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Ei Revdmo. Señor

Don

PEDRO

RICALDONE

Rector Mayor de la Congregación Saleslana. Superior de la Familia es­
piritual de Don Bosco s IV Sucesor del Santo, entregó su espíritu al
Creador el dia 25 de noviembre de 1951.
El BOLETIN SALESIANO le dedica este número, y pide a sus lectores
una oración por el alma del amadislmo Padre.

R .

I .

P .

SUMARIO
£ I l Y s u c e s o r de S a n J u a n B o s c o a i<t8 coop e­
ra d o re s s a le s ia n o s .— K 1 te s ta m e n to e s p i­
r itu a l del h e c t o r .lia y o r .— U esu m e n b io g r á ­
fic o del h v iu o . d on l'e d r o h ic a ld o n o .—
S a n ta m u e rto do d<»n Podro K io a ld o n o .E n tie r r o y fu n e r a le s d el IV s u c e s o r do D on
H o sco .— D o n P od ro Itic a ld o n o y ol D O L B T IX S A L E ^ IA N O .— E feiu ^ ríd o s s e c u la r e s :
P a so a p a s o .— C ró n ic a de g r a c ia s .

EL IV SUCESOR DE SAN JUAN SOSCO
A LOS COOPERADORES SALESIAN O S
Com o to d o s los
co n la a n ticip a ció n n e c e s a rio
p a r a e n v ia r la a la s re d a c c io n e s d e l BOLETIN,
n u estro R ecto r M a/ o r h a b ía e sc rito e s ta c a r t a
p a r a e i n ú m ero d e e n e r e d el a ñ o q u e co m ien za-

BENEMERITOS COOPERADORES:

A pesar de cuanto se esfuerzan los bue­
nos, los tiempos que corren son todavía
muy difíciles y todos sentimos la necesi­
dad de un especial auxilio del Cíelo, a fin
de lograr un ambiente de normalidad y de
paz que permita el pleno desarrollo de una
eficaz recuperación civil, religiosa y social.
Así, pues, al enviaros mi felicitación,
tanto a vosotros como a vuestras familias
y amistades, para el nuevo año, os asegu­
ro el más ferviente recuerdo diario en mis
oraciones y en las oraciones de los Salesíanos, de las Hijas de María Auxiliadora y
de toda la juventud congregada en nuestras
Casas y en nuestras Misiones.
Ojalá sea para todos un año .verdadera­
mente feliz, alegrado por copiosas bendi­
ciones, para consuelo de tantísimos pueblos
tan duramente probados aún, y para alivio
del mundo entero.
Educados en la escuela de San Juan Sos­
co, siempre tan serenamente optimista, aun
en las más duras tormentas de la vida, mi­
ramos llenos de esperanza el porvenir, por­
que hasta en las vicisitudes más azarosas
la paternal bondad del Señor nos ha llena­
do de consuelos.
La primera dicha que inunda nuestra al
ma al terminar este año es precisamente
vuestra constante y generosa bondad, que
nos permite continuar la misión de líon
8 0 S C 0 : sostener florecientes tantas obras y
emprender otras nuevas, siempre providen­
ciales: proporcionar buena educación a mi­
llares de niños pobres, asegurándoles un
porvenir decoroso; ayudar a tantos oDrazones generosos que a^iran al apostolado
salesiano, esforzándose por conseguir la
formación religiosa, cultural, pedagógica y
técnicoprofesional que un día les hará íns-

irumentos eficaces en las manos de Dios
para la salvación de las almas y para pro­
vecho de la sociedad.
Otra dicha inerable es el ver cómo van
madurando, tras el suave impulso de especialisimas bendiciones celestiales, exquisi­
tos frutos de santidad en nuestra familia.
Ei ano 1950 tuvimos le Beatificación del
angelical alumno de Don Bosco Domingo
Savio. Este ano, la suprema exaltación de
-la humilde hija de Mornese, la primera Superiora, Cofundadora del Instituto de las
Hijas de María Auxiliadora, Santa Marta
Dominga Mazzarello.
La gloria de la Madre se irradia sobre la
floreciente Congregación, llenando de ale­
gría las almas, prestigiando más y más el
Instituto y estimulando a religiosas y
alumnas a la imitación de sus preclaras
virtudes.
A partir de la solemnísima Canonización
en la Basílica de San Pedro, se han ido su­
cediendo brillantísimos f^tejos que, des­
pués de Roma y de Turln, difunden los ful­
gores de su santidad hasta los extremos
confines de la tierra, suscitando por doquier
y en todas ¡as clases sociales admiración y
devoción.
Otras once Causas de Beatificación y Ca­
nonización siguen su curso en la Sagrada
Congregación de Ritos, yendo a la cabeza
las de los Siervos de Dios don Miguel Rúa,
don Felipe Rinaldí, don Andrés Beltrami y
Príncipe Augusto Czartoryski.
Con nuestros dos mártires. Monseñor
Luis Versiglia y don Calixto Caravarío, van
adelante también don Luis Mertens, Madre
Magdalena_ Morano, Sor Teresa Valsé Pantellini, dona Dorotea de Chopitea y Ceferino Namuncurá.
FECHAS MEMORABLES

El curso de la Historia nos ha traído fe­
chas verdaderamente memorables y nos
ofrece otras muy cercanas.
— 3

Hemos celebrado €l año 1950 el LXXV ani­
versario de las Misiones Salesianas. Habéis
ieido las relaciones de los grandiosos fes­
tejos que han tenido lugar en la Argenti­
na, y especialmente en la ciudad de Bue­
nos Aires, ciudad que recordó la llegada de
¡os primeros Salesianos con demostracio­
nes de gratitud y de alegría difícilmente
superables. No se había concluido aún el
programa jubilar de las Misiones cuando
trajo huevo entusiasmo el LXXV aniversa­
rio del reconocimiento de la Pía Unión de
los Cooperadores Salesianos. En efecto, fué
el 'Papa Pío IX quien con Breve del 9 de
mayo de 1876 dió existencia oficial a la Pía
Unión y la enriqueció con muy preciosas
indulgencias.
Esta efemérides señala para vosotros,
amadísimos Cooperadores, una hora gran­
de. Y desde aquí seguimos llenos de com­
placencia las varias conmemoraciones que
se vienen haciendo en las asambleas loca­
les, regionales y nacionales, bajo la cuida­
dosa guia de los Directores Diocesanos y de
los Decuriones.
Coronará dignamente estas asambleas el
Congreso Jubilar, que tendrá lugar en Roma
en el mes de septiembre del año que vie­
ne, y el Internacional, que se celebrará en
Turin en mayo de 1953.
No dudo de que .vuestra participación se­
rá intensa. Por mi parte saludo ya desde
ahora a los delegados que acudirán tanto
a Roma como a Turín.
Los programas se irán detallando mes
tras mes en el BOLETIN SALESIANO.
Entre tanto, según se comunicó a su
tiempo, una selecta representación de vues­
tra Unión tomó parte, en la primera quin­
cena de octubre, en el Congreso Mundial
del Apostolado Seglar, Congreso que seña­
lará, a no dudarlo, una fecha gloriosa en
la historia de la Iglesia. Junto a los Dele­
gados de la Pia Unión de los Cooperado­
res asistieron también al Congreso dirigen­
tes de las Congregaciones o Compañías pia­
dosas, fundadas por Don Sosco hacia la mi­
tad del siglo pasado para formar en la pie­
dad y en el apostolado a las masas de sus
jóvenes.
De esta manera hemos contribuido al
éiíito del Congreso con nuestra modesta, si,
pero cordial participación mediante los
apóstoles en acto, Cooperadores y Coopera­
doras, y a través de la formación de los
apóstoles del mañana, según el espíritu y
pl celo de nuestro Fundador. Grande fué
nuestra alegría al sentirnos unidos a las
magnificas y multiformes Asociaciones e
Instituciones, ya de la Acción Católica, ya
del Apostolado especializado, aprobados y
bendecidos por la Iglesia. Y nuestro gozo
se vló sobremanera acrecentado al compro­
bar la admirable correspondencia del espí­
ritu y de los programas que hace ya un si­
glo les diera a nuestras organizaciones
Don Bosco. No sin gran razón, el Decreto

