Título

BS_1967_06

Descripción

Boletín Salesiano. Junio 1967

Fecha

1967.06

extracted text

AÑO L X X X I - N,9 6 - O RGANO DE LOS COOPERADORES S A L E S IA N OS - JUNIO, 19(>7

En e s t e n ú m e r o :

AGUAS
REVUELTAS
EN EL
RIO HAN
DECLARACIONES
DEL
RECTOR MAYOR
A LA PRENSA

NUESTRA PORTADAS
LiBgatta do don Luis
R ic c e ri a Bancetona

. *. •.*•• sí«

^09PA^

BOLETIN SALESIANO
ORGANO DE LA PIA UNION DE
COOPERADORES S A L E S I A N O S
Revisia

da

la Obra

de Don

Bosco

Año LXXXI - Núm. 6 - Junio, 1967
DIRECTOR:
JAVIER RUBIO IBAÑEZ
DIRECCION, REDACCION Y ADMON.:
Alcalá, 164 - Apartado 9.134
Teléfono: 255 2000

S u m a r io
ANECDOTARIO DE DON B O S C O ................
V IN O A HABLAR CON LOS SALESIANOS .
ECOS NACIONALES DEL PASO DEL RECTOR
MAYOR
AQ UI ESTUVO. ESTO H I Z O ........................
DECLARACIONES DEL RECTOR M AYO R A LA
P R E N S A ........................................................
ESPAÑA S A L E S IA N A ....................................
DIALOGO CON LOS HIJOS: Abramos las venAGUAS REVUELTAS EN EL RIO H A N . . .
CRONICA DE G R A C I A S ............................
BECAS SACERDOTALES................................
INSTITUTO SECULAR iVOLUNTARIAS DE
DON B O S C O i ............................................

MADRID-2
Depósito legal: M. 3.044-1958
(Coa censura eclesiástica)
B. O. Salealana: Madrid-Atocha

ANECDOTARIO

HASTA

EL

Le sucedió a Don Bosco en Paris. En una hermosa mansión
junto al Bosque de Boulogne.
Era un dia de mayo de 1883.
Una niña de 15 años estaba
a punto de morir tras largos me­
ses de fatigosa enfermedad. Pá­
lida, delgada, perdiendo de dia
en día, iba viendo pasar por la
cabecera de su cama a los me­
jores médicos.
Se llamaba Margarita de Cholet. También llegó hasta ella Je­
sús Sacramentado, como viático.
Una honda tristesa en volvía la
casa. No había esperansa para
Margarita.
Llegó Don Bosco. La mamá le
explicó la situación:
Don Bosco se acerca a la enfermita:
-—Margarita ¿tienes fe?
—Si, Padre, se apresura a res­
ponder la mamá en lugar de su
hija, que de puro agotada por
la fiebre no tenía ni fuerxas pa­
ra hablar.
—Si es así te curarás, porque

DE

QUINCE

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DON SOSCO

DE

Jesús ha dioho que la fe lo con­
sigue lodo. Será suficiente que
cada día dirijas una plegaria al
Sagrado Corazón de Jesús. Aña­
de luego un lAcordaos» como
saludo a la Virgen Auxiliadora.
Y esto lo harás hasta el 15 de
agosto.
—i Hasta el 15 de agosto!, g i­
mió la mamá. iQué lejos está!
Si usted quisiera, podría hacerla
levantar ahora mismo.
—Querida señora, haga como
le digo. Por mi parte rezaré y
haré rezar a mis alumnos de
Turín.
Y salió.
Aquella misma tarde Margari­
ta tuvo un acceso de los terri­
ble. Los días siguientes siguió
empeorando. Por las noches ar­
día de fiebre... ¿Había aún lu­
gar para la esperanza? La reco­
braban cuando rezaban lo man­
dado por Don Bosco, pero resul­
taba muy duro confiar todavía.
Llegó el 15 de agosto. Marga­
rita seguía sin poder moverse

AGOSTO
de la cama, delgada y pálida
como un esqueleto... Su mamá
se preparaba para ir a misa,
cuando de repente oye que su
hija le llama:
—Mamá, mamá, estoy curada.
Aturdida corre a la habitación
de su hija. A llí está Margarita
sentada en la cama, pálida pero
sonriente.
—Mamé te aseguro que estoy
curada. Tréeme mis vestidos que
quiero ir contigo a Misa.
—Hija mía, tú deliras.
— Que no, mamá. Estoy cura­
da y quiero ir en seguida a dar
gracias a la Virgen. Ella me ha
curado, como dijo Don Bosco.
Media hora después, Margari­
ta, un poco vacilante pero fer­
vorosa rezaba en la iglesia al
lado de su madre... La curación
fue completa. A su tiempo se
casó, crió tres hijos y alcanzó
la edad de 80 años.
Bien valió la pena rezar tres
meses seguidos.

1

A HABLAR CON LOS SALESIANOS
Don Luis Bicceri» V I Sucesor de San Juan Bosco en el gobierno de la
Congregación, estuvo en España del 5 al 14 de abril. ¿Era necesaria su
\isíta? La Iglesia, con el Concilio se impuso a sí misma y todos sus ele­
mentos una revisión de vida. Don Luis Bicceri vino a recabar de los salesianos españoles su colaboración decidida en la renovación planeada de
la Congregación Salesiana. L^nos 2.300 salesianos españoles y portugueses
le oyeron directamente y le dijeron «sí».

BARCELONA.— Salesianos de la ciudad condal y alrededores reunidos en los Hogares Mundet con
el rector mayor.

— 3

Congregación Salesiana no es ajena a
los vaivenes del mundo y tanto menos a
las vicisitudes de la Iglesia. £1 Concilio ha
removido las aguas; las consecuencias del
gesto de la Iglesia, pese a las ya producidas, no
es aún posible medirlas ni vislumbrarlas.
Concretándonos al campo de las Ordenes y Con­
gregaciones religiosas el Concilio las ha puesto
en trance de renovarse. Si no se renuevan, ellas
mismas acentuarán su desfase con las exigencias
del apostolado moderno y habrán firmado su re­
ducción a la ineficacia o quizás su desaparición
a plazo más o menos largo.
Renovación: esta es la palabra que impera en
las decisiones a tomar por las Congregaciones re­
ligiosas. Renovación de la mentalidad de sus
miembros, renovación de las estructuras para ade­
cuarse a los signos de los tiempos y a las ideas
conciliares, renovación de los tradicionales mé­
todos de apostolado.
La Congregación Salesiana, a pesar de su juven­
tud, ha comprendido que no era una excepción
y que para seguir siendo fiel a su misión y, sobre
todo, para no escamotear el papel que le corres­
ponde llenar en la Iglesia de hoy, por ser la ter­
cera Congregación de la misma con sus 23.000
miembros y la inspiradora de las otras dos fami­
lias salesianas, deben también renovarse.
La renovación comprende, en primer término,
a los salesianos, los cuales deben, cada uno, al­
canzar la plenitud del desarrollo de sus propias
aptitudes humanas, cristianas, religiosas, educa­
tivas y apostólicas para que, de verdad, formen
en los jóvenes esos cristianos, conscientes de su
bautismo, apóstoles del reino de Dios, construc­
tores o animadores, según la vocación, del orden
temporal; cristianos del posíconcilio, llamados a
dar nueva fisonomía al mundo.
La renovación personal de los salesianos tiene
que ir acompañada de la renovación interior de
las comunidades y la exterior de las estructuras
de la Congregación. La primera tiende a hacer de
las comunidades un equipo de hombres con un
enfoque comunitario de todas las actividades, que

L

a

SEVnJLA.~SiJe«ianot,

integran la educación juvenil o la pastoral res­
pectiva. En ese equipo, convertido en comunidad
educativa, cada uno de sus miembros, gracias al
verdadero diálogo reinante entre ellos y con el
director y su consejo, sabedores todos del alcance
de su misión concreta, espontáneamente aportan
su esfuerzo, no impuesto por la obediencia, sino
por imperativo de su propia voluntad de colabo­
rar plenamente con Dios y con los hermanos en
la formación de la juventud, en la conservación
cristiana de las clases populares.
Pues bien: haca dos años y precisamente en el
Capitulo General y del que salió elegido rector
mayor, Don Luis Ricceri, la Congregación Salesia­
na captó los nuevos signos, captó la renovación
que las ideas conciliares impondrían con fuerza
y elaboró los documentos básicos de su propia re­
novación. El capítulo General, realizada su labor,
encomendó el reajuste de la Congregación al ac­
tual Rector Mayor.
Puede decirse que desde entonces Don Luis Ricoeri, consciente de la responsabilidad que tal
encomienda significaba para él, ha viv id o sólo pa­
ra eso.
Su visión aguda de las cosas le ha permitido
contemplar a la Congregación, bella y esplendo­
rosa, una vez renovada; plena de eficacia y re­
novada de frutos, himno de gloria a Dios. Ante
ello no ha perdonado fatiga e impaciente, porque
«no S3 puede perder el autobúsi, como él ama re­
petir, a su primer trabajo de planificación añade
ahora el de la ejecución y, no contento con el en­
v ío frecuente de sus consejeros por el mundo salesiano con sus consignas, agrega ahora su propia
voz, su propia presencia.
Este es el significado de su visita a España. Ha
venido a decir a los salesianos españoles en todas
sus categorías: estudiantes, clérigos, coadjutores,
sacerdotes, directores y consejeros inspectoriales,
la urgencia de la renovación que la Iglesia y la
Congregación, de consuno, esperan de cada uno
personalmente, de cada comunidad, de todas las
inspectorías.

en Triuir. reciben del rector mayor consignas de renovación.

MADRID.— ¡V iv a Don Bosco! ¡V iv a el Rector Mayor! ¡V iva ! £1 Director General de Enseñan*
za Proiesional, Don Vicente Aleixandre, el General Barroso y Don Fermín Sanz Orrio con­
testan a los vivas complacidos y entusiastas.

ECOS NACIONALES DEL PASO DEL RECTOR MAYOR
La periodicidad mensual del Boletín Salesiano le impide en la mayor parte de las ocasio­
nes servir con actualidad los acontecimientos
salesianos. Una vez más se repite el caso con
la visita del Rector Mayor a España.
Afortunadamente en esta ocasión la televi­
sión española nos tuvo al corriente con sus
servicios, presentando en nuestras pequeñas
pantallas cuatro veces al Rector Mayor en los
momentos más noticiables de su estancia en­
tre nosotros, cosa que es de agradecer.
También diversos periódicos de Madrid,
Sevilla Y Barcelona recogieron la noticia. £1
Y A de Madrid publicó unas declaraciones de
Don Ricceri; el ABC de Sevilla además de la
crónica de su paso por la capital andaluza,
reprodujo en síntesis una entrevista con el
Rector Mayor. Pero el diario que más relieve
prestó al paso de Don Luis Ricceri por su ciu­
dad fue el gran rotativo barcelonés LA V A N ­
GUARDIA, que publicó diversas fotografías
de ios principales actos en que intervino, de­
dicándole en el número del día 13 de abril
casi entera la página Religión y Tiempo.
Es de destacar este relieve que la prensa
ha dado a la visita de nuestro Rector Mayor,
porque cualquier atento observador, habrá
notado que el paso de los superiores mayores
de Congregaciones religiosas apenas si re­
gistra en los periódicos la breve presencia
de unas lineas.

Radio Nacional de España incluyó en su
noticiario la llegada y la partida de Don Ric­
ceri. La revista ECCLESIA habló de ella en
sus números del 15 y 22 de abril y publicó
su foto.
Como decíamos poco ha, afortunadamente
los medios de difusión nos tuvieron al co­
rriente, no sólo de la presencia del Rector
Mayor sino también la finalidad de su visita.
Todos pudieron saber que su intención, al
venir a nuestra patria, era impulsar la pues­
ta al día de la Congregación en la línea con­
ciliar.
Esto nos permite a nosotros, con cierta cal­
ma, insisñr más en lo permanente de la visita
del Rector Mayor. En las palabras, que dijo,
en la semilla, que sembró, que no tiene el
valor fugaz de una efímera noticia, sino que
permanecen y deben permanecer para que
vayan germinando y los frutos sean durade­
ros.
En sección aparte ponemos el apretado cur­
so de sus días en España y por él cada uno
puede apreciar las ciudades donde estuvo,
las casas que visitó, las personas a quien ha­
bló.
Por las fotografías podrán ir captando mo­
mentos felices de la estancia de Don Ricceri
Y con todo ello nuestros lectores se formarán
una idea de lo que fue y significó su paso.

—

5

fB IT A DEL HECTOR MAYOR

A qu í ostuvo
Día 5 de abril: Madrid-Salamanca.
— Llega a Madrid por vía aérea, a las dos de
la tarde, dirigiéndose a la Casa Salesiana de
San Juan Bosco donde departe con los salesianos de la misma.
— 4 de la tarde: Recibimiento en Atocha y sa­
lida para Salamanca. A su llegada habla a
los estudiantes de Teología.
Día 6 de abril: Salamanca-Medina del Campo-Aré»
valo-Madrid.
— Después de concelebrar con los sacerdotes
recién ordenados sale para Medina del Cam­
po, en donde habla a los estudiantes de
Filosofía. Come con ellos y pasa por Arévalo para saludar a los aspirantes. Llega a
Madrid para hablar en el Colegio de Paseo
Extremadura a 414 salesianos.
Día 7 de abril: Madrid-Guadalajara.
— Concelebra en Madrid con los Directores de
las Inspectorías de Madrid, Bilbao y Zamora.
Se reúne con ellos toda la mañana. Por la
tarde habla a los estudiantes de Filosofía de
Guadalajara.
Día 8 de abril: Madrid-Sevilla.
— Sale de Madrid por vía aérea hacia Sevilla,
a las 9 de la mañana.
— Llega a Sevilla: Recibimiento en Triana. An­
tes de comer se reúne con los directores de
Sevilla y Córdoba. Después de comer habla
con los salesianos de Sevilla y ciudades v e ­
cinas.
Día 9 de abril: Sevilla-Sanlúcar la Mayor.
— Por la mañana visita la Universidad Laboral
y reúne a los Consejos inspectoriales de Cór­
doba y Sevilla.

Las juventudes salesianas jugaron el papel prin­
cipal en los recibimientos hechos al Sexto Sucesor
de San Juan Bosco, en Madrid y Lisboa (fotos su­
perior izq. y der.) en Barcelona y Sevilla (fotos
inf. izq. y der.). Millares de jóvenes le vitorearon
y manifestaron su alegría de verle entre ellos.
Los aspirantes y salesianos jóvenes aventajaron a
todos en entusiasmo gozosos de besar su mano, y
oírle de cerca, como lo demuestran esos aspirantes
de Barcelona (fot. centro izq.). A cuantos jóvenes
6 -

Esto hixo
— A mediodía llega al esíudianiado leológico
de Sanlúcar la Mayor, donde es recibido
por aspirantes, novicios, filósofos y teólogos
de las inspeclorías de Córdoba y Sevilla,
concelebra con los recién ordenados de
sacerdote y después de la comida habla a
los esiudiantes de teología.
— Por la noche se aloja en la casa inspecíorial.
La Cofradía de Nuestra Señora de la Espe­
ranza lo nombra Hermano honorario.
Día 10 de abril: Sevilla-Lisboa.
— Después de decir la misa a los alumnos sale
para Lisboa.
— En Portugal repite entre Estoril y Lisboa las
reuniones con salesianos hasta el 12 por la
mañana, que sale en avión para Barcelona.
Día 12 de abril: Lisboa-Barcelona-Senlmenat.
— Llega a Barcelona a eso de las dos. A las 4
recibimiento ofícial.
— Sentmenat, estudiantado filosófico. Habla
con estudiantes. V u elve a Barcelona-Martí
Codolar donde habla a los estudiantes de
Teología.
Día 13 de abril: Barcelona-Tibidabo-Ana Mundet.
— Reúne en el Tibidabo a los Consejos Inspectoriales de Barcelona y Valencia.
— Recibimiento por parte de aspirantes-estu­
diantes de Filosofía y Teología. Concelebra
con los misacantanos de las inspectorías bar­
celonesa y valenciana.
— Por la tarde en los Hogares Mundet habla
a los salesianos de Barcelona y alrededores.
Día 14 de abril: Barcelona-Milán.
— Por la mañana reúne en Sarria a los direc­
tores de Barcelona y Valencia.
— A mediodía sale para Milán.

le escucharon Don Ricceri les trasmitió el mensaje
de Pablo VI a los jóvenes de esta época: Conti­
nuad a través de los siglos el triunfo de Cristo
con el mismo entusiasmo con que los muchachos
de Palestina animaron el último viaje de Jesús
desde Betfagé a Jemsalén. En la foto (centro der.)
el rector mayor se entretiene con el joven de
Triana que le saludó en nombre de todos sus
compañeros de Sevilla.

