BS_1990_02

Ficha

Título
BS_1990_02
Descripción
Boletín Salesiano. Febrero 1990
Fecha
1990.02
extracted text
XXIII Capítii^o G e n e ra í
E n la T ie rra
Fuegp
MM.

hacer Justicia"
M i experien cia
en T6 go

Carta .
a los ñiños
de todas
las edades
is queridos amigos Juani*
to y Mari;
«¡Qué bien lo pasamos con Don
Boscol», me dice Mari. <€s un
santo la mar de simpático, que
nos hace reír mucho», añade Juanito. Pues hoy quiero contaros al­
go que os va a gustar cantidad.

"... AQUI SE PARTE UNO DE RISA”
Ya veréis lo guasón que era Don
Bosco. Escuchad.

quier cosa y yo haré que aparez­
ca encima de una mesa.»

Apenas cantó misa, Don Bosco
siguió estudiando en Turín, y se
hospedaba en una residencia sa­
cerdotal con otros jóvenes sacer­
dotes, muy amigos de la juerga,
por cierto, sobre todo cuando lle­
gaba el carnaval.

Le sugirieron al Santo las cosas
más ridiculas. Unos querían un .ga­
to; otros, un gallo vivo; otros, una
cesta de huevos, y algunos pedían
un pollo asado. Entre aquel voce­
río surgió la voz de don Pava:
«¡Queremos que aparezca el ga­
bán de nuestro amigo!» La pro­
puesta fue recibida con un gran
aplauso. Don Bosco se excusó
diciendo que era cosa imposible.
Vaya, el cura del gabán saltó: «Vo­
sotros haced lo que os dé la ga­
na; pero lo que es mi chaquetón
bien guardado que lo tengo bajo
llave. No va a ser fácil adivinar
dónde está...»

Había en la residencia un cura
muy bromista. Un día tuvo la idea
de comprar un gabán muy estrafa­
lario a unos judíos. Cuando se lo
ponía era el hazmerreír de todos
los compañeros. Don Bosco quiso
darle una broma y se las apañó
para llevar el gabán al estudio de
los residentes y ponerlo liado en
la silla de su dueño. El buen cura,
al sentarse, notó algo raro. «¿Qué
es esto?», exclamó, arrojándolo en
medio de la saJa. ¿Qué era? ¡Su
gabán! Lo recogió al punto y se lo
puso entre las risotadas de sus
compañeros. Don Bosco le repitió
la faena otro día llevándoselo al
comedor.
Llegó el carnaval y el Santo se
puso de acuerdo con don Pava,
otro de sus compañeros, para reír­
se a costa del chaquetón del am i­
go. «¿Queréis divertiros?», dijo don
Pava a un grupo de residentes.
«¡Sí, sí!», replicaron el teólogo Gua­
la y don Cafasso (¡san José Cafasso!).
«Pero ¿qué juego queréis que os
haga?», intervino Don Bosco. Los
circunstantes sugirieron muchos.
Don Bosco oía y callaba. «Bueno,
elegidlo vosotros. Decidme cual­

Don Bosco dio un salto y se puso
en medio de todos con su varita
mágica. Se ciñó la cintura con
una toalla y empezó a decir en
voz alta palabras misteriosas. To­
do el mundo se partía de risa al
verlo. Pero en seguida simuló su
fracaso asegurando que era cosa
imposible.
Animado de nuevo por sus com ­
pañeros, prosiguió haciendo sig­
nos cabalísticos. Hasta que, en un
momento dado, exclamó: «¡Silen­
cio! El gabán se encuentra ahora
mismo en Constantinopla, pero ha­
remos que venga...» Las risas cre­
cían de volumen cuando Don Bos­
co hacía que todos repitieran en
coro palabras esotéricas, sonoras
e incomprensibles. Qrdenó que tra­
jeran la mesa de uno de los resi­
dentes y la pusieran en el centro.

La abrió e hizo que todos se aso­
maran para comprobar que esta­
ba vacía. La cerró. La abrió de
nuevo, mostrando que allí dentro
no había prenda. Le echó la llave
y se la entregó al teólogo Guala,
obligándole a tenerla en alto ante
todo el mundo...
«Ya puedes hacer lo que quieras...
— reía el amigo del gabán— , que
esta vez no conseguirás nada.»
Don Bosco puso cara de visiona­
rio y, cortando el aire a grandes
rasgos con la varita mágica, pro­
nunció cuatro palabras, de esas
que no existen en ninguna lengua
del mundo, y acabó gritando; «¡Es­
tá hechol» Entonces dio la llave al
amigo del gabán, que abrió ner­
viosamente la mesa... Y... he aquí
que, ante el a so m bro de to d o s
los presentes, ap are ció el fam o­
so chaquetón.
Indescriptible fue la sorpresa y el
regocijo de todos los residentes. El
amigo del gabán quedó boquia­
bierto y con tres palmos de nari­
ces. Y don Cafasso se abrió ca­
mino soltando el trapo; «¡Vámonos,
por caridad, vámonos, que aquí se
muere uno de risa!»
■¿r





Y hasta a Juanito se le acaba de
escapar. «¡Pero qué hombre más
guasón!» «¡Esto es formidable!»
Recibid un abrazo de vuestro me­
jor amigo.

Padre RAFAEL

iíU S íi
^ ¡ 'é r r ' ' o
-

i

COMPARTIR
ES HACER JUSTICIA
a n o s U n id a s lanza
recho a que en algunas
todos los años un
partes del m undo haya so­
s/ogan para su cam paña
breabundancia y despilfarro,
de recaudar fondos en fa ­
mientras que en otras haya
vor de los países más ne­
todavía gente que muere de
cesitados de ayuda mate­
ham bre y que carece de lo
rial. Este año ha elegido la
más elemental para vivir.
frase C o m p a rtir es hacer
Evangelizar a estas gentes
ju sticia . Y nos parece que
equivale a darles nuestra
la limosna que dam os a los
m ano fraterna, y exige que
pobres es una justicia muy
los cristianos reconozcan su
escuálida, una simple m iga­
dignidad de hombres. Una
ja, porque repartida entre
dignidad que no reconoce­
tantos les toca muy poquita
m os al consentir el estado
cosa.
de miseria que padecen tan­
Sin embargo, son m uchos
tos m illones de hermanos
los proyectos que se llevan
nuestros que malviven en
a cabo con orden y con
los pueblos que llamamos
verdadera solicitud. Peor se­
con eufem ism o del «Tercer
ría no hacer nada. Aunque
Mundo».
creemos que, en justicia y
en amor, los países ricos
★ Com o salesianos, agra­
deberían hacer algo más. El
decem os a Manos Unidas
«Boletín Extraordinario de la
los proyectos de ayuda a
Campaña contra el Hambre»
nuestros misioneros. Sólo en
trae una cita de san A m ­
la Campaña del pasado año
brosio que pone en eviden­
cia esta realidad: «No es
parte de tus bienes lo que
Manos
Unidas
tú das al pobre; lo que le
CAMW NA CONTRA EL HAMBRE
das le pertenece. Porque lo
que ha sido dado para uso
de todos, tú te lo apropias.
La tierra ha sido dada a to­
do el m undo y no solam en­
te a los ricos.»

M

★ Queda bien claro que
nuestra «pequeña limosna»,
1 que no deja de ser un acto
: de amor, es ante todo un
■ acto de justicia. No hay de­

COMPARTIR ES HACER JUSTICIA

-

h-S

m

E C
'M D ¡

Manos Unidas subvencionó
cinco proyectos en Africa,
con un total de más de do­
ce millones de pesetas; 45
proyectos en América, que
supusieron más de 131,5
millones de pesetas, y ocho
proyectos en Asia, con cer­
ca de 27 millones de pese­
tas.
Justo es dar las gracias a
esta organización no guber­
namental por estas ayudas
en favor de los m uchos sa­
lesianos españoles que han
dado su vida para evangeli­
zar a los más pobres.

★ Desde esta página edito­
rial alentamos a nuestros
lectores a ser generosos.
También se nos dice a nos­
otros el slogan de la ca m ­
paña de este año: C o m p a r­
tir es h a ce r ju s tic ia . Nos­
otros añadim os que es muy
hermoso eso de hacer ju s­
ticia con amor.
El Evangelio nos avisa que
hemos de hacernos amigos
con el dinero injusto. Pero,
a la vez, nos inculca que
hagamos la caridad con ele­
gancia cuando nos dice tan
bellam ente «que tu mano
izquierda no sepa lo que
hace tu derecha». Y preci­
sam ente es el Padre de to ­
dos el que nos invita a
com partir con nuestros her­
manos. ■ •

i'D

Escribidnos!

BOLETIN

SA
LESIA N O
ítVWAM lA fAWU*. yUSlíNA
Aflo Cltl • N.“ 2 * Febrero 1990
Director:
RAFAEL ALFARO
Consejo de Redacción:
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reno, Juan José Bartolomé,
Conchi Muhoz. Jesús Rojano.
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El Boletín Salesiano se en­
vía gratis a la Familia Salesiana. a sus bienhecho­
res y amigos. Y se sostie­
ne con los donativos de
sus lectores
EN ESTE NUMERO
^ aquí se parte uno de

risa" ............................
Compartir es hacer (usiioa ..............................
lEscfibidnos' .................
XXIII Capfluio General de
los Salesianos .............
Francisco de Sales, cum­
plido caballero y santo a
mano ............................
Carta desde Suráfnca .
Vigo, Familia Salesiana
llena de vida ...............
Buen trabato, Valentín
Don Felipe Rinaldi, Di­
rector en Barcelona-Sarná ...................y...........
Don Aniceto, más allá
del diamante ...............
Natales, de nuevo en el
horizonte de mi vida . . .
"Akpe Togo" ...............
N oticias........................
Fueron a la Casa del
Padre ............................
Nuestra gratitud .........
Becas para las vocacio­
nes saiesianas ...........

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NUESTRA PORTADA
CompartHHriss b m b
y. s o c e te a s n irv
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part» S9ÍHSI le km - cpne ncs
el a iM M e Manos Unidas
en la

#í la y e e it ií nechatüAáfi sena
«íes iFoia ilwt' I tfs ¥ m ‘

ACONTECIMIENTOS
HISTORICOS
Estamos asistiendo, entre
atónitos y perplejos, a
unos hechos históricos de
primera magnitud, que ya
han sido calificados co­
mo el comienzo de una
nueva era para la huma­
nidad.
El primero de estos he­
chos —sorpresivo y to­
talmente inimaginable ha­
ce tan sólo unos anos—
ha sido e! derrumbe y
desmoronamiento progre­
sivo e imparable del mun­
do comunista. Como fi­
chas de dominó, una tras
otra, van cayendo barre­
ras, muros y «telones»
reales, políticos e ideoló­
gicos.
La caída del muro de
Berlín, junto con la aper­
tura de fronteras en los
países centroeuropeos. y
«la movida» estudiantil en
China, ahogada en un ba­
ño de sangre, así como
la «peréstroika» en Rusia,
son la punta del iceberg
que están señalando el
deshielo «in crescendo»
del férreo sistema comu­
nista. que, nunca mejor
dicho, hace agua por to­
das partes.
Estamos asistiendo al co­
mienzo del fin de un sis­
tema. que se muestra im­
potente para contener la
avalancha de libertad que
aflora poderosa en el co­
razón de millones de hom­
bres y de pueblos subyu­
gados durante décadas
por la fuerza, el miedo y
la ideología marxista-lénlnista Se está comproban­
do de hecho que el co­
munismo era un gigante
con pies de barro Su
destino está marcado irre­
misiblemente- Dentro de
poco, a Dios gracias, pa­
sará al baúl de los re­
cuerdos y a las páginas
de la Historia

El segundo de estos he­
chos que va a marcar
decisivamente el rumbo
del mundo en el futuro
inmediato ha sido la en­
trevista del líder ruso. Gorbachov. con S. S. el Papa
Juan Pablo II en el Vati­
cano, y del mismo en
Malta con el presidentenorteamericano, Bush.
El 1 de diciembre de 1989
figurará, sin duda, entre
las fechas más señala­
das del siglo. La entrevis­
ta entre el Papa Juan
Pablo II y Gorbachov mar­
ca el nacimiento de una
nueva era. Este encuen­
tro ha señalado el fin. des­
pués de setenta y dos
años de incomunicación,
de una triste situación,
tanto para la Unión Sovié­
tica como para la iglesia
católica.
Los resultados de este
encuentro han superado
todas las esperanzas: la
Unión Soviética y el Vati­
cano establecerán relacio­
nes diplomáticas: el Papa
ha sido invitado a visitar
la URSS y los fieles de
este país tendrán una ley
de libertad religiosa. Esta
visita borra por fin la inso­
lente brutalidad de Stalin
cuando preguntaba con
ironía cuántas divisiones
tenía el Papa. La Historia
en este final de siglo ha
sufrido un espectacular
vuelco gracias al esfuer­
zo de un papa, testigo de
las opresiones del mundo
del Este. De no menor
importancia cabe señalar
la entrevista de los líde­
res de las dos naciones
más poderosas del mun­
do en Malta el siguiente
día, 2 de diciembre. Am­
bos manifestaron, en un
comunicado hecho públi­
co. su convicción de que
«buscan un mundo nue­
vo, un mundo mejor para
los pueblos de todos los
continentes».

El mundo cambia ante
nuestros ojos a velocidad
de vértigo. Un orden nue­
vo se vislumbra en el ho­
rizonte y se afirma vigorosamente.
Son muchas y variadas
las interpretaciones y con­
jeturas que, desde diver­
sas visiones de la vida y
de la política, se están
dando a estos singulares
acontecimientos- Pienso
que no debe estar ausen­
te el enfoque de los mis­
mos desde el ángulo de
la fe.
Desde esta óptica, cabe
interpretar tales aconteci­
mientos como «señales o
signos de los tiempos»,
que presagian el alumbra­
miento de un mundo nue­
vo y de una humanidad
nueva.
Paulatina y progresiva­
mente se van haciendo
presentes los valores cris­
tianos del Reino de Dios,
proclamado en el Evan­
gelio.
Dios y sólo El, como Se­
ñor absoluto de la Histo­
ria y la vida de los hom­
bres, va conduciendo cdn
mano providente, respe­
tando siempre la libertad
que dio al hombre —y
«escribiendo derecho con
renglones torcidos»—, los
destinos de la humanidad
hacia su meta definitiva.
Los creyentes palparnos
la acción del Señor en el
mundo. Alabamos y ben­
decimos su «brazo pode­
roso» y nos sentimos ale­
gres de participar, cola­
borar y acelerar con
nuestras vidas, compromi­
so y acción, la llegada
del Reino de Dios a la
tierra
¡Es tiempo, amigos, de es­
peranza y de optimismo!
Miguel Rhdlla
San Martin
Alcorcón (Madrid)

EL PROXIMO MES DE MARZO EMPIEZA EL

XXIII CAPITULO GENERAL
El próxim o mes de marzo comienza el nuevo Capítulo General de los Salesianos. La elec­
ción de su tema es un regalo del centenario de san Juan Bosco. Así lo decía el Rector
Mayor en la carta de convocatoria, escrita en agosto de 1988. Resumimos aquí sus ideas.

E

n la misma drcunstancia el
dicho: «AcometerTKis una cosa de la
superior salesiano recordaba
mayor importancia para nuestra Con­
a san Juan Bosco. que al inaugurar
gregación... En estas asambleas rx>
la primera de tales reuniones había
tenemos más crt)jetivo que la mayor

gloria de Dios y la salvación de las
atmas". pensamiento que podemos
aplicar con la misma intensidad al
próximo Capftulo, llamado a afrontar

un tema que es la razón de nuestro
existir como salesianos: llevar a los
jóvenes a la fe.
El Rector Mayor ha insistido en di­
versas ocasiones sobre tal aconte­
cimiento. Presentamos algunas ideas
de sus intervenciones.- Quieren ser
una especie de premisa o lugar de
referencia para artículos que nos
proponemos desarrollar los próximos
meses a fin de ayudar a mantener
vivo el interés por este aconteci­
miento salesiano.
El lema de la educación de los jó­
venes en la fe es vital, uno de los
quehaceres más urgentes para la
Iglesia y, consiguientemente, para
nosotros. «La Iglesia —escribe el
Papa— tiene mucho que decir a los
jóvenes, quienes, por su parle, tie­
nen mucho que decir a la Iglesia.
Este diálogo recíproco, que debe rea­
lizarse con cordialidad, claridad y va­
lentía, favorecerá el encuentro e in­
tercambio entre las gerieraciones, y
será fuente de riqueza y juventud
para la Iglesia y para la spciedad ci­
vil» {Christifideles laici. 46).