de "Tuto*' para la Canonización del Santo
definió a la Pía Unión de los Cooperadores
Salesianos de "notable primer esbozo de la
Acción Católica” . En efecto, el Breve de
Pío IX coronó los experimentos iniciados
por. Don Bosco antes del ano 1850. Sintió él
desde los principios de su obra la necesi­
dad dcl apostolado de los seglares y pro­
movió desde entonces, denodadamente, su
organización.
El año 1952 nos trae también el centena­
rio de dos acontecimientos de capital im­
portancia. En efecto, el año 1852 —hace
cien años justos— Don Bosco fué canónica­
mente nombrado "Director-Jefe" de los Ora­
torios de San Francisco de Sales, de San
Luis y del Angel de la Guarda, y reconoci­
do como "Fundador de la pía institución "
por el Arzobispo de Turin, monseñor Fransoni, el cual le confirió las facultades pro­
pias del cargo, incluso la de imponer el
hábito eclesiástico a los jóvenes deseosos
de consagrarse al apostolado.
De dicho año data la sistematización pri­
mera de la Casa Madre de Valdocco y del
Hospicio, que por entonces tenía 36 inter­
nos y fué asimismo en 1852 cuando once
jóvenes selectos se impusieron un progra­
ma más denso de piedad y de apostolado,
programa que se vio coronado con la vestición clerical de Rúa y de Rocchietti; paso
decidido para la creación de la Sociedad
Salesiana. El 20 de junio de 1852, el Santo
vió bendecir y abrir al culto su primera
iglesia dedicada a San Francisco de Sales,
y poco después comenzaba la construcción
de los edificios que debían sustituir a la
pobre Casa Pinardi y que hoy día todavía
se conservan y consideran como la cuna de
toda la Obra.
Recuerdos amadísimos que merecen cier­
tamente una conmemoración digna, al
♦iempo que se proyectan otras grandiosas
efeméridos seculares para el año 1953. Os
las apunto tan sólo, reservándome el daros
a conocer el programa detallado para más
adelante.
En el año 1953 recordaremos: el primer
Centenario de la Prensa salesiana, orgáni­
camente iniciada con las Lecturas Católi­
cas, y el primer Centenario de las Escuelas
Profesionales Salesianas, comenzadas en
otoño del mismo afk) 1853.
¡Cuánto se ha avanzado desde aquella fe­
cha! :Cuántas imprentas y editoriales!...
¡Cuántas Escuelas Profesionales y Agrícolas,
del arto del libro y del vestido, del hierro
y de la madera! ¡Y cuántos otros centros de
educación elemental, media y superior pa­
ra la formación cristiana de la juventud
masculina como femenina!
Realmente tenemos motivos más que su­
ficientes para dar gracias al Señor y a la
Virgen Santísima Auxiliadora que se digna­
ron derramar sobre la humilde Familia Sa­
lesiana tan extraordinarias bendicioiíes. Y

por anadiduda, el año 1953 verá el Jubileo,
de Oro de la solemnísima coronación pontifici- de la taumaturga imagen de la Virgen
de Don Sosco, llevada a cabo el 7 de mayo
de 1903 por el Emmo. Cardenal Richelmy,
Legado Pontificio.
NUEVAS FUNDACIONES
Eatreionto, m e complazco «n ofreceros Icz
lista de las fimdaciones que han tenido lu­
gar en este año que termina en las varias
partes del mundo:
SALESIANOS
ITAUA: Compohotsso, AsQo p ara huérfa­
nos de guerra; A bhadia Santa Maxta, Orfa­
nato y Escuela Agrícola; Cfvffcrnova, Parro­
quia y Oratorio Festivo; San Scjvafore Monferrofo. Asistencia espiritual a los Hermanas
de h i A.; Todí, Oratorio Festivo; Vfeíri, O ra
lorio Diario; Frascati-Capocroce, reapertura
de un Oratorio Diario.
ALEMANIA: Velbert, Hospicio pora oj^en*
dices.
AUSTRIA: Blundetiz, Hospicio pora apren­
dices.
ESPAÑA: Barceiona, Parroquia de San
Juan Rosco.

FRANCIA: Orleans, Seminario pora ucra­
nios; Decazeville, Escuelas elementxiles y me­
dias; Muliwuse, Parroquia y Oratorio Fes­
tivo.
HOLANDA: Den Haag, Externado y Orato­
rio Festivo.
POLONIA: Bytom, Asistencia espiritual a
ios Hermanos de M. A.: Kretkow, Parroquia;
Suzaica Ciesxycka, obra solesiona; Lei^iica
Opoisba, asistencia espiritual a las Herma­
nas de M. A.; Miedzyhorz. Parroquia; Rabka,
Orfanato; Zori. asistencia espiritual al hospi<. y a las Hermanas de M. A.; Cbodanow.
Parroquia; Cieszlrow, Parroquia; ITatoivlce,
Capellanía del Hospital; Kobybiica, Parro­
quia; Kowalewo, Parroquia: JVowo G rodei,
Parroquia; Ostvíeczm. Estudiantado Teológico;
Ponkrjovjce, Parroquia; Poreva, Capellanía;
Rumia Zagoize, Parroquia; Síemianovice, Capellonío; SuJow, Parroquia; Szczodrow, ídem;
WrocIcnv, Asilo p ara jóvenes mutilados.
PORTUGAL: Viana do Castello. Escuelas
Elementales y Oratorio Festivo; Oporfo, Orfa­
nato y Escuelas Profesionales.
ANTILLAS: Visfa Alegre (Habana), Colegio
y Oratorio; Haiü-PelioavUla, Aspirontado y
Oioloño Festivo.
ARGENTINA: Buenos Aires, la Cosa del
BOLETIN SALESIANO.
BRASIL: Barixrcena, Colegio.

£ n a g o s to d el a ñ o 1 9 0 0 se r e n n ié el p rim e r C ap itu lo In s p e e to ria l d e l a C o u g reg aeló n S a l e s i a n
•B E s p a ñ a . D o n P ed ro R ic a ld o n e ( * ) a s is tid a é l a l la d o d e e s a s g ra n d e s l ig a r a s q u e p u ed en
v e rse en l a fo to g r a fía
—

5

CANADA: Edmonton, Colegio y Asilo peora
de emigraates italianos, alemanes y
polacos.
ESTADOS UNIDOS: M alm ah, Parroquia
pora polacos.
CENTROAMERICA: San Vicente, Escuelas
y Oral'orio.
COLOMBIA: Fusagasugo, Colegio.
ECUADOR: BomJ!>oIza, Misión «Domingo
Soyio», con internado pora jjboritos.
PARAGUAY: Asunción, nueva Obra Salesiana.
CHINA: Magno, Salesion Press, Imprenta^y
Librería Editorial; H ong-K oügShaukiw aa, Es­
cuelas elementales, medias y nocturnas;
Hong~Xong~Kowloon, Escuelas elementales,
medios y profesionales.
FILIPINAS: Taríac. Escuelas medias oara
externos; Victorias, Escuelas proíesionales y
Oratorio Festivo.
INDIA: MaJinpota, Escuelas y Oratorio;
Colagní, Obra Salesíana.
JAPON: rokyO'Merima, C asa de San Fran­
cisco de Sales, p ara prensa.

