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,

R E V I S T A DE
LAS OBRAS DE
DON B OS C O

A Ñ O

L I V

NOVIEMBRE 1946
NUMERO

l 1

Redacción y Adminislración: A lcalá, 164. — A partado 9134. — MADRID
SU M A R IO :
Los C ooperadores Salesianos.—E fem érid es seculares.— N oticiario salesiano :
E sp a ñ a (H orcajo' de S antiago, M álag a, M orón, S an V icente deis H orts).
E x tra n je ro (In g la te rra , S anto D om ingo, A rgentina). — Los «chicos d e la
calle». — D e nuestras Misiones. — C rónica de gracias. — « In m em oriam ».—
B ibliografía.

Los Cooperadores Salesianos
vez más, a lo largo de sus
U NA
casi setenta años de vida, vuelve

el BOLETIN a tra ta r un tema que le
es propio cual ninguno: Los Coopera­
dores Salesianos. No debemos olvidar
que nuestro humilde periódico nació
para ser órgano de la Fia Unión de
los Cooperadores Salesianos, y tal se
ha mantenido, fiel a los deseos y si­
guiendo el impulso que le diera su
fundador y primer director, San Juan
Bosco.
A fomentar los lazos de hermandad,
y para m antener el espíritu de la Pía
Unión, vino el BOLETIN SALESIANO; y para lograr lo primero inserta
en sus páginas mensuales crónicas
de vida y actividad salesianas, rela­
ciones misioneras, gracias de María
Auxiliadora y de San Juan Bosco,
especialmente; notas necrológicas de
hermanos difuntos, etc., y a lo segúndo: es decir, a lograr que se conserve
siempre vivo y pujante el espíritu
que le diera San Juan Bosco, tiende
de un modo particular el articulito,
que podríamos llamar de fondo, en el
170 —

cual se tocan, sucesivamente, puntos
primordiales de vida cristiana y salesiana.
ORIGEN DE LA PIA UNION
Creemos oportuno insistir nueva­
mente en este número acerca del
verdadero concepto de la cooperación
sálesiana, a fin de que nuestros bene­
méritos Cooperadores tengan siempre
mayores motivos para agradecer a
Dios la señalada gracia que les ha
otorgado, a la vez que otros se ani­
men a pertenecer a la Pía Unión.
¿Qué es la Pía Unión de los Coope­
radores Salesianos? Es la tercera ra­
ma del árbol plantado por San Juan
Bosco. Aunque inspirado por Dios,
nuestro Santo, al igual que en la fun­
dación y organización de sus otras
dos obras, la Congregación Salesiana
y el Instituto de las Hijas de María
Auxiliadora, también en ésta proce­
dió como por grados, mientras se iba
esclareciendo en su mente la primi­
tiva idea.

Vwía general de la Casa Salesiana de San Vicente deis tíorts (Darcelona), después de ¡as
obras de ampliación y reform a llevadas a cabo, gracias a la generosidad cíe los cooperadores

Tal vez el último paso haya sido la
asignación del nombre que actual­
mente lleva. Lo primero fué su espí­
ritu, que deducimos de la actuación
de aquellos colaboradores de Don
Bosco desde el año 1841, echada al
surco la semillita del Oratorio 5’estivo. Poco tiempo después del histó­
rico día 8 de diciembre, Don Bosco
contaba por centenares los mucha­
chos que acudían a sus tres Oratorios
en Turin. Los jóvenes se formaban en
la Religión, eran apartados del vicio
y de los peligros de la calle, recibían
instrucción en escuelas nocturnas y
en clases particulares, se recogían en
«Casa Pinardi> los más pobres y
abandonados... El bien espiritual que
se hacía era grande. ¿Gracias a qué?
Gracias a que Don Bosco logró, con
habilidad, ganarse y tener unidos en
torno suyo preciosos auxiliares, se­
glares y eclesiásticos. Y era tan ín ti­
ma y estrecha esta unión, que, años
más tarde, Don Bosco no titubeaba
en considerarla como un preludio de
la futura Congregación Salesiana, y
sus actividades como un ensayo del
trabajo apostólico que ésta deberla
llevar a cabo.
LOS «EXTERNOS»

ciedad insertara Don Bosco un p á­
rrafo dedicado a los «externos». En
él estableció: 1.® Cualquier persona,
aun viviendo en el mundo, en su
casa, en el seno de su propia familia,
puede pertenecer a nuestra Sociedad.
2.® No hará ningún voto, pero procu­
rará cumplir la parte de este Regla­
mento, compatible con su'edad y con­
dición. 3.® Para participar de los bie­
nes espirituales de la Sociedad es ne­
cesario que, por lo menos, prometa
al Rector emplear su fortuna y sus
fuerzas a la mayor gloria de Dios.
4.® Esta promesa, sin embargo, no
obliga, ni siquiera, bajo pena de pe
cado venial.
Por insinuación que al principio re­
cibiera de la Congregación de Obis­
pos y Regulares, suprimió, respecti­
vamente, este párrafo del original de
las Constituciones en 1869 y del
apéndice de la v e r s i ó n italiana
en 1873. Con todo, Don Bosco no de­
sistió en su empeño de dar forma a
los hasta entonces llamados «exter­
nos», creando una Asociación distin­
ta, pero dependiente de la Sociedad.
Salesiana.
PRIMER ESQUEMA
DE LA UNION

Nada de extraño, pues, que en las
primitivas Coi^tituciones de su So­

Y he aquí que en 1874 presenta al
Capítulo Superior un esquema de la
— 171

misma, bajo el título de Unión de
San Francisco de Sales. El fln de la
Unión, según dicho esquema, no era
otro que el de reunir algunos segla­
res y eclesiásticos que tratasen de
trabajar por la mayor gloria de Dios
y en bien de las almas, mediante la
caridad activa, sin miras de interés
material alguno ni de gloria mun­
dana.
El proyecto no entusiasmó a los
capitulares, pues creyeron se trataba
de fundar una cofradía más de las
tantas existentes en la Iglesia.
SE IMPRIME EL REGLAMENTO
Pero Don Bosco tenía también a
punto un Reglamento detallado, y no
tardó en presentarlo a su Consejo,
que lo estudió, y, según las modifica­
ciones de éste y las suyas propias, el
Santo lo redactó de nuevo bajo el
titulo de Asociación de Buenas Obras,
dándolo a la imprenta, para difun­
dirlo privadamente entre sus amis­
tades.
Después de oir diversos pareceres,
y tras nuevo y detenido estudio, vió
la luz el Reglamento, que podríamos
llamar definitivo, y que se intituló
cCooperadores Salesianos, o sea, modo
práctico de ayudar a las buenas cos­
tumbres y a la sociedad civil>.
FIN ESPECIFICO DE
LOS COOPERADORES
Este subtitulo se declara más por
menor en el párrafo III del Regla­
mento, que dice así: «El fin funda­
mental de los Cooperadores es aten­
der a su propia perfección, mediante
un método de vida que se asemeje,
lo más que sea posible, a la de comu­

172 —

nidad. Muchos abandonarían gusto­
sos el mundo para ir al claustro;
pero no lo efectúan, ya sea por razo^
nes de edad o de salud, o por su con­
dición, y muchísimos, por falta de
medios y de oportunidad. Haciéndo­
se, p u e s. Cooperadores salesianos
pueden, en medio de sus tareas dia­
rias y en el seno de su propia fami­
lia, vivir como si pertenecieran a la
Congregación. Por esto, el Sumo Pon­
tífice h a considerado esta Asociación
como una de las antiguas Ordenes
Terceras, con la diferencia de que
aquéllas se proponían llegar a la per­
fección cristiana por el ejercicio de la
piedad, y nuestro fin principal es el
ejercicio activo de la caridad hacia
el prójimo y, muy especialmente,
hacia la juventud, expuesta a los
peligros del mundo y de la corrup­
ción».
Notamos aquí, de paso, si bien es
nuestra intención aclararlo más y
más en artículos sucesivos, que este
párrafo del Reglamento habla de
ejercicio activo de caridad hacia el
prójimo, sin que se determinen cam ­
pos ni limiten cotos, lo cual quiere
decir, en la mente del legislador, que
para ser un buen Cooperador salesiano no es indispensable que se ayude,
exclusivamente, a las obras de cari­
dad que directamente lleva a cabo
la Congregación Salesiana, sino que
en el corazón del Cooperador habrán
de tener cabida, por el contrario, to­
das las obras católicas que m iran al
bien de los prójimos, promovidas por
cualesquiera de las organizaciones
de la Iglesia, particularmente por las
diocesanas y parroquiales.
(Continuará)

EFEMERIDES
Don

Bosco

p ' L p asado día 19 d e septicDibre se cum^ p lie ro n cien años de la aiparición de
•la Virgen, a dos hum ildes aldeanitos de la
m o ntaña llam ada L a S alette (F rancia).
Los M isioneros • que p erp etú an el recuerdo
con la floreciente C ongregación titu lad a
precisam ente de L a S alette, tienen ya su
Casa M adre en Rom a y un a residencia en
T u rín . Los Salesianos se unen a su gozo al
m ism o tiem po que recuerdan com nlacidos
cómo Don Bosco, que en aquellos días del
1846 se estaba estableciendo deíinitivam ente en la casita P in a rd i, apenas tuvo cono­
cim iento de las m aravillosas apariciones, se
constituyó en ardoroso apóstol de las m is­
m as.
« E sta aparición —escribe d o n Lem oyne
e n el volum en I I de las «Jdem orias B iográ­
ficas»— se convirtió en su tem a íavorito,
cien veces repetido p o r él, n o sólo p a ra
d e sp e rta r en sus m uchachos la idea de un
m undo so brenatural y la devoción y con­
fianza en la V irgen S antísim a, sino, sobre
todo, p a ra in fu n d ir en ellos odio a tres p e­
cados que m ueven la ir a de Jesucristo y
atra eu sobre los homíbres los m ás terribles
castigos : la blasfem ia, la profanación de

SECULARES
en

1846...

los días festivos y la violación del ayuno
y abstinencia.»
T a n ta im p o rtan cia le daba, que refirió el
hecho m ilag ro so en u n opúsculo, del que se
pub licaro n , en vida del Sam o, 20.000 ejem ­
plares en dos ediciones. «U n hecho cierto
y m aravilloso — decía Don Bosco en la intro­
ducción— , atestig u ad o p o r m illares de p er­
sonas, y que todos .pueden v erificar p o r sí
mism os, es la ap a rició n d e la B ienaventu­
rad a V irgen M aría, o cu irid a e l 19 de sep­
tiem bre de 1846...
A éste se ju n ta d otros hechos prodigio­
sos, recogidos incluso en docum entos p ú ­
blicos, o bien atestiguados p o r persona cu­
y a fe excluye to d a d u d a acerca d e cuanto
referim os...
E sta s señales sensibles de la om nipoten­
cia d iv in a son siem pre presagio de g rav es
ácontecim ientos, que m a n ifiestan la m iseri­
cordia y la bon d ad d e l S eñor, o bien su
ju sticia o su in d ig n a c ió n ; p e ro siem pre
de m anera que todo ello resu lte p a ra su
m ayor g lo ria y p a ra el m ayor provecho de
' las alm as.
H agam os q u e sean p a ra nosotros m anan-

EsU es el prado donde Juaniio Bosco tuvo sus primeros sueños, verdaderas visiones profétícas, que se cumplieron puníualmenle, para bien de la humanidad entera. Al fondo se ve el
magnífico Instituto "Bernardo Semerín”, para Escuelas Profesionales ■
—