— 7

taw-

'■m-

SEVILLA.—Llegada de Don Luis Ricceri al aeropuerto.

¿Cuál es el objeto de su veni­
da a España? (ABC, de Sevilla.)

SEVn.LA.~El aeropuerto se llena de saludos.
Recibimiento en Triana.

8 —

No es la primera vez que ten­
go la dicha de venir a España,
pero sí la primera que lo hago
como rector mayor: precisamen­
te por esto mi visita tiene en mí
una nueva resonancia. Con es­
te viaje me he propuesto un en­
cuentro directo con el mayor nú­
mero posible de salesianos es­
pañoles. Un interés más urgen­
te e imperioso me induce asi­
mismo al encuentro con lodos
aquellos que tienen alguna res­
ponsabilidad en el gobierno de
las obras salesianas en España.
Encontrarse quiere decir cono­
cerse mejor y amarse más: la
palabra viv a y el encuentro per­
sonal crean esa sintonía de al­
mas que da al trabajo común
unidad de ideas, de conviccio­
nes y de acción. En este momen­
to en que se está llevando a
cabo en la Congregación una
amplia y profunda labor de re­
visión, casi un examen de con­
ciencia de todo nuestro aposto­
lado, tal unidad espiritual es uno
de los elementos más valiosos
e indispensables. M i visita a Es­
paña es una etapa en un pro­
grama más vasto de encuentros
en otras partes del mundo salesiano, con la misma fínalidad.

L A CONGREGACION S A L E S IA N A D E S V E LA D A A L A P R E N S A

DECLARACIONES DEL RECTOR MAYOR
E l Y A de Madrid, el ABC de Sevilla y L A V A N G U A R D IA de Barcelona
publicaron sendas declaraciones de Don Luis Ricceri. En nin{!;im caso lo
hicieron íntegramente por escasez de espacio.
E l B O L E T IN S A L E S IA N O a cuyo poder han llegado íntegramente las
declaraciones al Y A y al ABC, seleccionando las declaraciones no repeti­
das y ordenándolas ofrece a sus lectores una versión completa.
En su conjunto nos dan el pensamiento del rector mayor sobre el momen­
to de la Congregación Salesiana en España y en el mundo.

De ese modo será más fácil des­
arrollar la misión que en este
extraordinario momento postcon­
ciliar la Iglesia señala a la Con­
gregación Salesiana.

¿Qué representa España en el
cuadro de la Obra de Don Bosco
en el mundo? (ABC, de Sevilla.)
Un elemento de primera impor­
tancia: lo puedo afirmar con se­
guridad plena, pues es cosa e v i­
dente Y además me parece de
justicia, hacerlo.
La España Salesiana se distin­
gue por el elevado número de
miembros que ha ofrecido a la
Congregación (pasan actualmen­
te de 3.000, distribuidos en sie­
te inspectorías; en 1957 eran sólo
1882); por la excelente calidad
que les caracteriza en su trabajo Y por las obras numerosas
e imponentes que han realiza­
do. H oy baY en España 142
obras; en 1957 eran 97.
Además es alentador compro­
bar el creciente número de v o ­
caciones: su incremento ha lle­
gado a uno de los índices más
elevados de toda la Congrega­
ción (218 nuevas profesiones en
1966), Y está justificada la espe­
ranza de una amplia contribu­

ción al apostolado salesiano de
España y '<^®1 mundo.
Puesto que me pregunta qué
representa la España Salesiana
en el conjunto de las Obras de
Don Bosco me es grato destacar
el espíritu misionero de los salesianos españoles. En estos 10 úl­
timos años han ido a misiones
320, de los que 290 se han diri­
gido a Hispano-América. La iden­
tidad de lengua, de cultura y
civilización han favorecido cier­
tamente este flujo de fuerzas
espirituales y con él la Congre­
gación ha podido responder pro­
videncialmente a la ferviente
llamada del Papa en favor del
continente sudamericano.
He de hacer notar asimismo el
eminente puesto de responsabi­
lidad que muchos españoles ocu­
pan en diferentes campos de ac­
tividad. Dos miembros del Con­
sejo Superior de la Congrega­
ción proceden de España: Don
Modesto Bellido, Director espi­
ritual Y Don Isidro Segarra, en­
cargado de las inspectorías de
la Península Ibérica, M éjico y
Centro América.
En el Pontificio Ateneo de Ro­
ma Y
el Instituto Superior de
Pedagogía ocupan cátedras va­
rios españoles, entre los cuales
cuenta D. Antonio Javierre, de­
cano de la Facultad de Teología.

El número y
calidad de los
salesianos españoles pueden ser
motivo de satisfacción para la
Familia Salesiana: pero quizás
sea de más valor la devoción y
la fidelidad que España Salesia­
na ha demostrado y sigue de­
mostrando hoY a Don Bosco, a
su espíritu y ^ sus obras. Puedo
decir que compruebo a diario
esta voluntad de adhesión a
nuestro Fundador y ciertamente
en ella radica la explicación del
vigoroso crecimiento de la Obra
Salesiana en España. Es una gran
lección Y I ojalá, se tenga siem­
pre presente en este tiempo de
fáciles desviaciones y desorien­
taciones!

¿Cuántos alumnos de la clase
obrera tienen los salesianos en
el mundo y en España? (YA, de
Madrid.)
Según datos de 1966 los alum­
nos de las escuelas profesiona­
les salesianas son 61.944 más
37.779 de las escuelas agrícolas.
De estos son españoles 15.093.
Referente a otras enseñanzas el
número es sensiblemente maYor
pues son 50.807 españoles, sobre
372.754 alumnos en todo el mun­
do.

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BIENVENIDO
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SANLUCAR LA MAYOR.—Por dos veces interrogaron los periodistas a Don Luis Ricceri sobre la crisis
de vocaciones que se observa en el mundo y su repercusión en los salesianos. Pudo responderles
que, en España, de 1.882 salesianos, que eran en 1957, han subido a 3.319, incluidos los novicios en
1967. En Sanlúcar los estudiantes de Filosofía y Teología de las inspectorías de Córdoba y Sevilla
con el rector mayor.

LA CONGREGACION Y EL CONCILIO
¿Qué cambios relevantes han
producido las ideas conciliares
en la marcha de la Institución
Salesiana? (ABC, de Sevilla.)
El Concilio ha sido y sigue
siendo viv id o iníensamenle por
la Congregación, aportándonos
una extraordinaria riqueza de
intereses. Quisiera, destacar que
si las exigencias de los tiempos
Y de los lugares nos impusieran
una serie de cambios, el Concilio
ha dado a nuestra Congregación
un nuevo impulso de ideas y de
acción. Si me es licito emplear
una imagen deportiva, ha sido
como encontrar y lanzar al sprint
toda la fuerza espiritual de los
Salesianos. Nuestro último Capi­
tulo General, que tuvo lugar a!
mismo tiempo que las últimas
fases del Concilio, pudo captar
Y traducir en sus deliberaciones
todo el espíritu conciliar. Y creo
poder afirmar con objetividad
que, hoy, nuestra Congregación
participa en la ardua tarea de

10

—

renovación en la que toda la
Iglesia se halla empeñada.

£1 carácter juvenil de nuestro
apostolado y la fecha relativa­
mente reciente de nuestro origen
pone a nuestra Congregación
dentro del clima conciliar como
algo propio y congónito.
Por seguir la linea conciliar
estamos trabajando en nuestra
renovación en todos los sectores,
tanto en el de las estructuras, de
la organización, de los métodos
educativos y apostólicos, como
en los de prevalencia espiritual.
En cuanto a las estructuras,
mediante ciertas medidas, pues­
tas ya en marcha, se ha querido
conciliar la unidad y la cohesión
de la Congregación, presente
en 70 naciones, con la necesidad
de una articulación más ágil
a favor de los organismos loca­
les. En la organización de las
distintas actividades apostólicas
se tiende a dar un sentido más
personal y de compromiso res­

ponsable a cada salesiano, a los
consejos de las casas y de las
inspectorias. Los métodos de tra­
bajo se han adaptado mejor a
las diversas condiciones ambien­
tales de nuestras obras.
Todo esto supone la presencia
de hombres preparados para
las nuevas tareas postconciliares,
de ahí que el centro de mis
preocupaciones sea la cualificación Y especialización del perso­
nal salesiano. Y o v o y afirmando
por todas partes que <el Salesianoi es lo primero y el objetivo
auténtico de la labor de renova­
ción postconciliar, puesto que
él es el verdadero protagonista
Y el artífice de la misión enco­
mendada por la Iglesia a los
Hijos de Don Bosco. Cuento con
que las estructuras y la organi­
zación nuevas se adapten a los
tiempos, pero sé muy bien que
la primacía de nuestros recursos
está en el potencial de vida es­
piritual de cada uno de los sale­
sianos Y de la Congregación.
Quiero al salesiano digno del
Concilio, como hombre, como
religioso y sacerdote, para que
también las obras sean dignas
del Concilio.

METAS ACTUALES DE LA CONGREGACION
¿Cuáles son las metas prefe*
lidas por la Obra Salesiana en la
hora actual? (ABC de Sevilla.}
Don Bosco señaló el camino
de nuestra Obra y está tan cerca
de nosotros, que no podemos
elegir metas distintas de las por
él indicadas con toda claridad:
mejor diría si afirmara que lo
que debemos hacer es abarcar
las amplias orientaciones del
Santo.
Si se me obliga a señalar al­
guna con preferencia indicaría
las obras juveniles, puesto que
nos hallamos en una época en
que los problemas de los jóve­
nes han tomado una amplitud y
una gravedad sin precedentes.
España, en este campo, está
muy en línea con las caracterís­
ticas de la Congregación, sobre
lodo, en el campo de los colegios
y en el técnico-profesional. Las
obras de Sevilla son un elocuen­
te testimonio.
No obstante el Capítulo Gene­
ral ha confirmado la vitalidad
y actualidad de la obra por ex­
celencia de Don Bosco: la que
él llamaba Oratorio Festivo. Esta
institución renovada en la forma
según las exigencias de los tiem­
pos, es hoy la más apta para
llegar a los jóvenes pobres y
más necesitados de asistencia.
Piénsese, por ejemplo, en la pe­
riferia de las grandes ciudades
y en el chabolismo. Los centros
juveniles son de hecho la única
obra que permite asistir social
y religiosamente a centenares
Y millares de jovencitos. Don
Bosco metería mano con mayor
urgencia a estas obras en esos
ambientes, si estuviese entre nos­
otros; Y es nuestro deseo com­
placerle.
Otra meta prefijada es la ccatequesisi, en primer lugar como
irílegración de la obra de asis­
tencia que se presta a los jó v e ­
nes, extendida luego a las gran­
des masas populares. Entiendo
hablar de una catequesis viva,
preparada y perfeccionada como
cualquier otra enseñanza, con
todos los recursos de la técnica

moderna, para hacerla agradable
Y comprensible a todas las cate­
gorías sociales. En este sentido
consideramos a nuestro Instituto
de Caíequética como Centro de
nuestra actividad y tenemos en
programa la creación de centros
catequéticos en todas las nacio­
nes e inspectorías, a fin de que
sean como centrales de forma­
ción de catequistas salesianos
Y laicos.
Un apostolado paralelo al ca­
tequístico es el de los medios
de comunicación social: prensa
radio, cine, televisión y teatro.
Don Bosco intuyó hace un siglo
las posibilidades y la potencia
de estos medios y queremos rea­
lizar sus aspiraciones. Queremos
preparar hombres, Salesianos y
no salesianos, que estén en grado
de utilizar esos recursos y po­
nerlos a disposición de la catequesis. No podemos mantener­
nos en posiciones de simple de­
fensa de la propaganda religiosa
e inmoral; queremos que lodos

los medios de técnica moderna
estén al servicio de la verdad.
Pienso que la salvación de los
jóvenes, en particular, puede de­
pender en g:an parle del buen
uso que hayamos sabido hacer
de la prensa, de la radiotele­
visión Y dol cine.
N o puedo hacer una lista de
todas las metas que nos hemos
propuesto, pero quiero destacar
la presencia activa y preocupa­
ción dominante que los sale­
sianos de hoy sentimos ante
nuestras fuerzas seglares: los
cooperadores salesianos, que son
nuestra tercera familia, los an­
tiguos alumnos, los profesores
seglares, los padres de nuestros
alumnos, los miembros de nues­
tras numerosas asociaciones tan­
to juveniles como adultos. Todas
nuestras obras y todos nuestros
esfuerzos miran todavía a dar
al mundo, por medio de los jó­
venes, lá presencia y el testi­
monio de un laicado católico.
Para concluir, todos nuestros es­
fuerzos Y todas nuestras obras
se orientan a dar a la Iglesia,
comenzando por los jóvenes, un
laicado que responda concreta­
mente a las nuevas perspectivas
indicadas por el Concilio.

SEVILLA.—-En Andalucía privan las cofradías. No hay asociación
que no tenga la suya. En el Colegio de la Santísima Trinidad la
Cofradía de la Esperanza mantiene el fervor cristiano de sus socios.
¿Qué mejor ocasión que la visita del rector mayor para entregarle
la vara de Hermano de honor? La Junta en pleno se reunió para
ello y nadie negará que el rector mayor la empuña con estilo, como
un pastor su cayado.

—

11

CRISIS DE VOCACIONES
¿En qué medida iniluye la cri­
sis general de vocaciones en las
vocaciones religiosas salesianas?
¿Cuál es exactamente en este
campo la situación de la Congre­
gación Salesiana? (YA, de Ma­
drid.)
Aunque también nosotros en
el conjunto notamos los efectos
da la que se llama crisis de v o ­
caciones, he de decir que para
nosotros, según datos que poseo,
no es tan sensible: aun más en
algunas partes del mundo nos
hallamos con un gozoso flore­
cimiento de vocaciones. Le cita­
ré nombres que le causarán extrañeza: constatamos riqueza de
vocaciones en Yugoeslavia, en
Estados Unidos, en la India y
en el Yietnam y en Méjico. Es­
paña en esto es capitulo aparte
y ocupa el primer plano. Baste
decir que este año los novicios
españoles salesianos son 335: ha­
ce diez años eran 215. El diagra­
ma de vocaciones en España es
ascendente, aunque apuntan ya

factores capaces de aminorar la
marcha con el tiempo.
Entre nosotros la crisis de vo­
caciones se advierte en ciertas
naciones europeas y sobre todo
en algunas de Hispanoamérica,
precisamente en aquellas cuya
necesidad es más urgente.
Entre las zonas que favorecen
y explican bajo ciertos aspectos
la siguiente situación favorable,
hasta cierto punto, y «1 creci­
miento numérico de nuestra Con­
gregación, creo que la primera
es la naturaleza de la misión
salesiana eminentemente juvenil
y luego la modernidad de nues­
tra institución. Estos hechos nos
insertan más profundamente en
el contexto del mundo contem­
poráneo y encaminan más fácil­

mente hacia nosotros a los jó­
venes que aspiran a la vida re­
ligiosa y al apostolado.
Quiero sugerirle a usted tam­
bién que nuestra Congregación
ahora apunta más a la calidad
que a la cantidad de los elemen­
tos nuevos. Tal criterio se sigue
en la selección de las nuevas
vocaciones, que se hace tenien­
do en cuenta la experiencia de
los cien años de vida de nuestra
Congregación y las normas de
las ciencias pedagógicas, que
cuidan con particular interés
en el correspondiente sector de
nuestro Instituto Superior de Pe­
dagogía.
Para nosotros hoy lo que más
cuenta son los hombres, pero
los hombres preparados adecua­
damente para los nuevos objeti­
vos; ellos son los que constitu­
yen la verdadera fuerza de las
instituciones.