ELECCION Y SIGNIFICADO
DEL TEMA CAPITULAR_________
La elección del tema dél próximo
Capítulo General se debe a la expe­
riencia de los últimos años y a las
dificultades encontradas por los jó­
venes y por la comunidad salesiana.
La educación juvenil en la fe se ha
hecho misión compleja, no sólo en
alguna que otra Inspectoría o en de­
terminadas áreas culturales, sino que,
en mayor o menor grado, lo es en
todas las regiones. No es problema
exclusivo de la Congregación, pues
afecta profundamente a toda la Igle­
sia. Su alcance no depende sólo de
las características de la condición
juvenil actual, pues nace de la si­
tuación de cultura emergente en una
hora de verdadero cambio de época.
El significado del tema lo indica con
claridad su mismo enunciado. Se
trata de analizar pastoralmente y ve­
rificar desde el punto de vista sale­
siano la realidad en que se trabaja.
Hay. al respecto, una tarea que rea­
lizar y un reto al que debemos res­
ponder. La tarea aparece en las
Constituciones salesianas: el reto lo
señalarán las comunidades locales
e inspectohales según el pluralismo’
de obras, de situaciones sociales, de
culturas y de coyunturas. Hay que
saber distinguir entre dificultades que
podríamos llamar normales y los re­
tos provenientes de novedades cul­
turales que requieren un verdadero
replanteamiento de los métodos y
contenidos de la educación en la fe.

RENOVAR LA CALIDAD
DE NUESTRA PASTORAL

COMO SAN JUAN BOSCO,
OPCION JUVENIL

Conviene recordar la distinción que
hizo el Capítulo General Especial en­
tre misión y pastoral. La primera es
idéntica e inmutable en cualquier
cultura y situación; la segunda es la
concreción operativa de la misión
bajo la guía de los pastores. Esto
supone ser sensible a los signos de
los tiempos y sentido de adaptación
al momer^to histórico y a la situación
local. La renovación de nuestra mi­
sión va íntimamente ligada a la pluriformidad de nuestra pastoral. La di­
versidad de pastoral es ya, entre
nosotros, algo admitido por todos:
constituye la base de partida del
próximo trabajo capitular. Sin em­
bargo, la óptica del tema propuesto
no se refiere directamente a ella; la
supone y aprecia como realidad viva
en que centrarse, pero hay que ha­
cerlo con miras al discernimiento de
otro aspecto: la calidad pastoral de
la comunidad salesiana. En la pluriformidad Interesa específicamente la
calidad pastoral. Así pues, por ahora
se dejan a un lado otros puntos
igualmente importantes: problema de
ios destinatarios, replanteamiento de
nuestras obras, inculturación de la
misión, revisión de la comunidad re­
ligiosa. relanzamiento de la Familia
Salesiana, etc. Lo que se quiere ver
específicamente y en profundidad es
la calidad de nuestra pastoral en la
educación cristiana de los jóvenes.
La fidelidad a la misión de san Juan
Bosco pide que se despierte en
nuestra mente y en toda comunidad
el ardor y la autenticidad de la com­
petencia pastoral, bajo la poderosa
acción del Espíritu Santo.

La preparación del próximo Capítulo
General nos tiene ya ocupados a
todos en el discernir y proyectar el
modo de emprender la nueva evangelización con los jóvenes. La op­
ción preferente de san Juan Bosco
por los jóvenes exige valentía en la
revisión y en la creatividad. El partir
de los últimos, como suele decirse
hoy día, ofrece una espléndida ópti­
ca de actuaciones. Los obispos ita­
lianos. por ejemplo, afirman que pre­
cisamente los últimos «son el índice
dramático de la crisis actual. Ante
todo, debemos abatir los ídolos que
nos hemos construido: dinero, poder,
consumo, despilfarro, tendencia a vi­
vir por encima de nuestras posibili­
dades. Después, trataremos de indi­
vidualizar los valores del bien co­
mún». Esta óptica lleva en profundi­
dad a una confrontación cultural que
requiere un cambio de mentalidad
para percibir los puntos estratégicos
de evangelización. San Juan Bosco
lanzó una pastoral renovadora ca­
balmente porque se situó en este
punto de observación: desde los úl­
timos se entiende mejor el problema
de todos. Pero no miró hacia los jó­
venes porque se hallaban en nece­
sidad y abandono, ni sólo porque
eran pobres y vivían marginados, ni
sólo porque eran los últimos y las
víctimas de estructuras inadecuadas.

La convivencia con los jóvenes
llevó a Don Bosco a crear
un ambiente de alegría.

sino porque intuyó y valoró la rique­
za de su corazón, portador de nue­
vos valores en la esperanza. La
convivencia con ellos le llevó a
crear un ambiente de alegría basado
en convicciones de verdadera posi­
bilidad de éxito.

LOS JOVENES, NUEVOS
AGENTES DE PASTORAL
La exhortación apostólica Chrístifideles la ic i presta una atención espe­
cial a los jóvenes, «No hay que ver­
los simplemente —atlrma— como
objeto de la solicitud pastoral de la
Iglesia, sino que son —y a ello de­
bemos alentarlos— sujetos activos,
protagonistas de la evangelización y
artífices de la renovación social.»
¡Son afirmaciones atrevidas e indi­
can la meta de nuestra pastoral ju­
venil! El XXIIl Capituló General nos
ayudará a ser, en este campo, edu­
cadores competentes que sepan en­
rolar a muchos jóvenes en la nueva
evangelización.

RELANZAR NUESTRO___________
ASOCIACIONISMO JUVENIL
Debemos estudiar, en particular,
nuestra pastoral mediante el asociacionismo juvenil. La «Confrontación

Don Sosco '88» hizo ver la impor­
tancia y actualidad de saber animar
un verdadero movimiento con los jó­
venes más entregados, imbuyéndo­
les el espíritu de nuestro santo fun­
dador. El criterio oratoriano. que de­
be caracterizar este relanzamiento,
sugiere no sólo una modalidad origi­
nal de animación de los grupos más
comprometidos, sino que recuerda
también que el Oratorio, en cuanto
criterio permanente de renovación,
no es meramente un lugar geográfi­
co; debe existir por igual en una
asociación y en un movimiento que
supere los límites del ámbito material
y local y que llegue a toda la Inspectoria e incluso a toda la nación.

INTERIORIDAD APOSTOLICA
DEL EVANGELIZADOR__________
Creo que es fundamental llamar la
atención acerca de otro aspecto que
está en la base de todo: la renova­
ción personal del evangelizador. Ha­
ce años que estamos insistiendo
machaconamente en la interioridad
apostólica. El Papa lo llama «nuevo
ardor». Se trata del corazón y de la
mente de quien evangeliza. Nunca
ha habido ni puede haber evangeli­
zación sin anunciadores válidos: pen­
semos en los apóstoles y en todos
los discípulos. La nueva evangeliza­
ción es testimonio. «La fuerza de la

evangelización —afirma Juan Pa­
blo II— está simullóneamenfe en la
verdad anunciada y en la convicción
del testimonio con que se propone.
Por este motivo la nueva evangeli­
zación pide que sus heraldos sean
fieles en la predicación de la verdad
y testigos de la tuerza salvadora de
la Palabra de vida.» Importa, pues,
centrar la atención en nosotros mis­
mos como educadores cristianos re­
novados. Esta óptica debe tener en
cuenta una característica inherente
a la modalidad propia del sistema
preventivo: la de «evangelizar edu­
cando» El Papa nos recuerda que
san Juan Bosco supo «hacer una
síntesis entre evangelización y edu­
cación». Su labor evangelizadora
—escribe— «abarca todo el am^io
sector de la condición juvenil; por
consiguiente, se sitúa dentro del pro­
ceso de formación humana».
Creo que está claro para todos que
las actividades educativas propia­
mente culturales (ciencias, formación
profesional, teatro, música, deporte,
disciplina, etc.) pertenecen, por su
misma naturaleza, al nivel de la ma­
duración humana. En sí no son evan­
gelización: las cultiva también quien
no es cristiano. Lo que las eleva de
significado, sin cambiar su naturale­
za, es la síntesis vital a que las in­
corpora el evangelizador que educa,
quien, gracias a su interioridad apos­
tólica, es el verdadero protagonista
de la nueva evangelización. Debe
haber asimilado vitalmente la verdad
revelada y mantenerse en contacto
con las novedades culturales de que
hemos hablado: pero, además, debe
considerar absolutamente imprescin­
dible la renovación pastoral de su
corazón. No nos engañemos: el se­
creto está también en el método, pe­
ro no basta Sin un cuidado especial
de la interioridad apostólica en nos­
otros. en los seglares y en los tóvenes, será inútil la tan ansiada nueva
evangelización.

¡ANIMO, CREO QUE VAMOS _
POR BUEN CAMINO!____________
Me parece que poderr>o8 decir que
la Congregación salestana camina
hacia la nueva evar^getización He­
mos visto ya sus prometedores fru­
tos. Es verdad que queda mucho
por hacer, y ahí tier>e boy su desafío
más apremiante, pero el próximo
Capítulo General rx>s ayudará a
afrontar este problema de forma más
práctica y concreta Recemos en
todas nuestras comunidades por su
buen resultado y pídame» con insistencia a san Juan Bosco que nos
obtenga del Seóor el ser poiladores
fieles de su cartsma ■

amistad en la vida de un santo me
parecía, de entrada, buena baza.
Nos han hecho a los santos tan san­
tos que nos han escamoteado al
hombre. Sin olvidar que. durante si­
glos. la amistad ha estado erizada
de tantos peligros y descarríos, se­
gún ciertos padres de espíritu, que
más que camino y medio para la
santidad fue juzgada obstáculo y
desvío. (A Dios gracias, también en
esto el último Concilio vino a poner
las cosas en su sitio.)

Con relativa frecuencia me han
preguntado (y esta misma ex­
periencia la habrán tenido tam­
bién, sin duda, la mayor parte
de los miembros de la Familia
Salesiana) la razón y el por­
qué de llamarnos salesianos.
Y al contestar que nos llama­
mos así en recuerdo de san
Francisco de Sales, a quien
Don Sosco escogió, por su
amabilidad y dulzura, como
patrono de la Congregación
salesiana, el interlocutor suele
comentar: «¡Ah!, de san Fran­
cisco de Sales...» Y a uno le
queda agazapada la duda de
que dijo Francisco de Sales
como podía haber exhumado
a Juan Crisóstomo o a José
Cafasso... De chiripa.

El libro era una traducción inglesa,
hecha en Irlanda (1964) de! original
francés, escrito por Henry Coüannier.
Desconozco si existe alguna edición
española. Me imagino que sí. Porque
el libro merece realmente la pena.
Por sus cerca de 500 páginas van
desfilando los amigos de Francisco
de Sales. Desde reyes y nobles has­
ta burgueses, gente del pueblo, cal­
vinistas. hombres y mujeres, monjas
y eclesiásticos. La amistad singular
y entrañable entre el santo y Mme.
de Chantal (santa Juana Francisca
de Chantal), que hizo posible la fun­
dación de las Salesas, está extensa
y profundamente expuesta.

Porque Francisco de Sales es
hoy un auténtico desconocido.
Y me temo que sea, incluso,
un glorioso desconocido para
nosotros, salesianas y salesia­
nos, y, consecuentemente, pa­
ra el resto de la Familia Sale­
siana. Y es una pena, porque
esa veta de maduro humanis­
mo y sencilla naturalidad que
hoy cunde en múltiples facetas
de nuestra existencia —sin ex­
cluir la vida religiosa— aflora
ya y se gusta, en la vida y doc­
trina de nuestro santo, aunque
en la lectura de sus obras, en
general, tenga uno que sufrir la
ampulosa retórica de la época.

En este mes, aún reciente la fiesta
del santo, me permito recopilar al­
gunas palabras y consejos que Fran­
cisco dirigió a esos amigos suyos,
tan variados y numerosos, y que
manifiestan espléndidamente su pro­
funda e intensa vivencia de Dios y
también su exquisita y sensible hu­
manidad.
DULZURA Y AMOR
«Los hombres consiguen más con el

FRANCISCO DE SALES
UNA CURIOSA BIOGRAFIA
Mi primer encuentro serio con la vi­
da y obra de Francisco de Sales fue
en mis años de teología. Don Fran­
cisco de la Hoz estaba entonces
preparando los escritos del santo
doctor para la BAC y, por medio de
un común amigo salesiano, don Isi­
doro Moro, me llamó para ayudarle.
Ayuda más de buenos deseos que
de realidades prácticas, la verdad.
Pero fue buena ocasión para el trato
y deleite con el santo obispo de Gi­
nebra y con sus escritos.
Este verano, muchos años después,
en un apacible rincón del País de
Gales, una de las monjas de la co­

8

munidad de la clínica en la que me
encontraba, como capellán interino,
me ofreció una biografía de Francis­
co de Sales.
—Léala —me dijo—. Verá cómo me­
rece la pena.

amor y la caridad que con la aspe­
reza y la severidad’’ (a un calvinista).
«Hacer todo por amor, nada por im­
posición» (a Mme. de Chantal). «To­
do lo que es hecho por amor, es
amor» (ídem).

Confieso que fue más la educación
que la posible curiosidad lo que me
forzó a aceptar el libro. Uno tiene ya.
y sin poderlo remediar, un soterrado
recelo, que aflora en estas ocasio­
nes. hacia cierta meliflua y deshu­
manizada literatura hagiográfica.

Una joven rica, pero de avara fami­
lia, se presentó a Mme. de Chantal
para hacerse salesa. Esta le insistió
varias veces en que necesitaba una
dote conveniente. Frarícisco. que
asistía a la conversación, no dijo
nada, pero después le reprochó a la
santa su dura actitud.

Después me ganó en seguida el títu­
lo: San Francisco de Sales y sus
amigos. Que alguien se atreviera a
realzar de modo tan destacado la

— En cuestiones de justicia —te in­
dicó Mme. de Chantal— yo soy in­
flexible.

mía. debe esforzarse para hacer to­
do con calma y pacientemente Verá
cómo en tres o cuatro años habrá
vencido completamente esa repenti­
na brusquedad. Pero recuerde que
debe hacerlo todo con moderación -

li

Algún tiempo después tiene que re­
comendarle de nuevo mesura ante
los excesos e ímpetus de la monia
“ Comer poco y trabajar mucho: te­
ner la mente abrumada por mil pre­
ocupaciones y rehusar al cuerpo el
descanso necesario es como inten­
tar forzar al máximo a un caballo,
que está famélico y en los huesos,
sin permitirle siquiera que paste.»
Un día, al entrar el obispo en una de
las dependencias de su palacio, oncontró a un criado suyo que estaba
escribiendo algo, que se apresuró a
esconder tan pronto como se perca­
tó de la presencia del santo Ante el
silencio obstinado del joven a sus
preguntas, le dice Francisco; -¿Pero
no somos amigos?» El joven enton­
ces le confiesa a regañadientes que
estaba enamorado de una viuda y
que le estaba escrtxendo precisa­
mente en ese momento para pre­
guntarle si quería casarse con él El
obispo le r o ^ que le dejase la carta
y comentó;
—No sabes hacerlo, ¿verdad'’
Luego se sentó y se la escribió
—Copia esta carta —le dijo— y en­
víasela. Verás como todo se an^gla
Pocos días después la joven viuda
vino a ver al obispo para pedirte su
consejo. Francisco, naturalmente, la
animó para que se casase.

