anftel González Sánchez
M .\DR1D: Desde que tuve noticias del slfiriost' m artirio de DON ANDRE.'? GIM ENEZ co-

1

I

1

i

NUESTROS
DIFUNTOS

meneé a inTocarle en m is necesidades, y h e visto
palpablem ente ra intercesión, sobre todo en dos
ocasiones. A ei atribuyo el h a b er podido reco­
b ra r una cantidad que »e m e debía en el sitio
donde trab ajab a y que me era m uy difícil a d ­
q uirir.
N uevamente me he visto favorecida en una
opo-sición-c-onrurso convocado por la E m presa en
que aclualinente me encuentro. Se tratalia de
cubrir una plaza de m ecanógrafa que a mi me
interesaba m ucho. Pocas eran las posibilirjáile<>
de salir bien, ya que éramo.s yeinti.scis las que
tom ábamos p arte en el concurso. A pesar de imio.
y gracias a la avmda de Don A ndrés, fui yo la
elegida p ara cu b rir la plaza. Al d ar publicidad
a estos favnre.'- entiendo d a r gracias a m í proteo,
lor. Al mismo tiem po envío una limosna para
a\m dar a cubrir los gastos de su Causa de Peailieación.
Conrhita M uñoz de Moraje*

E l día 22 de ju lio últim o falleció plácidam eute en Rcinosa don A lejandro M uquiera, padre
de don Jesús, recién ordenado sacerdote salegiano. y Sor .Amalia, H ija de M aría A uxiliado­
ra . P arece como si e l Señor esperase a que viera
a su h ijo ascender las gradas del a lta r y celebrar
su p rim era Misa, p a ra llam arle al prem io eterno
de vida e jem p lar cristiana.
Su ú ltim a pena tu é no h a b er podido asistir,
p a ra p rep ararse dignam ente a dicha p rim era Mi­
sa de sn h ijo , a una tan d a de E jercicios espi­
rituales. Tuvo, sin em bargo, el gran consuelo de
recib ir la últim a comunión de la vida de m a­
nos suyas.
M ientras damos el pésam e a sus m enciona­
dos h ijo s y demás hijos y fam iliares, rogamos a
nnestros lectores sufraguen en caridad a tan e.«*'ogida alm a. Los m ejores cooperadores son los pa­
dres de ios salesianos.
* * *
En Zaragoza falleció don José M aría Lagu­
na. asiduo lector de luicslra revista y generoso
bienhei'hor de niirstrns obras. Ofrezcamos oraciones
por *u alm a, y p o r nuestra p arte acompañamos
a su viuda, dona M aría Zabid. en su justo dolor.

B I B L I O G Í M A F I A

i

R odolfo Fierro Torrea, S. D. B ., Inapertor cen­
tral d el Mafiftprin de la Iglesia. —P roblem as He
E d u c a c ió n -. ET SISTEMA EDUCATIVO DE
DON BOSCO en las Per/ogogío.» C eneral v Espe­
ciales . T ercera edición puesta al día. SEI. Ma­
drid. 1953—. ¡>0 pesetas en rústica.
L 'bro denso de doctrina teórica y práctica, que
e r 620 página« agota certeram ente la m ateria, t'ros prim eras ediciones la prensa española y ex­
tran jera hizo los más halagüeños elogios. Esta
tercera edición ya no se puede a lab a r m ás de
lo que la h an enaltecido todas las revistas pe­
dagógicas y culturales de nuestros tiem pos. In ­
tencionadam ente nosotros hem os quedado para
los últim os, intentando poner el broche de oro
a tan abundantes y justas recen.siones.
Cosa poco usada en esta clase de libros. la critira, basta la fecha, ha sido unánim e en -prodiear los plácem es a su esclarecido a u to r y a la
Congregación educativa, que recientem ente h a re ­
cibido otro florón p ara su corona de ^ o r ia h u ­
mana en la Encom ienda de la O rden de Isabel

la Catófica, ganada por el P . Fierp.l y concedi­
da p o r el G obierno e.spanol. Y que la_ crítica no
ha sido m era lab o r ditirám bíca lo señala el he­
cho de que. a fuerza de los constantes pedidos
ejem plares que diariam ente llegan a esta E d i­
to rial. la tirad a, no jrequeña. pronto se nos ago­
tará.
Ocho capítulos integran la obra, subdivididos
con orden m uy didáctico en imiítitiMl de ortú-ub’coD lo que la doctrina se hace más fácil y eomprenriva. A barca el estudio d» cuantos tem as p re ­
ocupan a los abnegados educadores de nue«lr<*«
tiem pos, m aravillosam ente expuestos p o r un h i­
jo de Don Bosco qne hace más de medio siglo
viene estudiando a su Maestro, habiéndose asim i­
lado su espíritu de acción y .m pensam iento.
Q ue Dios conserve todavía la fecunda vida de!
P. F ierro p ara que su plum a siga dando a la eseoela católica m uestras, tan elocuentes como ésta,
de lo que puede u n corazón y un cerebro pues­
tos a centribución subida en pro de la m ejor
c.a«sa.
171



DE C I A MOS

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AYER. . .