¿SON FIELES LOS SALESIANOS A LA PEDAGOGIA
DE DON BOSCO?

LISBOA.—El rector mayor concelebrando en la iglesia de María
Auxiliadora de las Escuelas Profesionales de San José.

¿En qué términos se viven
hoy las directrices pedagógicas
de Don Bosco? ¿Con qué fide­
lidad las sigue? (Y A de Madrid.)
Las grandes ideas que hicieron
la fortuna del sistema educativo
de Don Bosco y le dieron su
alma no puedan sino sobrevivir;
e> cosa clara, porque hunden
sus raíces en el ihumusi perenne
del Evangelio. Más aún, hoy son
más válidas que nunca y de
fecundidad actual: tenemos prue­
bas experimentales de estos úl­
timos años en todas las parles
del mundo. Piense, por ejemplo,
en el hecho de que en los pue­
blos en los que trabajamos, es­
parcidos entre civilizaciones y
costumbres diversas, entre ca­
tólicos o no católicos o no cristia­
nos, en todos ellos obtenemos los
mismos resultados positivos. El
laudo de los hechos es verdade­
ramente elocuente.
Por otra parte comprobamos lo
mismo si comparamos los prin­
cipios del método educativo de

12

—

Don Bosco con los más acepta­
dos por la pedagogía moderna.
Piense en la comprensión y
en la confianza que tanto se in­
culca hoy hacia el joven; al
educador que ha de hacerse
amigo del educando hasta bajar
de su cátedra, condividir el rit­
mo de vida y hacerse compañero
de juegos de las clases obreras
más necesitadas de ayuda, en el
asociacionismo en que el chico
desarrolla su espíritu de iniciati­
va; en los centros juveniles don­
de los jóvenes al encontrarse
con el sacerdote en un ambiente,
de confianza espontánea que lo
envuelve todo, halla el amigo,
el guía, el maestro de su vida
Cito por encima los elementos
fragmentarios que intregan la es­
tructura de nuestro sistema edu­
cativo. Puedo recordarle también
el método de sacar dirigentes de
los mismos muchachos; la orga­
nización del tiempo libre, del
que Don Bosco entrevio la im­
portancia y del que resolvió
fundamentalmente varios de sus
problemas; la piedad alegre, que
encuentra su expresión espon­
tánea en las funciones litúrgicas,
dando al chico no la parte pasiva
Y aburrida del espectador, sino
la activa del pequeño protago­
nista que servía en el altar o
ejecutaba los cantos en el coro.
Por tales razones la Congre­
gación se ha preocupado de pre­
cisar genuinamente las ideas pe­
dagógicas de Don Bosco y puri­
ficarlas de todas las escorias y
subestructuras, que fatalmente
con los años pudieran endure­
cerlas o mortificarlas a fin de
conservarlas aptas para su apli­
cación práctica, según el espíri­
tu Y exigencias de los tiempos
nuevos.

BARCELONA.— En los Hogares Ana G. de Mundet recibió el rector
mayor, por parte de los muchachos de la institución y de varios
cientos de salesianos, una acogida entusiasta; después del recibi­
miento habló con los salesianos de Barcelona y alrededores.

lA HECHO ALGO lA CONGREGACION POR lA iClESIA?
En los 102 años de vida con
que c u e n t a la Congregación
¿qué cree usted que ha aporta­
do a la Iglesia y de qué modo
le ha servido? (Y A , de Madrid.)
Me hace usted una pregunta

de compromiso, a la que no es
posible contestar en el breve
espacio de una entrevista y he
de añadir que hasta me pone en
un poco de aprieto. Usted com­
prende muy bien que no me
corresponde a mí decir o enu­

merar lo que la Congregación
ha aportado en un siglo a la
Iglesia. Y aunque quisiera ha­
cerlo me resultaría muy difícil,
porque son aportaciones que no
es fácil documentar.
De todos modos intentaré de­
cirle algo: siendo nuestra misión,
con preferencia el cuidado de
la juventud, nuestra aportación
a la vida de la Iglesia puede
medirse bajo cierto aspecto, por

13

el número de exalumnos salidos
do las oasas salesianas. Pero ¿có­
mo contarlos? ¿Cómo seguir su
camino en la vida de la sociedad
Y de la Iglesia y cómo valorar
su influencia como seglares ca­
tólicos en la animación cristia­
na de la sociedad? ¿Cómo pre­
cisar en la variedad de recursos
espirituales, aportados por las
Instituciones a la Iglesia, los
que pueden ser más propios de
los exalumnos salesianos? Puedo
asegurarle que he hallado an­
tiguos alumnos salesianos en los
lugares y puestos que menos
podía imaginar, en posiciones
humildes y
más elevadas.
Pero he de renunciar, por impo­
sible, a dibujar el cuadro.
Pero permítame detenerme en
un sector particular, por ejemplo,

en América Latina. Hace menos
de 100 años Don Bosco envió
una docena de misioneros a Patagonia. Era entonces un inmen­
so desierto sin recursos y ca­
rente de toda organización re­
ligiosa. Los salesianos poco a
poco transformaron y poblaron
aquellas tierras: hoy existe una
población organizada y asistida
religiosamente por los salesia­
nos Y con la Fe entró el progre­
so económico y la civilización.
Quizás en esa región podría
formarse una idea de lo que la
Congregación Salesiana ha he­
cho por la Iglesia. Puede ser
también un punto de partida
considerar la obra desarrollada
en toda América meridional, en
la que los salesianos ocupan el
primer lugar por número de re-

MADRID.—En todos los recibimientos oficiales estuvieron présenles
representaciones de los cooperadores salesianos. Cuando se pre­
sentaban como tales a D. Ricceri una sonrisa de complacencia aso­
maba a su rostro. En la foto el consejero local del Centro de Carabanchel, Don Eugenio Sánchez, saludando al rector mayor.

14 —

ligiosos, con obras variadísimas,
repartidas por todas las repúbli­
cas, a favor de la juventud pobre
principalmente.
En la India ha tenido lugar un
fenómeno opuesto al de la Patagonia. Los salesianos arriba­
ron a ella los últimos, hace me­
nos de cincuenta años. Ahora te­
nemos misiones muy florecien­
tes, escuelas profesionales que
marchan a la vanguardia del
incremento industrial de la na­
ción, se cuentan entre las con­
gregaciones más desarrolladas y
los dos tercios de ios mil salesia­
nos que trabajan en la India son
del país.
Ignoro si puede ayudar a los
fines de su pregunta el número
de obispos salesianos: son 50
Y sus diócesis radican principal­
mente en América y Asia. El
cardenal de Santiago de Chile,
Silva Henríquez, honra también
a nuestra familia. Creo que son
expresión de nuestro servicio a
la Iglesia.
Si la santidad es la prueba
verdadera de la disponibilidad
hacia el reino de Dios puedo re­
cordarle a San Juan Bosco, a San­
ta María Mazzarello, fundadores,
a Santo Domingo Savio, entre
los alumnos, y una numerosa se­
rie de otros siervos de Dios, cu­
ya causa de beatificación se ha
incoado: la de dos sucesores de
Don Bosco, a saber, Don Miguel
Rúa Y Don Felipe Rinaldi, la de
U gran cooperadora española.
Doña Dorotea de Chopitea, la
del hijo del gran cacique pa­
tagón Ceferino Nemuncurá. Mi
pensamiento vuela también al
centenar de mártires salesianos
de España cuya sangre, cierta­
mente, ha fecundado la obra sa­
lesiana de su país.
Quisiera concluir estas alusio­
nes fragmentarias, dadas a puro
título de ejemplo, poniendo de
relieve dos cosas: Durante el
Concilio fui materialmente ase­
diado por obispos de todas las
naciones del globo pidiéndome
la presencia de los salesianos pa­
ra que fundáramos en sus dióce­
sis obras de tcdo tipo, pero en
especial escuelas profesionales.
¿Sirve para su pregunta?

También durante el Concilio
recibió el Papa a los miembros
del Capítulo General y tuvo pa­
ra con nosotros palabras de pa­
terna Y condescendiente bondad,
diciéndonos explícitamente que
tenía presentes los cien años de
nuestra existencia. El Papa, ex­
cluyendo datos estadísticos, afir­
mó: Nuestra sociedad salesiana
es gran cosa en la historia ca­

tólica mundial... Los salesianos
representan uno de los hechos
más notables, más beneficiosos,
más ejemplares, más promeíedores del catolicismo en el pasado
siglo Y en el nuestro; y quiera
el Señor que sea igual en los fu­
turos...* Las palabras del Papa
son la respuesta a su pregunta.
A mi me suenan con el peso de
una tremenda responsabilidad.

¿SON POBRES LOS SALESIANOS?
Por último: ¿ viv e la Congre­
gación Salesiana el espíritu de
pobreza de la «Iglesia de los
pobresB que es proclamado por
el Concilio? {YA , de Madrid.)
Creo que puedo contestar con
toda tranquilidad que sí, aunque
tal vez en algún lugar, a un
ojo superficial, a la vista de al­
gunos complejos grandiosos po­
dría parecerle lo contrario.
Le v o y a descubrir algún as­
pecto, quizá poco conocido, de
la vida de nuestra Congregación,
para darle una idea de nuestro
concepto de la pobreza y del
modo como la vivimos.
La Congregación Salesiana no
tiene ninguna fuente de renta
fija. Es más, tiene prohibido en
su Regla el poseer inmuebles
que se la aseguren (casas, terre­
nos, industrias, etc...), fuera de
aquéllos que le son estrictamen­
te necesarios para desarrollar úl­
timamente las actividades educa­
tivas de todas y cada una de
sus obras.
Los colegios y las escuelas,
muchas veoes, como en Espa­
ña, no son de nuestra propiedad;
pertenecen a diversas entidades
que nos confían las actividades
educativas. He de añadir que
muchas casas fueron confiadas
a los Salesianos, bajo obliga­
ción de desarrollar sus activi­
dades Y misión entre los jóve­
nes, por generosos bienhechores,
sin ios cuales nos hubiera sido

absolutamente imposible cons­
truir tan grandes Centros de En­
señanza. Compruebo además ca­
da día que en las Casas propie­
dad de la Congregación toda re­
novación material o toda nue­
va construcción es fruto de tra­
bajosos Y largos ahorros por par­
le de los Hermanos.
N o debe inducir a engaño, co­
mo a veces sucede, la apariencia
exterior de los colegios. Las cons­
trucciones escolares responden
hoy día a exigencias que años
atrás eran mucho más modestas.
Hay una legislación precisa a
este resguardo y sería de verdad
un inconveniente tener colegios
anticuados en cuanto a su cons­
trucción, mientras las institucio­
nes públicas se presentan tan
dignas y funcionales. Pese a esas
mismas apariencias el tenor de
vida de los Salesianos en dichas
obras, es siempre modesto.
Quisiera añadir otra conside­
ración sobre el concepto de tra­
bajo que Don Bosco nos ha de­
jado. Fue él mismo, como auto­
rizadamente dice Pío XI, un iformidable trabajador» y quiso fue­
ra ésta una característica de los
Salesianos. El trabajo, animado
por espíritu religioso, al mismo
tiempo debe ser instrumento de
apostolado y medio para procu­
rarse lo necesario para el sus­
tento.
Los Salesianos deben v iv ir del
propio trabajo. Esta concepción
se adecúa perfectamente a lo que

es mentalidad y ley del mundo
contemporáneo, en el que el tra­
bajo, en todas sus manifestacio­
nes, es un verdadero título de
nobleza y el principio de lodo
derecho. Don Bosco era enemigo
del ocio Y de lo superfino y ha
denunciado con palabras casi
apocalípticas el peligro de una
decadencia y de una bancarro­
ta de la Congregación, si se lle­
gara al abandono de la verda­
dera pobreza.
El reciente Capítulo General
no sólo ha remachado con ener­
gía las grandes directrices de
Don Bosco, sino que, tras una
exhortación a que cada uno de
los salesianos practique la se­
vera pobreza personal, hacién­
dose eco del espíritu del Con­
cilio, he hecho un doble llama­
miento: en primer lugar a la
pobreza colectiva, para huir de
cualquier ostentación de lujo y
de grandiosidad tanto en la vida
común cuanto en los edificios,Y luego a que se prefiera el
de la clase pobre y trabajado­
ra. De esta manera la pobreza
del Salesiano, al mismo tiempo
que va de acuerdo con las vivas
exigencias de nuestro tiempo,
obedece a las directivas conci­
liares que señala a los religio­
sos el trabajo como testimonio
de su pobreza.

¿Cuales son actualmente sus
proyectos? (YA, de Madrid.)
£1 plan que tengo es uno solo:
actuar con decisión, dentro de
la gradación exigida por los pro­
cedimientos prácticos, las delibe­
raciones del Capítulo General,
Y de una manera particular ha­
cer v iv ir en la Congregación el
espíritu del que fueron anima­
das Y por el que se dieron aque­
llas deliberaciones. En su con­
junto van dirigidas a dos térmi­
nos aparentemente opuestos, pe­
ro que se integran estrechamen­
te en la realidad: retomo a las
fuentes y al espíritu del Funda­
dor, y adaptación a los signos
de los tiempos, tal como reco­
mienda el Concilio y de acuer­
do con las repetidas exhortacio­
nes de Pablo VI.
—

15

NUEVO CENTRO DE FORMACÍP1
EN ARN1
E l ZZ de abril bendijo la prim
de León ante las máximas auto
Está proyectado para 500 al
maestros profesionales salesian

En la villa de Armunia, íocanle con U a i
do la consírucción de su futura casa de fon ;ón
al mismo tiempo centro profesional de ap üzí
de la villa de León, en calidad de externo
ARMUNIA.—El 22 de abril se puso la primera piedra del nuevo
Centro profesional salesiano. Asistieron al acto el Gobernador
C ivil de la provincia, diversas autoridades 7 representaciones
de las casas salesianas.

La posición de la primera piedra tuvo il i
por el obispo de la diócesis leonesa, Dr. A idi
ver que su diócesis va siendo enriquecidt ne
ción cultural, social y profesional de sigi lig

Con esta fotografía tomada en la Basílica del Sagrado Corazón de Jesús, del Tibidabo, cerramos
nuestra información sobre el viaje del rector mayor a España. Vino a entablar un diálogo cordial
con les salesianos españoles y allí donde fue no faltó la concelebración con los directores y los sacer­
dotes recién ordenados. Diálogo y unión a través del sacramento y del sacrificio unitivo por excelen-

16 —

PROFESIONAL SALESIANO
LEON
Lrledra el Doctor Almarcha, obispo
r\Íos*
I

•Tijy para Centro de formación de
iuj^

Lfi^ i inspectoría de Zamora ha comenzaonde coadjutores salesianos, que será
ac lizaje y maestría para los muchachos
vo ir el 22 de abril. Fue antes bendecida
t. A icha, quien expresó su satisfacción al
ael aumento de los centros de íormatligioso.