—Usted es justa más que miseri­
cordiosa. Y yo no quiero que sea us­
ted tan justa. La misericordia debe
situarse sobre la justicia.
Al hablar de la superiora. en las re­
glas de las Salesas, señala Francis­
co; «Debe aspirar a ser amada an­
tes que a ser temida», cita que
evoca las palabras de Don Bosco
en su sistema preventivo.
En una carta al obispo de Tours.
monseñor Richelieu, años más tarde
lamoso cardenal, reiteraba lo que ya
le había indicado en otras ocasio­
nes; “ La única felicidad de uno, aquí
en la tierra, está en hacer el propio
deber con humildad, padencia y por
amor de Dios, en el lugar © i que lo
ha puesto, sin preoci^iarse de las
opiniones de los demás.»
MESURA Y HUMANIDAD________
Cuarxk) Mme. de Chantal comunica

ai santo que ha decidido llevar una
vida de más oración, según los con­
sejos de Francisco, y que para eso
se levantaba unas horas antes, lo
que obligaba a su doncella a hacer
k) mismo, le escribe; “Debemos ser
tan acomodadizos en lo que se re­
fiere a nuestras devociones que ellas
rK> deben molestar a nadie. Me pa­
rece. pues, razonable que, puesto
que quiere usted buscar a Dios en
la oración, se levante usted por sí
sola, sin causar molestias innecesa­
rias a quienes le sirven.»
La célebre abadesa jansenista de
PcMl Royal. sor Angélica Arnauld,
coTK)ció también, cuando era joven
religiosa, al obispo de Ginebra. Mujer
de gran carácter y reda voluntad,
causó honda impresión en Frandsco. que. «atónito ante su gran cora­
zón» —son palabras del santo—,
desea que granen las inmensas po­
sibilidades que promete. En una de
sus cartas le indica Francisco; «Hija

(No estará de más señalar aquí,
como nota curiosa, que la madre de
san Francisco de Sales se prometió
a los siete años y se casó a los tre­
ce con el señor de Sales, que era
unos treinta años mayor que ella.
También uno de los hermanos del
santo. Bernardo, de veinticuatro años,
se casó con la hija de santa Juana
Francisca de Chantal, Mane Atmée.
que tenía diez años.)
COMPRENSION
En una discusión piúbiica con un
ministro calvinista, algunos amigos
del santo le reprochaban que te ha­
bía permitido hablar mucho tiempo
El les respondió; «Como no tenia ra­
zón ni argumentos debía, al menos,
concederte tiempo. Nuestros herma­
nos reformados deben constatar que
nuestra finalidad no es conquistarlos,
sino converx^erlos.»
En 1617. una tal Mme. Armand, jo­
ven y mundana señora, quedó tan

X A '.» *

w

conmovida tras oír predicar al santo
que le rogó fuese su director. Algún
tiempo después, un día en que M. A.
había comulgado, fue a pedirle per­
miso para vestirse de ninfa en un
ballet que iban a estrenar aquella
misma noche.
—Hija mía —le contestó Francisco—,
habiendo recibido al Señor esta ma­
ñana sería más conveniente que
emplease el día en retiro y oración.
Pero me temo que si yo se lo prohí­
bo usted va a hacerlo de todos mo­
dos. Por tanto, le doy mi consenti­
miento.
De este modo, amable y sin estri­
dencias. que no dejaba a veces de
escandalizar a la gente piadosa, y
acomodándose siempre al paso y
generosidad de las almas, dirigía
Francisco a sus penitentes. Y los re­
sultados fueron siempre sorprenden­
tes. En este caso. Mme. Armand
terminó por hacerse salesa y su ma­
rido ingresó en la Compañía de Je­
sús.
CALUMNIAS
Francisco fue también blanco de ca­
lumnias. Algunas muy graves. Su
norma al respecto era: «Uno tiene
derecho a aclarar las cosas, en ho­
nor a la verdad: pero si la acusación
continúa debe entonces oponerse a
ella con indiferencia y silencio.»

SENTIDO DEL HUMOR
Lo tuvo siempre el santo y lo ejerció
oportunamente, y en más de un
trance comprometido y difícil, lo sa-

10

có indemne esta gracia suya sin
malherir la caridad y quedando to­
dos amigos.
Ante la extrañeza que en muchos
suscitaba el gran aprecio que le pro­
fesaban las mujeres de toda condi­
ción, a pesar de que Francisco era
más bien parco en palabras cuando
estaba con ellas, el santo comentó
alegremente; «¿No es ya mucho de­
jarles decir todo a ellas? Es posible
que sea esta cualidad mía la que las
anima a estar conmigo.»
Durante su misión en el Chablais, en
sus primeros años de sacerdocio, un
día en que Francisco estaba comen­
tando las palabras del Evangelio «si
te golpean en una mejilla, ofrece
también la otra», un calvinista le inte­
rrumpió diciéndole; «Si yo le abofe­
tease ahora en una mejilla, ¿me
pondría usted también la otra?»
—Amigo mío —le respondió Fran­
cisco—. yo sé bien lo que debo ha­
cer. pero no sé lo que haría, porque
soy débil. De todos modos, puede
usted intentarlo.
A punto de comer un día con su
hermano Juan Francisco, que había
sido nombrado obispo auxiliar suyo,
llegó una señora que deseaba ha­
blar con el santo. Al terminar la larga
entrevista, Francisco se sentó a la
mesa mientras su hermano, furioso,
se explayó a sus anchas. El le dejó
hablar sin interrumpirle y luego co­
mentó;
—Creo que existe una mujer muy fe­
liz en este mundo: adivina quién
puede ser.
Su hermano, sorprendido, comenzó

a sugerir nombres; Francisco, son­
riendo, le dijo;
—Es la mujer que se hubiera casa­
do contigo si tú te hubieras casado.
Y añadió; «Como eres tan puntual, la
hubieras hecho sufrir grandemente.
Mira, nosotros los obispos nunca •
debemos negarnos a nadie si real­
mente queremos cumplir con nues­
tro deber. Hemos de ser como esas
grandes fuentes públicas, donde to­
do el mundo tiene derecho a beber
y donde no sólo los hombres, sino
todos los animales, vienen a saciar
su sed.»
Entre sus amigos se contaba tam­
bién san Vicente de Paúl, que solía
decir; «¡Qué bueno eres. Señor, qué
bueno eres, puesto que en esta cria­
tura tuya que es Francisco de Sales
hay tanta dulzura y amabilidad.»
Y cuando, tras la muerte del santo
obispo, se le pidió su testimonio pa­
ra el proceso de beatificación, Vicen­
te de Paúl escribió; «Al pensar en
sus palabras, sentía tanta admira­
ción por él que me inclinaba a con­
siderarlo como el hombre que más
de cerca se ha asemejado al Hijo
de Dios en la tierra.»
No puede haber, creo, conclusión
mejor que estas lineas.
Si. con motivo de su fiesta, nos ani­
mamos a bajar a Francisco de Sales
de su alto pedestal y entablamos
amistad con él. comprobaremos,
también nosotros, que el esfuerzo
merecía la pena, y que su santidad
continúa siendo asombrosamente vá­
lida y a mano en este tiempo nuestro.
Jesús Pabtos Mérxiez

Carta desde Suróf rica
Desde Suráfrica nos escribe don Angel Izquierdo contándonos sus prim eras Impresiones.
St. John Bosco College
TRANSVAAL
28 de octubre, 1989.
Queridos amigos: Llevo ya tres días en Suráfrica, mi nueva Inspectoría salesiana. y desde su
capital, Johannesburgo, os envío mis saludos.
Todavía me emociono pensando en la atención que tuvisteis conmigo al ir a despedirme al
aeropuerto. ¿De dónde a mí que la Inspectora de las Salesianas se tomara la molestia de ir
hasta Barajas para decir adiós a un pobrecillo salesiano como yo? ¡Mis gracias más sinceras!
Todos estos días he rezado dos rosarios, y uno de ellos ha sido por vosotras, para que la
Virgen os ayude a ser educadoras en y de la fe.
Tengo que reconocer que me costó mucho dejar España y venirme a este lugar tan lejano,
¡Pero no me arrepiento! Lo había pensado, consultado y rezado mucho antes de tomar esta
decisión. Espero que me acompañe la salud para ser todo lo útil que pueda a la Congrega*
ción, que es lo mismo que decir a la iglesia, en estos lugares.
Estoy destinado a nuestra misión de M aputsoe, en Lesotho. Allí trabajan también cinco sale­
sianas irlandesas. Procuraré colaborar con ellas lo más que pueda para pagar, de alguna
manera, la gran deuda que tengo con vosotras. No me avergüenzo de decir que las Salesia­
nas habéis jugado un papel importantísimo en mi perseverancia vocacional, y no en una per­
severancia cualquiera, sino en una perseverancia gozosa e ilusionada. No olvidaré nunca el
trato y las atenciones genuinamente cristianas que he recibido de vosotras en Plaza Castilla,
en la Escuela de Don Bosco. en la Casa Inspectorial... No olvidaré nunca vuestra presencia
en momentos duros de mi vida. Muchas de vosotras me habéis animado en mi decisión mi­
sionera, y algunas habéis sido para mí verdaderas hermanas y amigas sinceras. ¡Gracias!
No puedo contar muchas cosas de mi destino, ya que todavía no he llegado a él y aún tarda­
ré dos o tres semanas. El padre Inspector de aquí quiere que visite todas las casas antes de
Ir a Maputsoe, El lunes, día 30, me llevarán en coche a Swazilandia. Allí estaré una semana y
visitaré nuestros dos centros. Si puedo, pasaré a ver a las Salesianas de Naamacha y Maputo.
Volveré en avión para volar a Ciudad del Cabo, que está a 1.400 kilómetros de Johannesbur­
go. Pasaré allí unos diez días; volaré de nuevo y. desde aquí, iré en coche con mi Director a
mi Misión.
Si no hay cambios, me dedicaré a aprender lesotho, la lengua nativa de la nación, para poder
cumplir mejor mi cargo: parroquia y poblados cercanos. Vamos a llevar allí el Noviciado y esto
también me ocupará algo, ya que tendré que ayudar un poco al Maestro de Novicios. Creo
que van a ser siete; uno de ellos es de Zambia.
Una de las cosas que me han encomendado es la de promover en Maputsoe y en todo el
país la devoción a María Auxiliadora. Salí de España un día 24, a Ella he encomendado mi
vida misionera y por Ella trabajaré entre esta gente para que fructifique bien la semilla de
Evangelio que sembramos.

11

VICO
Fam ilia sa le sia n a
llena de v id a
Llevan los Salesianos en V igo poco m enos de un siglo. Y se nota. La parroquia de María
A u xilia d o ra es ce n tro de toda la Fam ilia Salesiana. de la que form an parte m uchos viQueses En sus dependencias se encuentra tam bién el local de la A sociación de A ntiguos
A lum nos, el C entro Juvenil A bertal y el cine p ú b lico salesiano. Al lado, en el colegio, la
com unidad salesiana sigue form a n d o jóvenes para los tiem pos actuales en una ciudad
socialm ente viva y culturalm ente movida.
cos. El cine Salesianos, registrado en
industria como tal. ofrece tres sesiones
stá la parroquia en el corazón
al público infantil y juvenil cada fin de
de la ciudad y es el motor de la
semana. Y por allí pasan todos los días
Familia Salesiana de Vigo. Centenares
numerosos antiguos alumnos salesíade niños acuden cada semana a la canos.
lequesis, animados por jóvenes anima­
dores, y cada vez son más los jóvenes
Desde el colegio se lleva a cabo una
que participan en la catequesis de
labor educativa cada vez más relacio­
confirmación.
nada con la educación sociocuttural y

E

Dependiendo de ella, el Centro Juvenil
Abertal ha comenzado a roturar cam­
pos nuevos como significa su nombre
en gallego: ofrece nuevos talleres des­
pués de la experiencia del primer cam­
pamento urbano organizado en el pa­
sado verano y proporciona locales pa­
ra otras actividades a jóvenes y chi­

12

ambiental. Cada año se organizan va­
rias semanas con repercusión en el
ámbito ciudadano. En coordinación con
el Centro Juvenil y la comunidad sale­
siana del Colegio Hogar de la Caja de
Vigo, se llevó a cabo hace un año una
"^m a n a de reflexión en tomo al mun­
do del joven». Al final de curso tuvo lu­

gar una "Semana de teatro», con parti­
cipación de todos los alumnos y éxito
especial de la obra presentada por los
profesores. Próximamente tendrá lugar
una "Semana de reflexión sobre la si­
tuación poiftica en Galicia». En el ámbi­
to colegial, las semanas de animación
a la lectura se suceden cada año y se
entremezclan con otras. Recientemen­
te se ha celebrado la Semana del Me­
dio Ambiente bajo el lema «No quemes
la vida». El último día se cetelxó una
fiesta en común en la que cada grupo
presentó a los demás su pancarta y
manifiesto y todos corearon los eslóganes de los demás. Todo terminó con
una manifestación rodeando el colegio.

El Consiliario Regional de León,
don Antonio García, explica
los motivos del homenaje
a Julio Latrañaga. ex presidente
de los Antiguos Alumnos.

LOS ANTIGUOS ALUMNOS
Con ese ambiente es fácil comprender
cómo los antiguos alumnos se sienten
ligados e integrados a la Familia Salesiana. Muchos de los ochocientos ins­
critos se acercan cada día al Centro,
cuyos locales se encuentran, desde
una reciente reestructuración, en el
tercer piso del edificio. Abajo están los
jóvenes; al lado, los niños. Un siglo da
para mucho y las escaleras no son
obstáculo para que los veteranos acu­
dan cada día para encontrarse y jugar
al dominó, sobre todo.
Cada vez hay más jóvenes entre ellos.
Y lo son casi todos los que componen
la nueva Junta Directiva, formada des­
pués del relevo de su presidente ante­
rior. Julio Larranaga. Este hombre, poli­
facético y trabajador, fue la mejor sín­
tesis de la vitalidad de la asociación
durante los últimos diez años que la di­
rigió, <‘Me quedé viudo hace muchos
años —declara—, con cinco hijos pe­
queños. y mi vida ha sido mi familia, mi
trabajo y mis devociones, que son la
Asociación de Ex Alumnos Salesianos
y las actividades deportivas. He estado
vinculado al fútbol, ciclismo, balonma­
no. baloncesto, voleibol...» El 5 de no­
viembre los antiguos alumnos le rindie­
ron un homenaje por su dedicación y
entrega a la Asociación, llevada a ca­
bo con entusiasmo y buen humor.

Familia Salesiana» para continuar la
nueva etapa iniciada con el cambio de
local, y ha proclamado su deseo de
“Ser puente que una las distintas gene­
raciones y las ideas de proyectos de
todos». El primer proyecto ya ha sido
realizado: Expocentro '89, una exposi­
ción de pintura de cinco jóvenes pinto­
res. todos ellos antiguos alumnos sale­
sianos.

Y Juan Bosco Caride. a quien ya su
nombre le delata y liga a la Familia Salesiana, asistió poco después al Pri­
mer Encuentro Cultural sobre ->0 arte
actual» Sus compañeros le llamaban y
llaman sencillaniente Bosco. ^ s maes­
tras y prolesores le animaron desde
niño a pintar Allí están ahora algunos
escuchando a Juan Bosco. que habla
como pinta: con temblor.

El mayor de ellos, Juan Bosco Caride,
nació el 21 de enero de 1963 en Vigo.
Es licenciado en Bellas Artes y ha
conseguido varios premios y becas,
como la VIII Bienal Internacional de Ar­
te (Pontevedra, 1988) Miguel Crespo
Posse, también vigués y con veintidós
años, estudia Bellas Artes en Cuenca,
lo mismo que Mercedes Marín, nacida
en Buenos Aires hace veinte años. El
orensano Netson Hemártdez, de dieci­
nueve años, estudia Medicina y Far­
macia en Navarra. Ya en 1980 había
ganado el primer premio en el concur­
so de carteles sobre las Olimpiadas
organizado por el Ayuntamiento de Vigo- Ignacio Arlal nació en Zaragoza y
estudia Bellas Artes en Sevilla y ganó
el concurso para la elección de la
mascota de! Mundial de Balonmano
'89.