173

tial de gracias y d e b en d icio n e s; sirvan
p a ra excitarnos a un a fe viva, operativ a ;
fe que nos m ueva a obrar el bien y a h u ir
el m al, a hacem o s dignos de su in finita
m isericordia.»
Resum im os aquí la n arració n del histó­
rico prodigio q ue refieren ]as «M em orias
Biográficas» en e l vol. I I , p á g s. 576-582.
M axim ino, d e once años, y M elania, de
quince, e ra n dos pobres pastorcillos que
apenas sabían rezar el P adren u estro y el
A vem aria. L a n iñ a no h a b ía hecho aún la
p rim era Com unión. P astoreando sus vacas
en la m ontaña d e L a S alette, se hab ían en ­
contrado po r vez p rim era en el m ism o ab re­
vadero el día 18 de septiemibre de 1846 y
se habían desafiado a quién llegaría más
p ro nto a l día siguiente. Al o ír el toque del
itAngelus» del m ediodía rezaron la breve
o ra c ió n ; después, concluida su fru g a l co­
m ida ju n to a u na fuentecilla que m andaba
sus aguas al vecino arroyo, se durm ieron
bajo la som bra d e los árboles. C uando des­
p ertaro n tuvieron quo ech ar a correr en
busca de las vacas, que se les habían des­
bandado. E n aquel m om ento, un a fu lg en tí­
sim a luz h irió los ojos d e M elania. Llam ó
a voces a M axim ino, y entram bos se h alla­
ron ante una visión herm osísim a ; u na Se­
ñ ó la , sentada sobre un m ontón de piedras,
con el rostro en tre la s m anos, rodeada de
vivísim a luz. Calzaba san d alias b lan cas,
adornadas con rosas de varios c o lo re s;
blanco era su vestido, todo él tachonado de
p e rla s ; blanco tam bién, y adornado de ro­
sas, un pañizuelo que llevaba al cuello, v
cubrírv su cabeza con una cofia adornada
asim ism o con rosas. D el cuello le pendía
un crucifijo, en cuyo m adero tran sv ersal
se veían grabados, a un lado, un m artillo,
y al otro, unas tenazas.
M elania, atem orizada, dejó caer su bas­

tón. P ero la S eñora levaiotó ¡a fre n te, se
puso en p ie e invitó a los pasto rcito s a que
se ac ercaran :
—^Acercaos, h ijo s m íos — ^les d i j o ^ , no
ten g áis m ie d o ; h e .venido p a ra anunciaros
un a g ra n nueva.
Ambos atrav esaro n el arroyuelo, y la S e­
ñ o ra, después d e conducirlos a l lu g a r um ­
broso do n d e h ab ían e stad o an tes, les h ab ló
a s i:
«Si m i pu eb lo no se quiere som eter, me
veré oblig ad a a d e ja r lib re la m ano de m i
H ijo , la cu a l es ta n fu erte y p esa tam o ,
que uo pu ed o ya d etenerla p o r m ás tiem po.
H ace m ucho q u e ¡sufro p o r vosotros. Si
quiero conseguir q u e m i H i]o no os aban­
done, te n g o que e s ta rle rogando constante­
m en te, y a vosotros os tie n e esto sin cuida­
do. P o d ríais mjay bien rezar, oibrar e l bien ;
p ero ja m ás lo g raría is com pensar la solici­
tu d que p o r vosotros m e he tom ado. «Os
h e concedido — dice e l Señor— seis d ías p a­
r a tr a b a ja r ; m e h e reserv ad o e l séptim o y
no m e lo queréis en treg ar.» E s esto lo q u e
h ace tan p esad a la m ano d e m i H ijo. S i
vuestras p a ta ta s se estro p ean , la cu lp a es
vuestra. O s lo h ice v er el añ o p asad o y no
quisisteis h a c e r c a s o ; cu an d o en co n tráis
p a ta ta s p o d rid as b lasfem áis el nom bre de
m i H ijo. Se seg u irán estropeando, y este
año, p o r N av id a d , n o te n d ré is nada. Si te­
néis trig o , no lo se m b ré is; todo cuanto
sem bréis será devorado p o r el tiz ó n ; si
algo sale, se co n v ertirá en p o lv o a l trilla r­
lo ... H ab rá u n a g ra n m o rtan d ad d e niñ o s
m enores de siete añ o s... S ucederá u n a g ra n
carestía... L as nueces y la s uvas se p erd e­
rán ...»
M ientras así hab lab a, la S eñora lloraba.
L as «M em orias Biográficas» hacen no tar
que las profecías se cum plieron todas.

Noticiario Salesiano
ESPAÑA
H O R C A J O D E S A N T IA G O (C u e n c a )___
F ie s t a en h o n o r de M a r ía A u x ilia ­
dora.
El peiióillco conquense "Ufensíva**, en su
núm ero del
de s-'püembre de 1946, publi­
caba el siguiente articulo:
“ invitado por el señor Secretarlo, don Fran174 —

Cisco Arquero, c impresionado hondamente
por el fervor y entusiasmo con que cele­
bran estos buenos hijos de Horcajo la fiesta
de nuestra Virgen Auxiliadora, envío estas
lineas al señor Director de “ Ofensiva”, para
que. si lo tiene a bien, las dé a la publicidad.
De año en año se ve arraig ar más y más

.V.ir.lflO (Barcelona).— Congregantes de San Luis y del Santísimo gue trabajaron con gran
celo el pasado curso a favor de las vocaciones y ¿Visiones salesianas
í*sla popularísim a devoción a la Virgen del
g ran pedagogo San Juan Bosoo.
Hacía algún tiempo que esta Imagen era
conocida, pero no am ada.
Hoy, debido a las facilidades y desvelos
del señor Párroco, señor Secretario e infini­
dad de devotos favorecidos con sus gracias
— entre los cuales se encuentran familias muy
distinguidas—, y a la ayuda generosa de los
buenos Padres Salesianos, se halla ensalzada y
venerada en la Novena, y m uy particularm en­
te en el día 15 de agosto, techa establecida
para honrarla, pedirle favores y buena ter­
minación del año agrícola.
Bien puede felicitarse el señor Cura al ver
Sil trabajo silencioso recompensado con el
fervor con que estas buenas gentes oyen el
Santo Sacrificio de la Misa y se acercan a la
Mesa Eucaristlca.
Si es consolador todo lo expuesto, no deja
d e serlo igualmente cuando se oye a un grupito de jóvenes entusiastas, sin respeto hum a­
no, cantar, con toda precisión, misas y mo­
tetes, elevando así el espírtiu de los oyentes
y trabajando en beneficio del culto santo.
rEnhorabuena a este puñadlto de cantoras,
por el inmenso bien que hacen y el consuelo
que derram an sobre tantos corazones oprimi­
dos por el sufrim iento!
A la salida del templo, grandes y peque­
ños eran obsequiados con unas bonitas es­
tam pas de'M aría Auxiliadora, San Juan Bosco
y el Venerable Domingo Savio, no sin antes
d ejar caer unas perros en la bandeja de la*
mesa petitorta, destinadas a la terminación y
embellecimiento del altar.
P or la tarde, concluido el Rosario y la No­

vena, salió la Auxiliadora de los cristianos en
paseo ordenado y triunfal por las calles de
costumbre, siendo aclam ada por continuas ple­
garias y melodiosos cantos, todos saturados
de sentida piedad.
Asimismo, en santa disputa, fué llevada la
imagen en herm osa carroza a hombros por
los jóvenes de ambos sexos.
Esperamos que esta devoción traiga el re­
surgimiento de aquella vida netam ente cris­
tiana de nuestros m ayores y obtenga de su
bondad el auxilio que tanto necesitamos en
estos tiempos de prueba.
Si el 8 de diciembre lodos acuden a vi­
torear a su Inmaculada, justo es que el 15 de
agosto —paréntesis en las grandes faenas
agrícolas— se acerquen llenos de fe a la que
siempre h a sido el Auxilio del Orbe Cristiano,
arrancándole sonrisas, paz, bendiciones e in­
finidad de gracias .y favores para todos sus
devotos y para ese campo de Horcajo, recio,
severo, hondo e Inmenso, como severa y re ­
cia es la llanada áspera de la Mancha, donde
se halla enclavado. ¡Viva la Virgen de San
Juan Bosco: María A uxiliadora!"
M A L A G A . — H om e n aje a un C o o p e ra­
d o r S a le sia n o .
La Congregación Salesiana en Málaga, que
tantos favores debe al doctor don José Gálvez, h a querido celebrar el octogésimo ani­
versario de su nacimiento, el día 29 del pró­
ximo pasado septiembre, .con u n a Misa de
Comunión general, celebrada a intención del
benemérito Cooperador, y una solemne vela— 175

da, durante la cual fueron distribuidos va­
liosos premios a los nlflos de las Escuelas
gratuitas. Dichos premios son debidos a la
generosidad do los Cooperadores Salesianos,
que lian sabido responder al llamamiento de
los hijos de San Juan Bosco en favor de la
clase pobre y necesitada. La velada fuó ame­
nizada por la Banda del Colegio Saleslano, y
hermosos núm eros de declamación y can­
to, distinguiéndose los pequeños artistas en
la ejecución de cantos regionales y en el
monólogo “ Curiosidad Infantil". El señor Di­
rector dirigió sentidísimas frases de gratitud
al doctor don José Gdlvez Ginachero, allí pre­
sente con su hijo, doctor Gálvez Molí. Al ter­
m inar el acto, todos los presentes tributaron
una calurosa ovación al doctor Gálvez Qinachcro, para quien piden al Señor toda suerte
do bendiciones por lo mucho que quiere y
protege a la Obra Salcsiana.
m O RO ni D E L A F R O N T E R A (S e v illa ).
E l Excm o. S r. G o b e rn a d o r M ilita r
v is ita el C o le gio Sa le sla n o .
Con ocasión del reparto de premios a los
alumnos, celebrado el día 29 del próximo
pasado junio, visitó el Colegio Saleslano de
Morón el Excmo. Sr. Gobernador Militar de
Sevilla, General don José Antonio Martín Prat.
Llegó a las once y fué recibido por los
alumnos y Superiores del Colegio, por las
prim eras autoridades de la ciudad y lo más
selecto do la población, entre aplausos, víto­
res y las vibrantes notas de la Banda Salesiana. Su Excelencia lomó parte en la fervorosa
procesión eucarlstica y asistió desde el pres­
biterio al Santo Sacrificio.
Luego, en el salón de actos, tuvo lugar el
reparto de premios a los mejores alumnos
del curso 45-46. Entre los hermosos núm e­
ros do la velada celebrada con este motivo,
destacó el discurso del antiguo alumno del
Colegio de Utrera, don Manuel García Arrecia­