Antes de la bendición el ins- - . ,
pector provincial, Don Santiago -^¿jIbáñez, explicó al Gobernador
de la Provincia, Sr. Ameijide, y
demás autoridades civiles y es­
colásticas de la provincia y al
alcalde de Armunia, D. Claudio
Puerta, y autoridades locales,
congregadas en la Casa Consis- h
torial, lo que sería la Obra, cuya
primera piedra se iba a bende­
cir y colocar.
En las cinco hectáreas de te­
rreno, cedidas por el Ayunta­
miento, la Congregación Salesiana levantará un Centro pro­
fesional de promoción de la ju­
ventud obrera leonesa. 500 alum­
nos recibirán en sus aulas edu­
cación cristiana y social e ins­
trucción primaria y obrera has­
ta ponerlos en el mundo del tra­
bajo con su título de maestros ARMUNIA.—El obispo de León,
industriales. Terminó sus pala­ Dr. Almarcha, bendice la prime­
bras agradeciendo a todas las ra piedra del iuluro centro de
autoridades su asistencia.
formación de coadjutores sale­
sianos.
{sigue e n #a pág. 18)

cia han dejado el corazón de los salesianos españoles vinculados al rector mayor para siempre. 26
J nuevos sacerdotes concelebraron con Don Ricceri en el Tibidabo. Como detalle grato a los coopera­
dores les diremos que los ornamentos que revisten los sacerdotes fueron confeccionados por las co­
operadoras del ropero de Santa Dorotea de Barcelona.

— 17

El CARDENAL SILVA,
SALESIANO. EN MADRID

MADRID.—En la casa «Don Bosco» el Cardenal Silva dijo la misa a
un grupo de cooperadores de diversos Centros madrileños. Después
se iotograiió con ellos 7 recibió el saludo de los mismos.

f v / o n 0 d a / a pég. 17}

A su vez el alcalde de Armunia puso de relieve el honor y
la alegría propia y de la Corpo­
ración municipal por albergar
en la Casa Consistorial a tantas
personalidades con motivo de
un acto tan grato a la población
cual era la fundación de un Cen­
tro Salesiano mediante el cual
la Corporación prestaría a los
vecinos el inigualable servicio
de elevar a sus hijos a un mejor
y mayor rendimiento profesio­
nal, técnico y funcional, pero
más aún moral, religioso y polí­
tico, al formarles hombres com­
pletos.
£1 Sr. Am eijide cerró el acto
declarándose muy satisfecho de
que los Salesianos acometieran
la nueva obra de formación pro­
fesional obrera. Terminaron los
actos con un vino español ofre­
cido por el Ayuntamiento de Armunia.

18

Madrid.— De paso para Roma,
el 9 de abril, estuvo 24 horas en
Madrid, el arzobispo salesiano
de Santiago de Chile, Cardenal
Silva Henríquez. Invitado a ce­
lebrar la Misa a un grupo de
cooperadores, concentrados en
la Casa del Boletín Salesiano,
accedió gustoso y glosó la ho­
milía del Buen Pastor. A l final
se entretuvo breves momentos
con ellos y pasó a reunirse con
un grupo de salesianos de va­
rias casas de Madrid. Sostuvo
con ellos, en plan familiar, una
rueda de preguntas sobre la
Iglesia en su momento actual
que fue interesantísima. El Car­
denal dejó a cooperadores y sa­
lesianos prendados de su senci­
llez y bondad.

LA CRUZ DE ALFONSO X EL SABIO, PARA EL
SALESIANO DON MIGUEL GOMEZ

Puerto Real, Cádiz.— El Jefe del
Estado, ha concedido al R. P. Don
Miguel Gómez Medina, la cruz de
Alfonso X el Sabio, como justo
premio a la labor educativa des­
arrollada en la provincia de Cádiz.

Nació en Fuenteguinaldo (Sala­
manca) hace 66 años. Su labor
sacerdotal la desarrolló en Cádiz
y Algeciras, como párroco, 22 años
y director del Colegio de la mis­
ma población durante tres años.
Colaboró en la fundación del co­
legio salesiano de La Linea de la
Concepción. Vino a Puerto Real,
hace 6 años donde lleva a efecto
una labor sacerdotal edificante.
Por los méritos contraídos en la
provincia y últimamente en Puer­
to Real el Ayuntamiento de esta
localidad acordó solicitar dicha
condecoración, informada satisfac­
toriamente por el gobernador ci­
vil y el presidente de la Diputa­
ción Don Alvaro Domecq. A la co­
mún alególa y felicitaciones, el
Boletín Salesiano se ime cordial­
mente por ser Don Miguel Dele­
gado del Centro de Cooperadores
de Puerto Real, al que dirige con
gran celo y competencia.

DIALOGO CON LOS HIJOS

ABRAMOS lAS VENTANAS
¿Ha visto usted ese anuncio
de la televisión en que aparece
un hombre metido dentro de
una campana de cristal? A l fín
le invitan a que salga y vaya
a pagar los impuestos que por
su fortuna le corresponden.
Y les pregunto a ustedes, pa­
dre y madre de un hogar cris­
tiano: ¿Tienen a sus hijos den­
tro de una campana de cristal?
¿Tienen ustedes cerradas las
ventanas de su piso? Si es así,
por favor, ábranlas; levanten la
campana y dialoguen con sus
hijos acerca de lo que pasa en
e! mundo. Desde los diez años,
más o menos, tal diálogo no será
inútil.
Parapetarse tras los muros del
hogar para poner a los chicos
al resguardo de los aconteci­
mientos del mundo y de su in­
fluencia es una láctica errónea,
o por lo menos inútil. La tele­
visión y los periódicos se los
meten en su casa de usted con
tal eficacia que cualquier acon­
tecimiento del mundo, por leja­
no que sea su escenario, reper­
cute en ustedes y, como no, en
el corazón de sus hijos.

La educación no es tarea de
un instante ni fruto de un acon­
tecimiento. Es semejante al tra­
bajo de un escultor. Cada golpe
del mazo sobre el cincel hace
saltar una esquirla de la piedra
y deja conformado un punto de
de la futura estatua.
Cada acontecimiento del mun­
do, que llega a su cdiico, produ­
ce en él un impacto mayor o
menor; siempre deja alguna
huella en su modo de pensar,
de apreciar las cosas o perso­
nas... en su mentalidad.

¿Sería usted capaz de afirmar
que su hijo, dejado a sí mismo,
puede formarse unos criterios
rectos, unos juicios equilibrados
de lo que ve? ¿También en ma­
teria de religión?
Que los padres no se engañen.
Que no renuncien a una de las ta­
reas más sugestivas que un hom­
bre puede acometer en la tierra:
modelar la inteligencia y la v o ­
luntad de un niño o de un ado­
lescente, de modo que sepa juz­
gar y comprender las cosas, que
pasan en el mundo, a la luz de
la fe cristiana.
Proveerles de este discerni­
miento es óptima preparación
para la vida.

Se declara, por ejemplo, una
huelga en la población en que
ustedes viven ; o los periódicos
airean una huelga de la que lo­
do el mundo habla; o más sen­
cillamente el chico está curioso
de saber algo sobre la huelga...
¿Dejará el padre de darle su opi­
nión? Por lo menos dialogará
con él para darle a entender que
la mayoría de los hogares se de­
baten en graves dificultades pa­
ra v iv ir y nivelar gastos. Y que
hay una solución justa.
Habla el Papa, la FAQ o quien
sea sobre el hambre en el mundo.
¿Pueden nuestros padres sosla­
yar esta realidad a sus hijos?
¿Pueden pasar sin apuntar la
solución cristiana? Es que ade­
más, cuando se sabe del hambre
y del subdesarrollo de tantos
pueblos, la vida se ve de oira
manera y los bienes se emplean
mejor.
Y quien dice de estos casos,
dice del problema de la v iv ie n ­
da, de los vuelos espaciales (con

su relación: poder de Dios y po­
der del hombre, pongo por caso)
y de la última canción de moda,
por citar tres casos, que amplían
la gama al límite.

Los padres han de abrir las
ventanas de sus casas para que
sus hijos se asomen al mundo,
para que vean lo que en él pasa.
¿Sólo para eso? No, sería gra­
ve equivocación.
Para enseñarles a juzgar y
comprender: a valorar los acon­
tecimientos; igual los grandes y
espectaculares que los pequeños
y los que interesan al mucha­
cho.
¿Cómo orientarán y cómo en­
señarán a juzgar y comprender?
Para formar una mentalidad cris­
tiana no hay mas que un cami­
no, una norma: Todo aconteci­
miento humano, toda conducta
humana, toda la vida humana
tienen su relación con la fe. Son
buenos o malos; es indiferente,
mejor o peor, según dicte la fe.
Fe Y vida, aunque alguien pre­
tenda separarlas y crea que las
ha separado, no van separadas
porque la fe juzga la bondad de
la vida.

Enseñe, pues, usted a juzgar
de las conductas de los hombres
y de los acontecimientos huma­
nos desde el punto de vísta del
Evangelio y de la interpretación
que da la Iglesia.
Mediante este diálogo conti­
nuo se forma la mentalidad rec­
ta Y cristiana. Mediante el em­
pleo de la fe, como piedra de
toque, se prepara la fe v iv a del
hombre, que será su hijo el día
de mañana.

— 19

DE NUESTR.4S M ISIONES

AGUAS REVUELTAS
EN EL RIO HAN
Varios salesiaiios españoles trabajan en Corea del Sur, de la que varias
voces hemos hablado en nuestras crónicas misioneras. Ahora llega el P a­
dre Molcro, párroco en la capital coreana, y nos ofrece en una crónica dos
de los medios más eficaces que emplea en su parroquia para difundir el
Evangelio.

l tío Han cruza Seúl. Sus
aguas de ordinario tran­
quilas llenan un cauce
amplio. Nunca imaginé
que el Han iba a ser para mí
una piedra de toque con que co­
nocer el espíritu de los jóvenes
católicos de mi parroquia, situa­
da en el barrio de Yong Dunk
Po.
En Corea los misioneros trata­
mos, como en todas partes, creo,
de suscitar de entre nuestros
cristianos nuevos apóstoles. Los
jóvenes obreros, encuadrados en
la Juventud Obrero Católica, se
han revelado en mi parroquia
unos auxiliares formidables pa­
ra la difusión del Reinado de
Dios. A ellos Y a 1°^ dispensa­
rios, que con gran esfuerzo y
con la ayuda generosa de di­
versos países católicos, sostene­
mos les debe la Iglesia Católi­
ca el gran prestigio de bondad
Y humanismo, que adquiere ca­
da día en mayores proporciones
entre los coreanos.
Pero volvamos al río Han.
En 1965, hace dos años, du­
rante el verano, tuvimos unas
grandes inundaciones en toda la

E

20

nación, de modo particular en
Seúl. A causa de las mismas las
familias sin hogar fueron mu­
chas. El Gobierno puso a su dis­
posición todas las escuelas de

la ciudad. Aulas y corredores es­
taban atestadas. Las enfermeras
de los hospitales dependientes
de las facultades de Medicina
Y, de modo particular, los cató-

Uno de los feligreses del P. Molero dedica la mejor de sus sonrisas
a cuantos le ayudan a estudiar a él y a sus amigos.

SEUL.—El dispensario médico constituye uno de los medios más convincentes, a los ojos de los po>
bres, de la bondad de la Iglesia. En el del P. Molero prestan su servicio desinteresado tres médicos,
uno de los cuales es pagano, y varias enfermeras.
líeos Y los protestantes sin dis­
tinción de confesiones trabaja­
ron en atender a cuantos tenían
alguna dolencia.
La Juventud Obrera Católica
inmediatamente hizo acto de
presencia durante todo el tiem­
po, Y no se quedó atrás: en la
parte más afectada de la ciudad,
Yong Dunk Do, donde radica mi
parroquia varios millares de fa­
milias vieron, no volar, sino madar» sus casas por las aguas del
río Han. Este fue el campo don­
de los jóvenes de las cinco pa­
rroquias del distrito actuaron
con un celo que solo su amor
al prójimo puede explicar, fue­
ron visitando a los refugiados,
Y tomando nota de lo más ur­
gente: Casi siempre de icomidai. Inmediatamente llamaron a
los comedores administrados por
la Juventud Obrera Católica en
diversos puntos de la ciudad y
pidieron que mientras durase el
aluvión estuviesen a disposición
de estas pobres gentes. Acudie­

ron asimismo a la Cáritas Am e­
ricana con cuYa aYuda, en me­
nos de 24 horas, organizaron va­
rios comedores ambulantes. Tres
veces al día preparaban la co­
mida los mismos jóvenes, la re­
partían, Y a veces incluso la ser­
vían <a dom icilioi hasta que pa­
sada la tormenta, que duró más
de una semana, pudo organizar­
se todo de una forma más hu­
mana. Por nuestra parte y con
la colaboración de otras perso­
nas buenas, conseguimos jabón
para lodos los damnificados,
pues el agua del cielo era lim­
pia, pero apenas locaba tierra
se convertía en fango. Consegui­
mos también ropa, y madera de
los campamentos americanos pa­
ra rehacer las casas.
La catástrofe sirvió para po­
ner de manifiesto el espíritu de
sacrificio de los jóvenes obreros
Y obreras católicos: durante la
noche unos, y durante el día
otros, tenían su trabajo en fábri­
cas, pero apenas quedaban li­

bres acudían en aYuda de los
necesitados. Puedo testimoniar
que la organización de las Ju­
ventudes Obreras Católicas du­
rante aquellos días funcionó sin
interrupción y
modo admi­
rable.

'C T o r
»S JOVEN;
Gracias a ellos los misioneros
conocen las dificultades existen­
tes entre las masas de obreros y
obreras en las fábricas ^ cómo v i­
ven en los internados o dormi­
torios Y íss trabas, que los due­
ños, protestantes, de las fábri­
cas ponen a los católicos/ cómo
cada semana les obligan a asis­
tir al rito protestante dentro de
la fábrica, etc... Todo lo cual nos
sirve de gran aYuda para luego
orientar a los obreros en la cla­
se de catecismo y
homi­
lía. Gracias a ellos sobre todo
vivimos en contacto con la ma—

21

sa del pueblo, sencillo, de bue­
na voluntad, deseoso del Reino
de Dios, pero atado por sus mu­
chas horas de trabajo. Cuántas
veces, al oír ciertas relaciones
en nuestras reuniones concluía
para mí: «Señor, si estos pobres
coreanos con sus diez o más ho­
ras de trabajo diario no llegan
al cielo, ¿quién irá?...i
Gracias al apostolado de los jó­
venes católicos obreros se nos
abren puertas de fábricas, cuyos
dueños no son protestantes, y a
veces de los mismos protestan­
tes, para, no sólo visitar, sino
enseñar el catecismo, dar confe­
rencias, etc., porque los jefes,
al ver la conducta de los mili­
tantes comprenden que el cato­
licismo es algo grande y útil,
no sólo para la Iglesia, sino tam­
bién para la fábrica.
En una palabra, son ejemplos
vivos del cristianismo en medio
de sus compañeros. Son imanes
que arrastran hacia la Iglesia,
son apóstoles que atraen a Cris­
to nuevos catecúmenos, los cua­
les, recibido el bautismo se con­
vierten en otros tantos militan­
tes, en otros tantos apóstoles. No
S3 olvide que el pueblo corea­
no es eminentemente apóstol y
propagandista de sus doctrinas e
ideas: ellos fueron los primeros
apóstoles de sus connacionales
hace unos 200 años. Los segla­
res de Corea introdujeron el ca­
tolicismo en su patria.
En Corea el amor al estudio
es muy grande: todos los chicos
no sueñan sino en poder ir un
día a estudiar en las mejores uni­
versidades, no sólo de su patria,
sino incluso del extranjero. Pe­
ro, por muchas circunstancias,
sp hace imposible la realización
de diohos sueños. Más aún, hay
familias que apenas si pueden
costear a sus hijos los estudios
elementales. Conocedores de es­
to nuestros jóvenes en noviem­
bre del 1965, obtuvieron las de­
bidas licencias para abrir una es­
cuela nocturna para los que, des­
pués de pasar el día junto a una
máquina o en otros trabajos, de­
seaban aprender algo más. De
este modo surgió la escuela noc­
turna en el mismo comedor de
los obreros. Buscaron profeso­
res, con espíritu de sacrificio;
se prestaron tres universitarios

22

—

paganos, atraídos por el buen es­
píritu de los jóvenes obreros ca­
tólicos, un soldado americano
para enseñar inglés,- y no po­
día faltar un sacerdote para en­
señar la religión. De esta mane­
ra sin decir cosas difíciles, pro­
curé ser sencillo y presentarles
una religión práctica: la mane­
ra de encontrar a Dios, median­
te las criaturas. Los alumnos die­
ron en bautizar la clase de re­
ligión como clase «de filosofía
de la vidai. Y todos asistían a
las dos clases semanales de filo­
sofía con gran placer. Hoy día
muchos de esos jóvenes al en­
contrarme por la calle me salu­
dan y se excusan de que «no
pueden ir a la iglesia porque no
tienen tiempo los domingosi...,
y es una realidad. Y o aprovecho
para preguntarles si rezan, y
ellos como de amigo a amigo me
responden: «Todas las noches
rezo a Dios y a la Santísima V ir­
gen»..., y ¿qué más se va a pe­
dir a un joven obrero que sólo
dispone de dos días libres al
mes?