Cuenta cómo comenzó a pintar in­
fluenciado por mucha gente, hasta que
llegó el momento en que olvidó todo lo
que había aprendido, esas recetas que
atan y amaneran, y se dedicó a traba­
jar e investigar y crear por cuenta jxopia. En su obra busca decir mucho
con lo menos posible. Y lo logra. Sus
cuadros cuestionan a los visitantes,
porque va siempre más allá y no se
conforma con lo logrado. Aunque sabe
que «se cierra el círculo de la creación
con la mirada del espectador», se pre­
senta ante el cuadro con temblor, co­
mo vive, «porque los cuadros son ma­
los y tienes que ser valiente a la hora
de crear. No puedes estar con miedo»
Detrás de su obra está Tapies, Saura.
Andy Warhol, Rossenberg, Duchamp,
Chagall... Quizás algún día haya que
hablar del pintor Caride. de nombre
Juan Bosco Y se sabrá que la Familia
Salesiana también aporta savia a la vi­
da cultural.

JUAN BOSCO, PINTOR
Todos ellos han colgado sus cuadros
en el centro de los Antiguos Alumnos.

Herminio Otero

La Asociación, dirigida por el nuevo
presidente. Manuel García Meíra. y ani­
mada por el joven consiliario José Luis
Moral, quiere plantearse ahora nuevas
líneas de acción sociopoiftica y entron­
car con la nueva realidad cultural. <ecuperando el espíritu de tantas iniciati­
vas como los antiguos alumnos sale­
sianos han realizado en Vigo a lo largo
de su historia», En concreto, tienen
planteado protagonizar acciones que
les lleven a crear una plataforma de
opinión y a compromtíerse en la ac­
ción de la ciudad. Por ahora preparan
la creación de una bolsa de trabajo en
conexión con organismos oficiales y la
coordinación de miéntaos que estén
metidos en partidos pc^rlicos y organi­
zaciones sindicales.
EXPOCENTRO '89
La nueva Junta Directiva desea -cons­
truir una casa que acoja a todos y
dortde se corrstituya urra verdadera
Julio Larrañaga recibe el diploma
que le entrega don Antonio
García. Al fondo, un autorretrato
de Ignacio Artal.

13
á

BUEN TRABAJO
VALENTIN...
«Con sobria fidelidad al te xto francés y cuidada elegancia en el castellano» (según dice
el p ró lo g o de m onseñor A n to n io M ontero, obispo de Badajoz), el sacerdote salesiano
andaluz Valentín Viguera Franco ha regalado a la B iblioteca de A utores C ristianos
(B.A.C.) una obra poco co n o cid a y poco consultada de san Francisco de Sales: M edita­
ciones sobre la Iglesia. Está reciente su tinta. Y el marcham o, con el núm ero 468 en la
esquina de la pasta del volum en, es fácilm ente reconocible: p u lcritu d tipográfica, ausen­
cia de erratas, com odidad de form ato. Q uiero d ecir alguna cosa sobre este volum en ai
am able lector boletinero...

EL HILO Y LA AGUJA
DEL MISIONERO DEL CHABLAIS
El vigoroso texto de Francisco de Sales —vertido al
castellano desde la edición crítica-definitiva del bene­
dictino Dom Benedict MacKey— lleva como preludio
un enjundioso y bien documentado estudio de Valentín
Viguera.
En estas páginas, llenas de amenidad e interés, se nos
cuenta algo tremendo. El joven misionero del Chablais,
antes de ser promovido al episcopado, fue examinado
por una comisión de cardenales y teólogos. Atención a
las tres «bes» iniciales de los purpurados; Borghese,
Baronio, Borromeo, Por si no fuera suficiente, había
otra ilustre «be» inicial; Belarmino, más tarde elevado
también al capelo cardenalicio. (Me estoy acordando
de los tres músicos preferidos del Papa Pío XII;
Brahms, Beelhoven y Bach...)
Clemente VIII. que presidió la teológica trifulca, puso
broche de oro abrazando al erudito primogénito del se­
ñor de Boisy mientras repetía estas bíblicas palabras
del quinto capítulo de los Proverbios: «Hijo mío, bebe el
agua de tu cisterna, el agua que brota de tu pozo. No
derrames por la calle tu manantial ni tus acequias por
las plazas. Sean para ti solo, sin repartirlas con extra­
ños...» (el traductor nos registra la fecha exacta: 22 de
marzo de 1599),
Dije que era algo tremendo porque una encerrona se­
mejante —al menos a mi— me hubiera producido tiri­
tones de susto, quizás soroche (que es mareo de altu­
ra) o soponcio, que es desmayo sin disimulo, o sea. el
sopitipando...
He adelantado esta noticia para subrayar que Francis­
co de Sales —el dulce tratadista de miles de páginas
espirituales— atesoraba una cultura poco común. París
y Padua lo pusieron a tono. Su señor padre había so­
ñado con el senado saboyano para su joven caballere­
te que llegaria luego a doctor «in utroque iure». Pero el

joven misionero se despachaba a su gusto: «En París
aprendí muchas cosas para complacer a mi padre y la
teología para complacerme a mí mismo.»
Meditaciones sobre la Iglesia lleva un breve prólogo de
su autor, lleno de sinceridad y de ideas ciaras. Hacia
su final advierte; «No diré nada nuevo. Todo es viejo.
Míos son solamente el hilo y la aguja. Lo demás no me
ha costado nada más que descoser y volverlo a coser
a mi gusto...»
En efecto: el autor se apoya en las Dispulaliones de
controversiis christianae fide i del cardenal Belarmino
pisando la tierra firme de las citas bíblicas, tan frecuen­
tes. y la aportación copiosa de los Padres de la Iglesia,
sin más biblioteca a mano.
Pero ¡qué hilo y qué aguja los que maneja Francisco!
¡Cómo reconocemos su brillante estilo! ¡Cómo centellea
su áurea lógica! ¡Cómo nos penetra su descarado
apasionamiento por lo que defiende! ¡Ningún despro­
pósito en su lenguaje, ninguna injuria para protestantes
o herejes, costumbre afincada en aquellos tiempos...!
Todos tenemos una cicatriz por la que se nos identifi­
ca, como aquella que Ulises recibió del jabalí en el
Parnaso, gracias a la cual fue reconocido por la ancia­
na Burieles mientras le aliviaba los pies lacerados en
un caldero de agua calentita...
Quien se haya familiarizado con la amable literatura salesiana, ¿cómo no reconocerá en las M editaciones so­
bre la Iglesia ai mejor Francisco de Sales, al escritor
ocurrente, erudito, gráfico, luminoso, ameno, bieninten­
cionado, valiente, dulcemente conquistador de todo
aquel que se acerca a sus graciosas y expresivas pá­
ginas?...

UN LIBRO SINGULAR
Temblamos al suponer que algunas p ^ s literarias
pudieran haberse perdido para siempre. Por los entresi-

¡os del alma nos recorre el repelu2no al leer (en el pe­
queño exordio que Teresa de Jesús dedica a su Ca­
mino de perfección) que si su confesor, el dominico
fray Domtngo Báñez. lo creyere oportuno, bien se po­
drían lanzar a las llamas los originales de puño y letra
de la santa mística española, por más que las monjas
del Carmelo hubiesen estado suspirando por ver rema­
tado el trabajo de la Madre...
Meditaciones sobre la Iglesia no fue editado en vida
del autor ni por iniciativa propia ni ajena. Monseñor
Montero puntualiza: «Eran papeles volanderos. A veces
periódicos murales clavados en los atrios de las igle­
sias. Siempre lecturas de ocasión al compás de las
escaramuzas católico-calvinistas. En suma, un perio­
dismo anticipado.’*
El aire de estos «papeles volanderos», luego hermana­
dos en una armoniosa gavilla, es el propio del apostó­
lico misionero, el del fervoroso discípulo del Señor, in­
flamado por un fuego bastante lejano de las vanas po­
lémicas. Ya el teólogo jesuíta Pedro Canisio, con el
que mantuvo correspondencia epistolar, lo afirmaba ro­
tundamente: «La experiencia ha demostrado que las
discusiones doctrinales no sirven nada más que para
agravar el mal.»
Valentín Viguera registra' la anécdota significativa.
«Un día pidieron al cardenal Du Perron. cuya ciencia le
valió el título de "azote perpetuo de los herejes” , que
se interesara por un gentilhombre que estaba dispues­
to a abandonar el protestantismo. El cardenal respon­
dió: "Si vuestra intención es confundirle y convencerle.

traédmelo a mí. porque, gracias a Dios, poseo ciencia
suficiente para defender la verdad católica. Pero si
vuestra intención es convertirle, llevadlo mejor al señor
de Ginebra, que ha recibido de Dios ese don para
convertirte” .»
Ya aflora ostensiblemente a la piel de este libro el don
salesiano de transformar corazones, de enderezar sen­
das desnortadas... La intención el tomar la pluma es
absolutamente misionera, más que literaria, «La tarea
de escribir —dice el santo obispo saboyano y ginebnno— es propia de gente docta e inteligente Hay que
saber mucho para escribir bien. La gente mediocre
debe contentarse con hablar, ya que la acción, la voz y
la compostura dan fuerza a la palabra.» Y en otra oca­
sión también resulta definitivo: «La palabra es viva en
los labios, pero muerta en el papel.» Francisco hubiera
preferido hablar a escribir.
Este libro no es un palíndromo que pueda leerse de iz­
quierda a derecha o en sentido inverso (como la pala­
bra «reconocer»), sino que hay en él una ordenación
jerárquica de conceptos, un creciente orden y conca­
tenación muy clara que ganan poco a poco la aten­
ción del lector interesado. Bastaría con echarle una
ojeada al esqueleto del índice.
Es algo incuestionable que después del Vaticano II hay
mucha luz nueva sobre determinados planteamientos
del apóstol del Chablais. Pero no ha perdido encanto,
ni frescura, ni fuerza, ni fuego su empeño literario y
apologético. El trabajo salesiano puede hoy todavía
convertirse, tras el denodado esfuerzo del traductor, en
auténtico deleite a la hora de elegir una lectura esptntual que nos despabile.
CODA CON INTERROGANTES...
¿Por qué casi'de chiripa nos enteramos en un rinconcillo de la «presentación» de que el traductor es salesiano? ¿Por qué no aparecerá la sigla obligada (SDB) en
los títulos correspondientes y destacados de igual ma­
nera que junto a Pedro Canisio siempre se anota su
condición de jesuila o junto a Dom B. MacKey la de
benedictino?... ¿Por qué en la Constitución Apostólica
de Juan Pablo II que precede al texto del nuevo Códi­
go de Derecho Canónigo se subraya la pertenencia
del padre Raimundo Bidagor a la Compañía de Jesús y
no la de monseñor Rosalfo Castillo Lara a la Congre­
gación Salesiana?..
Valentín me ofreció personalmente su libro de la BAC y
yo estaba de alguna manera obligado a quemar estos
sucintos granos de incienso en su honor. Monseñor
Montero, con quien colaboró un buen puñado de años
como vicario de la diócesis de Badajoz, no disimula el
gusto con que prologa el libro. Pero no se desvía un
pizco de la verdad cuando dice; «Para ofrecemos este
cuidado volumen ha puesto en juego su notable prepa­
ración te o l^ ic a en Lyón, Turín y Roma, al par que sus
calidades lingüísticas de experto en el idioma y lleratura francesas.»
Sotio voce: escaseamos los salesiarK>s de tropa que
se dejan traspasar y vencer por ese tenue remusgo
que pasa a nuestro lado, por esa inspuaóón capricho­
sa que llama a la puerta l^uem ente. chispa que cen­
tellea sin esperarlo, obligándonos a teclear en la má­
quina de escribir. Incluso esta tarea oscura s u ^ ser
tachada de vaporosa e inútil, de vano o lujoso entrete­
nimiento. (Menos mal que Don Bosco y san Francisco
de Sales y... Valentín Viguera discrepan totalmente de
semejante planteamíerrto...)
Juan Manuel E«plrH>ea, sdb

DON FELIPE
RINALDI,
DIRECTOR EN
BARCELONA-SARRIÁ

a Familia Salesiana de
España tie n e to d o el
derecho de considerar a
Felipe Rinaidi como algo pro­
pio, ya que aquí vivió y tra­
bajó durante doce años, des­
de octubre de 1889 hasta
marzo de 1901. En el tiempo
sucesivo, siendo Vicario Ge­
neral de la Congregación Sa­
lesiana (1901-1922) y Rector
Mayor de la misma (19221931), siguió también pres­
tando grandes servicios a la
España salesiana, a la que
conocía bien y amaba since­
ramente. Pero la etapa de su
vida que ha de llamarse «es­
pañola» se extiende desde
1889 a 1901.

L

i

w

\

★ Este período se divide en dos
segmentos, formados por los tres
años en que fue director de los
Talleres Salesianos de Barcelona-Sarriá (1889-1892) y por los
nueve en que, desde esta capital,
ejerció el cargo de Inspector o
Provincial de todas las casas sale sian as de España y Portugal
(1892-1901). Si el padre Rinaidi
llegó a ser nombrado para este úl­
timo cargo fue porque, en el trie­
nio anterior, dio su talla de gran
salesiano, de un hombre dotado
para impulsar aquella obra sale­
siana todavía incipiente en tierras
de España.
Por eso. los años de directorado
en la casa de Barcelona-Sarriá
fueron muy importantes para el fu­
turo de Felipe María Rinaidi. como
se le llamó siempre en España, y
lo son también ahora para nos­
otros. ya que, conociéndolos bien,
nos permiten adentrarnos mejor
en su personalidad.
Lamentablemente, la información
que tenemos de la actividad de
don Felipe en España es bastante
deficitaria. Sabemos enumerar la
veintena de nuevas fundaciones
que, en un grado o en otro, te
consideran com o promotor, pero
apenas somos capaces de seña­
lar. con datos precisos, su estilo
de educador, de director e ^ r itu a l,
de animador de una canunidad.

k

don
de gobernante. En suma, cono­
cemos poco a don Felipe Rinaidi
in tim o , cuando pasó lo mejor de
su vida entre nosotros.
De todas formas, los testimonios
existentes y parte de la corres­
pondencia epistolar que ha llega­
do a nuestras manos permiten de­
linear algunos rasgos de relieve.
LA O BR A R E A LIZA D A
Una vez en la casa de BarcelonaSarriá, el padre Rinaidi comenzó a
construir en seguida. Da la impre­
sión de un hombre a quien le falta
el espacio necesario para respirar.
El colegio del Santo Angel de la
Guarda, adjunto a los T alleres y
dentro de la propiedad de los
mismos, abrió sus puertas en abril
de 1891. La iglesia de María Auxi­
liadora. que debía sustituir a la an­
tigua capilla, fue inaugurada en
mayo del año siguiente. Ambas
construcciones las pudo levantar
don Felipe gracias a la ayuda de
doña Dorotea Chopitea de Serra.
Antes, en marzo de 1890, bajo la
iniciativa de la misma señora, ha­
bía podido poner en marcha una
fundación totalmente nueva; el ins­
tituto de San José, situado en la
demarcación municipal de Barce­
lona (calle Rocafort). En fin, entre
los años 1891 y 1892, con el per­
sonal salesiano disponible en la
casa de Sarriá. echó los funda­
mentos de las de Gerona y San­
tander.
Como se ve, la obra material reali­
zada fue notable, aunque, por el
momento, don Felipe Rinaidi no
pudo alcanzar el enclave de Mataró ni evitar que se perdiera para la
Congregación la propiedad de la
cum txe del Tibidabo...
¿Quién te había metido al director
de Sarriá en esta serie de nuevas
empresas? Nadie. La única fuerza
propulsora era ese universo en
exp an si(^ que él llevaba dentro
de sí; era el amor a la Congrega­
ción y a cuanto ésta significaba;
era el s ^ tíd o po lítico, que te ha­
cía percibir que su tiempo tenía
que ser de desarreglo y conquista.