/

TJ

Ti
MADRID.— Pistas exterior e intervk
putares Salesianas, recientemente fi.
do, que tejió un magnífico elogio de la Con­
gregación Salesiana.
Después de la bendición de la imagen del
Sagrado Corazón Eucaríslico,
que el reve­
rendo señor Director consagró el Colegio, to­
mó la palabra el Excmo. Sr. General, cuya
aparición en el escenario fué recibida con
u n a explosión de entusiasmo por el públi­
co, puesto en pie. De su brillante pieza ora­
toria no se sabe qué adm irar m á s: si su
elocuencia arrebatadora, sus sentimientos pro­
fundam ente cristianos o su acendrado am or a
la Obra de Don Bosco. Tuvo frases de encen­
dida devoción a María Auxiliadora, recordan­
do que el último latido del corazón de su hijo,
m ártir en Santander, halló eco en el de María
Auxiliadora, cuya estampa llevaba en la car­
tera. Terminó invitando a todos a tom ar como
primera entre sus obras meritorias el favore­
cer en lo posible a la Obra Salesiana.
SAN VICENTE DEES HORll
la Casa Salesiana después {

w

i

176

np

■ ■ ■ ■ ■ IIIIIU IIIII
iíií nuevo pabellón para Escuelas Poefcfnado en la baniada de Estrecho
S A N V IG E N T E D E L S H O R T S (B a rc e lo ­
n a ).— N o tab le s o b ra s de am p liación .
La vieja masía catalana de San Vicente
deis Horts, Casa solariega de muchos salesianos de España, pues en ella hicieron su no­
viciado y profesión los prim eros que en nues­
tra Patria se dieron a seguir las huellas de
Don Bosco, h a sido objeto, a partir del año
1939. de importantes obras de reform a y
ampliación.
Lo que podría llam arse segunda etapa de
las obras dió comienzo en el mes de julio
del año 1944. con la ampliación de un cuerpo
de edificio, donde se instaló la enferm ería
en el prim er piso, y un dormitorio, con ca­
pacidad para sesenta camas, en el segundo.
En 1945 se trabajó en el cuerpo central, que­
dando habilitadas para principios de curso

dos espaciosas aulas, magníficamente orien­
tadas, y un salón de estudio de ocho p o r
catorce metros. Continuaron después los tra­
bajos de revoque de la casa y pavimentación
de aceras. Ultimamente se h a trabajado en
el estucado de dormitorios, clases y corre­
dores, llegándose ‘así a la inauguración ofi­
cial, que tuvo lugar el pasado agosto, con
un triduo de misas a intención de cuantos
han ayudado a las obras y en acción de g ra­
cias a María Auxiliadora, que tan visiblemen­
te ha velado, con solicitud materna, por este
Seminarlo.
El día 25 de dicho mes, con los señores
Directores de Sarriá, Tibldabo y Horta, reci­
bimos a una selecta representación de los
Cooperadores de Barcelona, con cuya gene­
rosidad ha sido posible la transform ación que
en estos años h a experimentado la casa. En­
tre ellos, a los distinguidos señores Comamala, que tantas pruebas de afecto vienen dando
a los hijos de Don Bosco, y al acreditadobanquero de Barcelona don Antonio Cornudella, y su digna esposa, doña Rosita Casaponsa. La veladita que se celebró en su ho­
nor hizo las alegrías de los invitados, que
marcharon satisfechísimos, manifestando sucomplacencia por la gratitud y afecto gran­
des que habían encontrado en el SeminarioSalesian-o.
Actualmente llenan la casa tres cursos deAspirantes, en número de 130, y 40 novicios,
que habitan la Torre don Beltrami, enclava­
d a en medio de la finca. Todos ellos empe­
zaron el nuevo curso el día 16 del pasadoseptiembre, con el deseo ardiente de Irse for­
mando a imagen y semejanza del Padre Don
Bosco, para trab ajar con fruto en el campo
del apostolado.

EXTRANJERO
I N G L A T E R R A
Con ocasión del centenario de la conver­
sión de Newman, luego Cardenal de la Santa

I^celo n a ).—Díoersas vistas de
importantes obras llevadas

lj

— 177

Iglesia, nuestra Parroquia de Oowley-Oxford,
on la que se halla el antiguo Monasterio an­
glicano donde, en 1845, el gran convertido ab­
ju ró del Protestantism o en monos de un P a­
dre Paslonlsla, ha adquirido un terreno frente
a dicho Monasterio para construir una Igle­
sia, en recuerdo del histórico acontecimiento.
Presidió la ceremonia conmemorativa el
Delegado Apostólico, monseñor Godfrey, con
conspicuas representaciones del Clero secular
y regular.
S A N T O

D O M I N Q O

Trece Salc.slanos tienen a su cargo en Ciu­

dad-Trujillo dos Parroquias, una Escuela pro­
fesional, un Externado con Escuelas elemen­
tales y dos Oratorios festivos, uno de los cua­
les cuenta con más de mil muchachos. Se
espera poder abrir en breve u n a casa para
aspirantes a la vida salesiana.
A R G E N T I N A
El próximo pasado 6 de junio fuó consa­
grado con gran solemnidad, por el excelen­
tísimo y reverendísimo señor Arzobispo, doc­
tor don Juan P. Chimento, el nuevo y magnlílco templo parroquial saicsiano dedicado
al Sagrado Corazón de Jesús, en La Plata.

Los «chicos de la calle»
(Sigue la relación d.e septiembreoctubrej página isá.)
ipronto se vieron los frutos d e la
providencial obra de los «(chicos d e la
calle». Su transform ación fué rá p id a y
to ria : dejaron de verse caras torvas y es­
cenas b rutales y de oírse palaibras soeces
y blasfem ias. E n cam bio, com enzó a ser
frecuente el espectáculo de bandadas de
m uchachos, sucios y h arapientos, corrien­
do alborozados a sa lu d ar al sacerdote con
<íl («Sea alabado Jesucristo».
Los «sciuciá» del S agrado Corazón (Ro­
m a) tom aron p a rte en m asa en el piadoso
e je rc id o del «V ía Crucis», a l L avatorio de
los pies el Jueves S anto, y ochenta de
ellos hicieron la p rim era Com unión e l S á­
bado Santo con edificante p iedad.
E l cam bio de los m uchachos se hizo no­
ta r tam bién en las fam ilias, a quienes no
podía m enos d e llam ar la atención el ver­
los todos les d ías volver a casa m ejores,
m ás educados, alim entados, lavados, p ein a­
dos, rem endadas la s ropas p o r los mismos
clérigo's y sacerdotes, socorridos p o r las a l­
m as buenas... Mucjhoi padres abrieron los
ojos y se llegaron a Vos bienhechores de
sus hijos p a ra d arle s las gracias.
E l día de M aría A uxiliadora, la B asílica
d e l S agrado Corazón vió d esfilar seiscien­
to s «chicos de la calle» en devota proce­
sión ; cantaban con fervor y llevaban sen­
d o s ram illetes de flores, com prados espon­
tán eam en te p o r ellos mism os, p ara depo­
sita rlo s a los pies de la V irgen S antísim a.
E l trid u o de preparación a la fiesta de

M

uy

178 —

la E u ca ristía constituyó u n a v erdadera
tan d a d e E jercicios E s p ir itu a le s : serm o­
nes, recreos en silencio, exám enes de con­
ciencia, d ilig en tísim a co n fesió n ... L a v ig i­
lia de la fiesta, y a confesados, no se atre­
vieron' a irse a sus casas. T em ían ponerse
no­en ocasión de v olver a ofender a l Señor.
P asaro n la noche en tera en el O ratorio,
durm iendo donde m ejo r pudieron. A la m a­
ñ an a siguiente (25 de junio d e 1945), se­
te n ta y dos «chicos de la calle» recibieron
p o r vez p rim e ra a Je sú s S acram entado, v
po r la tarde fueron confirm ados p o r el emin e n tíd m o C ard en al J ílo n d , S alesiano, P ri­
m ado d e P olonia. Luego, los setecientos
que h ab ían hecho el trid u o , fueron obse­
quiados con u n a b u ena com ida. Los A nti­
guos A lum nos reg a laren lib rito s y objetos
de devoción y rep resen taro n u n a herm osa
función d e te atro . L a generosidad de los
bienhechores hizo q u e se le s p u d iera lle­
v a r a todos a com er a l cam po en un día
de aleg re excursión.
Los resultados m agníficos obtenidos de
los «chicos de la calle» llam ó poderosa­
m ente la atención, no sólo del <público, en
m ás ín tim o contacto con ellos, sino d e la s
altas je ra rq u ía s de la Ig lesia y del E sta­
do. E l S anto Padve habló rep etid am en te y
con g ran d es elogios d e esta obra de apostoilado j h ab laro n de ella y, com o el P a­
p a , la favorecieron y la siguen favore­
ciendo, C ardenales y O bispos, destacadas
perso n alid ad es d e la A. C. e, incluso, a l­
tos funcionarios públicos. L a P . C . A.
(P o n tificia Comisión de A sistencia), re­
u n id a en asam blea, hizo graT>des elogios
de la O bra d e le s «chicos de la calle», y

q u iso traslad a rse en p-leno al O ratorio del
S a g ra d o C orazón p a ra obsequiar a los m u­
ch ach o s con alim entos. E l presid en te de
o tra C om isión costeó los E jercicios cerratío s de diez «sciuciá». L a B anca C om er­
c ia l consiguió u n subsidio p a r a ocho huér­
fan o s acogidos en San T arsicio. U n p erió ­
d ico publicó varios artículos y abrió u na
suscripción b ajo e l títxilo «P ara los «sciuciá» d e D on Bosco», suscripción que al
cu a rto día alcanzaba la cifra de 34.000 li­
ras.
G racias a los bienhechores, en el verano
d e l 45 se p u dieron llev ar m uchos niños a
colonias. U n a de ellas se estableció en el
p a rq u e d e A riccia, cedido generosam ente
p o r S. A. e l P rín c ip e C higi, donde se be­
n eficiaron 400 m uchachos d e lo s m ás n e­
cesitados físicam ente.
D ía inolvidable fue aquel en que dos
m il «sciuciá» fueron recibidos p o r el P a ­
d r e com ún, p o r el Sum o P ontífice P ío X II.
D espués de o ír la S anta M isa, celebrada
p o r m onseñor C arro ll, lo s m uchachos p a ­
sa ro n a l A ula d e las B endiciones, j Qué
a le g r ía y qué em oción ta n grandes las de
aquellos pobres n iñ o s a l ap arecer la b la n ­
c a y veneranda figura del V icario de Jesu-'
cristo ! Los pequeños le siguieron h a sta el
trono, ap laudiendo y dando vivas ; después

ento n aro n e l «C hrisíus vincit» con las
«Acclam ationes».
T erm in ad o el canto, el P a p a le s dirigió
su p a te rn a l p a la b ra :
«A m adísim os n iñ cs — les d ijo — . N os lee­
mos en este m om ento en vuestros ojos la
a leg ría que experim en táis al estrecharos
en to m o nuestro. P o d éis tam bién vosotros
le e r en n u estro ro stro la d icha que senti­
mos al acogeros y la reconocida emoción
que hem os probado al recib ir vuestros do­
nes. E l don de vuestras p le g arias y de
vuestros sacrificios, e l don d e vuestros co­
razones, que quieren s e r puros y genero­
sos ; el don d e v uestra carid ad , d elicad a­
m ente fra tern al, con la q u e acudís en au x i­
lio de los niños in fieles en los p aíses de
misión.
«Muchos de vosotros sois m uy pequeños ;
p ero todos sois b astan te jóvenes, aun los
m ayores e n tre v o so tro s, y, sin em bargo,
tenéis y a ex p erien cia de la v id a ; habéis
conocido m uchas m iserias y m uchas tr is ­
tezas ; no pocos d e vosotros no h an ten i­
do, p io b ab lem en te, la felicid ad de n acer v
crecer en e l seno de u n a fam ilia cristiana.
Q uizá no h ab íais oído h a b la r de la R eli­
gión, de los sacerdotes, del P a p a , sino p a ra
b u rlaro s y h a b la r m al de e llo s ; quizá, inclusOj sin d aros cu en ta, vosotros mismos

JiADHW.— Suestros muchachos de la Institución Profesional “Virgen de la Paloma" asisten
a una Misa de campaña el último día del pastúo curso
—