NUESTROS DISPENSARIOS
En Corea hay muchos hospi­
tales y el Gobierno en varias zo­
nas ha intervenido de forma efi­
caz en favor de la salud públi­
ca. Pero no basta. Tanto los ca­
tólicos, como los protestantes, to­
dos tienen dispensarios en los
que la caridad de Cristo se ha­
ce palpitante. Desde que los salesianos pusimos pie en esta zo­
na de obreros de Yon Dunk Po,
nos preocupó la fundación de
un dispensario para las gentes,
que no pueden pagarse ni si­
quiera la más elemental de las
curas ordinarias. Asi se empezó
a pensar en algo práctico... cuan­
do yo llegué a la parroquia ya
funcionaba un dispensario gra­
tuito... como quiera que ni el pá­
rroco precedente, ni yo, ni nin­
guna de las hermanas de la pa­
rroquia son médicos, tuvimos
que contentarnos con abrir al pú­
blico nuestro dispensario gra­
tuito dos veces a la semana: los
martes y los jueves, días en que
tres médicos se prestaron a visi­
tar gratuitamente a los pobres.
Dos venían el martes y uno el

jueves. Dos monjitas hacían de
enfermeras, ambas con su título,y además varias muchachas de
la Legión de María y algún mu­
chacho de la Juventud obrera
Católica,- este era todo el perso­
nal de nuestro dispensario en la
parroquia de San Juan Bosco.
Empezábamos a repartir los
números a eso de la una y media
y el dispensario se abría a las
dos de la tarde..., y se conti­
nuaba prácticamente, hasta que
todos los enfermos habían pasa­
do por el doctor. Se repartían
medicinas gratis y se hacía la
visita médica gratis. Todos los
que padecían de algo se creían
con suficiente derecho para ser
visitados y curados en cuanto
fuese posible... La remuneración
del doctor y de las enfermeras,
no era otra que la que Jesús
prometió: «Estuve enfermo y me
visitasteis, venid benditos de mi
Padre». Es de notar que uno de
los doctores era pagano, y se
prestaba con igual desinterés
que los dos católicos... en Na­
vidades regalamos algunas cestiías a los doctores, y uno, ya de
mucha edad y delicado de salud,
me dijo: «Padre, yo tenía pensa­
do retirarme este año, pero usted
con este regalo me obliga a con­
tinuar...», y en verdad que ha
continuado, y no sólo, sino que
ha traído más de una vez a su
señora que es enfermera y muy
entendida en medicina...
Hay días en que la afluencia
de enfermos es tal que ni diez
doctores darían abasto. Pero ¿có­
mo se manda a los enfermos a su
casa sin haberlos visitado? Hu­
bo días, el año 1965, que se nos
presentaron unos 300. Ante la
imposibilidad de poder atender
a todos de forma conveniente,
establecimos no aceptar más de
150 al día. Fue peor el remedio:
por la mañana, cuando me le­
vantaba a las cinco para pre­
pararme a la santa misa, me en­
contraba con que ya estaban es­
perando para que les diera nú­
mero de turno para un pariente
enfermo... En vista de ello idea­
mos otro remedio para atender
a los enfermos verdaderamente
pobres y a todos los pobres. Va­
liéndonos de los catequistas y
de miembros de la Legión de Ma­
ría conseguimos los nombres de

los enfermos,- se les entrega­
ban los números, y así, sin de­
sórdenes ni molestias por parte
de nadie se podía atender en lo
humano a nuestros hermanos do­
lientes.
Este último fue un medio que
dio verdaderamente resultado.
Así se sabía ya de antemano el
número de enfermos, su proce­
dencia, etc., y en algunos casos
más urgentes, se les podía bus­
car inmediatamente cama en al­
gún hospital católico o protes­
tante, donde poder recibir una
cura más eficaz...
UN CASO ENTRE MUCHOS
Recuerdo el día que llegó una
mamá con su niña de pocos
años: raquítica, como nadie se
puede imaginar, un montón de
huesos metido en su saco de piel
humana. La monjita, cuando la
vio se le cayó el alma a los
pies. La examinaron..., y el mé­
dico dio como resultado ctuber-

culosis galopante*. La hermana
ante la desolación de la madre
buscó por casa un poco de le­
che y medicinas..., y desde ese
día, todos los días por más de
un año la hermana le iba sumi­
nistrando, según la recibía de
los campos americanos, la leche
para su enfermita... La hizo v i­
sitar también por un médico
americano, que se interesó por
dicho caso y sin más le propor­
cionó regularmente las medici­
nas necesarias para irse curando.
El médico no pudo verla com­
pletamente curada, pero tuvo la
satisfacción de verla en muy
buen estado antes de volverse
a América. La hermana me la
mostraba un año después y con
cierto orgullo me decía: iPadre,
i vea! Esta niña la hemos resuci­
tado nosotros en el dispensario*.
Milagros, no sé si de la medici­
na o de la caridad de las herma­
nas y médicos. Quizás de las
dos cosas juntas.
Y como este, otros muchos
casos que se presentaron duran­

te los años de existencia, que
no son muchos. Esperamos que el
Señor nos ayude para que esta
historia de la caridad se repita
cuantas veces sea necesaria.
no puedo extender­
me más, querido lector,
pero te prometo para el
mes próximo que te con­
taré algo más de lo que hace­
mos los salesianos en Seúl/ de
sus obras de apostolado, de su
caridad con los niños, con los
pobres... Mientras tanto te pido
una oración, un recuerdo ante
el Señor para que siga bendi­
ciendo nuestros pasos y semi­
lla que vamos echando en los
surcos. No nos importa quien re­
cogerá la cosecha/ el Señor se­
ñalará el momento oportuno. Si
además tienes medios y quieres
ayudarnos con tu limosna te la
agradecemos de antemano y te
recordamos que es como un de­
pósito a tu favor que haces al
Banco de Dios.
oy

H

F L O R E C IL L A S M IS IO N E R A S
I ju m e m o r ia
d ei e le fa n te
Un catecúmeno de una misión salesiana de la India
no se decidía nunca a recibir el bautismo. Un día
fue a cazar elefantes; hirió a uno pero el paquider­
mo logró refugiarse en la selva. Poco tiempo des­
pués el elefante se metió en el poblado, registró va­
rias cabañas y cuando localizó la del catecúmeno
la destruyó. Después persiguió al pobre hombre, que
no tuvo más remedio para salvarse que escapar a
toda prisa, con tan mala fortuna que tropezó y cayó
de bruces. A l verse perdido permaneció quieto, sin
respirar; en su interior, mientras tanto, prometía al
Señor que, si salía con vida, se apresuraría a recibir
el bautismo. Llegó junto a él el elefante; con su
trompa iba tanteando y registrando el terreno, re­
volvió las hojas secas, lo localizó; más al verle tan
quieto le debió creer muerto, lo cubrió de hojas y se
mardió. Apenas el catecúmeno se vio a salvo voló
a contarle al misionero lo que le había sucedido y a
pedir que lo bautizara. H e aquí por donde la me­
moria del elefante, que no olvida a quien una vez
le hizo mal, sirvió para refrescar la de un hombre
que acababa de acordarse, de que Dios lo quería
cristiano.

Os mandaremos los chiquillos, limpios
Las Hijas de María Auxiliadora que trabajan en­
tre los Guaicas de San José de Majlcodoteri han
tenido que dejar provisionalmente la misión mientras
les construyen la casa. Entretanto se han recogido
en Mavaca, lugar donde también abundan otras tri­
bus guaicas.
Como no podían olvidar a sus antiguos amigos
fueron un día a visitarlos. Apenas las mujeres y los
niños las vieron se pusieron a llorar desconsolada­
mente; los hombres, a su vez, bajaron la cabeza,
se pusieron de espaldas y les negaron el saludo. A
todas las reflexiones que las hermanas les hacían
unos y otras repetían sin cesar: «S i os vais es que
ya no queréis a nuestros chicos...> y no había modo
de sacarlos de la cantinela.
P or otra parte en Mavaca, donde los indios están
temiendo que se vayan las Hermanas, siempre que
pueden les insinúan con sus modos directos: «N o
volváis a San José; quedaos con nosotros, que os
queremos bien. Os traeremos plátanos, la carne que
c.acemos y los peces del río. Y os enviaremos nues­
tros hijos siempre limpios...»
Ta -c Hermanas con estas demostraciones están en­
tre la espada y la pared. Alguno dirá que la cosa
ea fácil: poner una misión en cada tribu.
Si esa es la solución, pero la tienen en la mano
las jóvenes llamadas por Dios. Si todas secundaran
su vocación habría solución para muchas cosas.

— 23

COOPEBADORES E N ACCION

LA PEREGRINACION A EATIMA
A las once de la mañana la
Virgen Blanca de Fálima, lleva­
da a hombros por cuatro coope­
radores salesianos, salía de su
Santuario Y
dirigía hacia la
columnata de la izquierda del
templo, en donde un millar de
cooperadores la aguardaban, lle­
nando el tiempo de espera con
preces y cánticos.
La presencia de la imagen de
Nuestra Señora de Fátima fue
acogida con vítores y aclama­
ciones entusiastas. Para esa hora
los peregrinos hablan preparado
sus almas con la confesión para
recibir a Jesús sacramentado y
los que no, lo iban haciendo
alli mismo bajo el pórtico.
Aguardaban la llegada de la
Virgen, revestidos de los sagra­
dos ornamentos, el inspector de
Zamora, Don Santiago Ibáñez,
que iba a presidir la concele­
bración/ los inspectores de Bil­
bao, Madrid y Barcelona. Don
Emilio Hernández, Don Emilio
Alonso Y Don Francisco Oliván
respectivamente. Junto con ellos
el Delegado Nacional, y los de­
legados inspectoriales de coope­
radores Don Ignacio Diez, de Za­
mora, Don Nemesio Delgado, de
Bilbao, Don Marcelino Talavera,
de Madrid, Don Esteban Casals,
de Barcelona, Don Jesús Borre­
go, de Sevilla y Don Francisco
Acuñas, de Córdoba.
Apenas instalada la imagen de
la Virgen en su pedestal comen­
zó la Misa Concelebrada, propia
Y especial de Nuestra Señora de

24

—

ser apóstoles seglares del reino
de Dios. De la homilía tan cen­
trada, tan puesta en su lugar y
tono, no cabe mejor elogio hu­
mano que el pronunciado por
un peregrino: «Si hubiera falla­
do esa homilía hubiera faltado
la mitad de la peregrinacióni.
Y llegó la comunión. Las ocho­
cientas formas preparadas y con­
sagradas apenas bastaron, te­
niendo que partirse algunas.
/-i

Fátima. Todos los peregrinos la
siguieron mediante la Guía faci­
litada Y participaron activa y
fervorosamente en las partes va­
riables correspondientes al pue­
blo. La homilía, pronunciada por
el celebrante con unción y en­
tusiasmo situó a los peregrinos
en el lugar y en el significado
intimo de la presencia de los
cooperadores en Fátima: lugares
santificados cincuenta años atrás
por las apariciones de María a
los tres pastorcitos Lucía, Jacin­
ta Y Francisco para entregarles
un mensaje de oración, peniten­
cia Y devoción a su Corazón In­
maculado. Mensaje que han de
hacer suyos cuantos aman a Ma­
ría Auxiliadora, cuantos quieren

Con la misa concelebrada por
los diez sacerdotes terminó el
primero de los actos religiosos
de la peregrinación, que fue se­
guido inmediatamente de la Pro­
cesión. Formados de ocho en
fondo, llevando cada grupo sus
banderas e indicadores, y can­
tando la letrilla de «El trece de
mayoi, con su ritornello «A v e
Marías, los cooperadores desfi­
laron por la amplia explanada
que se extiende delante del San­
tuario.
La imagen de Nuestra Señora
de Fátima, deslumbrante en su
blancura, pese a que el sol no
lució sus mejores rayos, iba a
hombros de cooperadores para
pasar luego a los de los cuatro
Inspectores Provinciales. La pro­
cesión desfiló ante la capilla,
que recuerda el lugar exacto,
donde se hallaba la encina en
una de cuyas ramas posó su pie
la Aparición celeste, y se reco­
gió de nuevo al pórtico donde
se había celebrado la Misa.
El Delegado Nacional, Don Ja-

vier Rubio, habló a los coopera­
doras recordándoles el molivo
principal de la peregrinación:
Conseguir de la Virgen Santí­
sima su apoyo decidido para la
Obra de los Cooperadores que
se está implantando en España.
Rioordó que la peregrinación a
iiOurdes había producido frutos
visibles Y animó a todos a pe­
dirle a María en Fátima que la
Obra siguiera arraigando y cre­
ciendo. Tres frutos particulares,
di]o, esperamos de esta peregripación: que mande delegados
salesianos dolados y enamora­
dos del apostolado de los coope­
radores,- que cuantos el Señor
llama a ser cooperadores con
Don Bosco secunden el llama­
miento Y finalmente que Ella
guíe, inspire y aliente a lodos
los dirigentes de la Tercera Fa­
milia Salesiana para que le se­
pan imprimir el rumbo justo. A l
terminar sus palabras, el mismo
delegado nacional hizo las pe­
ticiones, sumándose todos con
fervor a las misraas.

Sevilla con cooperadores de di­
versos Centros andaluces. Ubeda vino con un autocar. Béjar,
Salamanca, Astudillo y Zamora
enviaron nutrida representación
en sendos autocares.

'.iros; pero muy prudente se con­
tentaba con insistir al delegado
nacional que cantáramos más y
gritáramos menos. Pero ¿quién
para a los españoles tratándose
de la Virgen?

Los peregrinos más numerosos
fueron los de Madrid,- pasaban
de 150.

Escarmentado quizás de otras
peregrinaciones españolas man­
dó asimismo dar el aviso de que
nadie tocara las flores del paso
de la Virgen, cosa que cumplió
a la perfección.