hi}03

INGLATERRA: Torreiídge, Asilo Preventorio
de niños.
PORTUGAL: Oporío, dirección del «Patro­
nato de Nuestra Señora de los Dolores y de
San José», pora niñas huérfanas — nece^tados; Golegá, dos casas, una con Escuelas,
Oratorio v obras sociales, y la otra, con Am­
bulatorio y Dispensario.
BRASIL: Naia¡, Escuelas maternal y ele­
mental, Escuelas nocturnos y Oratorio Fes­
tivo; Paró de Minas, Orfanato; Porto Velbo,
Pensionado.
COLOMBIA: Sonta Rosa de Viteibo, Escue­
las elementales y media, ToUeree, Oratorio
Festivo y Escuelos dominicales.
CHILE: Puerto A ysen, Escuela maternal v
elemental. Talleres, Oratorio Festivo y C ate­
cismos.
PARAGUAY: Puerto P'masco (Chaco), Cema
misión con Escuelas, Talleres pora las indiecitas y p ara las hijas de los obreros de las
vecinas fábricas de tonino.
INDIA: BandeJ (Bengala), C asa Misión con
Escuelas, Oratorio Festivo y Dispensario.
PENAS Y ANSIEDADES

HIJAS DE MARIA AUXILIADORA
ITALIA: Momese, reapertura, en homenaje
de la Fundadora, Con ocasión. de su Cano­
nización, de la verdadera C osa Madre, que
h a sido reconstruida y destinada a Asilo de
huérfanos de carabineros; Cervinoro, Grig□oro, fssogne, Milán SS. S ’Jvesrtre y Martín,
Noto. Roma - Cfnecitfá, SenorbL Sícfgi»cmo
degÜ Abruzzi, Escuelas maternales. Escuelas
de trabajo. Obra postescolar, Oratorio Festi­
vo y Obras Parroquiales; Turín-Mirerfiorf, las
mismas obras y Escuelas elementales; Palermo. Cosa pora enfermos del Instituto; Pa­
vía, otros dos C asas, una con pensionado;
Escuelas elementales, talleres y Oratorio Fes­
tivo. y la otro, con Escuela maternal; Beliipo
y Pedara. cocina y ropería de los Colegios
Salesianos.
ALEMANIA: Boftrop y Munich, Escuela matemol. obras postescolor. Oratorio Festivo y
Obras parroquiales.
BELGICA: Gron Bígord, Aspiranlado, Postulantado. Escuelas y Talleres.
ESPAÑA: BarceJonouSon Andrés de ®a’omar. Escuelas elementales v profesionales.
Escuela del Trabajo. Cantina escolar y tres
Oratorios Festivos; Baroelono-Horto y Borce*
lono-Sarriá, sendas C asas pora la coctoa y
ropería de los respectivos Colegios Salesia­
nos; Madrid (calle Dooii). Escuela ProfeeionoL* Sontoader. Escuela maternal y elemen­
tal. Oratorio Festivo, cocina y ropena del
Colegio Solesiono.
d

Bien quisiera concluir esta corta deióndoos
ton sólo la alegre impresión de buenas no­
ticias. Pero, como sobéis, desde el año p a­
sado, m ás de ciento cincuenta de n u ciro s
C asas se hallan azotodas por el h m acán de
la persecución religiosa; mil novecientos sa ­
lesianos Y centenares de Hijos de M aría Au­
xiliadora. deportados, destenados, encerrados
en prisiones y vejados de mil formas. En
algunas naciones el cuadro es to d ^ ia m tó
negro: no c[ueda ni una C oso; el numero de
encarcelados v a en aumento; sus sufrimentos sólo Dios puede conocerlos y medirlos.
No podemos comunicamos con ellos, y mu­
cho menos, socorrerles. No nos orueda otra
solución que pedir al Señor que cesen y a
los odios, dando paso al amor. y. entre t<mto.
que sostenga y dé fuerzas a
hermanos en tan terrible prueba, librándoles
de tontos angustias y troyéndoles de nuevo
al seno de la famüia religiosa.
AGUINALDO PARA E L ASO 1952
Por nuestra parte, persuadidos de que la
fuente de toles tribulaciones y. podemos muy
bien decirlo, de todo
y el orgullo insano. CULTIVEMOS CON
DO E b ffl^ O LA VIRTUD DE LA H U l ^ A D .
virtud que os propongo como agumaldo para
^ ^ n - u t a á es el esplendo, de la v e r ^ *
h ace posible y alegre la vida so o a l y fanu-

1

liar; es si escudo de la cosíidad; es la virtud
que engrandece el corazón eü servicio del
prójimo y es fuente de bondad y de dulzura.
lEs toa necesaria la humildad! l^actiquémosla e inculquémosla tmnblén en los demás, en
la seguridad de que sólo con ella se salvan
los naciones, se hermanan los pueblos, se
imen los corazones.
El Señor h aga descender sobre cad a uno

de vosotros y sobre todas vuestros fonjilias
sus más copiosas bendiciones. Que la Virgen
Santísima se a vuestra Auxiliadora y San
Juan Bosco os diga la gratitud de toda la
Familia Salesiana. y especialmente de óuien
se profesa vuestro aíme. en J. v M.,
PEDRO RICALDONE
Rector Mayor.

TUllIN.—El Clero dirigiéndose a la RasíUca de Maria Auxiliadora para las hoiirus fúnebrefl
del Kvino. don Pedro Hiraldone
11 M i l

■1 1 1 1 1 1 1 1 1 1 1 I I 1 1 « M I M m l ' l l l i t

M i I H i * l 1 1 M a 1 1 -M t « 1 |iM

EL TISTAIUEIMU ESPIRilUAL IIEL liECEHIt MAVIIK
Cuando el 22 de noviembre Don Ricaldone aguardaba el Santo Ylállci», dietó sere­
namente sus últimas instrucciones y consejos, cuya lectura lué escuchada momentos
después con enorme cm( ción per cuantos asistían a la patética escena:
iQueridícimos hijos: >*o pudiendo hablaros, os dejo tres recuerdos;
Vivamos siempre y todos en el corazdn y en el espíritu óe san Juan Boseo.
Vivamos siempre y todos en el espíritu y en la pureza angelical de Jíiaría Auxiliadora.
Vivamos siempre y todos en el Corazón de Jesús, sobre su cruz, en las llamas de
su amor, que nos hará eternamente felices en el cielo.
A todos os bendigo de todo corazón; os pido pen ón por las faifas cometidas y os
asegnro que si el Señor, en su boudad. me acoee en el cíelo, todos los días rogaré
por vosotros y por todas vuestras intenciones.
Turin, a las 15 horas dei 22 de noviembre de 1951.»