179

■05 habíais acostumibrado a p en sar y a h a ­
b la r del m ism o modo
»Si alguien os hubiese dicho, señalando
con e l dedo hacia esta colina del V aticano,
que un d ía habríais d e e n tra r todos iuntos.
felices de veros acogidos p o r el P a p a , como
un p a d re que os am a de todo corazón, y
q u e ju n to a él os ibais a en co n trar a ffustó, llenos de confianza y de te rn u ra f i l i a l :
si alg u ien os hubiese predicho esto hace
alg unos meses, vosotros no le habríais creí­
do. Y con todo, i'heos aquí presen tes!
» P utque desde h ace unos m eses, todo ha
cam biado p a ra vosotros : habéis sido afec­
tuosam ente recogidos y caritativam ente cui­
dados en el cuerpo y en el alm a ; habéis
ap rendido en la clase de Catecism o m uchas
cosas g ran d e s y h e rm o sa s; ahora sabéis
que, m ás allá d e esta tie rra , aflig id a con
tanto» m ales y con ta n tas m iserias, hay un
Dios bueno que os ha creado, que se ha
hecho pequeño y pobre com o vosotros, para
señalaros cl cam ino de la salvación.; que
h a m iierto en la cruz p a ra abriros la p u e r­
ta del Cielo, c e rra d a p o r el pecado ; p ara
llam aros un día a su lado y haceros vivir
en su delicioso P araíso. Sabéis que el H ijo
U n ig én ito de D ios, p a ra hacerse pequeño,
quiso n acer de una M adre, la m ejor, la
m ás p u ra, la m ás santa, la m ás suave de
la s m adres, y en su g ra n benignidad dis­
puso que fueseis vosotros, a sém eianza
suya, hijos am ados de la V irgen Santísi­
m a ; sabéis que este buen Jesús quiso que­
d arse en m edio de nosotros, presen te y ocul­
to en el tabernáculo de n uestras iglesias,
Úonde no tenéis m iedo de en tra r, y que
desvia vivam ente veros a c erca r a E l p a ra
recibirlo en vuestro corazón en la Mesa
E ucarisiica.
»De esta m anera la vid a h a cam biado
com pletam ente p a ra v o so tro s; es ahora
m ejor, m ás herm osa, m ás halag ü eñ a. Pero
e l dem onio tra ta rá de haceros volver atrás
de este cam ino bueno y herm oso p a ra arras-*
traVos de nuevo a la triste vida que in tes llevabais. N o le escuchéis ; tened ^ n fianza en aquellos que h a n dem ostrado am a­
ros tan to y que tanto bien os h an hecho.
Y si el pecado llegase a m anchar m ás o
m enos g ravem ente vuestias alm as con el
polvo o el fango de las calles p o r donde
vosotros cam inabais erran te s en otro tiem ­

Í80 —

po, y a sabéis que D ios, N u estro Señoir, e s tá
siem pre d ispuesto a p erd o n aro s, a la v a r
vuestras alm as con su san g re, ap en as con­
fiéis vuestras m iserias a l sacerdote p a r a
obtener la absolución en e l S acram ento dfe
la P en iten cia.
«H ijos am adísim os : A lgunos de vosotros
no h a n n i siquiera conocido a su p a d re v
a su m adre j los p ad res de otros n o han.
tenido quizá la su erte de ser instruidos,,
como vosotros ahora ; no h an seguido e l
cam ino recto, no am an n i a D ios, n i a l a
R eligión, n i a la Ig lesia ; en fin , los h a ­
brá e n tre vosotros que en lo s años d olo­
rosos de la h o rrib le g u e rra , de los bom bar­
deos, de la h u id a, del destienro, h an v isto
m o rir a los que tiern am en te am ab an , y s e
h an sentido pobres, solos, abandonados,,
hasta el día en que buenos sacerdotes, reli­
giosos y religiosas, los h an recogido. R ezad
po r vuestros queridos difuntos ; y a los que
aun podéis co n tem p lar vivos, decidles m u y
claram en te que el P ap a los am a, los ben­
dice, p id e a Dios q u e les h ag a h a lla r, comoa vosotros, el sendero de la felicid ad eter­
na en el Cielo, y del consuelo en la tie rra
y vosotros contadles dulcem ente, con g a r­
bo, con am or y respeto, todas esas herm o­
sas cosas q u e habéis aprendido. i Qué d i­
cha ta n g ran d e la v u estra e l d ía en quepod áis llevarlos a Jesú s, a la V irgen In*
m acu lad a, a la Ig lesia !
«Q ueridos niños : H a llegado el m om en­
to en que debemos separarnos ; per-o nues­
tro corazón os seg u irá, au n q u e de lejo s v
n uestras oraciones os aco m p añ arán m ien ­
tras con toda la efusión de nuestro ánimoim partim os a vosotros, a aquellos y a aque­
llas cuya am orosa .bondad os m an tien e, os
educa v os g u ia, n u estra p a te rn a l B endi­
ción Apostólica.»
Dos pequeños «sciuciá» subieron a l tro ­
no p ara ofrecer al P ad re S anto un p e rg a ­
m ino en que constaba un n u tridísim o teso­
ro esp iritu al, la o frenda de 5.514 lira s, re­
unidas en tre los niños de la O bra y desti­
nadas a lias M isiones, y un m ensaje de
am or filial.
Al sa lir, los pequeños fueron obsequiados
con un ab u n d an te alm uerzo, y m ás tarde»
en sus respectivos C entros, con u n a comi­
da, am bos obsequio del P ap a.

D e nuestras Misiones
M A T T O G RO SSO (Brasil^
{ C on tin úa la rela ció n d e l nú m e­
ro d e sepiiem hre-octuhre^ ’p dgina 158 .)

L o s in d io s B o r o r o s
P a ra un a cada yez m ás ráp id a y com ple­
t a civilización de estos indios, hem os adop­
ta d o un nuevo sistem a, que est¿ dando con­
soladores resultados.
L os 'bororos, h asta h ace pocos años, tr a ­
b ajab a n la s tie rra s d e la M isión, que les
d a b a , en cam bio, u n jo rn a l proporcionado,
c a sa y com ida. L os niños e ra n acogidos
g ra tu ita m e n te en los internados de la M i­
sión y se les enseñaba un oficio. P ero des­
d e que el veterano D. C olbacchini, y a res­
tablecido, volvió a em ipuñar las riendas
d e M eruri, proyectó y puso, en p rác tica este
nuevo sistem a : d ar a cada fam ilia o g ru ­
p o de fam ilias un a o m ás porciones do te ­
rren o p a r a que las cultivasen p o r su cuen­
ta com o si fuesen sus propietarios. Se que­
d a b a n con la p a rte de cosecha que p udie­
ran n ecesitar d u ran te el año, y e l resto lo
v en d ían a la M isión. £1 sistem a dió al
p u n to , según he dicho, excelentes resu lta­
d o s, p rin cip alm e n te p o r esto ; estim uló la
activ idad e iniciativ a individuales, m ien­
tr a s los vagos, acostum brados antes a co­
m er lo m ism o, ta n to si trab a jab a n como si
no, p o rque los m antenía la M isión, tu v ie­
ron que deponer su indolencia si no que­
rían ay u n ar. Los terrenos («as rocas») se
extienden en un radio d e varios kilóm e­
tro s alre d ed o r de la M isión. Los indios p a ­
sa n la sem ana en ranchos "im provisados, y
e l sábado reg resan a la «aldeia» p a ra oír
la S an ta Misa y recibir la instrucción re­
lig io sa. C om ulgan casi todos, y por la ta r­
de, la b an d a d a u n c o n c ie rto ; intern o s e
in te rn as d esfilan en form ación gim násti­
ca ; después, p ad res e hijos se en tretienen
uu p a r de h o ras en la m ás suave y sabro­
s a intim idad.

nudos, d isp arab an sus flechas co n tra el
ap arato . A lgunas se clav aro n en las alas.
A m edida que la colum na avanza, se cons­
truyen ca rre teras, p u entes y casas, y se
allan a n florestas p a ra cam pos de aviación.
E sta les p rovee, desde la base de A ragarca, de víveres, arm as, m áquinas y h e rra ­
m ientas de trab ajo . E stam os en m uy bue­
nas relaciones con el m ando de la base,
que pone a n u estra disposición aeroplanos
p a ra el tran sp o rte de hom bres y materia-^
les. T ratam o s ah o ra de co n stru ir en Aragarca, ciudad n u eva y m oderna sobre la
confluencia del G arcas con el A raguaya,
dos colegios (uno p a ra niños y otro p a ra
niñas), separados de la p arro q u ia. V endrán
a ser las p rim e ra s escuelas m edias en el
corazón de la P re la c ia , y serv irán p rin c i­
p alm en te p ara los hijos d e los oficiales y
em pleados igubernativos. L a colum na ha
rebasado y a A rag u ay an a, donde duerm en
el ú ltim o sueño nuestros herm anos D . Sacilotti y D. F u ch s, después de h ab er dado
la v id a p o r la salvación d e los ch av an ­
tes, hace doce añbs.
H e. h ab lad o de aeroplanos. E l año pasa-

L o s in d io s ch a v a n te s
U n a expedición m ilita r gu b ern ativ a, al
m an d o d e un coronel, va em pujando siem ­
p r e m ás hacia e l N orte los últim os restos
d e esta indóm ita trib u . E l aeroplano, vo­
lan d o a la a ltu ra d e siete m etros sobre sus
le jan o s cam pam entos, logró fotografiarlos
e n el m om ento en que^ com pletam ente des­

Maria Auxiliadora, llevada en triunfo por las
calles de Horcajo de Santiago
—

181

do, la base se nos o fre d d p ara tran sp o rta r
a los m isioneros en sus visitas p o r e l Meru ri. E ste año irem os a Cuyabá y A ragarca, on la línea «Cruzeiro»* ahorrando un
mes de v ia je en tre cam ión, caballo y ca­
noa. T odas las M isiones tienen ya su cam ­
po de aviación. Creo que debemos utilizar
am pliam ente este nuevo y rapidísim o m e­
dio de locomoción.
£1 viejo sistem a de caballo y canoa, al
m ism o tiem po que g asta y destruye n ues­
tra fibra y nos hace p e rd e r \m tiem po p re­
cioso, nos expone a pelig ro s en que n o in ­
curren los verdaderos m isioneros, los cu a­
les no pueden ren u n ciar al caballo y a U
canoa, ya que, p a ra desem peñar su m inis­
terio, tienen que v isitar casa p o r casa ; nos­
otros, en cam bio, aún no estam os curtidos
p a ra esas fatigas^ n i tenem os la habilidad
suñciente p a r a viaijar a lom o d e anim ales v
ev itar las m uchas insidias de las corrientes
fluviales.
E l año pasado hicim os todavía 75 le ­
g u as a caballo (la frio lera de 500 kilóm e­
tros) , y fué ta l el cansancio, que tuve que
d e ja r a trá s a la M a d re Inspectora, enfer­
ma do erisip ela y de m al de hígado. E l año
an terio r le había tocado la vez a m i secre­
tario, D. P into, quien, al te rc e r m es de
m archa, tuvo que darse p o r vencido, into­
xicado por u na fulm inante ictericia. Si no
es por un aeroplano especial que le reco­
gió y le llevó a S an P ablo, hubiéram os te­
nido que se p u lta rle ©n el «sertáo». T am ­
bién yo pasé las mías.
T odavía no hace dos años que, habién­
dome dorm ido b ajo las estrellas, desperté
a la s tres de la m añana con la p ie rn a d e­
recha hinchada hasta el m uslo. Me pesaba
como si fuera de plom o. Me h ab ría m or­
dido seguram ente algún anim al venenoso.