Todos pasaron felizmente la
frontera, habiendo habido un so­
lo caso en que por inadverten­
cia un peregrino no pudo conti­
nuar el viaje.
Los cooperadores que llegaron

Emocionantes fueron los en­
cuentros entre cooperadores de
diversos Centros, que se cono­
cían de anteriores contactos y

El acto estaba terminado. Los
peregrinos cantan el tRendidos
a tus plantas* mientras la Virgen
retorna al Santuario entre un fla­
mear de blancos pañuelos, des­
pedida cordial a una Madre, cu­
ya imagen queda en Fátima, pe­
ro que se vino a España en el
corazón de cada cooperador, de
cada peregrino.
La capilla de las apariciones rodeada de peregrinos.
: uKtOSIDADES
D£ LA PEREGRINACION
£1 número de peregrinos pasó
ligeramente de los mil.
Un vistazo a los indicadores
de los diversos grupos de co­
operadores dio la sensación de
que la mayoría de los Centros
de Cooperadores mandaron re­
presentantes a Fátima. A llí v i­
mos a los del Hogar Calvo So­
telo de La Coruña, a los de V igo
Y Allariz, a los de Asturias, San­
tander Y Bilbao. Barcelona man­
dó un autocar. Zaragoza y La Almunia de Doña Godina otro. A li­
cante estaba representado por
A lcoy y Alicante. Murcia por
Cabezo de Torres. A llí vimos a
los de Pozoblanco, Córdoba y

el sábado, día 29, a tiempo to­
maron parte en la procesión de
las antorchas.
Don Ignacio Diez, el decano
de los delegados inspectoriales,
dirigió los cantos y preces/ lle­
vado de la costumbre española
de vitorear a la Virgen arrancó
numerosos y potentes vivas a la
masa de los cooperadores con
admiración de los numerosos v i­
sitantes, que entraban y salían
de la basílica, los cuales se pa­
raban a averiguar quiénes eran
aquellos peregrinos tan ruidosos
Y con desesperación del Monse­
ñor encargado del Santuario, un
enamorado del silencio y del re­
cogimiento, al que los vivas y
los aplausos le sentaban como

c-n salesianos •¡ue en otro tiem­
po trabajaron en las casas de
donde venían.
Decía una cooperadora, anda­
luza por más señas: »Me vo y
contentísima; he dejado todos
los pecados, me he llenado de
gracia; estoy entusiasmada, quie­
ro más a la Virgen; lo van a
notar*.
Así sea, concluimos nosoírc».
La peregrinación la va a notar
la Tercera Familia, porque fue
mucho lo que en poco tiempo
se amó y se pidió a nuestra Au­
xiliadora, a Nuestra Señora la
del Inmaculado Corazón de Fátima.

— 25

G

R

A

C

I A

S

d e MIaeia AuxiliadoetM
Fui al quirófano por mis pies
Velilla de Valderaduey.— Encontrándome enfer­
mo de cuidado (habla sufrido tres ataques de
próstata en poco más de cinco meses), decidí po­
nerme en manos de un especialista para ser in­
tervenido, dado que el tratamiento no respondía.
En tal situación, aconsejado por mi hijo salesiano en La Coruña, puse toda mi confianza en
María Auxiliadora, encomendándole el éxito de
la operación, doblemente penosa por mi edad
avanzada y la enfermedad en sí. Confesé y co­
mulgué y en brazos de la Virgen de Don Bosco yo
mismo ful al quirófano por mis pies.
La operación resultó un éxito. N o tuve fiebre
ni dolores, ni vómitos. A los tres días ya tomaba
alimentos, caminaba y hacía vida completamente
normal. Como considero que es una gracia extraordlnaria de nuestra buena Madre, lo publico
como prometí y envío una limosna para las obras
salesianns. Feliciano Monje.

Como buena Madre
Hace unos catorce años le prometí a la San­
tísima Virgen que dedicaría mi vida a extender
su devoción y que publicaría esta gracia si, como
buena Madre que es, ayudaba a un ser muy que­
rido para mí a volver sus pasos a la Casa del
Padre, de donde se había alejado hacía ya muchí­
simos años, más de 30, 50 quizás, y más... No
podía ser de otra manera y nunca desconfié de
ello a lo largo de todos estos años; y hoy, con
verdadero agradecimiento, cumplo aquella segun­
da parte de mi promesa, esperando que María
Auxiliadora me ayude a hacerla conocer y amar
más y mejor. Un dovoto de Afario AiwHiadorn.

Cayó rodando treinta metros
Turf». Mi sobrino Roberto de 24 años, mien­
tras practicaba una escalada alpina con un grupo
de amigos tuvo la desgracia de caer rodando
treinta metros, dándose repetidos golpes con la
cabeza en los peñascos sobresalientes de la nieve.
Recogido por sus compañeros y llevado al hos­
pital en una camilla improvisada, tras un dramá­
tico descenso, que duró varias horas, los médicos
diagnosticaron amplia herida y laceración en la
cabeza; fractura de la bóveda craneana extendida
a la base con hundimiento del parietal derecho:
subluxación anterior en la sexta vértebra cervi­

26

cal y múltiples contusiones y abrasiones. Pronós­
tico reservado.
Ante la gravedad del caso inmediatamente me
dirigí a María Auxiliadora y a San Juan Bosco
a fin de que tomaran a mi sobrino bajo su pro­
tección. Tras un no breve período de tiempo fue
declarado fuera de peligro; sin que hubiera ne­
cesidad de intervenirle en el cráneo como el mé­
dico proyectaba. Repetidas pruebas radiológicas
han confirmado la curación. Con vivas y sincera
gratitud doy gracias a María Auxiliadora. Suevia Brighenti.

Saltó el parabrisas
Valencia.— Descendiendo una cuesta y al tomar
una curva, el coche que conducía patinó a causa
de la gravilla, saliéndose de la carretera y dando
una vuelta de campana. Saltó el parabrisas y el
techo y los laterales quedaron en un lastimoso
estado. Mi esposa, mi hijo y yo salimos indemnes
milagrosamente. La invocación de nuestra Madre
María Auxiliadora, hecha en aquellos instantes,
no dudamos fue nuestra salvación. Una vez más
ha estado con nosotros.
Como agradecimiento doy cuenta del hecho y
envío un pequeño donativo. C. L.

Siendo ella la única hija
Afonfoña Alta, Las Palmas.— Estando una sobrinita de mi esposo, una niña de seis años, muy
grave, atacada de meningitis y siendo ella la úni­
ca hija del matrimonio, al ver situación tan grave
recurrí a María Auxiliadora de la que soy gran
devota para que la curara.
A l llevársela de casa a la clínica me llegó la
visita domiciliaria de la Virgen. L e supliqué en­
tonces con toda mi alma que sanara a la niña y
consolara a sus padres. A los catorce días estaba
completamente restablecida sin haber dejado la
enfermedad ese rastro tan temible en los que
padecen meningitis. Agradecida a tan buena Ma­
dre le envío una limosna y le ruego nos escuche
siempre en nuestras plegarias. Afarfa Melión.

La solución no parecía fácil
Sexñlla.— En los últimos días del pasado año
se nos presentó ia necesidad de resolver un asun­
to espinoso, cuya solución no parecía fácil, ni
mucho menos. Durante todo el mes encomenda-

y d e s tt A p ó s to t

S a n tfnan B a sco
mos a María Auxiliadora y a San Juan Bosco que
desaparecieran las diñcultadea que se nos habían
presentado, rogando con todo el fervor y la insis­
tencia de que fuimos capaces que nos proporcio­
nara la solución con el menor daño para todos.
Gracias a Dios hemos sido escuchados por lo que
cumplo la promesa de publicar en el Boletín Salesiano el favor recibido y enviar una limosna
para las obras salesianas. Ai. J. y familia.

El avión se precipitó sobre un prado
JíaíKzos, Brasil.— Doce Hijas de María Auxilia­
dora viajaban de Manaos a Belén a bordo de dos
aviones: tres en un pequeño hidroplano y nueve
de un Douglas del ejército brasileño. Los dos
aviones: saliei'on con un intervalo de cinco mi­
nutos uno del otro. A las dos horas y media de
vuelo el hidroplano amaró en Santarem a mitad
camino entre Manaos y Belem, junto al aero­
puerto.
Las tres hermanas, que viajaban en él, pensa­
ron que el Douglas, mucho más veloz que su
hidroplano, había llegado bastante antes que ellas,
pero oyeron no sin cierta extrañeza que no era

así. Su preocupación creció cuando supieron que
el avión militar había sido visto girar por encima
de la ciudad, pero que no había aterrizado.
A l ñn se presentó de nuevo sobre el aeropuerto,
y comenzó a dar amplios giros hasta que pareció
que se decidía a tomar tierra, cuando de pronto
se precipitó sobre un prado a doscientos metros
de distancia. Por efecto del golpe una rueda saltó
por los aires, la otra se incendió y las llamas se
alzaban hasta el ala del avión; todos temían que
de un momento a otro estallara el motor. No ha­
llándose los bomberos a punto, los empleados del
aeropuerto trataron de conjurar el fuego con sus
extintores, mientras se presentaba el desastre co­
mo algo inevitable. Pero fueron sólo unos pocos
minutos de angustiosa expectación: pronto se
abrió la puertecilla del avión y se echaron fuera
rápidamente unos treinta pasajeros, sanos y sal­
vos.
Presos de la más viva emoción exclamaban:
Nos han salvado la vida las oraciones de las mon­
jas a María Auxiliadora.
La prodigiosa protección de María Auxiliadora
apareció sensible; allí estaban los restos del avión
reducido a un lamentable estado proclamándolo.
(D e una relación.)

Otros corazones agradecidos
Barcelona.— Da gracias a María Auxiliadora y
S. Juan Bosco una cooperadora y antigua alumna
de «Santa Dorotea* por haber curado de una
gravísima lesión a la columna vertebral debida
a un accidente de tráfico. Une a su ferviente gra­
titud una limosna para las Obras Salesianas. N u­
ria Mirabel.
Ibars de Urgél.— Dando gracias a María Auxi­
liadora por un favor recibido y esperando recibir
otro, envío una limosna. M. B.
Muy agradecida le envío una limosna para las
Obras Salesianas y confiando siempre en María
Auxiliadora, mi madrecita del cielo, que nunca
me ha abandonado, ni en los momentos más di­
fíciles de mi vida. Una devota.
León.— Sumamente agradecida a María Auxi­
liadora por un favor recibido envío una limosna
para su culto. J. Z.
Estepa.— Agradecida por un favor de María
Auxiliadora envío una limosna para su culto y
deseo se publique en el Boletín Salesiano. Juana
Rueda Vidales.
Puerto Real.— Da gracias a María Auxiliadora
y a la Sierva de Dios, Doña Dorotea, enviando
una limosna. Lo Familia A lfaro.

Firnas.— Envío una limosna muy agradecida a
María Auxiliadora y a San Juan Bosco para el
templo que se está construyendo en su honor.
U»ia devota.
Sevilla.— Por un favor recibido de María Auxi­
liadora envío una limosna para su culto. Gracias
Madre mía. Un dovoto de M. A.
Muy agradecido a nuestra celestial Madre Ma­
ría Auxiliadora, por los muchos favores recibidos,
tanto para mi, como mi familia, animo a todos
para que en sus apuros se encomienden a Ella en
la seguridad de que serán siempre atendidos.
Mando decir una misa y entrego una limosna
para las Obras Salesianas. F. de V., A. A. y Co­
operador Salesiano.
Zamora.— ^Habiendo recibido un favor de María
Auxiliadora, doy gracias a tan buena Madre y
envío una limosna, animando a todas las perso­
nas que lo necesiten, acudan a Ella con la con­
fianza de ser atendidas. María Antón.
Arbos.— Doy gracias a María Auxiliadora y
Santo Domingo Savio, por el feliz nacimiento de
mi nieta y otros favores recibidos. Mando el dona­
tivo prometido para las Obras Salesianas. M. P. 8.

(Pasa a la pág. 28.)

— 27

Favowes de
SiBnto M íom ingo StMvio
M^rot0icior d e Mas MMadres «/ d e las C u n a s

Temíamos lo peor
Morón de la Fro7itera.— Hace unos seis meses
enfermó mi hermano, y trascurría el tiempo sin
que ninguno de ios médicos visitados lograra ali­
viarle; y todos temíamos lo peor, pues ya era tal
su debilidad que no se sostenía siquiera. En estas
circunstancias acudimos al Colegio Salesiano, don­
de nos proporcionaron una carpetita con las es­
tampas de María Auxiliadora y de Santo Domin­
go Savio, que pusimos inmediatamente bajo la al­
mohada del enfermo, pidiendo con mucha fe su
curación, que no se hizo esperar, porque desde
aquel día empezó a mejorar; y hoy está recupe­
rado y robusto que nos parece mentira lo que se
ha atravesado con su enfermedad. Por todo lo
cual nunca olvidaremos esta gracia de María
Auxiliadora y de Santo Domingo Savio. Ana Se­
rradlo.

Feliz acontecimiento
Puerto Peni.— Por haber recibido felizmente
contra todo pronóstico una hermosa niña después
do una novena a María Auxiliadora y a Santo
Domingo Savio manda una limosna para su culto,
impone a la niña el nombre de María Auxiliadora

(Viene de pág. 27)
Córdoba.— Agradecido por un favor recibido de
la Santísima Virgen envío una limosna y deseo
se publique en el Boletín Salesiano. Agustín Bermúdez Moreno.
Sevilla.— En ocasión de una enfermedad grave,
de mi hermano político, desahuciado por el mé­
dico, me encomendé a la Santísima Virgen Auxi­
liadora. Habiéndome concedido Ella la gracia,
pues al día siguiente empezó a mejorar y encon­
trándose actualmente fuera de peligro, cumplo
mi promesa do enviar una limosna. Juan Gtiirmdn
Diez.
Puerto Real.— Dolores Domíuc/Mec de Caamario,
da gracias a María Auxiliadora y envía una li­
mosna para su culto por haber hecho que su hern\ano saliera bien de una difícil operación y por­
que. después de un año aproximadamente de ella,
ha podido reanudar sus servicios regulares de
correos.
Puerto Peal.— El niño Rafael Rspinosa. agra­
dece a María Auxiliadora el haberle librado de

28

—

y desea se publique la gracia en el Boletín Sale­
siano para honra de Ella y del santo protector de
las madres y de las cunas. N . N.
Doy gracias a Santo Domingo Savio por una
gracia concedida por su intercesión y cumplo lo
prometido enviando una limosna. Caridad Quesada.

A l cabo de trece años
Catania.— Habían pasado trece años desde
nuestra boda. M i esposo y yo íbamos poco a poco
acostumbrándonos a la idea de que en nuestro
hogar faltara la alegría de las risas de los hijos,
puesto que tres veces nuestras ilusiones habían
quedado tronchadas. Tuve la fortuna de encon­
trarme con una amiga de la infancia, hija de
María Auxiliadora, la cual me habló de muchas
gracias que Santo Domingo Savio hace a las
madres en este sentido y me exhortó a que me
encomendara a él y me pusiera su escapulario.
Dos años pasé pidiendo y suplicando al Santo
nos concediera el hijo que tanto anhelábamos.
La larga espera fue premiada con el regalo de
un hijo al que hemos puesto su nombre. El pe­
queño crece muy sano. Que el querido Santo
vele siempre sobre él y toda nuestra familia.
Ignacio Agata Call'i.

una gravísima enfermedad, manda decirle una
misa en la cual comulga y entrega una limosna
para su culto, y Obras Salesianas.
Puerto Real.— Por haber arrancado de la muer­
te a una hija suya de dos años, después de ha­
berla invocado en aquel angustioso instante, al
ver su imagen en el Almanaque, que como archicofrade recibe todos los años, le da las gracias
y cnti'ega una limosna para las Obras Salesianas.
Fratjcwco Pulido.