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K \« ^ v O ? E b 9 T O 5 H - y - f J ü ‘3 U T im 'í(i§ p r
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l E C a m o r al prójim o t s u no
' d< lo s m a ^ o rts y m a s txe t(intot d en <s q u t to d ivino
b on d ad putd a io n e t d ir é (os
hom bres

"

A Ñ O XXIV - N. 9

l& Fuac Oc SaLSSl

O s rtc o m lrn d o la m n tz u lo
J u v io lu d : cultivad con g ra n ­
de esm ero s u educación c risü a n a ; g p rop o rcion ad le li­
b ro s que la ensenen a h uir del
vicio g a practicar la virtud.

(Pin IX»

PUflí/CAC/ON M E N S U A L

vLtlTAU#»!
(Redoblad vu e a lra s fu ersas
i Tin de o p a rla r a la n i ñ o y
m ve n lu d de la c o rru pc ió n «
m credulidad, y p re p a ra r a si
u n a n ue va generación.

(Leas XIUI

SEPTiEMBRE de 1903

E n u n recuadro de p rim era plana anunciábam os la elección de Monseñor Sarto al Sumo Pontiíicadoj^con
el nom bre de Pío X.
Las tres páginas siguientes com entaban el jubiloso m om ento y ofrecían datos biográficos del nuevo Papa.
Cinco páginas m ás eran eco del Congreso de Cooperadores y de la Coronación de M aría A uxiliadora.
E n cinco am plias reseñas y tre in ta y cuatro citas dábam os testim onio de la bondad de nuestra Virgen para
con sus devotos.
Publicábam os la carta novena de don J u a n Beraldi sobre la visita pastoral de M onseñor Cagliero por tie*
ira s patagónicas.
Don Ju a n Bálzola reseñaba las prim eras fatigas de los m isioneros salesianos por el M atto Grosso.
C ontinuaba el P. T allachini dando im presiones de su viaje apostólico «A través del Ecuador».
Con el título «U na fecha m em orable» pregonábam os —recordando a Pío IX y León X III— la proxim i­
dad del cincuentenario Concepcionista.
Seguía la lectura de las «M emorias biográficas» de Monseñor Lassagna, el obispo m á rtir salesiano.
Nada m enos que ciento quince nombres, entre salesianos y cooperadores, hispanoam ericanos ocupaba
la sección de difuntos, m ientras concluíamos este n ú m :ro de septiembre con el ruego, de que se rem itieran a
nuestra Redacción los nom bres de los cooperadores fallecidos.

P O R

A M O R

Un celoso cura rurad, asiduo lector de nues­
tra revista, nos pide el favor de Insertarle la
carta que sigue, lo que hacemos gustosos, cotnprondiendo que, aunque su objeto no se refiere
espoclficamenic a los fines dcl BOlüTlN SAL£SIANO, es servicio de la S aita iglesia, y está
interesada la gloria de Dios en sus templos:
“Mazarete. 18 de )uU-'> de 1953.
Sr. Director del BOLETIN SALESIANO. Madrid.
Muy Sr. mió: Dispénseme la molestia de di­
rigirle estas cortas lineas, pero lo hago a c o la ­
do por la necesidad en que me encuentro.
En una de las tres parroquhs a mi cargo, en
reconstrucción hace más de dos años, se vino
abajo toda la techumbre, y por lo realizado

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DE

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debemos ya más de DIEZ MIL PESETAS; no
pudiendó pagar esta cantidad ni, por tanto,
continuar las cftiras, oes encontramos sin Sa­
grario y con altares muy deteriorados.
Ruego a usted que en ia revista de su digna
dirección inserte este angustioso llamamiento en
favor (le mi pobre iglesia; estoy seguro de que
ios Cooperadores Salesianos responderán generomente con sus Iknosnas a remediar esta urgen­
te necesidad.
Las cérendas pueden dirigirse al que suscri­
be, Cura Párroco de Mazarete (Guadalajar.'V
Dispense la molestia que le ocasione, y con
gracias anticipadas queda de usted afectísimo
hermano en el Sacerdocio.

Miguel Llorsnie. Pbroj>

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Conjuntos de fichas
Boletín Salesiano
1953