P u d e celeb rar la S an ta M isa y, con g ra n dísdma fa tig a , m o n tar a caballo. N o en tra­
ron n i el zapato, n i la p o la in a , n i «1 estri­
bo. Con todo, tu v e que v ia ja r dos días con.
aquel peso m uerto colgando y con fiebre
m uy alta. E n Sangrodouro p u d e curarm e.
A m adísim o P ad re, no acab aría n unca si
quisiese refe rirle todos los casos que m e
han sucedido en catorce años de v id a m i­
sionera. £1 Señor vela sobre sus criatu fas.
V o c a c io n e s
U n a p a la b ra acerca de las vocaciones.
T enem os un cen ten ar de asp iran tes, i P ero
cuán tas d ificu ltad es h a habido que, v encer
p ara ju n ta rlo s ! P ad res que se oponen, de­
fectos n atu ra les, poca sa lu d ... N uestros novdcios, estudiantes de F ilo so fía y T eo lo ­
gía, no p o d rán n u n ca , a causa de su esca­
so núm ero, form arse en n u estra Inspecto­
ría eu casas p ro p ias. A l p rese n te, se fo rm a n
en las casas de form ación d e la Inspecto­
ría de S an P ablo, que tien e m ás de m il vo­
caciones. ¿ Cómo ellos tien en ta n ta s y nos­
otros ta n pocas? U sted conoce. P a d re , e l
proyecto que acaricio. E s necesaric que la s
M isiones pertenezcan a u n a InspectoríS
rica en florecientes colegios, donde abun­
d an las vocacicnes y los m edios...
P erd o n e, am ad o P a d re , si m e he a la r ­
gado. ¡ H em os estado ta n to tiem po sin d a r
y sin recib ir noticias... 1
B endígam e, am ad o P ad re, y conm igo
bendiga a los S alesianos y H erm an as, a fin
d e que nos sintam os m ás y m ás dispuestos
a tra b a ja r en u n a m isión donde el d e b e r
es la inm olación, y el sacrificio , heroico.
Su affm o. en J. y M.,
E R N E S T O C A R L E T T I. P b ro .
In sp ecto r

C R O N I C A DE G R A C I A S
POZOBLANCO (Córdoba).— H ic* u n a n oven a
a M orío A u xiliad o ra y prom etí p u blicar la qrod a . pidiéndole tu protección en un asunto de
c u y a ráp ido to lu d ó a depend ía e l porvenir de
un miembro de mi fam ilia. La V irgen de Don Boeco me h a escuchado, y . o g ra d e d d o . cum plo mi
prom esa .— José D ios. S. S.
BARCELONA.— En un opu ro profee&onal. ocudí a M aría A uxiliodoro y a S an Juan Boeco.
qu e no tardaron en otender mis ruegos. En
p ru eb a de gratitud, deseo qu e se publique la
gra c ia y en vío una limosna.— ^R. C osols.

182

—

SAR R O C A DE BELLERA (Lérida). — D am os
g r a d o s a M orío A u xilio d o ro y a S an Joan.
Bosco por dos favores que nos hon olcanxado. y deseam os qu e se pu bliqu e lo g r o d a . a l
mismo tiempo qu e enviam os uno lim osna.—

ü . F.
B AR ACALD O (Vixcoya).— H allándom e próxi­
mo o terminar mi oño de n oviciado en Mohernando. recibí carta de mi fom ilio en q u »
me an u n ciaban e l g r a v e estodo de mi madrea c a u sa de u n o terrible hinchazón de la m ano,
qu e om enozobo terminar e n ga n gre n a. A l pun-

lo com encé u n a n o re n a a M aría A u xiliadora,
juntam ente con otro com pañero. Pocos d io s des­
p u és m e escribió mi m adre de propio puño, diciéndom e que precisam ente e l d ía en qu e co­
m encé la n oven a le h abían d e s a p o re á d o los
dolores, volvien do la m ano a su estad o noturaL A grad ecid o a estos 7 m uchos otros fa v o ­
res que M aría A u xiliad o ra nos h a concedido,
publico la g r a c ia p a ra común aliento. — lu ís
SontamoTÍa, S . S.
CA M PELIO (Alicante). — H allán dose gravíslmomente enferm a u n a nietecito m ío de pocos
m eses, 7 7 0 d e sah u ciad a de los m édicos, a cu ­
dí o M o n a Auxiliado.ro, em pezando una n ove­
n a y prometiendo pu blicar la g ro c ia 7 enviqr
uno lim osna. Hov, a g r a d e d d a , puedo cumplir
mi prom esa, envian d o 10 p e se ta s p e ra e l culto
de la V irgen Sontísim a.— D olores N avarro Ferré.
S A L A M A N C A .— A l terminor mi carrera, 7 a l
q u erer com enzar a dedicarm e a la enseñonzo,
p o se un tiempo sin qu e v in ie ra ningún alum ­
no. A cu d í a M oría A u x ilia d o ra , 7 a q u e lla m is­
m a tarde se presento e l prim ero. Le ruego que
p u bliqu e la gracia^ en e l Boletín, a l mismo
tiempo que le en vío una limosna. — Saturnina
Lorenzo.
SANTANDER.— ^En cumplimiento de mi deber,
v ia ja b a con otro com pañero guian do u n a c a ­
m ioneta cerrod a. A I intentar d a r m archa a trá s
en un sitio p eligro so de la carretera, en m u7
m al estad o o c a u s a de la s prolon gados llu­
v ia s. com enzó a patinor e l coch e 7 dimos en
e l fondo d el río, sin que sirvieran p a ra n ad a
lu los frenos ni la p ericia person al. Q uiso M a­
n a A u x ilia d o ra q u e ca7éserao s en un recodo
7 no m as h a c ia el interior d el río. pu es en este
c a s o hubiéram os sido arrastrados por la corriente. En la c a íd a qu edé c a b e z a a b a jo 7 loe
p ies trabodos en e l asiento de conducción, sin
p od er h a cer esfuerzo a lgu n o p a ra sa lir d e e se
estado. A s í perm anecí e l tiempo m ás qu e su fi­
cien te p o ra p erecer d e a s fix ia v a ria s v eces,
aguan tan d o la respiración con titánico esíuer*0 p a r a no trag o r la s a g u a s c en a g o sa s d el
n o . oyen d o la s voces de mi com pañero y vien ­
do Uegor e l fin de mis dios con una im pasi­
bilid ad y sa n g re fría que no me explico y cu y o
solo recuerdo me a terra . En un forcejeo desesperodo, mi com pañero logró sa c a r la ca b ezo a l
exterior a tiempo q u e se in iciaba nuestro s a l­
vam ento. Por h a b er transcurrido tonto tiempo,
mis sa lv a d o re s me d aban por muerto; pero,
m erced a la s in stan cias de m i com pañero, lograron sacarm e, no sin gran d es esfiierzos, c o s í
en estad o d e a s f itía y com pletam ente am ora­
tado. Es de notar qu e e! coche no sufrió des­
perfecto olguno, ni perdim os n a d a de cuanto
n eváb am os. La única con secuencia d e s a g ra d a ­
b le fueron^ unos d ía s de cam a, sujeto o un
prudente régim en da desinfección interna. Hoy,
y a com pletam ente restablecido, reconozco 7
publico qu e ta l m ilagro h a sido debido a la
bon dadosa protección de la totim oturga Virgen
cte Don Bosco. M aría A u xiliad o ra, c u y a estam pa
llevo constantem ente conm igo en mis continuos
▼ rajes. En a c a o n d e g ra c ia s m ondé celebrar
una m isa en su honor en la ig le s ia d el Cole­

gio S alesian o, com ulgondo con toda m i fam ilia
7 entregando u n a lim osna p o ro la s ob ras del
te m p lo .-^ irfa c o L o ita López.
S A L A M A N C A .— D oy gra c ia s a M aría A u x ilia ­
dora por u na g ra c ia qu e m e h o concedido, 7
en vío 10 p e se ta s p a ra e l boutizo de u na p a
gan ito con e l nombre de M oría d e l Aurdlio.—
J. A lv a re z. C ooperad ora S alesion a.
SAN PEDRO (Zamoro).— Encontrándome m uy
enferm a, vin o u n a a m ig o a visitarm e 7 me
onimó a h o cer u na n oven a a M orío A u x ilia ­
dora. La em pezam os todos los d e c a s a , 7 g ra ­
cias a ton bu ena M ad re e stoy com pletam ente
cu rad o . A gro d ecid a , en vío siete p e se ta s de 11mosno.— Una devota.
MADRID. — A cu d í a M aría A u x ilia d o ra p i­
diéndole la curoción d e mi podre, grovem ente
enfermo, y la V irgen no tardó en conceder la
g ro c ia p edida. Cum plo mi prom esa de pu blicar
e l fav o r y de en tregar 100 p e se ta s de lim os­
n a.— Una gran devota.
IG U A LA D A (Barcelona).— H o lláb ase enferm a
mi hijita, por lo c u a l a cu d í a M aría Auxiliadoro. c u y a m edollo pu se sobre la n iñ a ,'q u e no
tardó en curor. A g ra d ec id a , e n v ío 25 p e se ta s
de Umosna.— Una m adre agra d ecid a.
M A L A G A .— Posan do por uno situación moral
m uy difícil y contraria o mi M tado. y no p o ­
diendo soportar la p e n a qu e esto m e c a u sa ­
b a , recurrí a la qu e e s consuelo d e lo s a flig i­
dos, M ario A m d liad ora. En com pañía de \m
am igo em pecé u n a n oven o. Cum plo ahora mi
prom esa d e p u blicar la g ra c ia .— G . D.
EClJA (Sevilla).— En reconocimiento o íovores recibidos de Nuestro Señor p or intercesión
d el siervo de Dios príncipe A u gu sto Czartorysk i, en vío 10 p e se ta s por giro telegráfico p oro
una m isa en acción de g ra c ia s, y d e s e e que
se pu bliqu e en e l Boletín.— U na an tiguo olum na.
RON D A (M álaga).— M uy a g ra d e cid a a M oría
Aurdliadoro 7 a S an lu á n Bosco por m uchas
g ro c ia s qu e me h a n concedido, e n v ío u na Um osno y h a g o público mi agradecim iento.—
A n g e les D uran d e Benífez, cooperadora salesian a.
HORCAJO DE S A N T IA G O (Cuenco). — D oy
g ra c ia s a M aría A u xiliad o ra p or m uchos fovores qu e me h o otorgado, y a g ro d e cid a o e sta
bu en a M odre, le en vío 25 p e se ta s de limosna,
esperand o que me a lca n ce la g ra c ia qu e le
e stoy pidiendo en una noveno.— Josefa R oldáiu
ASTUDILLO (Palencia).— D esean do a lca n za r
u na g ro c io m u y im portante p a ra mL ocu d í a
M aría A u x ilia d o ra , y hoy, conseguido e l favor,
h a g o público mi agradecim iento y entrego una
lim osno p o ra la s v o c a c im e s sa lesio n o s.— Luisa

G utiérrez d e N ebreda.
T AR AN C O N (Cuenca). — Según juicio de los
m édicos, e r a preciso qu e m e som etiera o una
operación quirúrgico p a ra recobrar lá solud.

— 183

ücularm ente entre lo s c o s o s religio sas. G ran
devota de M oría A u xiliadora, entusiasta de la
C on gregación S alesia n a, a su gen erosidod se
debe la rica y herm osa im agen que se v en era
en e l gron templo salesian o de V igo. N uestra
condolencia a su herm ana doña P au lo y a sus
sobrinos, destacados cooperadores salesionos,
don M anuel, don P ablo y don Aniceto.