Dan gracias a María Auxiliadora y
a San Juan Sosco y envían una limosna
D. Ramón, de Madrid; Una agradecida, de Ta­
rragona: María Forteza, de Alcudia; Díia devota,
de Madrid; N’a íit'idad Rodríguez, de ViUanueva de
Córdoba: Atiíonia Jover, de Alicante; Leonor Sán­
chez, de Alicante; F. C. D., de Sevilla: Angelito
üforíín, de Venta de Baños; Herminia Romero, de
Orense; Vicenta Jiménez, de Madrid; Familia Mu«oyerro, de Madrid; Ayusíina Olira, de Zuazo de
Cuartango; N . N ., de Antequera.

Favores y Gracias de Doña Dorotea de Chopitea
C o o p e m tlo p a

A l tercer día le v o lv ió la paz
Puerto Real.— A causa de cáncer padecía mi
marido unos dolores tan horrorosos que temía
llegara a desesperarse. En tal situación, una ami­
ga mía que le visitaba nos dijo que por qué no le
rezábamos a la Sierva de Dios Doña Dorotea de
Chopitea. Comenzamos una novena y al tercer
día le vuelve la paz del alma y se le quitan los
dolores, como se lo veníamos pidiendo. E l mismo
me dijo: «H e pedido al Señor que me recoja ahora
que estoy tranquilo»... y pidiéndome perdón mu­
chas veces por las molestias que me había pro­
porcionado en la enfermedad, después de recibir
con gran devoción los Santos Sacramentos pláci­
damente se durmió en el Señor.
Agradecida por ello envío una limosna y deseo
se publique en el Boletín Salesiano. N . N .

Buenas notas
Alicante.— Varias veces he leído el Boletín In­
formativo, pero no me había llamado mucho la
atención hasta que un día me di cuenta de que
Doña Dorotea ayudaba a muchas personas a re­
solver toda clase de problemas. El mío es que no
soy muy inteligente y me cuesta mucho sacar

s n le s in n a
adelante mis estudios. P or este motivo, y después
de los Ejercicios Espirituales, prometí a Doña
Dorotea que si me ayudaba en estos meses, y
aprobaba el curso y la reválida este año, le en­
viaría una limosna para su beatificación. Efecti­
vamente: este mes he tenido buenas notas y he
adelantado mucho, por lo que cumplo mi prome­
tida limosna. A. C.
Posadas.— Agradecida a Doña Dorotea por un
favor recibido le envío una limosna para su causa
de beatificación. Antonia Teruel.
Madrid.— Para la beatificación de Doña Doro­
tea, le envío una limosna, ya que le debo muchos
favores. Una congregante de María Auxiliadora.
Madrid.— Da gracias a Doña Dorotea y envía
un donativo para su beatificación. P ila r C.
Antequera.— Muy agradecido a Doña Dorotea
por los favores que me ha concedido entrego una
limosna. Pedro Cámara.
Fraga.— Estando muy apurada por haber per­
dido algo que me interesaba mucho hallar enco­
mendé el asunto a la Sierva de Dios, Doña Do­
rotea. Tres días después apareció lo que buscaba
evitándome gastos mayores. Maria José Frellan.
Salamanca.— Doy gracias a Doña Dorotea de
Chopitea y le envío un donativo. N . N .

Favores del siervo de Dios don Felipe Rinaidi
Curado de conmoción cerebral
Turin.— E i 26 de marzo, por la tarde, mi ma­
rido cayó por tierra privado de sentidos. Llamado
con toda urgencia el médico diagnosticó conmo­
ción cerebral y estado gravísimo.
Lo llevé inmediatamente al puesto de socorro
más próximo y los doctores confirmaron la gra­
vedad del enfermo. El capellán le dio la absolu­

ción. A l registrarle la cartera, para mostrar sus
documentos, le hallé una estampa del Siervo de
Dios, Don Felipe Rinaidi, y se lo encomendé en
mi angustia. A mi plegaria se unieron, avisadas,
las Hijas de María Auxiliadora y las niñas del
Oratorio. Cual no sería el estupor de los doctores
al ver que de pronto mi marido recobra los sen­
tidos y se siente como si nada le hubiese suce­
dido. A los pocos días mi marido y yo fuimos a
comulgar en acción de gracias. Francisca Bollati.

Royuemos por nuestros difuntos
Alma verdaderamenfe angelical y sencilla se
distinguió por su espíritu de trabajo, piedad, y
alegría, virtudes que hacían esperar de él un buen
salesiano.
Recibió la Unción de los Enfermos con gran fer­
vor y espíritu de fe teniendo la dicha de hacer la
profesión religiosa para morir salesiano el día 3
de marzo.
Pocos días antes tuvo el consuelo de tener a su

lado a su buena madre y hermanos venidos de
Larumbe (Navarra) donde forman una ejemplar
familia cristiana.
Luis María Andaeza Galdaraz, ^ en Barcelona
el 8 de marzo. Era novicio coadjutor salesiano.
Pos éste y por todos los salesianos. Hijas de Ma­
ría Auxiliadora y cooperadores difuntos aplique­
mos sufragios e indulgencias.

— 29

^ecas fuito ásostenimiento ^
formacidn (kOocaciones
«El mejoi premio que Dios concede a una familia es un hijo sacerdote.» (Don Bosco)
IN SPE C TO R IA DE B AR C E LO N A

P. Provincial: P.* San Juan Bosco, 74 - Barcelona-17
BECAS COMPLETAS
Bocn -t.Marla Auxiliadora». Total: 100.000 pls.
Beca rDon Boaco» Tolol: 30.000 pls.
Bocn «José Moretó». T olal; 32.000 pts.
BECAS EN FORMACION
Beca «Don Digno Uterlño». 2.B o.; 46.000 pts. T olal: 90.000.
Beca «Santos Antonio y Sebastián». Total: 10.000 pts.
Ceca «José María Valles Plá». Total: 6.000 pts.
Beca «Claudio García». l.B e .: 26.000 pesetas.
Beca «María Auxiliadora». R. Vergés Llardent. T .: 30.000.
Beca «Ntra. Sra. de Montserrat». Total; 60.000 pts.
Beca «Dofta Bibiana Sodas». Total: 17.000 pesetas.
Beca «Don Felipe Alcántara». Sarrlá. Total: 3.000 pts.
Beca «María Auxiliadora». Tarrasa. Total: 16.000 pts.
Beca «Don Florencio Sánchez». Total: 13.000 pts.
Beca perpetua «D .l Clementlna Vallmitjana Cros de Baró».
Total: 20.000 pts.
Beca «Sr. V .» Total: 8.000 pts.
Beca perpetua «María Casacuberta de Masó». Total: 5.000.
Beca «Santo Domingo Savlo». Total: 16.000 pts.
Beca «Estanislao Muzás». Total: 16.000 pts.
Beca «San José». Total: 6.000 pts.
Beca «Dofta Dorotea». Rocafort. Total: 27.000 pts.
Beca «Sonta Emilia». Total: 26.000 pts.
Beca «María Auxiliadora». Sarrlá. Total: 6.000 pts.
Beca «Don José Recasens». Total: 4.199.60 pts.
Beca «Dolores Casacuberta». Total; 10.000 pts.
Beca «María A. Porta de Durán». Total; 8.000 pts.
Beca «Sr. Martín Golcoechea». Colegio Sarrlá. Total: 26.000.
Beca «P . Vlftas». Archlcofradía de Sarrlá. Total: 6.000 pts.
Beca perpetua «J. M.». 1.a e .; 5.000 pts.

IN S PE C T O R IA DE B ILB AO

P. Provincial: Escuelas Salesianas - Deusto-Bübao
Beca «Mamá Margarita». L. Cañada. Pamplona. N. c.; 260
pesetas. Total: 16.250 pts.
Beca <D. Pedro Ollvazzo». Total: 30.000 pts.
Bocn <D. Cirilo Sagastagoltla», promovida por los AA. AA.
de Baracaldo. Total: 15.000 pts.
Beca «D. José Díaz de Corlo Valle y Petra Gastón Ventosa».
Total; 4.000 pts.
Bien «Santisimn Trinidad». Total: 27.000 pts.
Beca «Carmina Gutiérrez». Total: 29.000 pts.
Beca «Agustina Alonso». Total: 28.000 pts.
Beca «Piedad Ramos». Total: 28.000 pts.
Beca «Natividad Postigo*. Total: 29.000 pts.
Beca «Rosario Gutiérrez». Total; 29.000 pts.
Beca «Padullo Gutiérrez*. Total: 28.000 pts.
llera «Fernando y Rutina*. Total: 28.000 pts.
Beca perpetua «San Cosme y Sta. Magdalena». T . : 76.000 pts.
Beca «D e las Srtas. do Felipe». 1.6 e.: 26.000 pts.
Beca «María Auxiliadora». 2.1 Arch. Baracaldo. T . : 13.000.
Beca «F . Canales». Total: 14.000 pts.
Beca «Matilde Peisyo». Pamplona. Total: 6.000 pts.
Beca «Don Ramón Zabalo». Baracaldo. M. Fernández. T o­
tal: 26.000 pts.
Beca «Seftor Justi». Deusto (Colegio). Total: 19.600 pts.
Beca «Virgen del Castillo». El Royo. Total: 9.300 pts.
Beca «I. Concepción», Bilbao. J. L. M. Total: 6.600 pts.
Beca perpetua «San Martin». Total: Sl.OOO pts.
Beca «María Auxiliadora». Zuazo. Total: 6.60U pts.
Boca «Don Bosco». Ciudad I.>aboral. Pasajes. Total: 6.720.
Beca «Francisco T ierra» Burcefta. Total; 8.600 pts.
Beca «Sagrada Familia». San Sebastián. Total: 10.000 pts.
Beca «San Juan Bosco». Santander. Total: 5.000 pts.
Beca c ^ n to Domingo Savlo». Santander. Total: 19.500 pts.
Beca «José Puertas». Deusto. Total: 10.000 pts.
Beca «Señores de Udaetxe». Bilbao. Total: 34.000 pts.
Beca «María Auxiliadora». D. H. Q. R. Total: X.OOO pts.
Beca «San Andrés». Burgos. Total: 1.S37.S6 pts.
Beca «Nuestros Mártires». Zuaio. Total; 18.609 pts.

30

Beca «María Auxiliadora» I I. Total: 20.000 pts.
Beca «Alfonso Gómez Pineda». Pamplona. Total; 5.000 pts.
Beca «S. José Obrero». (Industriales-Santander). T .: 10.000.
Beca «María Auxiliadora». (Arch. Santander). T .: 6.000 pts.
Beca San Paulino». Baracaldo. Total: 28.0()0 pts.
Beca cD. E. Capranl». Baracaldo. Total: 6.000 pts.
Beca «D. J. Santos». Deusto. Total: 17.000 pts.
Beca «Jesús Aznar». Promovido por Doña M a^a Salmerón
Vda. de Aznar. Total: 7.000 pts.

IN S PE C T O R IA DE CORDOBA

P. Provincial: Calle María Auxiliadora, 14 - Córdoba
BECAS E N FORMACION
Beca «M.6 Auxiliadora». Cooperadores Salesianos. Anteque­
ra. N. e.: 3.000 pts. Total: 5.500 pts.
Beca «Fam ilia Ansorena». Total: 15.000 pts.
Beca «Fam ilia Hoyos González». Total: 71.833 pte.
Beca «Fam ilia Espejo (^m ez». Montilla. Total: 12.000 pts.
Beca «Domingo Savio». Cías. Religiosas del Colegio Santa
Teresa. Total: 4.700 pts.
Beca «Don Salvador Rosés». Ronda. Total: 99.000 pts.
Beca «Fam ilia Muñoz». Total; 18.000 pts.
Beca «María Auxiliadora». Antonio Royán. T ota l: 26.200 pts.
Beca «Fam ilia E. Chacón de Hernández». Total: S.9()0 pts.
Beca «Fam ilia Naranjo». Total: 2.400 pts.
Beca «Fam ilia Torres». Total: 2.600 pts.
Beca «Fam ilia Lago». Total: 4.100 pts.
Beca «Fam ilia Atilio L ey». Total: 1.000 pts.
Beca «María Auxiliadora». Familia Gómez Briasco. T . ; 34.000
Beca perpetua «T roya Gozálvez». Ubeda. Total; 24.000 pts.
Beca «Juan X X II I» . Montilla. Total: 13.350 pts.
Beca «Ntra. Sra. de Consolación». Torredonjimeno. T . : 20.000.
Beca «Fam ilia Franchis». Las Palmas. 1.6 e.: 600 pts.
Beca «Virgen del Pino». Las Palmas. 1.6 e.: 1.000 pts.
Beca «D. Bernardo López Baena». Córdoba. T .: 12.000 pts.
Beca «Baldomcro Pagán». Total: 16.000 pts.
Beca «Ntra. Sra. del Carmen». Pozoblanco. Total: 26.000 pts.
Beca «Pura Bermúdez». Málaga. Total: 22.600 pts.
Beca «Antonio Elspinosa». Santa Crux. Total: 32.000 pts.
Beca «Santa Isabel». Granada. Total: 34.000 pts.
Beca «San Jvuui Bosco». Lopera. Total: 16.000 pts.
Beca «Fam ilia León de Navarro». Total: 2.300 pts.
Beca «Fam ilia Lara Uadln». Total: 4.3()0 pts.
Beca «Santo Domingo Savlo». (Cía. de la Juventud Salealona). Leis Palmas. Total: 16.6(X) pts.
Beca «Sto. Dgo. Savlo». Cías. Religiosas. Ronda. T .: 18.000.
Beca «San José y Ntra. Sra. de Montserrat». Granada.
Total: 18.200 pts.
Beca «Utrera Dehervea». Córdoba. Total: 10.000 pts.
Beca «Cías. Juventud Salesiana». L a Orotava. Total: 20.000.
Beca «Escuelas Externas». Montilla. Total: 3.000 pts.
Beca «Nicolás Rodríguez».
Palmas. Total: 2.100 pts.
Beca «San José». Pozoblanco. Total: 4.000 pts.
Beca «Santa Teresa». Granada. Total: 16.160 pts.
Beca «Moisés Redondo Tirado». Pozoblanco. Promovida por
D. José Fernández. Total: 40.000 pts.
Beca «San Rafael». Córdoba. Total: 17.737 pts.
Beca «San Miguel». Montilla. Total: 21.300 pts.
Beca «Manuel Hernández». Las Palmas. Total: 6.000 pts.
Beca «J. M. Manfredini». Granada. Total; 67.000 pts.
Beca «P . Santa Catalina» 2.6 Las Palmas. Total: 1.0(X) pts.
Beca «San Juan Bautista». Córdoba. Total; 13.000 pts.
Beca «Ntra. Sra. de Luna». Pozoblanco. Total; 26.000 pts.
Beca «Santo Domingo Savio». Cías. Tenerife. T . : 19.000 pts.
Beca «Marta Auxiliadora». Málaga. Total: 4.300 pts.
Beca «María Auxiliadora». Pozoblanco. Total: 50.000 ptsBeca cD. Sebastián María Pastor» Total: 4.015 pts.
Beca «Rafael Moure Ríos». Córdoba. Total: 8.750 pts.
Beca «D. Vicente Reyes». Córdoba. Total: 2.200 pts.
Beca «N . Rodríguez». Las Palmas. Total; 2.100 pts.
Beca «Ntra. Sra, del Pino». (P or las Compañías de la Ju­
ventud Salesiana). Teror. Total: 36.000 pts.
Beca «Sra. F. Peña». Málaga. Total: 12.000 ptas.
Beca «M ontilla». Montilla. Total: 25.000 ptas.
Beca «Fam ilia Vargas». Ronda. Total: 10.000 ptas.