— 7

• M I M Il -. M r ii 11 M . M ' M - i i l i M I - M K L ' M i r j I

M I M M W N I K I lI t M I M V iM I M iU M iM I I I W I I I W M iliit M I I I M in U tM W

RESU M E N B I O G R A F I C O DEL
RVMO. DON PEDRO RICALDONE
In

t.t h l - I J i M M I I M K M iM - l< M M M - M 'I ^ I I I li l 'M M i l M > M > » lliriiM tM I .M IM<I.M>I>M l i M : h l i l l l l M M : iilt M I M il l l i l i M l i M l i M I M I M T

Nacimiento y prim eros años
El reverendísimo don Pedro Ricaldone habla
nacido en Mirabello (M onferrato, Italia) e l 27 de
ju lio de 1370.
Sus padres se'llam aban Luis y Cándida R aller i. Don Ricaklone conservó siem pre un em ocio­
nado afecto a su pueblo n atal, y em pleó en
algunas ocasiones su nombre como seudónimo
en algunos escrito s de tipo apologético popular.
Ni que decir tiene que halló en el seno de
su fam ilia el m ejor am biente para una educa­
ción cristian a sólida y profunda. Su piadosísima
madre sacaba de la prolongada oración hecha
en casa, mañana y tarde, sobre el duro suelo;
de la asistencia d iaria a la Santa Misa y de la
Comunión casi d ia ria , inspiración y fuerzas para
el e je rc ic io de las más nobles virtudes domés­
ticas y de la caridad hacia los pobres y menes­
terosos.
No menos aleccionador y eficazm ente educa­
tivo era el ejem plo dél padre, hom bre de re ­
cias virtudes varoniles, a quien sus conciudada­
nos eligieron repetidas veces alcalde de la po­
blación, a la cual él prestó los m ejores servi­
cios.
En esta escuela, la m ejor escuela, ciertam en­
te ; la escuela de un hogar cristia n o , se formó
ese tem ple de acero , revestido de paternal c a ­
ridad, que a los ochenta y un años cumplidos
form aba toda^'ia la ca ra cte ristica de don Podro
Ricaldone y ha sido una de las cosas adm irables
que han hecho de él una verdadera gran figu­
re de la actualidad mundial.
Encuentro con San Juan Bosco
Cursados los estudios prim arios en su pueblo
n atal, el niño Ricaldone ingresó como alumno
Interno en el Colegio Salesiano de Alassío, pa­
sando poco después al de B orgo San M artino.
Aquí tuvo la dicha de conocer al Fundador
de la Congregación Salesian a, de quien tenia
que ser ei cuarto sucedor y a quien habría de
representar por veinte años.
El Santo era ya é>^cíano, y sus fuerzas decHnaban h a d a el ocaso. Sin em bargo, llevado de
aquel su extraord inario am or a la juventud, no
perdonaba fatig a ni sacrificio con tal de hacer
el bien a las almas de los niños y jóvenes que
(a Providencia ponia a su paso. Uno tr a s ,o tr o ,
los alumnos del Colegio de Borgo San Martino
fueron pasando por la habitación de Don Bosco.
Le tocó el turno al pequeño R icald one... Cuan­
do el niño se halló a solas con el Santo se sin­
tió súbita e irresistiblem ente atraído por aque­
llo su bendad paternad; le m anifestó su inte­
8

—

1

Ll

rio r, escuchó sus preciosos con sejos, y en su
alma quedó grabado para siem pre aquel hechi­
zo, que fué en aum ento con los años y con el
conocim iento dei incom parable Apóstol de la Ju­
ventud.
Ricaldone volvió a ver a Don Bosco e l año
1582, en T u rin , cuando, juntam ente con los de­
más alumnos de su Colegio, asistió a la solem­
ne consagración de la Iglesia de San Juan Evan­
gelista. ■ ¡Quién hubiera podido sospechar que
aquel muchachito de doce años, desconocido y
mezclado en tre centenares de otros niños asis­
tentes al grandioso acto, iba un dia a ser el fau­
tor principal y el presidente de otros muchísi­
mos actos parecidos, pero de mayor importan­
cia y grandiosidad, cuales han sido en la histo­
ria de la Congreg'ación los llevados a cabo por
Don Pedro RicaQdone en los densos años da su
rectorado!
En las filas de la Congregación
Seguram ente San Juan Bosco, a quien ol Se­
ñor dotó d e un indudable poder profético, vió el
porvenir de aquel niño com o habla visto o i de
otros muchos- de sus jóvenes a quienes la ProSIdencia quiso asociar a su m agna em presa de
tedención.
Verla cómo habría de com enzar sus estudios
eclesiásticos, prim ero en el Sem inario diocesano
de Casal M onferrato, para continuarlos después
ert ol año 1889 en el Instituto Internacional SaIctsiano de Valsaldce, comp>añoro de dos grandes
Siervos de Dios, esto e s , el príncipe polaco don
Augusto Czartoryski y don Andrés B eltram i. Pa­
ra las alntas que vhren en intim a unión con el
Señor, sus caminos son siem pre rectos.
En España
La predilección que los Superiores S^ ósianos,
a p»artjr dcl Fundador, han manifestado a nues­
tra P a tria , España, hizo que el Siervo de Dios
don Migue] Rúa, prim er Sucesor de Don Bospo,
enviara a don Peslro Ricaldone el año 1890 a
Sevilla. No e ra tcdavia Sacerdote Don Ricaddone,
pero el tam bién Siervo de Dk>s don F riip e RinaW í, que se hallaba por aquel entonces al fren ­
te de la Obra Salesiana en España, le lanzó de
lleno aJ apostolado, decidido quizá por ilustra­
ción de lo alto , a fo rja r en él la gran figura de
su sucesor y del hombre providencial que la
Congregación necesitarla
momentos difícU lsimos de la historia del mundo.
El 2 3 de ju lio de 1892, siendo todavía estu-

diante de Teologi-a, don Pedro Ricaídone comen­
zó a acofTípañar sem analmente ^ Padre Atzeni
al Oratorio de la Santísim a Trinidad, en Sevilla.
Joven, lleno de celo y rico en dotes de mente
y de corazó n , lleg^ó a ser en brexe el alma del
O ratorio, conquistando tal ascendiente sobre
aquellos quinientos muchachos, que apenas canto
su prim era m isa, don Felipe Rinaidi no dudo en
descargar sobre ol novel Sacerdote toda la di­
rección de una obra que habría de llegar a ser
bajo el impulso de Don Ricaldone un modelo de
actividad y de eM cada afo stó licas.
En 1901, el Siervo de Dios Don Migue Rúa,
al mismo tiem po que llam at^ a Turin a Don
F tíip e Rinaidi, dividía las Casas de E sp rín en
tres inspectorías o Provincias, llamadas Céltira,
B élica y Tarraconense, y nom braba para Supe­
rio r o ln sp cc to r.d e la B é lica a Don pcdro Ricaldcjne, erigiend o en Casa IrKpectoriEil £l Oraterdo de la SatUisima T r in id ^ en Sevilla, do­
lado ya de Escuelas Elementiiles y Profesionales
coa áum nos externos e internos.
la -n u e v a Inspectoría contaba con siete Casas
y con 86 religiosos. El prim er pens^niento de
Don Ricaldone fué aumervíar el personal, y para
ello suscitó abundantes y generosas vocaciones,
abriendo en la Casa de E cija un Aspirantado, que
luego se trasladó a M ontilla. ¿Consiguió su fin?
Plenam ente. Diez años más tarde la Inspectoría
tenia d en SalOjiano> m ás, jóvenes, entusizstas,
bien form ados, que hicieron posible La am plia­
ción de las Casas existentes y la ^>ertura de
otras nuevas.
De los tiem{>os d e,D on Rkaídone como In s­
pector de la Inspectoría B ética data el entusias­
mo y la organización d e los Antiguos ÁKimnos,
a quienOs dedicó especi.ai interés como asimismo
a los Ccoperadorcs Salesianos.
Ante la maravillosa caparidari agrícola de la
región -andaluza, promovió el interés por su valo rlz a d ó n , poniendo sy especializada competen<ia en in cuestión ag raria aá sondeio de propie­
tarios V colonos, y difundiendo el llamado “sis­
tem a So lari” con la fundación de la Dlbiotcca
Agrícola Soteriana” , que puWicó, desde 190d a

m aernífico I n s titu to cC o n ti
T u r ín , uno
d e lo s m u ch o s c e n t r o s d e fo rm aeSóo m isio n e ra cre a d o s por
el
R T m o . don P ed ro R ic a ldone