H ice uno n oven a a M aría A u xiliad o ra. 7 h oy
m e encuentro perfectam ente so n a. sin haber
m ediado intervención a lg u n a . Cum plo mi pro­
m e sa de pu blicar la g ra c ia y e n v ío u n a limos­
n a.— V icente O cañ a.
SAN TO DOM INGO DE SILOS (Burgos).— Doy
g r o c ia s o M aría A u x ilia d o ra por u na g ra cia
recibida, y entrego 100 p e se ta s de lim osna p a ro
la s v o cacion es sa le sia n a s.— Vlctorio Corozo.

«IN

Encom endam os tam bién o la s oracion es de
nuestros lectores e l a lm a d el m py ilustre se­
ñor don Juan B, Palom ero M oreno, C anónigo
de la S. i. C. de M á la g a y benem érito coope­
rador solesiano, qu e falleció h a c e olgún tiempo.

MEMORIAM»

H on p osod o tam bién a m ejor v id a los coope­
radores solesianos: Ado. D. Juan Perramón
O liva, B eneficiado M aestro de C ap illo de la
S. I. C. de G erona, fallecid o e l d ía 19 de a g o s ­
to; fimo. Sr. D. Emilio Portabella B arrena, D irec­
tor G erente de «Sociedad A nónim a G róber», fa ­
llecido e l 25 de agosto ; d o ñ a M a ría A n o Ferrer
Hibas de A fm ed a, fallecid a e l d ía 9 de septiem ­
bre, y don Luis V alen tí Llausás, fallecid o e l d ía
11 de septiem bre.
Todos ellos entregoron su alm a a Dios, h a ­
biendo recibido los Santos Sacram entos 7 la
Bendición A postólica.

El dio 11 d e m arzo d e l corriente año folieció en su co s a de V igo la antigua coopera­
dora sa le sia n a doña Purificación L. S aa ve d ra.
v iu d a d el qu e fué prestigioso escritor g a lle go
y odm irador de lo O b ra S olesio n a don A m a ­
d eo M ontenegro. Esta señora, que podríam os
com p arar con lo mujer fuerte de la Escrituro,
v e n ía p adecien do desde h a c ía ocho oños uno
afección c a rd ía c a , soportada con gran espíritu
do fe. qu e le h a c ío so b rellevar los m ayores do­
lores qon adm irable resignoción. M adre de nue­
v e hilos, de los qu e le so breviven seis, los
edu có exquisitam ente en la p ie d a d e hizo g e ­
n ero sa en trega de la s dos hijos m ayores al
Instituto de la s H ijas de M aría A uxiliadoro.
A u n q u e su muerte fué repentino, pu es le sor­
prendió durante >la cena, no fué im prevista, y a
q u e se v en ía p reporando a e lla con u na v id a
profundam ente cristiana. L a conducción de su
ca d á v e r, en un d ía de llu via torrenciol, cons­
tituyó u na v e rd a d e ra m anifestación de duelo,
q u e vino a dem ostrar la sim patía de que g o ­
z a b a quien h a b ía sido todo corazón p a ra con
lo s pobres y necesitados. D escon se en p a z lo
virtuoso señora, y reciben sus hijos nuestro m ás
sentido pésam e.

Pedim os im a oración e sp e cia l p or e l alm a de
doña D olores R iera, a cu y o esposo y a cuyo her­
m ano difunto debe e l C olegio S alesian o d e G e ­
rona tantos favores.

BIBLIOGRAFIA
V id a de la Virgen M adre.— Por el Rdo. P. Hi­
lario O rzanco. M isionero de San V icente de
P aú l. — T ercera edición, aum entada. — Libro de
extraordin aria utilidad p o ra niños de E scuelos
y C olegio s de Prim era Enseñanza. M étodo sen ­
cillo y claro; sesen to g rab ad o s; facilita sobre­
m an era e l estudio de lo v id a de la Santísim a
Virgen y de los prin cipales misterios de la Reli­
gión, relacionados con la M adre de Dios. El P a ­
dre O rzanco h a m erecido calurosos elog ios de
m aestros y m aestras y la aproboción d el Con­
sejo N acional, que lo dió e l libro como m u y útil
y práctico p a ro lo s Escuelos. Precio, 10 p esetas.
Distribución 7 v en ta: Editorial Escelicer, S. L.

D e e d a d a v a n za d a , y confortada con los San­
io s Sacram entos, recibidos con toda devoción
y seren idod de espíritu, murió en V igo a m e­
diad o s de septiem bre doña IV istana G óm ez Curieses. Fué la finoda la r g a en carid ad es, que
rep artió en todos los sectores de la ciudad, pa^

Talleres Gráficos.—Hermosllla, 73.—MADRID
1 1 1 1 1 1 1 1 1 M i i i n H 1 1 1 1 1 1 1 1 n 11 m 11 n i-i

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LECTURAS

CATOLICAS

15 pesetas - 12 tomos al ano
S. E. I, Alcaló 164
Madrid

Núm. de Diciembre
Almanaque de los Lecturas
Católicas

n

1 11 l u m i i i i i i i n 1 i m

1 n 111 m 11 ri M 1 1 1 1< hi 1111

BOLETIN

SALESIANO

A P A R T A D O

9 t 3 4 - M A D R i D

Texto

,

R E V I S T A DE
LAS OBRAS DE
DON B OS C O

A Ñ O

L I V

NOVIEMBRE 1946
NUMERO

l 1

Redacción y Adminislración: A lcalá, 164. — A partado 9134. — MADRID
SU M A R IO :
Los C ooperadores Salesianos.—E fem érid es seculares.— N oticiario salesiano :
E sp a ñ a (H orcajo' de S antiago, M álag a, M orón, S an V icente deis H orts).
E x tra n je ro (In g la te rra , S anto D om ingo, A rgentina). — Los «chicos d e la
calle». — D e nuestras Misiones. — C rónica de gracias. — « In m em oriam ».—
B ibliografía.

Los Cooperadores Salesianos
vez más, a lo largo de sus
U NA
casi setenta años de vida, vuelve

el BOLETIN a tra ta r un tema que le
es propio cual ninguno: Los Coopera­
dores Salesianos. No debemos olvidar
que nuestro humilde periódico nació
para ser órgano de la Fia Unión de
los Cooperadores Salesianos, y tal se
ha mantenido, fiel a los deseos y si­
guiendo el impulso que le diera su
fundador y primer director, San Juan
Bosco.
A fomentar los lazos de hermandad,
y para m antener el espíritu de la Pía
Unión, vino el BOLETIN SALESIANO; y para lograr lo primero inserta
en sus páginas mensuales crónicas
de vida y actividad salesianas, rela­
ciones misioneras, gracias de María
Auxiliadora y de San Juan Bosco,
especialmente; notas necrológicas de
hermanos difuntos, etc., y a lo segúndo: es decir, a lograr que se conserve
siempre vivo y pujante el espíritu
que le diera San Juan Bosco, tiende
de un modo particular el articulito,
que podríamos llamar de fondo, en el
170 —

cual se tocan, sucesivamente, puntos
primordiales de vida cristiana y salesiana.
ORIGEN DE LA PIA UNION
Creemos oportuno insistir nueva­
mente en este número acerca del
verdadero concepto de la cooperación
sálesiana, a fin de que nuestros bene­
méritos Cooperadores tengan siempre
mayores motivos para agradecer a
Dios la señalada gracia que les ha
otorgado, a la vez que otros se ani­
men a pertenecer a la Pía Unión.
¿Qué es la Pía Unión de los Coope­
radores Salesianos? Es la tercera ra­
ma del árbol plantado por San Juan
Bosco. Aunque inspirado por Dios,
nuestro Santo, al igual que en la fun­
dación y organización de sus otras
dos obras, la Congregación Salesiana
y el Instituto de las Hijas de María
Auxiliadora, también en ésta proce­
dió como por grados, mientras se iba
esclareciendo en su mente la primi­
tiva idea.

Vwía general de la Casa Salesiana de San Vicente deis tíorts (Darcelona), después de ¡as
obras de ampliación y reform a llevadas a cabo, gracias a la generosidad cíe los cooperadores

Tal vez el último paso haya sido la
asignación del nombre que actual­
mente lleva. Lo primero fué su espí­
ritu, que deducimos de la actuación
de aquellos colaboradores de Don
Bosco desde el año 1841, echada al
surco la semillita del Oratorio 5’estivo. Poco tiempo después del histó­
rico día 8 de diciembre, Don Bosco
contaba por centenares los mucha­
chos que acudían a sus tres Oratorios
en Turin. Los jóvenes se formaban en
la Religión, eran apartados del vicio
y de los peligros de la calle, recibían
instrucción en escuelas nocturnas y
en clases particulares, se recogían en
«Casa Pinardi> los más pobres y
abandonados... El bien espiritual que
se hacía era grande. ¿Gracias a qué?
Gracias a que Don Bosco logró, con
habilidad, ganarse y tener unidos en
torno suyo preciosos auxiliares, se­
glares y eclesiásticos. Y era tan ín ti­
ma y estrecha esta unión, que, años
más tarde, Don Bosco no titubeaba
en considerarla como un preludio de
la futura Congregación Salesiana, y
sus actividades como un ensayo del
trabajo apostólico que ésta deberla
llevar a cabo.
LOS «EXTERNOS»

ciedad insertara Don Bosco un p á­
rrafo dedicado a los «externos». En
él estableció: 1.® Cualquier persona,
aun viviendo en el mundo, en su
casa, en el seno de su propia familia,
puede pertenecer a nuestra Sociedad.
2.® No hará ningún voto, pero procu­
rará cumplir la parte de este Regla­
mento, compatible con su'edad y con­
dición. 3.® Para participar de los bie­
nes espirituales de la Sociedad es ne­
cesario que, por lo menos, prometa
al Rector emplear su fortuna y sus
fuerzas a la mayor gloria de Dios.
4.® Esta promesa, sin embargo, no
obliga, ni siquiera, bajo pena de pe
cado venial.
Por insinuación que al principio re­
cibiera de la Congregación de Obis­
pos y Regulares, suprimió, respecti­
vamente, este párrafo del original de
las Constituciones en 1869 y del
apéndice de la v e r s i ó n italiana
en 1873. Con todo, Don Bosco no de­
sistió en su empeño de dar forma a
los hasta entonces llamados «exter­
nos», creando una Asociación distin­
ta, pero dependiente de la Sociedad.
Salesiana.
PRIMER ESQUEMA
DE LA UNION

Nada de extraño, pues, que en las
primitivas Coi^tituciones de su So­

Y he aquí que en 1874 presenta al
Capítulo Superior un esquema de la
— 171

misma, bajo el título de Unión de
San Francisco de Sales. El fln de la
Unión, según dicho esquema, no era
otro que el de reunir algunos segla­
res y eclesiásticos que tratasen de
trabajar por la mayor gloria de Dios
y en bien de las almas, mediante la
caridad activa, sin miras de interés
material alguno ni de gloria mun­
dana.
El proyecto no entusiasmó a los
capitulares, pues creyeron se trataba
de fundar una cofradía más de las
tantas existentes en la Iglesia.
SE IMPRIME EL REGLAMENTO
Pero Don Bosco tenía también a
punto un Reglamento detallado, y no
tardó en presentarlo a su Consejo,
que lo estudió, y, según las modifica­
ciones de éste y las suyas propias, el
Santo lo redactó de nuevo bajo el
titulo de Asociación de Buenas Obras,
dándolo a la imprenta, para difun­
dirlo privadamente entre sus amis­
tades.
Después de oir diversos pareceres,
y tras nuevo y detenido estudio, vió
la luz el Reglamento, que podríamos
llamar definitivo, y que se intituló
cCooperadores Salesianos, o sea, modo
práctico de ayudar a las buenas cos­
tumbres y a la sociedad civil>.
FIN ESPECIFICO DE
LOS COOPERADORES
Este subtitulo se declara más por
menor en el párrafo III del Regla­
mento, que dice así: «El fin funda­
mental de los Cooperadores es aten­
der a su propia perfección, mediante
un método de vida que se asemeje,
lo más que sea posible, a la de comu­