Beca
Beca
Beca
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Beca

«Doña lfarla>. Las Palmas. Total: S.700 ptas.
cSagrado Corazón». Las Palmas. Total: IS.OOO ptas.
«Manuel Moreno». Las Palmas. Total: 1.500 ptas.
«Santa Cniz de Tenerife». (Casa). Total: 6.800 pts.
«Mártires de Pozoblanco». Total: 8.725 ptas.
«María Auxiliadora». Cooperador. Málaga. T .; 8.000 p.
«Domingo Savlo». Las Palmas. Total: 22.500 ptas.
«Matrimonio CLM-SCB». Málaga. Total: 46.060 ptas.

EVSPECTOKIA DE M AD R ID - «D E S A M A »
P. Provincial: Paseo del General Primo de Rivera, 25
Madrid (5) ■ Telél. 227 56 91
Recordamos a todos los participantes en BB8AMA las
tres categorías de Becas Completas:
— Beca O R D IN A R IA : SO.OOO pesetas.
— Beca M A Y O R : 100.000 pesetas.
— Beca P E R P E T U A : tSO.OOO pesetas.
Siempre vueden enviar donativos para ir completando
loe Becas *BE8AMA>.

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«Bodas de Oro». Ai. Guadaira. Total: 60.000 ptas.
«Cor. de Jesús». H. Dña. Salvadora García. T : 10.000.
«V . Esperanza». Sevilla. Total: 1.750 pesetas.
«D. Juan Torres». Jerez. Total: 20.0()0 ptas.
«Sagrado Corazón». Coop. Utrera. Total: 63.000 ptas.
«B . Bomero». S. J. del Valle. Total: 6.193 ptas.
«Don Andrés Yun». Algeciras. Total: 5.(X)0 ptas.
c F . Molpeceres». Carmona. Total: 13.100 ptas.
«C. I. Cooperadores». Total: 15.000 ptas.
«C. S. San Pedro». Sevilla. Total: 1.000 ptas.
«Doña Josefa Rodrigues». Total: 3.000 ptas.
«1. Concepción». La Línea. Total: 500 ptas.
«Maestro Pagés». Cádiz. Total: 13.395 ptas.
«San Juan Bosco». (3.9). R. U. S. Total: 5.000 ptas.
«F . Alcalá Viva». Morón. Total: 10.000 ptas.
«San Andrés». P. del Condado. Total: 6.000 ptas.
«P . Agustín Nofre». Utrera. Total: 26.810 ptas.
«San Juan Bosco». Cáceres. Total: 16.760 ptas.
«D. José Canal». Sevilla. Total: S1.5(X} ptas.

IN S PE C T O R IA DE V A L E N C IA
P. Pro\incíal: Calle de Sagunto, 212 > Valencia

BECAS E N FORMACION

BECAS E N FORMACION

Beca «Besama» I I. Donativos: A. J. Amador, 4.000 pts. T o­
tal: 13.415 pts.
Beca Mayor «Nuestros Mártires». General López de Letona.
N. e.: 5.000 pts. Total: 65.000 pts.
Beca «M. A. L .» N. e .: 1.000 pts. Total: 15.000 pts.
Beca «D. Higinio Arce», para Coadjutor Salesiano. Total:
25.000 pts.
Beca «Archicofradia M.9 Auxiliadora». P.S Extremadura.
Total: 6.000 pts.
Beca «San Francisco de Sales». Estrecho. Total: 9.645 pts.
Beca «Casimiro Ramiro». A. A. Atocha. Total: 28.000 pts.
Beca «E l Coadjutor Salesiano». Cías. Paloma. Total: 30.000.
Beca «Padre Esteban». AA. AA. Paloma. Total: 9.800 pts.
Beca «María Auxiliadora» n . Atocha. Total: 20.975 pts.
Beca «Vda. Clasanovas». Total: 5.000 pts.
Beca «Sánchez-Blanco» I I. Total: 6.000 pts.
Beca «Fam ilia Mesonero Rodríguez». Total: 8.000 pts.
Beca «D. F élix González». D.8 Isabel L . de Pardo. T .: 17.000.
Beca «Doña Mercedes Cruzado». Total: 9.000 pts.
Beca «Doña Dorotea». Madrid-Don Bosco. Total: 20.000 pts.
Beca «F . de B .» Béjar. Total: 25.000 pts.
Beca «Josefa A. Roldán y Familia». Total: 30.000 pts.
Beca «Viuda de Pujadas». Total: 12.000 pts.
Beca «Centro Juvenil». P.9 Extremadura. Total: 13.600 pts.
Beca «Ntra. Sra. de las Angustias». Arévalo. T . : 26.500 pts.
Beca Mayor «Sta. Teresa y S. Vicente». Total: 98.000 pts.
Beca «de la Virgen del Carmen y de las Animas del Pur­
gatorio». Total: 40.000 pts.
Beca «Ntra. Sra. del Carmen y S. Lucas». Total: 24.000 pts.
Beca «Fam ilia de D. Antonio Miranda. Salesiano». T . : 10.000.
Beca «Doña Carmen Olalla». Total: 35.000 pts.
Beca «Doña Consuelo Olalla Ramos». Total: 40.000 pts.
Beca «Manuel Nicolás». Total: 10.000 pts.
Beca «Don Juan». I I. Total; 5.000 pts.
Beca «P ío X II ». Víllaamil. Total: 20.754.85 ptas.
Beca «María Auxiliadora». Guadalajara. Total: 7.500 pts.
Beca «San Estanislao». Familia López Alvarez. Salamanca.
Total: 16.000 pesetas.
Beca «Laura Vicuña». Teologado. Total: 23.100 ptas.
Beca «Santo Domingo Savio». (San Blas). Total: 18.306 pts.
Beca «María Auxiliadora». Salamanca. T o ta l: 6.300 ptas.
Beca «Escuela de Automovilismo». T ota l: 6.000 ptas.

Beca perpetua «Juan Manuel»., por D.8 Carmen Gómez de
Tortosa. Alcoy. 1.8 e.: 50.000 pts.
Beca «Niño Jesús del Milagro». Total: 30.000 pts.
Beca «Rvdo. D. Mariano Aisa». Burriana. Total; 17.050 pts.
Beca «San Bernardo». Villena. Total: 22.000 pts.
Beca «Circulo D._ Savio». Valencia. Total: 27.200 pts.
Beca «Nuestra Señora del Pilar». Zaragoza. Total: 33.000 pts.
Beca «Antonia Cabot». Albacete. Total: 13.000 pts.
Beca «Jesús Mendívil». Valencia. Total: 25.000 pts.
Boca «Don Luis Berenguer». Alicante. Total: 20.000 pts.
Beca «P . Tarín». <3odelleta. Total: 3.000 pts.
Beca «Trabajo y Honradez». Valencia. Total: 24.000 pts.
Beca «San Vicente». Valencia. Total: 54.000 pts.
Beca «Cooperadores de Valencia». Total: 7.500 ptas.
Beca «Archicofrade M. A. 2.8». Primera entrega 4.000 ptas.
Beca «Francisco Serrats». Valencia. Total: 8.000 ptas.
Beca «Ramón Guerrero». Albacete. Total: 12.550 ptas.
Beca «Azul y Rosa». Valencia. Total: 20.000 ptas.
Beca «Virgen de Luz». Cuenca. Total: 13.725 ptas.
Beca «San Agustín». Alcoy. Total: 18.000 ptas.
Beca «Colegio Salesiano». Valencia. Total: 83.500 ptas.
Beca «Perpetuo Socorro». Valencia. Total: 6.000 pías.
Beca «San José». Alicante. Total: 10.000 ptas.
Beca «Virgen del Pilar». Alicante. Total: 6.000 pesetas.
Beca «C o le ro Salesiano Burriana». Total; 11.000 ptas.
Beca «D. José Calassmz». Total: 14.026 ptas.
Beca «Antiguos Alumnos». Valencia. Total: 2.050 pías.
Beca «Colegio San Juan Bosco». Valencia. Total; 6.000 pts.

IN SPE C TO R IA DE S E V IL L A - «B E S A S E »
P. Provincial: Calle María Auxiliadora, 18 - Sevilla
Teléfs. 35 04 86 ■ 35 01 00
Beca
Beca
Beca
Bc^ca
Beca
Beco
Beca
Beca
Beca
Beca
Beca
Beca
Beca
Beca
Beca
Beca
Beca

BECAS E N FORM AinON
«M.8 Auxiliadora». Sevilla por A. R. T. 1.8 e.: 2.000.
«Virgen Victoria». Mérida. N. e.: 3.000 pts. T .: 55.500.
«Stella Maris». Huelva. Total: 24.000 pts.
«Clemente Guede». (^ d iz. Total: 6.775 pts.
«Santo Domingo Savio». Ecija. Total: 23.000 pts.
«Colegio Salesiano». Sevilla. P or A. R . 1.000 pts.
«Ntra. Sra. del Rosario». Rota. Total: 14.000 pts.
«Rvdo. D. F. Javier Montero». Total; 7.5<X) ptas.
«N tra. Sra. del Sagrado Corazón». Morón. T .: 16.000
«Santiago Apóstol». Cádiz. Total: 60.000 ptas.
«Corpus Christi». Quintana. Sevilla. Total: 8.230 pts.
«María Auxiliadora». Á w u de Guadsúra. T ota l: 14.850.
«María Auxiliadora». Puerto Iteal. Total: 14.000 pts.
«Don Florencio Sánchez». S^.-lSrin. Total: 10.000 pts.
«D<Kt LÁis Hernández». Sevilla Trinidad. Total: 10.000.
«Don Pablo Kontaldo». Sevilla Trinidad. Total: 10.000.
«Rvdo. Tomás González». Sevilla. Triana. T . : 25.000.

IN S PE C TO R IA DE ZAM ORA
P. Provincial: Universidad Labora] - Zamora
BECAS EN FORMACION
Beca «José Sabaté». Vigo. Total: 31.000 pts.
Beca «María Auxiliadora». Naranco-Oviedo. 1.8 e .: 4.934 i<ts.
Beca «D. Emilio Montero». Orense. Total: 18.600 pts.
Beca «Virgen de Villanueva». Allariz. Total: 6.475 pts.
Beca «D. José Saburido». Orense. Total: 22.000 pts.
Beca «San Benito» Allariz. Total: 28.000 ptas.
Beca «D . Pedro Olivazzo». Astudillo. Total; 11.676 ptas.
Beca «Don Ernesto Armelles». L a Coruña. (Colegio). Tolal:
33.750 pesetas.
Beca «P . Miguel Salgado». Vigo. S. Matías. T ota l: 47.860 pts
Beca «María Auxiliadora». Celanova. Total; 12.000 ptas.
Beca «María Auxiliadora». Are. Zamora. Total; 19.500 pts.
Beca «P . Cirilo Segastagoitla». León. Total: 36.100 ptas.
Beca «D. Tomás Bussons». Vigo. S. Matías. T ota l: 20.000 p.
Beca «M.S Auxiliadora». Vigo. S. Matías. Total: 32.000 pts.
Beca «San Cristóbal». V igo S. Matías. Total: 8.000 ptas.
Beca «Doña Lucia Beebade». Chambados. Total: 1 4 .^ pts.
Beca «San José». Vigo. S. Matías. Total: 58.000 ptas.
Beca «P . Fila Arce». (Bodas de P iala). Masaveu. T .: 32.000.
Beca «Sto. Domingo Savio». Vigo. S. Matías. Total: 10.500
Beca «Cooperadores Cánido». Vigo. 8. Matías. T . : 9.000 pts.
Beca «San Juan Bosco». Vigo. Hogar. Total: 7.000 ptas.
Beca «(Jeferíno Namunciirá». Vigo. Hogar. Total: 8.000 pts.
Beca «María Auxiliadora». Vigo. Hogar, T ota l: 5.000 ptas.
Beca «Sto. Domingo Savio». Cambados. Total: 14.500 ptas.
Beca «Ntra. Sra. de Covadonga». Tudela Veguín. T . : 13.246.
Beca «San José». (Jompafilas. Zamora. Total. 11.000 ptas.
Beca «José Irísarri». Estudiantes. Zamora. T .: 7.2S0 ptas.
Beca «Círculo Sto. Domingo Savio». Zamora. T .: 14.000 pts.
Beca «S. León l^ g n o ». Zamora. Total: 26.000 ptas.
Beca «Sto. Domingo Savio». Avilés. Total: 4.600 pesetas.
Beca «Domingo Savio». León. T ota l: 13.3^ pesetas.

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vil. - INSTITUTO SECULAR «VOLUNTARIAS DE DON BOSCO»
He aquí finalmente cuanto el «Decreto Conciliar
sobre la adecuada renovación de la vida religiosa»
dice de los Institutos Seculares: Art. 11.— «Los
Institutos seculares, aunque no son institutos re­
ligiosos, llevan, sin embargo, consigo la profesión
verdadera y completa, en el siglo, de los consejos
evangélicos, reconocida por la Iglesia. Esta pro­
fesión confiere una consagración a los hombres
y mujeres, laicos y clérigos, que viven en el mun­
do. Por lo tanto, tiendan ellos principalmente a
la total dedicación de si mismos a Dios por la
caridad perfecta, y los institutos mantengan su
carácter propio y peculiar, es decir, secular, a fin
de que puedan cumplir eficazmente y por donde­
quiera el apostolado en el mundo y como desde
el mundo, para el que nacieron».
«Sepan, no obstante, muy bien que no pueden
cumplir tan alta misión si sus miembros no se
forman cuidadosamente en las cosas humanas
y divinas, de suerte que sean realmente fermento
del mundo para robustecimiento e incremento del
cuerpo de Cristo, cuiden por ende, seriamente los
directores de que se dé instrucción señaladamente
espiritual a sus miembros y de que se promueva
su formación ulterior.»
^^La vocación a los Institutos Seculares — escri­
be el Cardenal Larraona— es una gracia especial,
la cual, sin embargo, pide cimientos fuertes y
profundos, almas varoniles, decididas, incondicio­
nales.»
El Instituto de las V. D. B. quiere precisamente
salir al encuentro de sus aspirantes ofreciéndoles
un altísimo ideal de santidad, un peculiar espíritu
tomado de San Juan Bosco, un campo dilatado y
un estilo de apostolado, capaces para apagar aún
las más acuciantes exigencias de las almas más
generosas.

Así, pues, para quién, después de mucha ora­
ción y refiexión, desee pertenecer a este Instituto,
sírvale de aliciente y consuelo la autorizada y
alentadora palabra de Pío X II:
«N o podemos por menos de dar gracias a la
bondad de Dios por esa nueva falange que se ha
sumado al ejército de aquellos que, en el mundo,
profesan los consejos evangélicos y además por
la valiosa ayuda que tan providencialmente re­
fuerza el apostolado en estos tiempos tan pertur­
bados y aciagos.»
Las jóvenes que se sientan llamadas a enrolarse en este Apostolado encontrarán aquí el camino
seguro y expedito para la completa realización
de sus santos ideales.
Edad: Haber cumplido los 21 y no pasar de los
35. Para más detalles dirigirse al Rvdo. Sr. Direc­
tor de cualquier colegio salesiano, o a la Rvda. Superiosa de las Hijas de María Auxiliadora y tam­
bién a la Dirección del Boletín Salesiano.

N O T A .— Si bien es cierto que Jas «Voluntarias
de Don Bosco» viven habitualmente con sus fa ­
milias, no obstante tienen sus horas y días de
convivencia. Para lo cual necesitarían disponer
de un amplio piso céntrico en la ciudad, donde
radica el Grupo o de una casa chalet en las afue­
ras o alrededor de la misma. Si alguna alma ge­
nerosa quiere llenar esta necesidad o ayudar a
remediarla, contribuirá grandemente al desarrollo
y apostolado de este Instituto Secular.
El P. Juan Castaño (Francos Rodríguez, 114,
Madrid-20) en Madrid, y el P. Rosendo González
(P P . Salesianos-Zamora) en Zamora, recibirán
con gusto cualquier noticia a propósito.

E. Q. Salesiana: Madrid-Atocha