1928, 140 tomitos en octavo divulgando la apli­
cación p ráctica de los principios científicos del
gran precursor de la moderna ag ricu ltu ra, Es­
tanislao So lari.
Varios de los lomos publicados por la cTtada
Biblioteca salieron de la bien cortada pluma de
Don Ricaldone, el cual, dotado de excepcionales
condiciones, para la^ lenguas, llego a dojnJntir In
española con singular nvaesiria, hasta <íi punto
de que en los últimos días do su vida podía no
sólo conversar con toda facilidad, sino incluso
improvisar interesantes y fluidas conferencias y
charlas en público.
B astante entendido en mi'isira, ticoso del deco­
ro de las fu n cio n a litú rgicas y digno alumno
de San Juan Bosco, fué uno de los prim eros en
poner en práctica la reforma del canto liTurgico
ordenada por el B eato Pío X.
Amó tiernam ente a su segunda p atria, Espa­
ña, y de un modo esp ecial, a la hechizante tie­
rra andaluza, de m anera que llegó a asim ilar
en su decár el g race jo de la tierra de M ana
Santísim a, tanto en el acento como Cn la flexi­
bilidad dei pensam iento, inculcándcilo en sus d i­
rectivas pedagógicas para la enseñanza de la
Religión al pueblo y a los niños.
Visitador extraordinario.
La habilidad demostrada ©n el gobierno de la
Inspectoría B élica movieron a Don Miguel Rúa
a nombrar a Don Pedro Ricaldone Visitador extraerd ínario de las Casas S a te s i^ a s de América
del Sur.
La Congregación Itabia toínado un auge real­
mente mar-evilloso en aquellas R cpiíbllcas, y la
vis'ta ’e llevó más de un año, concluyéndola cn
ju nio de 1909, acompañado por el entonces Di­
rector de la Casa Salesiana de Utrera y hoy Con­
sejero profw íonal y agrícola de la Congregación,
rcxercndisim o don Antonio Candela.
Les hombres ejue tanto Don Basco como su Su­
cesor Don Rúa habían enviado a misionar en la<
tK-rras am ericanas eran ciertam ente hombres ex■traordinarios. Solo asi puede explicarse la mag­
nitud de la obra llevada a cabo en ci corto tfein-

Ei

RebaudeD ?o*, en

k

f

í

—

9

po de setenta y c irc o años, pero no cabe duda
que la visita da Don Ricaldone enarcó una fecha
decisiva en la organización de una empresa que
habla adquirido una extensión y una profundidad
realm ente asombrosas.
Sobre todo las tierras d^^l Sur argentino y chi­
leno, las Pampas, Patayonla y T ierra dei Fueq o , con. las Islas australes, oran reglones que
ofrecían a nuestros misioneros dificultades sólo
vencibles con una extraordinaria ayude de la Di­
vine Providencia y un tesón y una fuerza de
voluntad d i?nas de héroes legendarios.
Don Rlcaldonc visitó una por una basta las más
pequeñas y alejadas residencias m is io n e r a , las
capillas diseminadas entre los canales m as’a llániros o perdidas en tre las estribaciones de las
sierran andinas. Tren , ca rru a jes, caballos, bar­
c a s ..., todos los medios de locomoción empleó,
ski ahorrar fatiga ai sacrificio con ta! de Ijevar
a sus herm anos en religión el consuelo de su pa­
labra y la fuerza de su con sejo con la bendición
del Prim or Sucesor de Don üosco.
Director general de las Escuelas profesionales
y A grícolas Saleslanas
En 1 9 1 1 , después de la muerte de don Miguel
Rúa, regla los destinos de la Congregación Salesiana don Pablo Albera. Fué él también quien llamó
a Turfn a don Pedro P»icaldone para confiarle el
cargo de Director general de las Escuelas profesio-

M ies y Agrícolas Salesianas, haciéndole miembro del
Capítulo Superior de la Congregación.
Don Ricáldone puso al punto a contribución de
esta nueva obediencia todas sus extraordinarias do­
tes y su gran experiencia. Puesto en contacto con
ios jefes de taller, con espíritu práctico y amplitud
de miras, completó y perfeccionó programas y nor­
mas descendiendo hast^ los mis pequeños detalles.
Meditando concienzudamente un plan, dedicó todos
sus esfuerzos a la formación del personal, disposi­
ción de los talleres y redacción de textos. Con santa
-audacia estimuló a los maestros a alcanzar la má­
xima competencia, y Ies proveyó de los títulos y di­
plomas necesarios.
Supo poner las Escuelas a la vanguardia de los
adelantos modernos en materia tanto pedagógica
como técnica! y logró interesar a los Cooperadores
económicamente superdutados para crear centros
verdaderamente modelos.
Como eficaz estímulo a la emulación entre los
alumnos promovió y organizó exposiciones dentro
de la Congregación e hizo que nuestras Escuelas
Profesionales y Agrícolas tomasen parte en exposi­
ciones de tipo nacional e internacional.
En la Exposición Internacional del Libro y Artes
Gráficas — para citar un ejemplo entre cien— , que
tuvo lugar en Leipzig el año 19 14 , tomaron parte
53 Escuelas tipográficas salesianas, 51 Escuelas de
encuadernación, cuatro de fundición de tipos, tres
de litografía, con 42 editoriales, pertenecientes a 18

o

La primera expoUoIóu misionera dol redorado de don Pedro Kicaldonc que dio un formidable
y decisivo impul.so a la obra de las .ulsloncs Salesianas, hasta el punto de colocar a nuestra
('ongreeracidn entro las primeras en este campo específico del apostolado religioso
0

—

m

P oro B <Has a n te s d e su m u e rte , don P ed ro R icu ld o n e d espide en ! a B a s ílic a de M a ría A u x ilia d o ra
d e T u rín l a v ig é sim a e x p ed ició n m is io n e ra d e su re c to ra d o j s e p tu a g é s lm a se x ta do la Gongre>
g a c ló n S a le sia n u

rstados de Europa, América, Africa y Asia, con un
conjunto de 3.675 alumnos ( 1.890 tipógrafos, ‘ 1.753
encuadernadorés y 32 litógrafos).' A nuestras Es­
cuelas se les asignó diploma de oro.
El año 1920 , con ocasión de la inauguración del
monumento a Don Bosco en la plaza de María Au*
xiliadora en Turín, se organizó una magna Expos rión Internacional Salesiana, que constituyó un
grandioso éxito para nuestras Escuelas Profesionales
y Agrícolas, y dió a Don Ricaldone el máximo
prestigio en estas materias, no sólo a los ojos de
sus Hermanos, sino de cuantos en el mundo civi­
lizado se ocupan de la formación del obrero.
B razo derecho de Ooo Riaaldl
Muerto Don Pablo Albera, fué elegido para su*
cederle el siervo de Dios Don Felipe Rinaldi. De
Don Felipe Rmaldi se ha dicho que fué el hombre
de consejo acertado. El mismo debió de aconsejarse
muy acertadamente cuando se puso al lado, para
que fuera su vicario, a Don Pedro Ricaldone. Para
muchos fué este acto una señal de la santidad, que
ita hecho de Felipe Rinaldi un siervo de D i-s ca­
mino del honor de los altares.
Resulta tarea poco menos que imposible para el
aiticulista resumir en pocas líneas la inmensa lab:r
llevada a cabo por Don Pedro Ricaldone como Pre­
fecto general de la Congregación. Bastaría decir que,
a pesar de la grandeza excepcional de su Rector