172 —

nidad. Muchos abandonarían gusto­
sos el mundo para ir al claustro;
pero no lo efectúan, ya sea por razo^
nes de edad o de salud, o por su con­
dición, y muchísimos, por falta de
medios y de oportunidad. Haciéndo­
se, p u e s. Cooperadores salesianos
pueden, en medio de sus tareas dia­
rias y en el seno de su propia fami­
lia, vivir como si pertenecieran a la
Congregación. Por esto, el Sumo Pon­
tífice h a considerado esta Asociación
como una de las antiguas Ordenes
Terceras, con la diferencia de que
aquéllas se proponían llegar a la per­
fección cristiana por el ejercicio de la
piedad, y nuestro fin principal es el
ejercicio activo de la caridad hacia
el prójimo y, muy especialmente,
hacia la juventud, expuesta a los
peligros del mundo y de la corrup­
ción».
Notamos aquí, de paso, si bien es
nuestra intención aclararlo más y
más en artículos sucesivos, que este
párrafo del Reglamento habla de
ejercicio activo de caridad hacia el
prójimo, sin que se determinen cam ­
pos ni limiten cotos, lo cual quiere
decir, en la mente del legislador, que
para ser un buen Cooperador salesiano no es indispensable que se ayude,
exclusivamente, a las obras de cari­
dad que directamente lleva a cabo
la Congregación Salesiana, sino que
en el corazón del Cooperador habrán
de tener cabida, por el contrario, to­
das las obras católicas que m iran al
bien de los prójimos, promovidas por
cualesquiera de las organizaciones
de la Iglesia, particularmente por las
diocesanas y parroquiales.
(Continuará)

EFEMERIDES
Don

Bosco

p ' L p asado día 19 d e septicDibre se cum^ p lie ro n cien años de la aiparición de
•la Virgen, a dos hum ildes aldeanitos de la
m o ntaña llam ada L a S alette (F rancia).
Los M isioneros • que p erp etú an el recuerdo
con la floreciente C ongregación titu lad a
precisam ente de L a S alette, tienen ya su
Casa M adre en Rom a y un a residencia en
T u rín . Los Salesianos se unen a su gozo al
m ism o tiem po que recuerdan com nlacidos
cómo Don Bosco, que en aquellos días del
1846 se estaba estableciendo deíinitivam ente en la casita P in a rd i, apenas tuvo cono­
cim iento de las m aravillosas apariciones, se
constituyó en ardoroso apóstol de las m is­
m as.
« E sta aparición —escribe d o n Lem oyne
e n el volum en I I de las «Jdem orias B iográ­
ficas»— se convirtió en su tem a íavorito,
cien veces repetido p o r él, n o sólo p a ra
d e sp e rta r en sus m uchachos la idea de un
m undo so brenatural y la devoción y con­
fianza en la V irgen S antísim a, sino, sobre
todo, p a ra in fu n d ir en ellos odio a tres p e­
cados que m ueven la ir a de Jesucristo y
atra eu sobre los homíbres los m ás terribles
castigos : la blasfem ia, la profanación de

SECULARES
en

1846...

los días festivos y la violación del ayuno
y abstinencia.»
T a n ta im p o rtan cia le daba, que refirió el
hecho m ilag ro so en u n opúsculo, del que se
pub licaro n , en vida del Sam o, 20.000 ejem ­
plares en dos ediciones. «U n hecho cierto
y m aravilloso — decía Don Bosco en la intro­
ducción— , atestig u ad o p o r m illares de p er­
sonas, y que todos .pueden v erificar p o r sí
mism os, es la ap a rició n d e la B ienaventu­
rad a V irgen M aría, o cu irid a e l 19 de sep­
tiem bre de 1846...
A éste se ju n ta d otros hechos prodigio­
sos, recogidos incluso en docum entos p ú ­
blicos, o bien atestiguados p o r persona cu­
y a fe excluye to d a d u d a acerca d e cuanto
referim os...
E sta s señales sensibles de la om nipoten­
cia d iv in a son siem pre presagio de g rav es
ácontecim ientos, que m a n ifiestan la m iseri­
cordia y la bon d ad d e l S eñor, o bien su
ju sticia o su in d ig n a c ió n ; p e ro siem pre
de m anera que todo ello resu lte p a ra su
m ayor g lo ria y p a ra el m ayor provecho de
' las alm as.
H agam os q u e sean p a ra nosotros m anan-

EsU es el prado donde Juaniio Bosco tuvo sus primeros sueños, verdaderas visiones profétícas, que se cumplieron puníualmenle, para bien de la humanidad entera. Al fondo se ve el
magnífico Instituto "Bernardo Semerín”, para Escuelas Profesionales ■
—

173

tial de gracias y d e b en d icio n e s; sirvan
p a ra excitarnos a un a fe viva, operativ a ;
fe que nos m ueva a obrar el bien y a h u ir
el m al, a hacem o s dignos de su in finita
m isericordia.»
Resum im os aquí la n arració n del histó­
rico prodigio q ue refieren ]as «M em orias
Biográficas» en e l vol. I I , p á g s. 576-582.
M axim ino, d e once años, y M elania, de
quince, e ra n dos pobres pastorcillos que
apenas sabían rezar el P adren u estro y el
A vem aria. L a n iñ a no h a b ía hecho aún la
p rim era Com unión. P astoreando sus vacas
en la m ontaña d e L a S alette, se hab ían en ­
contrado po r vez p rim era en el m ism o ab re­
vadero el día 18 de septiemibre de 1846 y
se habían desafiado a quién llegaría más
p ro nto a l día siguiente. Al o ír el toque del
itAngelus» del m ediodía rezaron la breve
o ra c ió n ; después, concluida su fru g a l co­
m ida ju n to a u na fuentecilla que m andaba
sus aguas al vecino arroyo, se durm ieron
bajo la som bra d e los árboles. C uando des­
p ertaro n tuvieron quo ech ar a correr en
busca de las vacas, que se les habían des­
bandado. E n aquel m om ento, un a fu lg en tí­
sim a luz h irió los ojos d e M elania. Llam ó
a voces a M axim ino, y entram bos se h alla­
ron ante una visión herm osísim a ; u na Se­
ñ ó la , sentada sobre un m ontón de piedras,
con el rostro en tre la s m anos, rodeada de
vivísim a luz. Calzaba san d alias b lan cas,
adornadas con rosas de varios c o lo re s;
blanco era su vestido, todo él tachonado de
p e rla s ; blanco tam bién, y adornado de ro­
sas, un pañizuelo que llevaba al cuello, v
cubrírv su cabeza con una cofia adornada
asim ism o con rosas. D el cuello le pendía
un crucifijo, en cuyo m adero tran sv ersal
se veían grabados, a un lado, un m artillo,
y al otro, unas tenazas.
M elania, atem orizada, dejó caer su bas­

tón. P ero la S eñora levaiotó ¡a fre n te, se
puso en p ie e invitó a los pasto rcito s a que
se ac ercaran :
—^Acercaos, h ijo s m íos — ^les d i j o ^ , no
ten g áis m ie d o ; h e .venido p a ra anunciaros
un a g ra n nueva.
Ambos atrav esaro n el arroyuelo, y la S e­
ñ o ra, después d e conducirlos a l lu g a r um ­
broso do n d e h ab ían e stad o an tes, les h ab ló
a s i:
«Si m i pu eb lo no se quiere som eter, me
veré oblig ad a a d e ja r lib re la m ano de m i
H ijo , la cu a l es ta n fu erte y p esa tam o ,
que uo pu ed o ya d etenerla p o r m ás tiem po.
H ace m ucho q u e ¡sufro p o r vosotros. Si
quiero conseguir q u e m i H i]o no os aban­
done, te n g o que e s ta rle rogando constante­
m en te, y a vosotros os tie n e esto sin cuida­
do. P o d ríais mjay bien rezar, oibrar e l bien ;
p ero ja m ás lo g raría is com pensar la solici­
tu d que p o r vosotros m e he tom ado. «Os
h e concedido — dice e l Señor— seis d ías p a­
r a tr a b a ja r ; m e h e reserv ad o e l séptim o y
no m e lo queréis en treg ar.» E s esto lo q u e
h ace tan p esad a la m ano d e m i H ijo. S i
vuestras p a ta ta s se estro p ean , la cu lp a es
vuestra. O s lo h ice v er el añ o p asad o y no
quisisteis h a c e r c a s o ; cu an d o en co n tráis
p a ta ta s p o d rid as b lasfem áis el nom bre de
m i H ijo. Se seg u irán estropeando, y este
año, p o r N av id a d , n o te n d ré is nada. Si te­
néis trig o , no lo se m b ré is; todo cuanto
sem bréis será devorado p o r el tiz ó n ; si
algo sale, se co n v ertirá en p o lv o a l trilla r­
lo ... H ab rá u n a g ra n m o rtan d ad d e niñ o s
m enores de siete añ o s... S ucederá u n a g ra n
carestía... L as nueces y la s uvas se p erd e­
rán ...»
M ientras así hab lab a, la S eñora lloraba.
L as «M em orias Biográficas» hacen no tar
que las profecías se cum plieron todas.

Noticiario Salesiano
ESPAÑA
H O R C A J O D E S A N T IA G O (C u e n c a )___
F ie s t a en h o n o r de M a r ía A u x ilia ­
dora.
El peiióillco conquense "Ufensíva**, en su
núm ero del
de s-'püembre de 1946, publi­
caba el siguiente articulo:
“ invitado por el señor Secretarlo, don Fran174 —

Cisco Arquero, c impresionado hondamente
por el fervor y entusiasmo con que cele­
bran estos buenos hijos de Horcajo la fiesta
de nuestra Virgen Auxiliadora, envío estas
lineas al señor Director de “ Ofensiva”, para
que. si lo tiene a bien, las dé a la publicidad.
De año en año se ve arraig ar más y más