DO N FELIPE R IN A LD I.
POR DENTRO
En el director de los T alleres Sa­
lesianos de Sarriá había como
dos personajes Uno era el hom­
bre dinámico, organizador, atracti­
vo, capaz de hacerse querer y lle­
var sus proyectos adelante, hasta
la audacia. El otro era el niño tími­
do y retraído, el campesino huidi­
zo. que decía no tener fuerzas, no
saber hacer, no servir para nada,
no acertar a estar donde tenia que
estar...
La actitud espiritual que más so­
bresale en él durante el periodo
de su directorado sarrianense es,
sin duda, la humildad; ese bajo
concepto en que se tenía a sí
mismo, esa pobreza radical en
que se creía sumido.
Por otra parle, las responsabilida­
des que se le habían dado le te­
nían abrumado. «Yo creo que no
estoy hecho para esto —te c o ­
mentaba un día desde Sarriá a
monseñor Cagiiero—. Carezco de
las cualidades más necesarias (...).
mientras que. entre los indios sal­
vajes, me parece que me encon­
traría bien.»
Así llevó adelante su misión sale­
siana don Felipe María Rinaidi du­
rante los años de directexado en
la casa de Barcelona-Sarriá; entre
la humildad, la angustia y la auda­
cia.
R am ón ALBERO t

Primer
Plano

Don Aniceto,
más allá del diamante

3>\

gue. Más allá del diamante, ¿qué
on A n ice to Sanz Yagüe
hay?
acaba de cumplir tos no­
venta aftos de edad y los sesenta
de sacerdocio. Ha celebrado ★
conHay circunstancias y personas
con las que el tiempo y la natura­
toda solemnidad sus bodas de
leza han sido tolerantes para que
diamante sacerdotales y, forzosa­
a los hombres, por si han perdido
mente. tenía que aparecer en
la memoria de sus méritos, su
nuestra Revista saiesiana y en
presencia se los recuerde. A esta
«Primer Plano». Don Aniceto es un
convocatoria la llamamos boceto,
«abuelo» juvenil. Aún sube las es­
y en boceto ha de quedarse, por­
caleras de dos en dos y podría
que no cabe resumir en un pliego
echarse un pulso con el más for­
noventa años de vida y obra.
nido salesiano de la Inspectoría
de Madrid. En cultura nos dejaría
Todos podemos conocerle: los de
a todos K.O. ¿Y en elocuencia?
muchos años, porque hemos con­
Hablen estas dos páginas del Bo­
vivido con él; los de pocos, porque
letín por lo breve, ya que él no
su figura no escapa a unos ojos
acabaría...
avizores, por poco insistentes que

D

Le deseamos mucha vida y una
inmensa cosecha de sus largos
años de un trabajo que todavía si"Í8

sean. Su tipo molar, de contextura
recia, pelo cano, enmarañado y
abundante, escasamente domado

aún, ancha espalda, cedida a los
años y trabajos, paso lento, algo
vacilante ya, nos deben ser cono­
cidos. Una lucecita que ilumina y
brilla en cierto parapeto de la igle­
sia, delata su nervio garboso, co ­
mo de planta erguida, en labores
de apostolado, aun en tiempos de
lasitud de conciencia. De muchos
ha sido maestro: de otros tantos
mentor y de todos padre espiritual.
Ser longevo es prerrogativa que
no todos consiguen. Pero no es la
longevidad la principal franquicia
para este tributo de reconocimien­
to. En el lapso de tiempo de sus
noventa años conmemora sus bo­
das de diamante con el sacerdo­
cio, la «misión cumplida» de una
ejecutoria sucesiva. El 25 de ma­
yo de 1929 fue ordenado sacerdo-

p
te. fecha en la que impuso a su
vida el marchamo de un instru­
mento de serwcio y comprensión.
Con motivo del cumplimiento de
esta fecha, diversas asociaciones
del colegio le han rendido el tes­
timonio de su afecto; el colegio
mismo, con sus integrantes de
alumnos, APAS, cooperadores;
también la Inspectoría lo hizo el
pasado junio, porque pocas casas
en ella han carecido de su pre­
sencia, y también lo celebraron
los antiguos alumnos.

SU PEREGRINAJE SALESIANO
Vivir, decía Ortega y Gasset, es
una faena de dos dimensiones,
una de las cuales es recibir lo vi­
vido; la otra, dejar fluir la propia
personalidad. De esto se trata pa­
ra todos. Por ello será justo recor­
dar, aunque sea brevemente, las
dimensiones de su vida.
Acompañado por su madre salió
un día de su casa, derechito a
donde lo llamaba su vocación.
Culminados sus estudios en Es­
paña y en Italia, después de un
sexenio en Argentina, muy pronto
fue incorporado a las tareas de di­
rigir, Sucesivamente, fue director
del colegio de San Benito, en Sa­
lamanca (1940-1946): en Azcoitia
(1946-1947); en BaracaWo (19471950): en Estrecho (1950-1956);
en Béjar (1956-1962); en Carabanchel Alto (1962-1965). Vuelve
a Estrecho en 1965.

en lo social, en lo económico y en
lo cultural. Comedores y Colonias
Escolares, clases a rebosar y seve­
ros programas de estudios comer­
ciales surtieron de logrados can­
didatos a las empresas que en­
tonces pujaban por restaurar vie­
jas estructuras e instaurar otras
nuevas. La ingente cúpula de la
iglesia, herida y maltratada por la
guerra — no se olvide que el cole­
gio fue cuartel general del Quinto
Regimiento de Milicias Populares
desde el 19 de julio de 1936 hasta
el 28 de marzo de 1939—, fue re­
hecha y remozada en su totalidad.
El rojizo y endeble baldosín cata­
lán fue sustituido por la negra y
resistente pizarra que hoy la revis­
te. Así otros muchos detalles de
envergadura y número que no es
preciso referir. El colegio ganó en
prestancia y nombradla, de tal mo­
do que a los pocos años siguien­
tes no fue difícil obtener del Minis­
terio de Educación y Ciencia el
permiso necesario para orientar
su trayectoria hacia lo que es hoy.
Lo que sí es dable añadir es que

mejoras de este tipo fueron reali­
zadas en otros colegios por donde
pasó. Cabe decir siempre que otros
quisieron y no pudieron.

EPILOGO EN ESTRECHO
Cerrado su círculo de plenitud laborativa, libre del polvillo de me­
lancolía que pudo recoger en sus
jomadas, no exhausto aún, en 1965
volvió a Estrecho, que lo abrazó
en su informe trapezoide. Para en­
tonces se llamaba el colegio de
San Juan Bautista, nombre que
le dio su fundador en 1922 y que
así obra en los Archivos del Minis­
terio de Educación desde esa fe­
cha.
Hoy aspira a ser recordado no por
sus años, sino por cómo vivió y lo
que hizo con una vida cuyo valor
reside «en perderla a tiempo y con
gracia». Por esto, nosotros trata­
mos de conmemorar en la perso­
na de don Aniceto Sanz Yagüe la
excelsitud de una vida alta sobre
una vida larga. ■

★ Estos datos, por estadísticos, in­
expresivos y poco vinculantes, los
aquilatan los trabajos desplegados
en el sexenio vivido en Estrecho
entre 1950 y 1956. Los números
dicen poco. Por aquellas fechas el
colegio arrastraba la precaria si­
tuación derivada de la guerra civil;
heridas psicológicas sin cicatrizar,
endémica economía, ertseñanza sin
estabilizar, en punto medio entre lo
comercial y lo universitario que vi­
no después. El nombre del colegio
reflejaba, en cierto sentido, su ocu­
pación y estatura; Escuelas «Popu­
lares Salesianas». Pero todo fue
creciendo bajo su mano. Experi­
m entó un notable alivio y progreso

Como buen salesiano,
don Aniceto pasa sus m^ores
momentos con los niños.

19

l

Aquí recibo la ayuda
de muchos amigos.

Miguel Angel Moral Villa
es un húrgales que lleva
veintiséis años en Chile.
A caba de pasar p o r M adrid
y nos deja estas páginas
com o saludo a los am igos
de la Familia Salesiana.
Dice que tiene cuarenta y
seis años y m uchos
kilóm etros contados paso
a paso. Dice que es un
soñador em pedernido,
pero tiene los pies en la
realidad. Actualm ente es
pastor y párroco de Puerto
Natales, ciudad de la
Patagonia chilena. Está
im paciente por volver a su
m isión, donde lo esperan
tantos jóvenes y adultos
que reclaman su
presencia...

N atales, de nuevo
en el h o rizo n te
de mi v id a
MI TRABAJO
★ No soy nuevo en esta zo­
na de los sueños de Don Sos­
co. Estoy comenzando mi tre­
ce año de Magallanes. Conoz­
co los pingüinos, los guanacos
y las avestruces, hasta el pun­
to de ser amigo de ellos. En
Puerto Natales estoy por se­
gunda vez después de quince
años. Antes había trabajado

como vicepárroco y misionero
ambulante entre los chilenos
emigrantes en la inmensa Pa­
tagonia argentina.

de Don Sosco. Muchas veces
pienso; ¡¿Qué sueños tenía Don
Sosco?! ¡Qué tierras, qué pam­
pas! ¡Qué lugares... para sus
hijos o sus nietos....’ vaya usted
a saber!

Volví a la soledad y al silencio
de las pampas despobladas y
esteparias. Volví a los hombres
y mujeres curtidos por el vien­
to y las largas jornadas frías
del invierno magailánico.

Y no lo digo por otra cosa más
que porque lo conozco des­
pués de los años que llevo
trabajando en estos lugares.

Volví a la tierra de los sueños

No es lo mismo ser misionero

20

i

en otros lugares... Los salesianos allí llevamos cien años y
no lo hemos hecho todo. Nos
falta mucho, pero lo que se
palpa es realmente una obra
de titanes.
★ Ahora no se trata de mi­
rar para atrás y admirarse.
Se trata de seguir trabajando
con el mismo entusiasmo y
dedicación con que lo hicieron
Fagnano, De Agostini. Salaberry, Bernabé. Boric o Cádiz...,
etc. Se trata de hacerlo enfren­
tando los nuevos desafíos de
los tiempos nuevos.
La nuestra es una Iglesia jo­
ven. formada una sola, en ba­
se a la inmigración interna de
Chile, y externa, en los prime­
ros tiempos, de europeos. Hoy
esa Iglesia, tan dispersa, se
percibe como una fuerza gran­
de, como un espacio vital de
libertad y de proyección crea­
dora. Esta Iglesia magallánica
se percibe cerca de los po­
Un día recibimos la visita
del Rector Mayor, que, como
sabéis, antes fue Inspector
de los Salesianos de Chile.

bres y al mismo tiempo cerca­
na de las aspiraciones de to­
dos ios hijos del Padre que
crecen por todas partes.
Magallanes hoy es una región
que tiene identidad propia. De
la enorme cantidad de culturas
y de razas de ios primeros
tiempos se ha llegado a con­
formarse como un pueblo de­
finido dentro de la comunidad
nacional chilena, una región
respetada, con cultura y con
historia propias.

LOS SALESIANOS

~

★ Podemos decirlo sin te­
mor: hemos contribuido en casi
todos los campos a que esto
se haya hecho realidad.
La Familia Salesiana podemos
decir que se ha ganado el re­
conocimiento sincero de la
gente. En Magallanes no hay
una persona que no conozca
o de alguna manera esté en
contacto con los salesianos.
Nosotros somos los pastores,
somos los educadores. Muchas
veces escribimos. Llegamos a
los campesinos y a los pesca­

dores. Estamos presentes en
los talleres de nuestras Escue­
las Profesionales y estamos
también apoyando a los pes­
cadores artesanales.
Evangelizamos con nuestra
presencia y con nuestros gru­
pos juveniles. Tal vez como en
pocas regiones de la tierra lo
salesiano forma parte de la vi­
da del pueblo.

Puerto Natales. Nuestra
presencia aquí data de los pri­
meros años del siglo, cuando
los Salesianos, durante las va­
caciones a lomo de caballo o
en carretas, llegaban como mi­
sioneros del Evangelio, visitan­
do las avanzadillas de los pri­
meros colonos, pastores en su
mayoría de la inmensa Pampa
chilena. Con los natalinos he­
mos compartido las muchas
angustias y esperanzas duran­
te setenta años.
•k

Hemos pasado épocas mejo­
res desde el punto de vista
económico. Hoy vivimos en la
incertidumbre. Estamos situa­
dos en la frontera de Chile y

21

1
Empezamos por hacemos amigos
de los niños y jóvenes.

Argentina. Y muchísimos natalinos se ven obligados a traba­
jar en la República hermana,
pero sometidos a las condi­
ciones de la «economía de
guerra», Hoy un minero chile­
no que trabaja en las minas de
Río Turbio gana el equivalente
en España de 10.000 pesetas.
Así es que la parroquia se
abrió para cocer el pan y los
«porotos» (judías) para los que
pasan hambre o para los es­
tudiantes de las escuelas bá­
sicas o de enseñanza media.
★ No podemos negar que el
Señor ha sido generoso con
nosotros. Nuestra tierra y nues­
tros mares son ricos..., pero sin
medios no es fácil explotar to­
dos estos bienes de Dios. La
carne que producimos hay que
venderla muy lejos, lo mismo
que la lana o los mariscos y
pescados.
Es cierto que tenemos mucho
carbón..., pero, en esas condi­
ciones, ¿quién nos lo compra­
rá?
¿A qué político del Norte le in­
teresamos nosotros? ¿A qué

compañía comercial le intere­
sa invertir?...
¿A qué misionero se le ocurre
aterrizar aquí?
Porque se necesita anunciar el
Evangelio y mostrar que Dios
nos quiere y que les quiere a
los hombres y mujeres de Tie­

rra del Fuego o de Natales.
Los hijos de Don Sosco y la
Familia Salesiana seguiremos
acompañándoles y trabajando
con ellos.
★ Recostado en el fiordo A l­
mirante Montt, una impresio­
nante entrada del Pacífico ha­
cia el corazón del sur del con­
tinente americano, se encuen­
tra mi pueblo.
Es alegre... por sus casas y
por sus gentes... y por los ce­
rros que nos rodean por do­
quier. Y porque está edificado
sobre el carbón. Y porque con
sus gentes se prolonga en la
Patagonia argentina y porque
en sus aguas saltan los sal­
mones y bullen los peces y los
mariscos en sus numerosísi­
mos canales... y porque sus
cielos son surcados por multi­
tudes de aves... y porque en
sus praderas engordan hermo­
sos lanares y numerosos va­
cunos Hereford.

La gente chilena
es muy comunicativa y ategre.

22

Mi pueblo tiene también sus
tristezas... Dependemos del
Norte, de ios caprichos de los
precios, de un simple choque
sobre el molo donde desem­
barcaban los camiones del
«Roll on Roll Off». Nos afecta
profundamente, casi de muer­
te, la situación sociopolítica de
la República hermana o de la
nuestra. Un enojo o malenten­
dido por un hito en la frontera
puede significar el destierro o
la inseguridad.
Yo soy e! pastor-párroco de
los natalinos. Y he vuelto des­
pués de los años. Han pasado
tantas cosas... Yo soy diferen­
te, aun siendo el mismo... Co­
mo mi pueblo, que ha cambia­
do..., pero sigue siendo Nata­
les.
Aquellos que yo bauticé hace
quince años son ahora jóve­
nes en la plenitud de sus fuer­
zas. Y me dicen: «Padre, en mi
casa hay una foto suya. Yo
era guagua y usted me bauti­
zó.»
Otros me comentan: «Mire, és­
tos son mis hijos. Usted nos
casó.» Y un antiguo monitor de
Colonias: «Te acuerdas. Miguel,
cuando comenzamos las Co­
lonias..., cuando fuimos al Pai­
ne o a Dorotea...»