Mayor, Don Felipe Rinaldi, cuando Don Pedro Ricaldone le sustituyó en el cargo a su muerte, pare
ció a todos que ya venía aureolado con el piestigi*
de un antiguo Rector Mayor. Sin etnbargo, no htf
que pensar que obrara por su cuenta y a su albe­
drío en cuan^s empresas llevó a cabo: siempre fué
un fiel ejecutor de las consignas de Don Rinaldi.
Ambos se habían fundido en un supremo ideal: It
'■^IvaciÓn de las almas, el espíritu de «Don Bosco,
la dcftiisa y engraodecimieto de la Iglesia Católica.
En lus años en que Don Ricaldone fué Prcfcct»
General, díó extraordinario impulso a la actividad
misionera, secundando así las directrices del grao
Pontífice de las Misiones, S. S. Pío X I : becas mi­
sioneras. fundación de la Asociación Juventud M i­
sionera, con su correspondiente revista; participació*
en la Exposición Misional del Vaticano y organiza­
ción de la Salesiana en Turín en conmemoración
del cincuentenario de nuestras Misiones; propaganda
variada y eficaz y, sobre todo, Ja creación de nu­
merosas Casas de Formación Misionera en diversas
naciones, destinadas a preparar a nuestros futuros
misioneros, especializiodolos para las variadas acti­
vidades apx»tólicas.
P arj pc>der oiganízar mejor y con mayor conoci­
miento práctico las Misiones, Don Pedro Ricaldone
'.15 visitó una a una detenidamente, haciéndose car­
go de las dificultades que hallan los misioneros en
ia.5 distintas Misiones, viviendo en su compañía y
compartiendo con ellos penas y alegrías, ó in esta
—

11

visita, que empalmó con la jirada a otras Casas de
Europa y América, completó la vuelta al mundo,
lecorricndo todas las Casas Salesianas, siendo, por
c nsiguiente, el primer Rector Mayor que haya co­
nocido personalmente toda la vastísima y dilatada
Obra Salesiana en las cinco partes del mundo.
D e tan importante viaje hizo relación no sólo al
Rector Mayor y a los demás Superiores del Capítu­
lo, sino también a todos los Cooperadores, bien me­
diante el BO LETIN SALESIANO, bien en conferenoas interesantísimas dadas en Turin y en los teatros
principales de Italia, ilustrándolas con un film do­
cumental, hecho rodar por él durante las visitas
d las diversas Misiones. Cumplió luego un opúsculo,
del que se hicieron centenares de miles de copias,
con el fin de hacer un llamamiento oficial a favor
Je aquella Cruzada Misionera, que tantos frutos
lindió y sigue rindiendo, para la dilatación del reino
de Dios.
Rector Mayor
No cabe duda de que la Divina Providencia le
había preparado de una forma excepcional y extra­
ordinaria para este cargo. Nadie mejor que él po­
día suceder al siervo de Dios Don Felipe Rinaldi
en el gobierno supremo de la familia de Don Bosco.
En efecto, los inspectores y delegados llegados a
Turín desde las más remotas regiones de la tierra,
le eligieron p^r unanimidad Rector Mayor de la
Congregación Salesiana el día 9 de mayo de 19 32 .
Este plebiscito confirmó la expectación no sólo
de h s Salesianos e Hijas de María Auxiliadora,
sino también de los Cooperadores, Antiguos Alumros y de las autoridades eclesiásticas y aun civiles,
que veían en él a un dignísimo Sucesor de San Juan
Busco.
Las dificultades excepcionales de los tiempos en
que ha ejercido su rectorado han contribuido a realz.Tr sus c.ites personales.
El primer decenio se distinguió por una intensi­
ficación, del que podríamos llamar trabajo hacia
dentro, es decir, en la formación religiosa del per­
sonal salesiaoo, encauzando y disciplinando sus apos*
t'.''ados.
Voluminosas circulares, verdaderos trabajos de especializuc'ón, dieron normas detalladísimas para la
aplicación del espíritu de San Juan Bosco en todos
los ramos de la actividad salesiana.
Nuestros Cooperadores han podido observar prin­
cipalmente el gran impulso dado a la Federación
de los Antiguos Alumnos, a ios Oratorios Festivos
y u la Cruzada Catequística.
D e un modo particular queremos llamar la aten­
ción .sobre este aspecto de s a actividad de hombre
organizador.
Hoy, a la distancia de diez años (la comenzó
piecisamente el año 1941 como homenaje a Don
Bosco en el primer Centenario de la Fundación de
los Oratorios Festivos), los frutos de dicha Cruzada
pueden representarse materialmente en cifras esta­
dísticas.
Va cuando avanzaban sobre Italia y el mundo las
negras nubes de la segunda guerra mundial, Don
Ricaldone puso la primera piedra de una obra que

12

—

hibr* de constituir durante muchos siglos uno de
Irs pedestales más sólidos de su gloria terrena; la
Casa de la Doctrina Cristiana en la colina natal de
San Juan Bosco, en I Becchi, esto es,' un grandioso
edificio magníficamente dotado de todos lo's adelan­
tos, de la más depurada técnica moderna para k s
artes gráficas, destinado a la formación de maestros
salesianos y a la edición de obras y recursos cate­
quísticos.
En esa Escuela se han impreso, y desde allí por
toda Italia y por varias otras naciones del mundo,
folletos de instrucción religiosa popular, sugestiva­
mente presentados y escritos con gran amenidad,
(.''.lección Lux se llaman, y en/ ellos han trabajado
hasta 170 escritores, constando la colección de 351
títulos, con un total de 1 2 .041.000 ejemplares. A
ellos hay que añadir copiosas ediciones de otros
muchos libros, maravillosamente presentados, cintas para proyección, carteles murales, etc., todo destina­
do a la instrucción religiosa.
Al mismo tiempo, guiados casi personalmente por
el mismo Don Ricaldone, varios sacerdotes salesia­
nos, debidamente preparados y provistos de los me­
dios más modernos de propaganda, han recorrido
un sinfín de diócesis, organizando 447 Congresos
Catequísticos, dando millares de conferencias sobre
organización catequística en Seminarios, centros de
Acción Católica, Colegios de enseñanza superior, etc.,
y ofreciendo a los señores párrocos y sacerdotes
dedicados a la instrucción religiosa del pueblo me­
dios abundantísimos para organizar y hacer eficaz di­
cha instrucción.
Toda esta actividad está asesorada por su corresp'-ndiente central técnica, con sede en Turín, pero
con ramificaciones y sucursales en diversas otras nac:ones, como la Central Catequística Salesiana de
Madrid.
Un gran deseo de Don Pedro Ricaldone lo cons­
tituía el ver terminado antes de morir un libro en
que cifraba sus más halagüeñas esperanzas. Y lo
consiguió muy pocos días antes de caer enfermo
de la enfermedad que le ha llevado a la tumba.
Se titula D on B osco, educador, cuyo primer volu­
men ya estí impreso en su edición italiana, y no
taidará en ver la luz pública el segundo, pues llegó
i corregir las pruebas de imprenta.
Este libro forma parte de la Biblioteca Ascética
Salesiana, obra colosal salida de la mano de núestío llorado Rector Mayor, que le ha dedicado los
años de su florida ancianidad, condensando en ellos
la experiencia de sesenta años de vida religiosa y
de'conductor de almas. Sus capítulos contienen la
síntesis del espíritu de Don Bosco, y dan la medi­
da de la poderosa figura de su autor.
A don Pedro Ricaldone, como Rector Mayor de
la Congregación Salesiana, le ha tocado vivir mo­
mentos de dicha y de gloria inefables, y días tris­
tísimos y de intenso dolor.
Entre los primeros, la canonización de San Juan
Bosco, el día x de abril del año jubilar de la re­
dención humana; la beatificación y canonización de
la Cofundadora de las Hijas de híaría Auxiliadora,
Santa María Dominga Mazzarello; la Beatificación
ue! angelical discípulo de Don Bosco, Domingo Sa\io, el año 1950 , etc.