.V.ir.lflO (Barcelona).— Congregantes de San Luis y del Santísimo gue trabajaron con gran
celo el pasado curso a favor de las vocaciones y ¿Visiones salesianas
í*sla popularísim a devoción a la Virgen del
g ran pedagogo San Juan Bosoo.
Hacía algún tiempo que esta Imagen era
conocida, pero no am ada.
Hoy, debido a las facilidades y desvelos
del señor Párroco, señor Secretario e infini­
dad de devotos favorecidos con sus gracias
— entre los cuales se encuentran familias muy
distinguidas—, y a la ayuda generosa de los
buenos Padres Salesianos, se halla ensalzada y
venerada en la Novena, y m uy particularm en­
te en el día 15 de agosto, techa establecida
para honrarla, pedirle favores y buena ter­
minación del año agrícola.
Bien puede felicitarse el señor Cura al ver
Sil trabajo silencioso recompensado con el
fervor con que estas buenas gentes oyen el
Santo Sacrificio de la Misa y se acercan a la
Mesa Eucaristlca.
Si es consolador todo lo expuesto, no deja
d e serlo igualmente cuando se oye a un grupito de jóvenes entusiastas, sin respeto hum a­
no, cantar, con toda precisión, misas y mo­
tetes, elevando así el espírtiu de los oyentes
y trabajando en beneficio del culto santo.
rEnhorabuena a este puñadlto de cantoras,
por el inmenso bien que hacen y el consuelo
que derram an sobre tantos corazones oprimi­
dos por el sufrim iento!
A la salida del templo, grandes y peque­
ños eran obsequiados con unas bonitas es­
tam pas de'M aría Auxiliadora, San Juan Bosco
y el Venerable Domingo Savio, no sin antes
d ejar caer unas perros en la bandeja de la*
mesa petitorta, destinadas a la terminación y
embellecimiento del altar.
P or la tarde, concluido el Rosario y la No­

vena, salió la Auxiliadora de los cristianos en
paseo ordenado y triunfal por las calles de
costumbre, siendo aclam ada por continuas ple­
garias y melodiosos cantos, todos saturados
de sentida piedad.
Asimismo, en santa disputa, fué llevada la
imagen en herm osa carroza a hombros por
los jóvenes de ambos sexos.
Esperamos que esta devoción traiga el re­
surgimiento de aquella vida netam ente cris­
tiana de nuestros m ayores y obtenga de su
bondad el auxilio que tanto necesitamos en
estos tiempos de prueba.
Si el 8 de diciembre lodos acuden a vi­
torear a su Inmaculada, justo es que el 15 de
agosto —paréntesis en las grandes faenas
agrícolas— se acerquen llenos de fe a la que
siempre h a sido el Auxilio del Orbe Cristiano,
arrancándole sonrisas, paz, bendiciones e in­
finidad de gracias .y favores para todos sus
devotos y para ese campo de Horcajo, recio,
severo, hondo e Inmenso, como severa y re ­
cia es la llanada áspera de la Mancha, donde
se halla enclavado. ¡Viva la Virgen de San
Juan Bosco: María A uxiliadora!"
M A L A G A . — H om e n aje a un C o o p e ra­
d o r S a le sia n o .
La Congregación Salesiana en Málaga, que
tantos favores debe al doctor don José Gálvez, h a querido celebrar el octogésimo ani­
versario de su nacimiento, el día 29 del pró­
ximo pasado septiembre, .con u n a Misa de
Comunión general, celebrada a intención del
benemérito Cooperador, y una solemne vela— 175

da, durante la cual fueron distribuidos va­
liosos premios a los nlflos de las Escuelas
gratuitas. Dichos premios son debidos a la
generosidad do los Cooperadores Salesianos,
que lian sabido responder al llamamiento de
los hijos de San Juan Bosco en favor de la
clase pobre y necesitada. La velada fuó ame­
nizada por la Banda del Colegio Saleslano, y
hermosos núm eros de declamación y can­
to, distinguiéndose los pequeños artistas en
la ejecución de cantos regionales y en el
monólogo “ Curiosidad Infantil". El señor Di­
rector dirigió sentidísimas frases de gratitud
al doctor don José Gdlvez Ginachero, allí pre­
sente con su hijo, doctor Gálvez Molí. Al ter­
m inar el acto, todos los presentes tributaron
una calurosa ovación al doctor Gálvez Qinachcro, para quien piden al Señor toda suerte
do bendiciones por lo mucho que quiere y
protege a la Obra Salcsiana.
m O RO ni D E L A F R O N T E R A (S e v illa ).
E l Excm o. S r. G o b e rn a d o r M ilita r
v is ita el C o le gio Sa le sla n o .
Con ocasión del reparto de premios a los
alumnos, celebrado el día 29 del próximo
pasado junio, visitó el Colegio Saleslano de
Morón el Excmo. Sr. Gobernador Militar de
Sevilla, General don José Antonio Martín Prat.
Llegó a las once y fué recibido por los
alumnos y Superiores del Colegio, por las
prim eras autoridades de la ciudad y lo más
selecto do la población, entre aplausos, víto­
res y las vibrantes notas de la Banda Salesiana. Su Excelencia lomó parte en la fervorosa
procesión eucarlstica y asistió desde el pres­
biterio al Santo Sacrificio.
Luego, en el salón de actos, tuvo lugar el
reparto de premios a los mejores alumnos
del curso 45-46. Entre los hermosos núm e­
ros do la velada celebrada con este motivo,
destacó el discurso del antiguo alumno del
Colegio de Utrera, don Manuel García Arrecia­

/

TJ

Ti
MADRID.— Pistas exterior e intervk
putares Salesianas, recientemente fi.
do, que tejió un magnífico elogio de la Con­
gregación Salesiana.
Después de la bendición de la imagen del
Sagrado Corazón Eucaríslico,
que el reve­
rendo señor Director consagró el Colegio, to­
mó la palabra el Excmo. Sr. General, cuya
aparición en el escenario fué recibida con
u n a explosión de entusiasmo por el públi­
co, puesto en pie. De su brillante pieza ora­
toria no se sabe qué adm irar m á s: si su
elocuencia arrebatadora, sus sentimientos pro­
fundam ente cristianos o su acendrado am or a
la Obra de Don Bosco. Tuvo frases de encen­
dida devoción a María Auxiliadora, recordan­
do que el último latido del corazón de su hijo,
m ártir en Santander, halló eco en el de María
Auxiliadora, cuya estampa llevaba en la car­
tera. Terminó invitando a todos a tom ar como
primera entre sus obras meritorias el favore­
cer en lo posible a la Obra Salesiana.
SAN VICENTE DEES HORll
la Casa Salesiana después {

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176

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■ ■ ■ ■ ■ IIIIIU IIIII
iíií nuevo pabellón para Escuelas Poefcfnado en la baniada de Estrecho
S A N V IG E N T E D E L S H O R T S (B a rc e lo ­
n a ).— N o tab le s o b ra s de am p liación .
La vieja masía catalana de San Vicente
deis Horts, Casa solariega de muchos salesianos de España, pues en ella hicieron su no­
viciado y profesión los prim eros que en nues­
tra Patria se dieron a seguir las huellas de
Don Bosco, h a sido objeto, a partir del año
1939. de importantes obras de reform a y
ampliación.
Lo que podría llam arse segunda etapa de
las obras dió comienzo en el mes de julio
del año 1944. con la ampliación de un cuerpo
de edificio, donde se instaló la enferm ería
en el prim er piso, y un dormitorio, con ca­
pacidad para sesenta camas, en el segundo.
En 1945 se trabajó en el cuerpo central, que­
dando habilitadas para principios de curso

dos espaciosas aulas, magníficamente orien­
tadas, y un salón de estudio de ocho p o r
catorce metros. Continuaron después los tra­
bajos de revoque de la casa y pavimentación
de aceras. Ultimamente se h a trabajado en
el estucado de dormitorios, clases y corre­
dores, llegándose ‘así a la inauguración ofi­
cial, que tuvo lugar el pasado agosto, con
un triduo de misas a intención de cuantos
han ayudado a las obras y en acción de g ra­
cias a María Auxiliadora, que tan visiblemen­
te ha velado, con solicitud materna, por este
Seminarlo.
El día 25 de dicho mes, con los señores
Directores de Sarriá, Tibldabo y Horta, reci­
bimos a una selecta representación de los
Cooperadores de Barcelona, con cuya gene­
rosidad ha sido posible la transform ación que
en estos años h a experimentado la casa. En­
tre ellos, a los distinguidos señores Comamala, que tantas pruebas de afecto vienen dando
a los hijos de Don Bosco, y al acreditadobanquero de Barcelona don Antonio Cornudella, y su digna esposa, doña Rosita Casaponsa. La veladita que se celebró en su ho­
nor hizo las alegrías de los invitados, que
marcharon satisfechísimos, manifestando sucomplacencia por la gratitud y afecto gran­
des que habían encontrado en el SeminarioSalesian-o.
Actualmente llenan la casa tres cursos deAspirantes, en número de 130, y 40 novicios,
que habitan la Torre don Beltrami, enclava­
d a en medio de la finca. Todos ellos empe­
zaron el nuevo curso el día 16 del pasadoseptiembre, con el deseo ardiente de Irse for­
mando a imagen y semejanza del Padre Don
Bosco, para trab ajar con fruto en el campo
del apostolado.

EXTRANJERO
I N G L A T E R R A
Con ocasión del centenario de la conver­
sión de Newman, luego Cardenal de la Santa

I^celo n a ).—Díoersas vistas de
importantes obras llevadas

lj

— 177

Iglesia, nuestra Parroquia de Oowley-Oxford,
on la que se halla el antiguo Monasterio an­
glicano donde, en 1845, el gran convertido ab­
ju ró del Protestantism o en monos de un P a­
dre Paslonlsla, ha adquirido un terreno frente
a dicho Monasterio para construir una Igle­
sia, en recuerdo del histórico acontecimiento.
Presidió la ceremonia conmemorativa el
Delegado Apostólico, monseñor Godfrey, con
conspicuas representaciones del Clero secular
y regular.
S A N T O

D O M I N Q O

Trece Salc.slanos tienen a su cargo en Ciu­

dad-Trujillo dos Parroquias, una Escuela pro­
fesional, un Externado con Escuelas elemen­
tales y dos Oratorios festivos, uno de los cua­
les cuenta con más de mil muchachos. Se
espera poder abrir en breve u n a casa para
aspirantes a la vida salesiana.
A R G E N T I N A
El próximo pasado 6 de junio fuó consa­
grado con gran solemnidad, por el excelen­
tísimo y reverendísimo señor Arzobispo, doc­
tor don Juan P. Chimento, el nuevo y magnlílco templo parroquial saicsiano dedicado
al Sagrado Corazón de Jesús, en La Plata.

Los «chicos de la calle»
(Sigue la relación d.e septiembreoctubrej página isá.)
ipronto se vieron los frutos d e la
providencial obra de los «(chicos d e la
calle». Su transform ación fué rá p id a y
to ria : dejaron de verse caras torvas y es­
cenas b rutales y de oírse palaibras soeces
y blasfem ias. E n cam bio, com enzó a ser
frecuente el espectáculo de bandadas de
m uchachos, sucios y h arapientos, corrien­
do alborozados a sa lu d ar al sacerdote con
la cena, no fué im prevista, y a
q u e se v en ía p reporando a e lla con u na v id a
profundam ente cristiana. L a conducción de su
ca d á v e r, en un d ía de llu via torrenciol, cons­
tituyó u na v e rd a d e ra m anifestación de duelo,
q u e vino a dem ostrar la sim patía de que g o ­
z a b a quien h a b ía sido todo corazón p a ra con
lo s pobres y necesitados. D escon se en p a z lo
virtuoso señora, y reciben sus hijos nuestro m ás
sentido pésam e.

Pedim os im a oración e sp e cia l p or e l alm a de
doña D olores R iera, a cu y o esposo y a cuyo her­
m ano difunto debe e l C olegio S alesian o d e G e ­
rona tantos favores.

BIBLIOGRAFIA
V id a de la Virgen M adre.— Por el Rdo. P. Hi­
lario O rzanco. M isionero de San V icente de
P aú l. — T ercera edición, aum entada. — Libro de
extraordin aria utilidad p o ra niños de E scuelos
y C olegio s de Prim era Enseñanza. M étodo sen ­
cillo y claro; sesen to g rab ad o s; facilita sobre­
m an era e l estudio de lo v id a de la Santísim a
Virgen y de los prin cipales misterios de la Reli­
gión, relacionados con la M adre de Dios. El P a ­
dre O rzanco h a m erecido calurosos elog ios de
m aestros y m aestras y la aproboción d el Con­
sejo N acional, que lo dió e l libro como m u y útil
y práctico p a ro lo s Escuelos. Precio, 10 p esetas.
Distribución 7 v en ta: Editorial Escelicer, S. L.

D e e d a d a v a n za d a , y confortada con los San­
io s Sacram entos, recibidos con toda devoción
y seren idod de espíritu, murió en V igo a m e­
diad o s de septiem bre doña IV istana G óm ez Curieses. Fué la finoda la r g a en carid ad es, que
rep artió en todos los sectores de la ciudad, pa^

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