Yo no soy el Buen Pastor. Yo
no alcanzo a retener los nom­
bres de las ovejas de este re­
baño. Cuando en las noches
vuelvo a mi comunidad salesiana, en mi oración se lo
cuento al Señor: «Tengo un
problema, Señor; Tú conocías
su nombre. Yo no... Soy remalo
para recordar a la gente por
su nombre.»
Pero mis ovejas son hasta de­
masiado buenas. Hasta me dis­
culpan que no les llame con
su nombre.
★ Aquí estoy sirviendo des­
de el mes de marzo. No les
cuento mejor todo lo que me
costó dejar mi anterior servicio
en la obra salesiana de San
Ramón, en Santiago. Entre los
que hemos consagrado nues­
tra vida a Dios en los pobres,
siempre cuesta mucho lo que
se deja, aunque dejarlo todo,
por más que duela, cuando se
trata del Reino, siempre vale la
pena.

NATALES
Y LOS SALESIANOS
★ No sé si Natales creció
con nosotros o nosotros cre­
cimos con los natalinos. Tal
vez ambas cosas. Lo cierto es

que hoy ya no se pueden se­
parar. Hay una huella muy hon­
da dejada por todos los que
nos precedieron. Imprimieron
el sello de la bondad.
Aquí, donde todo es agreste,
duro y hermoso a la vez. mu­
chos hermanos no tienen tiem­
po para contemplarlo y expe­
rimentarlo. Pero una raza de
hombres nacidos y crecidos
en la Escuela de Don Bosco
habla con este lenguaje tan
increíblemente necesario.
Aquí se sembró con mucha
esperanza. Al llegar soy testigo
providencial de la abundante
cosecha que me toca recoger.
★ Uno de estos días que re­
cién pasaron con los jóvenes
de la parroquia despedimos a
un joven que quiere él mismo
también convertirse en após­
tol de la bondad, Buen Pas­
tor, al estilo de Jesús, como
Don Bosco.
En Natales también él escu­
chó su voz: «Necesito tu co­
razón para seguir amando.»
Se llama Javier Cárdenas.
¡Animo, Javier! Muchos te es­
tamos apoyando. Muchos her­
manos te necesitan.

P. Miguel Angel Moral, sdb
Párroco de Puedo Natales

★ Y me doy cuenta cómo los
pequeños detalles se adhieren
profundamente en la mente de
los niños y de los jóvenes. Y
concluyo para mis adentros:
«Yo no le daba importancia a
los pequeños gestos...»
No tuve que pagar el piso
cuando volví a este pueblo. Yo
ya era de los suyos. Y hay
personas que me lo dicen en
la cara: «Tú eres de los nues­
tros.»
Cuando escuché esta frase se
me encogió el corazón. Y me
acuerdo de Jesús cuando de­
cía: «Conozco mis ovejas y las
mías me conocen a mí» (Jn
10.14).

Preparamos nuestras catequesis
con esmero.

23

AKPE TOGO

te

He te n id o este verano la ocasión de pasar una experiencia en A frica, concretam ente en
Togo. C reí que podía ser de utilidad contarla en el Boletín Salesiano, com o inform ación
y para seguir en contacto con nuestros herm anos que trabajan p o r allí.

a ce a h o ra u n m es q u e
v o lv í d e m i e s ta n c ia en
T o g o . A hora que la m ente
un po co m ás fría y que el tie m ­
po m e ha dejado reflexionar un
poco más, -os cue nto io que ha
sido, a grandes rasgos, mi expe­
riencia.

H

El m otivo que m e llevó a salir
para A frica fue un m otivo de
discernim iento. El tem a de la
m isión en A frica resonaba en mí
de una m anera un tanto espe­
cia l y quería saber si esta ca m panita no quería indicarm e que
D ios m e quiere hablando ewé.
Por eso el Inspector m e invitó a
pasar una exp eriencia por allí y
co n o ce r un po co el ambiente.
La ave ntura viene sola y c o ­
m enzó desde qu e puse los pies
en A frica, pues en el aeropuerto
de A bidján nos detuvo la policía,
hasta qu e puse los pies en Sevi­
lla, dond e m e qued é sólo co n el
pasaporte en la m ano, pues las
m aletas se m e perdieron.
En los tres países que he esta­
do. C osta de Marfil. Benín y T o ­
go. especialm ente en este útti-

IS.Í

*24

mo, que es dond e he estado to ­
do el tiem po, m e he encontrado
está
una realidad m uy distinta de la
que m e im aginaba. P osiblem en­
te tenía una idea m uy m itificada
de las misiones.
Por una parte, m e encontré, a
nivel general, a nivel político, so­
cia l y eco nó m ico, lo que es la
realidad del T e rce r Mundo. C o­
sas de infraestructura que pa re­
ce n norm ales no existen. Tuve
o ca sió n de visitar el hospital K a­
ra, y la verdad es que no vi
nunca cosa igual.
Por otro lado, la dependencia
e co n ó m ica y política de los paí­
ses de O ccide nte ha ce que la
esperanza de desarrollo sea es­
casa.
Pero no soy yo el m ás indicado
para h a ce r análisis del T ercer
Mundo.
Y, por otro, a nivel m ás p a rticu ­
lar, existen entre los togoleses
m uch os problem as, y esp ecial­
m ente entre los jóvenes. El tem a
de la fam ilia, la poligam ia, el tra ­
bajo. la educación... M uch os c h i­

c o s tienen que «buscarse la vi­
da» pronto, pues en casa no hay
nada que hacer.
La evangelización se encuentra
con todo el problem a de la incuituración: la diferencia de c u l­
tura entre los m isioneros y los
togoleses; la lengua, la m en ta li­
dad, las costumbres... Pero, por
otro lado, la Iglesia local, que es
quien tiene m ás fácil la eva ng e­
lización de la cultura, parece no
estar m uy con ven cida del tema.
Por eso. la labor qu e se está
haciendo en la M aison Don S os­
co de form ación (es el noviciado
y po stnoviciado) es el futuro de
la obra evangelizadora de los salesianos en el A frica del Oeste.
★ M ás en c o n c re to , sobre lo
que he he cho allí os cue nto que
he parado poco y. au nq ue a rit­
m o africano, m e he m ovido por
todo el país.
He estado en tres cam p am e n­
tos, donde he aprendido m ucho
de la ge nte de aquí y do nd e he
tenido m is «aventuritas», conrw
los via jes en el T a lg o togolés, o

la degustación de la gastrono­
mía ewé, etc., etc.
En Lomé también he pasado
muchos días y, con la ayuda de
algún joven de la parroquia, me
he pateado todo el territorio de
la misión.
En Kara estuve haciendo de to­
do un poco; por ejemplo, hice
mis «pinitos» en medicina, pero,
claro, casera.
Todo esto me ha servido para
conocer más y mejor lo que es
la realidad del país y sus gentes,
para conocer más de cerca lo
que es la vida misionera y, mi­
rando al futuro, ver los distintos
campos de trabajo, necesidades
y algunos medios de acción.
★ Otra cosa bonita ha sido la
experiencia de comunidad y
fraternidad que he tenido con
todos los salesianos y salesianas de allí. De una manera es­
pecial, los salesianos de la pa­

En la página anterior estamos
atravesando el lago Togoville.
Y aquí vemos unos jóvenes
de la parroquia
de María Auxiliadora de Lomé.

r

rroquia. que fue mi comunidad,
Santos Marcos, estuvo muy cer­
cano en los campamentos, en­
señándome cosas, dando bue­
nos consejos y, sobre todo, dán­
dome ánimo, que lo necesité
muchas veces. Lo mismo tengo
que decir de Justice, que tam­
bién me acompañó en uno de
los campamentos. Paco Carrillo
también estuvo muy atento, es­
pecialmente las dos veces que
estuve enfermo. Con los tres hi­
ce pronto buenas amigas y me
ayudaron y enseñaron muchas
cosas.

vestiros como el BuBú. Allí nos
está esperando una inmensa
mies de jóvenes y mayores ne­
cesitados,
■A

*



He titulado este artículo «Akpe
Togo», que quiere decir en ewé
«Gracias. Togo». Gracias por mu­
chas cosas, pero especialmente
por descubrir un poco más lo
que Dios quiere de mí.
Jesús Jarque G a rd a , sdb

De los otros hermanos, los de
Akodessewa y Kara, otro tanto
de lo mismo.
★ Bueno, ahora estoy de nue­
vo en Granada, pero esto ya no
será como antes. Me he traído
muchas cosas. Además de al­
gunos souvenirs para la familia y
la comunidad, buenos recuerdos,
el ritmo africano, la «filosofía del
cubo»..., me he traído sobre todo
el deseo de volver.
La verdad es que dejar tu país,
tu gente, un poquito de ti mismo,
no es nada fácil, pero ser após­
tol tiene estas cosas. De todas
formas merece la pena. Por eso
no descartéis nunca la idea y
animaros a coger la maleta y

25

NOTICIAS
EL COLEGIO DON BOSCO,
A 45 KILOMETROS DE BEIRUT.
UN CAMPAMENTO:
“ LOS HIJOS DE LA PAZ"________

nuevos inquilinos y sus enseres. Se
pensaba que todo iba a terminar en
pocos días o, cuando más, algunas
semanas; en cambio, van corriendo
los meses...

Victorio Pozzo fue hasta hace unos
años superior provincial de los saiesianos de Oriente Medio. Ahora diri­
ge la obra de El Housson, en las
montañas de Líbano. Escribe:

Como salesianos, pensamos inme­
diatamente en los jóvenes, a fin de
poder llegar también a sus familias,
tanto si eran de refugiados como a
las del lugar, que habían abierto de
par en par sus puertas para recibir a
parientes y amigos. Con la generosa
y competente colaboración de un
grupo de voluntarios —amigos de
Don Bosco y, quizá pronto, celosos
cooperadores— organizamos una
especie de colonia para los peque­
ños —de cinco a catorce años— y

'•Tras unos años de calma r^. ativa
en Líbano, en marzo estalló de nue­
vo con violencia la guerra, que trae
consigo la asoladora noticia diaria
de destrucción y muerte (...).
Al intensificarse los bombardeos en
las zonas residencíales se produjo la

UNIVERSIDAD SALESIANA:
“ ISCOS ” O INSTITUTO
DE CIENCIAS
DE LA COMUNICACION SOCIAL
En la Universidad Salesiana de Ro­
ma ha comenzado a funcionar un
nuevo instituto: el que da título a es­
tas líneas. La nueva Facultad dará
los grados de licenciatura y docto­
rado en Ciencias de la Comunica­
ción en tres especialidades: infor­
mación (ediciones y periodismo), ani­
mación (música, teatro) y radio y te­
levisión.
ITALIA: INSPECTORIA
DE SAN MARCOS:
700 “JOVENES
PARA LOS JOVENES"
Un fin de semana original, divertido
y bien aprovechado fue el encuentro
de setecientos jóvenes en el cam­
pamento de Caorle. Se trataba de
formar líderes dispuestos a trabajar
en la animación juvenil. Fue una ex­
periencia significativa. «Como ha di­
cho el Papa —confesaba uno de los
participantes—, un cristiano sólo es
verdaderamente tal cuando dedica a
los demás parte de su tiempo libre».

GABON: NUESTRA FIESTA
NO DEBE CONCLUIR
En Gabón los salesianos de París
tienen cuatro presencias. Las Hijas
de María Auxiliadora, del mismo ori­
gen. trabajan en otros dos lugares.

Líbano: Clase al aire libre
del grupo «Hijos de la Paz»,
de El Houssoun, en un rato
de recogimiento.

huida de decenas de miles de per­
sonas desde Beirut y sus alrededo­
res hacia un posible refugio en la
montaña, lo más lejos posible del
fuego artillero.
Así. el colegio Don Bosco. situado
en la altura, a 45 kilómetros de la
capital, en un lugar más tranquilo, se
vio exaltado literalmente como lugar
más seguro (...).
Cerrado el colegio, en el que todavía
quedaban doce familias de vetera­
nos refugiados (¡desde 1983!), el edi­
ficio se llenó en pocos días con 250

26

un campt.mento escolar para los
más crecidos: de quince a veinticin­
co años.
De modo estable u ocasional, he­
mos podido atender hasta ahora a
varios centenares de niños y jóve­
nes, siguiendo un programa de acti­
vidades recreativas y culturales, a
las que acompaña una sólida for­
mación religiosa. Todo ello en el
clima de apertura y flexibilidad pro­
pio del estilo de san Juan Bosco (...).
Este programa se refleja en nombres
sugestivos: colonia "Amigos de San­
to Domingo Savio". campamento es­
colar "Los hijos de la paz"... Es signi­
ficativa la presencia de unos veinte
chicos musulmanes. En un Líbano
deshecho por la violencia y el fana­
tismo hay una semilla de esperanza.»

En Oyem. por ejemplo. Unos y otras
desarrollan apostolado juvenil y ca­
tequístico. El pasado mes de julio
organizaron conjuntamente una es­
pecie de oratorio volante: una se­
mana en cuatro localidades distintas.
Antes hubo unos días de reflexión y
preparación con un grupo de ani­
madores jóvenes. Tema: el sistema
preventivo. «En un contexto educati­
vo fundamentalmente represivo —es­
criben de Oyem—, nos esforzamos
por ayudar a descubrir las intuicio­
nes esenciales de Don Bosco y su
novedad: razón, religión, amor. Los
jóvenes animadores salieron entu­
siasmados.»
El primer tumo se realizó en el cen­
tro de las Hijas de María Auxiliadora.
Estaba previsto un centenar de asis­
tentes. Acudieron el dobte, sin contar
los futbolistas del torr>eo «Don Bos­
co». A pesar del número y la limita-

NOTICIAS
aiíam cite le s itac^es, teñía fiüfeajjmg.

osrri rcrnitelcacii lúas smirnaecnes Iri®'
l&s pmniiteí^ íüw^ 5 ^ o© ptecenica y aTTSteiÍGteá..
íLa serrsrfe s u e r te se 'ís a te ^ c e
ce [las
te)
Etemi
Suscai. ILa t© ?:® * se va a ufffi
grases s te inospliaideci cS? uete eS'
Cuítete púteicte epe cecie su c a to y
oi3s aJtes Por úI dsool la cuacta se­
rrarla eS oratefio ptania sus terviias
en u ra alósa práüoma a Oyem
ConduKia la fiaena. todos los anima­
dores —salesxanos. H^as de María
Auxiadora y jóvenes volúntanos—
se feumeron para unos instantes de
solaz y revisión con miras al futuro.