Días y años de dolor han' sido: la persecución
religiosa en su amada España; la guerra mundial,
en la que tantos hijos de Don Bosco han perecido
ya en los frentes de combate, ya en los ataques a
ias ciudades de la retaguardia; la persecución que
aun dura en las naciones más a llí del telón de
acero, y en la pobre China, donde tan florecientes
se hallaban nuestras Misiones...
En estas excepcionales circunstancias se mostró
también en toda su grandeza la figur^i de Don Pe­
dro Ricaldone: en su corazón hallaron cabida miles
de desdichadas víctimas de la persecución o de la
guerra; comunidades religiosas enteras han sido aco­
gidas en nuestras Casas de Italia y tratados sus
miembros como si hubiesen sido profesos de nues­
tra Congregación; sacerdotes seculares y aun simples
fieles, al huir de sus naciones respectivas, hallaron
abiertas de par en par las puertas de la Casa Madre
I MIIMIUIHIIIM

de los Salesianos, donde se Ies proporcionó alimento,
vestido y, lo que vale más, amor de familia y me­
dios para dulcificar sus penas y entretener prove­
chosamente su forzado destierro.
Una de las m is terribles consecuencias de la guelia lo fué el abandono en que quedaron miles y
miles de pobres niños huérfanos o lujos de padres
prisioneros en tierras ex ranjeras... El Papa Pío X II
llamó a las Ordenes y Congregaciones religiosas pa­
ra que acudieran a remediar tamaño mal. Don R i­
caldone lanzó decidido a los Salesianos a secundar
el llamamiento del Vicario de Crist.', y nada le
consolaba más en sus últimos años cual el contem­
plar el vigoroso desarrollo adquirido por aquellas
obras que, con diversos nombres, se habían creado
para recoger a los llamados “chicos de la calle”,
convertidos ahora en “los chicos de Don Bosco”.

iiiik iiiiiin m im im iiiiu M U '

llUIIMMItmi

SANTA MUERTE DE DON PEDRO RICALDONE
La radio y la Prensa mundiales dieron la tris­
te noticia; el Rvmo. don Pedro Ricaldone, Rec­
tor Mayor de los Salesianos, en treg ó su alma al
Creador a las I 5 ,3 S del día 2 5 de noviem bre,
ilom ingo.

. Kabia tenido que guardar cam a el día 15. La
enfermedad no parecía grave; se tratab a, senci­
llam ente, de una afección gripal. P ero sobrevino
la com plicación, edem a pulm onar, que alarmó a
los Superiores dei Capitulo de la Congregación,

L o s m ie m b ro s d el C ap itu lo S u p e rio r de la C o n g re g a c ió n y el C ap ítu lo G e n e ra lic io d e la s M i]as
de M a ría A u x ilia d o ra en el e n tie rro d el R e c t o r M a y o r

— 13

ban con este hecho las visitas, históricas ya, del
presentes en T u rin , « los doctores que le aslsCardenal Alimonda a su gran am igo moribundo
ilr n . El dia 2 2 , jueves, la gravedad llegó al ex­
S»n Juan Bosco en enero de id 88 . Cuando el
trem o, y la ciencia perdió la esp eranza de salvar
actual Cardenal de Turin llegó por segunda vez
ta preclosr vida dcl cuarto sucesor de Don Bosco.
al lecho Je don Ricaklone, se hallaba éste ago­
Su» h i j^ 'de todo el mundo, al re cib ir la
nizante y a , mas tuvo fuerzas para exciam ar:
aciag a n'^tlcia, recurrieron a la oración como
“ ¿C óm o..., otra v e z ...? ” Y es que, en su gran
único y ultimo recurso. Mas el Señor había de­
modestia y humildad, le parecía excesivo el ho­
terminado llam ar a su seno a) “ siervo bueno y
nor que le tributaba un P ríncipe de la Iglesia.
íie i” , que, com o San P ablo, podía muy bien
exclam ar: “ He llenado mi existencia de obras
Llegó tam bién a recibir su última bendición
san tas."
el exim io e scrito r don C erla, historiador de la
La excepcional constitución fislca de don RiCongregación y coetáneo de don Ricaldone. Este
caldone, que le habla perm itido recorrer todo el
levantó el brazo con energía y. bend ijo.
mundo civilizado y ei salvaje y tra b a ja r incan­
En cam bio, tuvo que ayudarle don Z iggiotti
sable c Intensamente hasta los ochenta y un años
para poder bendecir a la re\-erendisima Madre
bien cum plidos, luchó contra la enferm edad mu­
general del Instituto de las Hijas de María
cho más tiempo que el previsto por los médicos.
Auxiliadora. S e iba acercando el fin , que sobre­
El P refecto gen eral, don Renato Z ig io tti, el
vino tranquilo y sereno, apagándose la pieciosa
segundo de a bordo en la m ajestuosa nave de la
vida del amado Padre como lámpara votiva del
Fam ilia Saiesian a, la advirtió a su debido tiem ­
Santuario al irse consumiendo el a ceite . Muerte
po: “ Don Ricaldone, nos hallamos a las puertas
tam bién, en las m anifestaciones externas, digna
de la E tern id ad ." Y el hom bre que, llevado de
dei ju sto .
su am or a las almas de los salesianos y de sus
Los prim eros en acudir a re zar ante e i ca­
cooperadores, habla escrito años atrás el pre­
dáver del cuarto sucesor de San Juan Bosco
cioso libro titulado “ E je rcicio de la Buena Muer­
fueron el Cardenal de Tu rin , el gobernador civií
t e " , pidió en seguida el Viático y se dispuso ai
de la ciudad y el Rector de la C o n s o l a t a .. y
gran paso.
después de d io s, centenares de personas de to­
Cuando el Señor Sacram entado llegó a la hu­
las clases sociales; de manera que los venerandos
milde h.'bitación del amadísim o enferm o, éste
restos tuvieron que ser expuestos a la mañana
quiso que se leyesen en voz alta unos consejos
siguiente en la B asílica de M aría Auxiliadora,
o pensomientos que en la espera habla dictado.
por donde pasó, se puede d ecir, todo el pueblo
iRucn tim onel, que, como Dor Bosco, tuvo fir ­
lurinés. Cuatro sacerdotes salesianos no daban
me la m^no en el timón d ^ gobierno hasta
abasto a hacer rozar sobre las manos del cadárendir v ia je !
- ver los objetos que ios visitantes les tendían.
C' iiHi v'u V pidió que le dejasen solo.
Entre tanto, sobre la mesa del P refecto gene­
El Ecónomo general de la Congregación, re­
ral se acumulaban los telegram as de todo el
verendísimo don Fidel Giraudl, fué el prim ero
mundo. En la imposibilidad de ni siquiera citar
en r-'gresar al lado del enferm o, el cual, con
su numero, transcribirem os el más augusta de
aquel su proverbial buen hum or, le d ijo , son­
ledos los despachos de pésame:
riendo: "¿Ves como ha ido todo a las mil ma­
“ Noticia pío tránsito Rector m ayor, don Ríravillas?"
caldone, apena corazón Su Santidad, que recor­
Durante los días de la breve enferm edad, el
lando todavía cuán grandes servicios prestara
Oratorio de Valdocco, Casa Madre de los Sale­
siervo bueno y fiel a la Iglesia y qué espíritu
sianos, que ya de ordinario es uno de los pun­
sostuviera siem pre y guiara digno sucesor Don
ios más concurridos de Turin por los tesoros de
Bosco en su largo y fru ctífero cam ino, enco­
tradición y los santos recuerdos que e n cie rra,
mienda al Señor alm a e leg id a , esperando pre­
se constituyó en centro de continuas e ininte­
mio cie rn o , m ientras invoca consuelos de la Fe
rrumpidas visitas.
Dos veces estuvo a visitar al amadísim o enfer­
y envía particular y consoladora bendición a la
gran Fam ilia Saicsiana, huérfana tan eximio
mo el em inentísim o y reverendísimo señor Carífenaí de Turin, siendo muchos los que recorda­
Padre.—^ o n í l n l , su stitu to ."