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que estuvo m m a «fies 'tH' inw 'iviua.’
padre O x e o

COLOMBIA; O EN A i¡ ^
DE LABOR SALESIAHA
EN COLOMBIA. tCS0 -1S9«
Colombia se
celiíter.ir- ctr*
¡a mave* scú'--'-'iposteiit' ’.'ii csi-

« o si [faitt) iw uiíuoíhtís» quuuirtijU’
unMhítr«ÍÜ»«»i [hílWKíi8tíHW-3ei[IÍW<h
ttn $i}i(n«l«W'ihHíiótuH; dw uilw »*lHi v.
Eli cem w»i«rtí' fié'
'yw ií Qéríhí'
riéiWvaciWh pioluildiíi 'ftti éiHhfflti. dtt'
saih JKaih Iftihiihíi put#a- swi élfjeitKih
gjtiféitíii líuWUi dé' ríUíéveii 'éi ééllüBdr
dé' iiwééiiéi iñ « '
sé iw iíi éííi «íélpméiéi QdiW ) iiáirHiiOi
iSUléWéééi •

líTMJiA.im tM A A C D O A M l
PARA C t D C $ A M ^ L ^

MADAGASCAR: PRIMERAS
VOCACIONES EN MADAGASCAR
ANS ha dado ya en diferentes oca­
siones noticia de las obras que los
salesianos y las Hijas de María Auxi­
liadora tienen en Madagascar. Tam­
bién dio a conocer, en su día. el
nombramiento de un delegado del
Rector Mayor en la persona de Luis
Zuppini. Este, apenas le fue posible
conocer la realidad, tras los ptrimeros
contactos, mandó un informe deta­
llado al Consejo General de la So­
ciedad Salesiana. Después hizo, con
los hermanos y hermanas de la
nueva circunscripción, ejercicios es­
pirituales en el monasterio benedic­
tino de Mahitzy: durante aquellos
días pudo oír y estudiar diversos
problemas.
Las perspectivas más interesantes
se deben, ante todo, a la presencia
de las primeras vocaciones No va a
ser posible tener en seguida un rx>viciado propio; por ello, el próximo
curso los candidatos a la vida salesiana irán a Zaire. Sin embargo, de
1990 a 993 se espera poder organi­
zar en la isla todas las estructuras
de Iniciación en la vida salesiana
El problema de los p rt^ m a s , que
podríamos llamar clásico desde la
época de Don Bosco, es la despro­
porción entre las personas con que
se cuenta y las necesidades y ur­
gencias... A pesar de todo, los sale­
sianos y las Hijas de María Auxilia­
dora hacen ya lo imposible, en la
esperanza...
ÉL ACTUAL CONSEJERO
SALESIANO DEL PACIFICO
Y CARIBE, NUEVO OBISPO
Monseñor lgnaciQ*Antonío Velas*
co, vicario apostólico. B padre Ig-

M irtin o Q ir c ii B o n illi ha i«atua«U> un vrai« a ('ultMiihta !><»«
p ro ysd o i d« ly u d i l la i do i Inittec.U xiii (Htluméiaiuik y a Wk téuiu de lab
Hifi» de éM S ig r id o i Coriuontm de) (tadie t t i i i Vaitaia
Aquí lo vemos en uní pia/a de Ciilaúena de tndiM

lenano de la llegada do loa SitloMa
nos de Don Bosco Ya oslán turnia
dos la comisión cornial y su uomiió
ejecutivo
Para e l l 1 de tobroro. día coniona
no. habrá diversos aciot on Bogotá
se televisará la Eucaristía, coiobrada
por un obispo salosiano, en lo pin/a
de Bolívar se realizará un acto rnuili
tudinario. al que acudirán los |óvo
nes con pancartas, bandas do mú'
$»ca y de lambores, eslóganos, ote
En la catedral, c*i arzobispo do Bogo
tá presidirá ima concolobroción ou<
carísiica En el programa (igurari r;iras
celebraciones e micialivas. pr^ r^ompk). campoboscos luvoniios. simpo-

t M da (x lutHa dtiii
Viuaoo
toiluvo ah Coila Oon Tii":.' <> pata
aitintii al ( ivigfaiMj <So Im>: jovoitab ati
liados al VlAmlanaílii ihltsOial.MWial
para oi {}heairf>i)o (Vifü t^iw.iohiob
da allos hablan ftaeado la nr«rTia antanor an latieiiir'xi i artUi y iiiaoiori
Por la rnahana duiarila uua r/aia
brar.ión liiurgtr e muy rxaii é^rada
(r^HUtf\ al r^oribctom gartorai ría Mi
birrias riaiafaiariab LzabiM^b lab na*
t)i(Íi al flaou^ Mayrx qua laa hi/i> yar
la iffifjfiftaré..a rja •=:/ ->íx,iófi lanéj
(tara la Wfa i ^ r ‘:'x.ai i/xfV j para i^ia
vííOaoiófi da barv-.ii) ari la rx^iwryf.f,tóri da un futuro rriayx y d'aiifrér ■

21

Fueron
a la Casa del Padre
Su relación con la Familia
Salesiana hizo que la de­
voción a María Auxiliado­
ra calase profundamente
en su corazón.

Doña Severina
Guijas Cerrato
En Hornillos de Cerrato
(Palencia) falleció doña
Severina Guijas el 28 de
octubre de 1989; había
nacido el 23 de octubre
de 1901 en Herrera de
Valdecañas (Palencia).
Mujer humilde y sencilla,
servicial, alegre y profun­
damente cristiana. Mien­
tras pudo, asistió diaria­
mente a la Eucaristía.
Muy joven todavía, se vio
sola con seis hijos y otro
que venía de camino. Pe­
ro no se amilanó. Se arre­
mangó de brazos y se
puso a trabajar con ahín­
co para sacar adelante la
familia lo más dignamen­
te posible. Como mujer
valiente y enérgica, con
su temple de castellana,
curtida por el aire, el pol­
vo y el sol de la estepa,
sacrificada al máximo,
realizaba todos los traba­
jos del campo. Su plena
confianza en Dios le ayu­
dó a superar las dificulta­
des y contrariedades de
la vida, de tal modo que.
gracias a su esfuerzo y
trabajo, nunca faltó el pan
para sus hijos y aún le
llegaba para dar con ge­
nerosidad a los pobres
Asi logró, sabiendo vivir
con fe. entrega y amor,
llegar a los ochenta y
ocho años que Dios le
concedió de vida.
Devota de la Virgen, y
desde joven su camare­
ra. siempre le rezó el san­
to rosario. Era su devo­
ción preferida, que lo re­
zaba lodos los días en
familia antes de cenar.

28

El funeral fue verdadera­
mente emotivo; concelebró
un gran número de salesianos y el Consejo Ins­
pectoría! en pleno, veni­
dos de todas las casas
cercanas de la Inspecto­
ría de León; profesores y
alumnos del Centro Don
Sosco, de León, en cuya
comunidad trabaja su hijo
salesiano, Matías Antolín;
personal de servicios, que
vinieron a participar en la
Eucaristía en la iglesia que
la vio crecer y madurar
en la fe, en la misma
iglesia y ante el mismo
sagrario en los que vivió
su fe de joven esposa y
madre durante una vida
llena de alegrías y penas.

una familia cristiana don­
de surgieron dos vocacio­
nes religiosas: sus herma-.
nos Miguel, salesiano, y
Rosario, del Rebaño de
María. Por necesidad la­
boral de su esposo se
estableció en Valencia,
hace ya veintisiete años.
Con ánimo optimista y
alegre supo siempre su­
perar las no pequeñas di­
ficultades que le presentó.
la vida. Ejemplar madre
de familia numerosa, su­
po integrar de forma ad­
mirable su tradicional con­
cepción de la vida con
las nuevas inquietudes y
aspiraciones que llegaban
a su casa con la vida de
sus hijos-

t en Valencia el día 11
de octubre de 1989
Hace más de dos años
fue intervenida quirúrgica­
mente de un tumor intes­
tinal y desde entonces
sabíamos de la gravedad
de su enfermedad, /a que
el mal había hecho me­
tástasis en otros órganos
vitales.
Con una gran serenidad
y entereza de espíritu ha
vivido su proceso, lento
pero imparable.
Había nacido en Montilla
(Córdoba) el 21 de febre­
ro de 1928. en el seno de

Luchó hasta el final por
mejorar su salud, acep­
tando. sin perder el senti­
do del humor, el dolor
que le acusaba en diver­
sas ocasiones. Son signi­

Con su trato alegre y ser­
vicial, supo crear profun­
das relaciones de amis­
tad con todos los que se
relacionaba.
El último mes de su vida,
internada en el hospital y
apagándose lentamente,
ha sido para toda su fa­
milia. y en especial para
ella, una prueba dura de
superar. Tenemos la con­
fianza de que el Señor le
habrá recompensado ge­
nerosamente tanto sufri­
miento.

Doña Carmen Raigón
Córdoba

Bosco. rubricaba la últi­
ma página del libro de su
vida terrena. Su corazón
dejó de latir tres semanas
después de haber pasa­
do por el quirófano para
intentar recuperar, con
nuevas válvulas, las ener­
gías que últimamente le
fallaban. Tenía cuarenta y
nueve años.

El agradecimiento de su
familia a los hermanos de
la Casa Inspectorial de
Valencia, que nos acom­
pañaron en momentos tan
duros, a la Familia Sale­
siana de Montilla y de
Córdoba, que de forma
tan masiva quisieron es­
tar con nosotros; a la co­
munidad parroqial de Ma­
ría Medianera, de Valen­
cia. y a todos los que. al
no poder estar presentes,
nos han hecho llegar sus
sentimientos de dolor y
su oración.

Feli Reguera
En la madrugada del día
27 de octubre de 1989.
nuestra hermana Feli Re­
guera. voluntaria de Don

ficativas las muchas sim­
patías que se ganó en el
hospital entre los compa­
ñeros y el personal sani­
tario.
Ella conocía muy bien la
escuela del dolor, porque
había desarrollado gran
parte de la actividad apos­
tólica en medio de los
enfermos, colaborando
con total entrega en La
Fraternidad.
Precisamente en los en­
cuentros de este movi­
miento apostólico pudimos
conocerla dos voluntarias
y hablarle, posteriormen­
te. de la existencia de
nuestro instituto. Acogió
inmediatamente la pro­
puesta, porque correspon­
día al gran proyecto de
su vida: «Consagrarse to­
talmente a Dios en la secularidad.» En más de una
ocasión nos reprochó el
demasiado tiempo que
habíamos esperado para
decírselo.
Desde los primeros mo­
mentos que forma parte

det instituto destaca por
su gran disponibilidad y
entrega ante las exigen­
cias de la consagración
secular salesiana. No co­
nocía demasiado a Don
Bosco e inmediatamente
leyó con avidez los libros
que se le sugirieron, en­
tusiasmándose con su vi­
da y su obra.
Es digno de admirar el in­
terés que tuvo por enri­
quecer su formación. No
perdía cualquier oportuni­
dad de asistir a cursillos,
conferencias y todo tipo
de actividades formativas.
El carisma salesiano le
caló muy hondo y pronto
lo encarnó en su vida. En
seguida se dio cuenta que
la catequesis debía ocu­
par un lugar importante y
a ella se entregó con la
mayor dedicación y alegria.
En el campo laboral, no
le faltaron serias dificul­
tades, pero la entereza y
la serenidad para afrontar
los problemas, confiando
totalmente en Dios, esta­
ban siempre presentes.
El funeral se realizó en su
pueblo natal. Villamorafiel
de las Matas, de la pro­
vincia de León.

Manolo Rodríguez
Araújo
t el día 17 de agosto de
1989 a la edad de treinta
y ocho años, en San Mar­
tín (Orense) a causa de
un inesperado y extraño
accidente de carretera
cuando acudía a formali­
zar unos papeles del pa­
ro. El dolor y la sorpresa
helaron el aliento de su
familia y amigos, que
siempre le quisieron con
afecto extremado.
Desde hacía unos diez
años permanecía en ca­
sa al lado de sus padres,
ya mayores, haciendo de
todo y siendo todo para
ellos. Había dejado un
buen trabajo en una fá­
brica de Madrid, exclusi­
vamente para cuidar a
sus padres.
Por sus primeros estudos
en el colegio de Altariz
(Orense) y más tarde su
formación profesional en

¡NO llores sí me am as!
S i conocieras e l inmenso m isterio de! Ciefo donde ahora vivo,
estos horizontes sin fin, esta lu z que todo h envuelve y lo penetra,
no Horarias, s i es que m e amas.
Absorto estoy ahora en e i em beleso de Dios,
en su herm osura inexpresable.
¡Las cosas d el tiem po son tan pequeñas en su com paración!
M e han quedado e i am or h a d a ti y una ternura Ilim itada
que n i siquiera puedes im aginar.
Vivo en un gozo purísim o.
En las angustias de ia vida piensa en este Casa,
donde un dia estaremos juntos, a ia otra orilla de la muerte,
saciados en ia inagotable fuente de ia dicha,
d el infinito amor.
¡N o llores s i es que m e am as de verdad!

los Salesianos de Atocha,
hicieron de él un auténti­
co y ejemplar antiguo
alumno, gurdando muy
gratos recuerdos de tan­
tos salesianos y compa­
ñeros de sus años ató­
chanos. Muy pocos 24
de mayo faltó a la cita en
un colegio salesiano para
honrar a María Auxiliado­
ra por dos razones: cum­
plía años y llevaba muy
dentro la devoción a la
Virgen.
El funeral fue verdadera­
mente emotivo por la pre­
sencia de tantas perso­
nas que le estimaban y le
querían, desde los más
pequeños, con los cuales
se hacía un auténtico ni­
ño. hasta los más jóve­
nes y maduros. Destaca­
mos la concelebración de
un nutrido grupo de sale­
sianos y presidida por los
Padres Provinciales de
León y de Madrid

Don Frar>cisco Ruiz
Esquível
t el 23 de septiembre de
1989.
Tras larga y penosa en­
fermedad. ha fallecido en
Sevilla el ilustrísimo señor
don Francisco Ruiz ^ u i vel. Nacido en Sevrilía el
19 de febrero de 1903.
ingresó en el Cuerpo de
Funcionarios de Correos

y Telecomunicaciones a
la edad de dieciocho años,
cursando posteriormente
estudios en la Facultad
de Filosofía y Letras de
esta Universidad, obte­
niendo su licenciatura en
la rama de Historia. A
.partir de entonces com­
paginó su trabajo de fun­
cionario postal con el eiercicio de la docencia en
diversos centros de en­
señanza de esa capital,
enseñando Geografía e
Historia a muchas gene­
raciones de sevillanos.
Fue administrador princi­
pal de Correos de Sevilla,
decano del Ilustre Cole­
gio de Doctores y Licen­
ciados en Filosofía y Le­
tras y en Ciencias y con­
sejero nacional de Edu­
cación durante una larga
y fecunda etapa. Asimis­
mo. desempeñó importan­
tes funciones en los ám­
bitos de la pol^íca local
sevillana, como diputado
provincial y concejal de­

legado de Cultura y Edu­
cación. así como presi­
dente del Consejo de Ad­
ministración de la Empre­
sa Municipal de Transpor­
tes Urbanos durante mu­
chos años, siendo fruto
de su generosa entrega y
dedicación a estas tareas
ciudadanas la construc­
ción de numerosos gru­
pos escolares y escuelas
de formación profesKXiai
en Sevilla y su provincia
En premio a su labor, fue
galardonado con numero­
sas distinciones, como las
encomiendas de Alfonso X
el Sabio, de Dsneros. de
la Orden del Mérrto Ovil,
etcétera Colaborador y
gran amigo de la obra salesiana. durante muchos
años la madre de su mu­
jer fue camarera de la
querida imagen de María
Auxiliadora en Carmona
(Sevilla).

29

T
Cruces-Baracaldo: Doy
gracias a María Auxilia­
dora y a san Juan Bosco
por favores recibidos y
les pido sigan ayudándo­
nos. Envío un donativo.
M ari Carmen.
Madrid: Soy una joven
estudiante que tenía una
gran dificultad en una
asignatura de curso. Re­
currí a Nuestra Señora
implorando su ayuda y
me he sentido agraciada
con su misericordia. En
prueba de agradecimien­
to, y por la festividad que
hoy se celebra (24 de
mayo), ruego acepten es­
te donativo que envío.
J. J P.

lesiano. María Pilar Can­
tos.
Alcalá de Henares; En­
vío un donativo para con­
tribuir a la publicación y
difusión del Boletín Salesiano. Y damos gracias
a María Auxiliadora y a
Don Bosco por tantos do­
nes, tanta fe y esta luz.
Familia Cano Ayuso.
Huesca: Envío una limos­
na en agradecimiento por
la curación de mi hija.
Durante su enfermedad la
encomendé a la beata
Laura Vicuña. Gracias. M.
L. G.

Pamplona; Deseamos ha­
cer público nuestro agra­
decimiento a María Auxi­
liadora por un favor reci­
bido. Y para que siga ayu­
dándonos enviamos la li­
mosna que prometimos.
£ £

Málaga: En acción de
gracias a María Auxiliado­
ra por favores recibidos,
envío un donativo. Enri­
que Sánchez Fernández.

Plasencia (Cáceres): En­
vío un donativo en acción
de gracias a María Auxi­
liadora por un favor reci­
bido. Aracetí Vic&ite.
Valencia; Doy gracias a
María Auxilidaora y a la
beata Laura Vicuña por
los múltiples favores re­
cibidos y envío un dona­
tivo para que sigan es­
cuchando mis súplicas.
A. a
Talavera de la Reina;
Damos gracias a María
Auxiliadora y a los santos
salesianos por el feliz re­
sultado en sus estudios
de mi sobrino. Enviamos
una limosna deseando se
pubüque en el Boletín Sa-

Béjar (Salamanca): Da­
mos gracias a María Auxi­
liadora por su intercesión
y ayuda en momentos de­
cisivos, como así ha su­
cedido después de que
un hijo nuestro hubiera
sufrido un gravísimo acci­
dente de circulación. Acu­
dimos a María Auxiliadora
cuando la situación era
desesperada: Ella nos si­
gue ayudando y contamos
con la esperanza del total
restablecimiento de nues­
tro hijo, aceptando siem­
pre la voluntad del Señor.
Enviamos una limosna pa­
ra las obras salesianas
con el deseo de que se
publique en el Boletín Sa­
lesiano. Familia Sánchez
Muñoz.
Béjar: Doy gracias a Ma­
ría Auxiliadora, a san Juan
Bosco y a santo Domin­
go Savio por favores re­
cibidos y para que nos
sigan ayudando; deseo se
publique en el Boletín Sa­
lesiano y envío un dona­
tivo para las obras salesianas. M. I G.

Carcabuey (Cárdoba):
Enviamos un donativo en
acción de gracias a Ma­
ría Auxiliadora por favo­
res recibidos. Custodia
Zafra.

Elche: En acción de gra­
cias por favores recibidos
de la venerable Dorotea
de Chopitea y del vene­
rable don Felipe Rinaidi,
envío un donativo. María
de! Carmen Pascua! Sel/és

ración, está saliendo ade­
lante. Doy un donativo.
Maruja Pérez.

EIda (Alicante); Envío un
donativo en acción de
gracias a María Auxilia­
dora y en cumplimiento
de una promesa por una
gracia recibida. Deseo se
publique en el Boletín Salesiano. Y animo a todos
a que acudan con con­
fianza a María Auxiliado­
ra. María José Sáez Campayo.
Astudillo; Doy gracias a
nuestra Madre Santísima
Auxiliadora por haberme
escuchado y salir bien de
una operación quirúrgica.
Envío un dorrativo y de­
seo se publique en el Bolétín Salesiano. A G.
Madrid: Le pedí a la Vir­
gen Auxiliadora la cura­
ción de mi marido y, des­
pués de la segunda ope­

B é ja r Doy gracias a Ma­
ría Auxiliadora, a san Juan
Bosco y a santo Domin­
go Savio por los dones
que he recibido y espe­
cialmente por un puesto
de trabajo para mi hijo.
Cumplo la promesa de
enviar un donativo y de­
seo que se publique en
el Boletín Salesiano. M.
I. G.
Béjar. Doy gracias a Ma­
ría Auxiliadora por los do­
nes que he recibido y en
especial por haber salido
de una operación quirúr­
gica bien. Cumplo la pro­
mesa de enviar un dona­
tivo y deseo que se pu­
blique en el Boletín Sa­
lesiano. P. T.
Barcelona: He obtenido
una especial gracia de
María Auxiliadora y de
Don Bosco. que quiero
agradecerles y publicar,
como testimonio particu­
lar de mi devoción hacia
ellos. Ha sido un retomo
que nurx» hubiera ima­
ginado tan cordial y fruc­
tuoso. ¡Gracias. Don Boscoi La lirTK)sna que acom­

paño es un símbolo ex­
terno de todo. L B. S.
Astudillo: Doy gracias a
nuestra Madre Santísima
Auxiliadora por haberme
escuchado y salir bien de
una operación quirúgica.
Envío un donativo y de­
seo se publique en el Bo­
letín Salesiano. A G.
Astudillo: Doy gracias a
María Auxiliadora por va­
rios favores recibidos y
envío una limosna para
las obras salesianas. Do­
lores Alvarez
Barcelona; Me encomen­
dé a doña Dorotea de
Chopitea y el Señor me
escuchó gracias a su in­
tercesión. En prueba de
mi reconocimiento, envío
una limosna'para la cau­
sa y hago pública esta
nueva prueba de su va­
limiento. Maná de! Carmen
Hernández.
Salamanca: Doy gracias
a María Auxiliadora por
un gran favor recibido y
envío una limosna. Deseo
se publique en el Boletín
Salesiano. Frum enda Ló­
pez.
Salamanca: Expreso mi
agradecimiento a María
Auxiliadora por favores re­
cibidos y por los que la
tengo encomendados. En­
vío una limosna y deseo
se publique en el Boletín
Salesiano. A Zazo.
Salamanca; En acción de
gracias a María Auxilia­
dora por favores recibi­
dos. envío un donativo y
deseo se publique en el
Boletín Salesiano. M ar­
ee Calvo.
Villoruela (Salamanca):
Envío un donativo a Ma­
ría Auxiliadora por favo­
res recibidos, confiando
en tan buena Madre para
que siga dándonos salud
a mí y a los míos. Deseo
se publique en el Boletín
Salesiano. F. C.
Zamora; Doy gracias a
María Auxiliadora por salir
de una operación bien un
familiar. Le pido me siga
ayudando. Mando
do­
nativo en agradecimiento
y deseo se publique en el
Boletín Salesiano. N. N.

MSfCCTOnA DE BARCELONA
B e a •Ocn L o s F ^ . P. i : 100.000 plE.
Beca 4iNria Audadcn*. Rdoíci I P. e.: SaOOO.
B o a «liguel TejBi>. (h meinorám). M. e.: 10JO0. Tott; 88i»)
Beca «San Maro»-. P . t : 100.000
^
Beca «Btana Sedas*. N. e.: 11000. To(N: 146.000.
Beca *ana. TrinÉdad y Sda. Fa n b * . N. e.: 10000. Tolafc 160.000.
Beca «Doña OonlBa de Q vptea-. P. e.: 100.000.
Beca «Oon Felpe Hnatt*. N. t ; 4.000. TcKat 208.400.'
Beca «Uaria Audadora-. FandaTotns. ToGI: 30.000
Beca 'Angel Frandato*. P. e.: 100000.
Beca «JKé de Fartaña*. P. e.: 300«OBeca •Asasdán Maia Auxiaden*. Sanü N. e : 30000. Tod-

D O N A T IV O S
A nuestros lectores y amigos:
No os olvidéis enviar vuestros donati­
vos al «Boletín Salesíano. Os necesi­
tamos de verdad. Vamos muy atrasa­
dos en el pago de nuestra Revista
Gracias por vuestra generosidad.

Beca •W an^Toriano*, A rta . P. e.: 100.000.
Beca «Maña Sensada*. cBirta. P. t : 100.000.
IN S P E a O R U D E B m O
Beca «Juan Manuel de Beobide*. P. a.: 30.000 pa&
Beca 'M aria Auxiadora*. Sartander. N. e.: 40.000. Total: 171000
Beca «Uatía Auxiadora*. Deuslo. N. a : 3S.000. Total: 165.000.
Beca «FUno EncíBS*. Vda. de M u iáo. K a ; 12000 T o tt 80000
Beca •U b Tontño*. Vda de M a ró o . N. a : 10000 ToW: 65.000
Beca •M sonen*. F l e: 25000 Total: 325.000
Beca •SanwahC)*. N. a : 25000 ToW: 325.000
Beca «ÜB Mcraerni*. W a de M a n e . N. a : 10000 Tott: 45000
Beca4lariaAuiiadcn*.6aracBdo.N e.:& O 0a.Tott:lS1000
Beca •)«& Sta. de Cantonad*. N. a : 30000. T o tt 165.600,
Beca *0. J. üá$ CarredcN. P £ J A N. e.: 100.000. Total. 410.000.
Beca *880( 1: Fflano Sanos*. K. a : 100.000 Total: 155000
Beca 4 ttn o Sanbs*. P. a : 500.000.
* .N . a : 3SODOO. Total: 350.000.
* .H a : 15.000. Total: 215JW).
* .P . a ; 43.000.
IKSPECTORU DE CORDOBA
Seca 'Fainta Saiesttia*. Arrtguera. N. a : 14i00. Total: 473.600.
^- •Asnadón Mana Auobítaa*. Tenerta l í a : S.000. Tott:
Beca •lAsnnera K T.>. Q isa d a t i a : 13.359. Tott: 297335
Beca *Oon Soeces. U Oettava. N. a : 50.000 Total: 660.000.
Beca *Utta Auxiadora*. B S a it t N. a : 15000. T o tt S 30 0.
Beca *Pam)ue S ara Cattna*. Las Palnas. N. a : 50.000. Total:
707.400.
Beca *Pio C»npen>*. Orense. P. a : 300.000.
Beca Seraün García Hemándea*. Cddoba N. a : 50.000. Total:

t e <4*0 SNsgani*. Zamora. N a ' 15000 T o tt 195000
Beca -M m i Aisladora. Cando*. Mgo. N t . : 30 000 Tott
614.000.
te 'B o d e d a O ro O .A g is tírx .N k :50.000.ToU:1.150.000
Beca 'Pozos SenegaFAIemara*. A ttn ara P. a.: 619504. Tott'
619504.
t e 'San Lié*. CalvD Sotto. N. e.: 50.000. Tott: 650000.
t e •TaibacDunda*. CRvo Sotto. N. e.: 50.000. Tott: 650 000
t e *Msones Salesianas*. Wgo. P. t : 100.000. T o tt 100.000
para el SEFCGAL 95000. R s : 127300. Tott: 222.000

Beca'Teresadeüsseux'.PuettdelaCrua. l í a : 100.000 Tott:

^
C « o b a P a 500000
Baca *A d i Jeat*. las Pabaaa P a 60000
M SPECTO RU O EliO N
B « * F ra la VÉzquK R i t o . C t t » . F>. a .
B « a 4), F a ^ . M. a: Sd 3 o, Tott: 750000

200000 p t t

Sm .S w rd o tt Ptto*.
R a: 5 000 T o tt 2D3000
B r a ^ S ir iw o M* A u d ttta * .
R a : 125000. Tott:

770X10.
Beca*75Ar»arsano*.Oemae.N. a ; 100000 Tott-35000
Beca s W iF itt a s * . d e n sa R a: 100000 T o tt 685000
Beca 4 . VBartín.. AsáiAo. R a : 5000 Tott: 1Q1SOO
t o < . ^ * . I t o . R a : 11000 Tott 363000
Beca • U .'A u iid c n - . densa R a : WOOO T o tt 215000
. C A oS otto . R a : 50000 T c t t 626000
.^ R a :9 5 D .T o tt6 S 9 S n
---------d O . C t t w o - . R a ; 75000 T o tt 1082500
Baca .G cfrlfe.. Mgo. R a : 95000 T o tt 1050000
la r w a * . Mga R a : 1QOOO T o tt SDOOO
. . - J - R a : 125000T o t t 965000
t a *J06í rtla d > . Wgo. R a ; 50000 T o tt 625000
Bm *S»i Araño*. W g a R e s to c o T o t t 236000
Seca ^ a r f c B M b lin a » , d e ra a R e --140000 T o tt 340000
d e a •AacaaradD Senegal>. Goalar, A i e i m . R a:610ao. T o tt
'650000
:R a .4 15 D Q T c t t 273500
. . . -Z Ptr».1 AgaR a : XaOOQ T o tt 500000
t e - f . Jura IMgato*. O M tti R a 160DD T o tt 325750

MSPECTtMAOESEVlU
t e •Seta Cns dN Csapo* Vtarna cW Corte Tott
200000ptt
te'D .JoatB áez* Bodas da OnSaoRdottK Tott 44100
te'D .SnagoSónm az* S e * Tott 432400
t e 'Msxines Togo* S e * N i 314500 Tott 130000
t e 'D. deudo te he z* Udete Tott: 137100
t e *D. RaM Flotes* Mánde N e ' 200 OOO Tott 520n o
t e *0. Jesús Morales*. S c * T m R e 270000 Tott

Beca «Msonara Asodadán Mana Auxiadora*. Dep. hsn. Córdo­
ba N. a : 5000. T o tt 105000
Beca 'Coadutor Uaesío Salinno*. Tenerie. la Cuesta P. e.:
75000.
Beca «Togo. Asoc. Mana AuxiadOQ*. Malaga N. a : 200000 To* 73 20 0 0
Beca *F. C *. Córdoba N. a: 100.000 Tott: 119297
Beca 4). LtB Hernández Casado*, las Pamas. N. a: 35000. ToH: 760.000.
Beca *Sar«jario Mana Auiiadcra-. M onlla N. a.: 25000. Tott.
Beca *Fania Salesana*. la O tolM . Tott: 162.000.
Beca *Usnnen Margara María*. Córdett. N. a: 45000 T o tt
m ooo.
Beca *SaeBd(tt Fermín Catzada* Ronda N a: lOOOOO. Tott:
450000.
Beca * F M SNsaana*. dañada M a : iflOOOO Tott. 290000
BecaAOME* la iP B n a a N .a : inOOO T o tt 510235
■ ■ I A » Eam»>. M e m a N. a: 63291 Tott

MSPECTDRU DE HADFBO
t e ' A i U d e P o n l a a * N • lOOOOO Tott lOOOQOptt
te * A J 4 A d a A lo c b i- H e 10000 T o t t 410000
te * A M A d a S n > O o m rg o S M > 'N e 15000 TcM 105009
t e . A M A d e B ^ N e 40000 Tott
t e ^ A M A .diP^Exi
d iP ^ E iM f f lt t n * Tott 75000
B e o f A M A d e A m e R o lo - S e t ta ir a N e 25000 Tctt
500 000
te * F im « iF fln a á * N e 1000 Tott 213000
t e * U A L * H e 1000 Tott 243000
te*M iroedKCiuz> ito- N e 6000 Tott 275000
t e * 2 S e M V 0 C K m s Q u i w Tott 120000
t e * F v É i A S M * N c 100000 Tott 600 000
te 'M m iA u x É iik ftttd o re S c p * Tott 300 000
te * lte q u a S v iF n n a K O d is a li( * .T a W 200 000
Baci*CLACD CpendcntP‘ E i» « m e d n * N t 25000 Tott
250000
t e ^ H . * LópezSirrtD* Tott 236000
te 'S N M n o sD o n B o e co * Joaquín y Encitne Tott 200 000
t e 'F li t i i l B a e i t t o r » PenoqueMUdeAtoche N e 5000
Tott 467500
t e * S v i j M r * N e lODCOO Tott 350000
te «N n oiiA oira e.U in LA n p« i> * Tott 300 090
te*Fem vdoF4rrtncb* Tatt l73000
iF Cucate- H e 10000 Tott 410000
N e 1500 Tott 64800
' H 6 2000 Tott 402000
)MuMiDcnBoia> R e lOOOOOTott303009
l * t e « F w i i Han (iHalBCi4* N e 150000 Tott l i s o 000
l^ t e 'H n e e M a r a M a lM » - P e 2S0 000 Tott 2S0 000
te 'Fu ca iA p in cD G a n zále z* P e-200 000.Tott 200000
t e -O. A*. R e : 15.000.Tott 140 000
te M e x m a ra 'V .y C .> .P .e :in o a O T o W lOOOOO
t e «Anhcoliidli M * Auchedon* Pizantei N i 5000
Total' 121000
te * A n lo n o Tomé*. Tott 610000
I*0. AncatoSvuYa^Je* n ra n e ra a g t 300 000
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León. Tel. (967) 20 37 12.
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Don Bosco era un soñador, en el mejor sentido de la palabra.
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El historiador salesiano Fausto Jiménez hace un estudio lúcido y moderno
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Este libro, segundo de la colección "CELEBRAR Y ORAR",
contiene materiales prácticos para la celebración de la
Cuaresma:
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tres ciclos.
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T ítu lo s de la C o le cció n p u b lica d o s
1.
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Celebrar desde tos simbdos. Emeterio Sorazu.

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Celebrar el tiempo de Pascua. Alvaro Ginel.

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Teléfono 2 5 5 2 0 0 0 / Alcalá, 1 64 / 2 8 0 2 8 - MADRID
Conjuntos de fichas
Boletín Salesiano
1990