E S T I D IA H E L O H IC.EN D E L O U A T O H IO F E S T IV O E S P E N E T R A R E N E L CO­
RAZON D E N U E ST R O P A D R E , D E L CU A L B R O T O E L T O R R E N T E D E LA O B R A
S A L E S IA N A ; E S
FLU Y E
ARDOR

EL

N A V EO A R

E S P IR IT U

DEL

D E L A C A R ID A D

H A C IA E S A
GRAN

C E L E S T IA L F U E N T E

P A T R IA R C A . E S

Q U E T A M B IE N

LA

CUAL
EN

EL

A E L L E IN F L A M A B A .
DON

u

DE

E M B R IA G A R S E

PEDRO

R IC A L D O N E

El traslado de los restos m ortales del cuarto
sucesor de San Juan Bosco no ha sido una ma­
nifestación de tristeza por la sep aración, sino
más i).en de am or y de gratitud de todo un puebio hacia quien ha sido uno de los más grandes
bicnhechoies de la Humanidad.
Junto a l em inentísim o Caidenal de T u rin , que
asistió de pontifical a los funerales; junto al
pueblo de T u iin y a sus más altos representaníes, m agistrados, gen erales, gobernadores, a l­
calde, e ic ., se hallaban representaciones de to­
das las clases y de todas las categ o rías sociales,
lales com o e! Rector Magnifico de la Universi­
dad, los Obispos de Ivrea, Verceiii, Casale, Acqui,
Asli, U ernia y Venafro; titular de Eudossiade,
los Superiores de todas las Ordenes y Congrega­
ciones de ambos sexos, los duques de P istola y
de B érgam o, e t c ., e tc.
En la p.esid en cia del due’o formaban los Su­
periores Mayores de la Congregación Salesiana
ta excepción de los tres que se hallan ausentes
en lejanas regiones y que no pudieron acudir
por falta m aterial de tiem po) y la Madre ge­
neral de las Hijas de M ana Auxiliadora, con su
Consejo, y numerosos señores Inspectores Salesianos de varias Inspectorías de Italia y del ex­
tran jero , en tre los cuales destacamos la presen­
cia de los señores Inspectores de España muy
reverendos don Felipe Palomino y don Florencio
Sáncliez.
U tarde dei día 2 6 , dia laborable, la ciudad
de Turin presenció un espectáculo propio sólo
d e.lo s grandes días nacionales: calles, avenidas,
parseos, tranvías, a u to s ..., todo lleno de ciuda­
danos que acudían a Valdocco para rendir un
postrer hom enaje a los restos m ortales del cu ar­
to sucesor de San Juan Bosco.
Hadan guardia al féretro escuadras de Cara­
bineros en tr a je de g ala. Centenares de bande­
ras de otras tantas Asociaciones religiosas y ci­
viles, de Municipios ru rales, de O rganizaciones
obreras, formaban calle a ambos lados del cor­
tejo fúnebre. Rodeando la bandera del pueblo
natal de don Ricaldone, M irabeilo, se veian a
su alcald e y el prim er teniente, al reverendo se­
ñor cura párroco, sA director dei Colegio Salesiano, ju nto con los sobrinos del querido extin­
to, don Luis Ricaldone, su herm ana. Hija de Ma­
ría Auxiliadora, y un tercer herm ano, e j doc­
tor en V eterinaria don Víctor Ricaldone.
El féretro iba sobre un coche de tercera cla­
se — por expresa voluntad de don Ricaldone, el
autor del m agnifico tratado de ascética “ Pobre­
za**— . Los cordones del coche eran sostenidos
por los profesores Valletta y Grosso, el procura­
dor de los Salesianos, don T om m asettí; el doc­
tor belga Dusmaret y e| presidente de los Anti­
guos Alumnos Salesianos.
En el furgón esp ecial iban las coronas fúne­
bre*^ de la ciudad, de la Empresa M iat, del se­

ñor Agnelli y de los talleres Villar de Perossa.
? c calculan en más de cien mil las personas que
formaban en el c o rte jo fúnebre y en varios cen te ­
nares de miles las que con religioso recogim ien­
to contemplaban desde las aceras el paso de la
com itiva, oyéndose de continuo un poderoso ru­
mor de plegarias y viéndose lágrim as en muchos
ojos. Asi pasaba entro los ciudadanos de Turin
el cadáver del humilde sacerdote, del incansa­
ble h ijo de Don Bosco, que había dedicado toda
su larga y fecunda vida al bien de las alm as,
al bien dei pueblo trab ajad o r, al bien de los h i­
jo s de los obreros.
Los restos m ortales del cuarto sucesor de San
Juan Bosco descansan en el sencillo panteón que
la fami ia salesiana tien e en el cpfnenterio de Tu­
rin . Pero su memoria y su nom bre perdurarán
en el corazón del pueblo, en el corazón de mi­
llares y m illares d t herm anos, de discípulos, de
fieles esparcidos por todo el mundo.
Sobre ia mesa de su Vicario, el Prefecto ge­
neral de la Congregación Salesian a, según de­
jam os dicho, se han acumulado por centenares y
aun m illares los telegram as de sentido pésame
enviados desde las más apartadas naciones al
conocerse la noticia del fallecim iento dei ama­
dísimo Padre. Entre muchos nos com place men­
cionar cí del excelentisigiio y reverendísimo doc­
tor E ljo Caray, P atriarca de la« Indias occicicntales y Obispo de Madrid-Alcalá, íntim o r/nfgo
del cuarto sucesor de Don Bosco, del cual, en el
prólogo al libro titulado “ Formación religiosa**,
hace este elog io sincero y co rd ial, con ei que
term inam os estas mal pergeñadas lincas necro­
ló g icas:
“ Su autor (el autor dcl lib ro ) es el revereadisim o don Pedro Ricaldone, a quien los m éri­
tos de una vida infatig able y totalm ente dedi­
cada a l apostolado de la formación cristiana de
la juventud, y la singularísim a com petencia, alia
sabiduría y encantadora bondad que le adornan,
han nevado a ia suprem a cum bre je rárg ica den­
tro de esa gloriosa legión de apóstoles que for­
man la Congregación Salesiana.
“¿Italian o’ ¿Español? l o uno y lo o tro . Vino
a España tan joven y tan deseoso, por am or de
Dios, de hacerse lodo a todos, y trabajó tanto
y tanto con toda su alm a en aquella Sevilla, que
se honra con él como con un preclaro h ijo pro­
pio, y estuvo tanto tiem po e n tre nosotros, que
anu a España com o la puede am ar el más ena­
morado h ijo . ¡Con qué placer recuerdo aquellos
días felice s, ya tan lejan o s, en que, para bien
de mi esp íritu , tuve la dicha de tratarle , y que­
dé cautivo de su arraig ad a virtud, de su efu­
sión cordialisim a, en alto grado ev angélica; de
su laboriosidad incansable, de su cien cia ecle­
siástica y p rofana, de sus afanes, estudios y pu­
b licacio n es, tanto para la educación cristiana de
los jóvenes como para la m ejora y perfecclona-

—

15

DON
Y EL

PEDRO RICALDONE
“ B O L E T IN S A L E S IA N O “

Clon conocen nuestros lectores ej origen del
BOLETIN SALESIANO; lo fundó y d irig ió durante
muchos años San Juan Bosco en persona.
Hasta ol año 1943 se redactó, imprimió y a d ­
m inistró on diversas lenguas (llega.ron a ser d ie­
cisiete) en la Casa Madre de la Congregación
(Turin, Italiia).
Los Superiores Mayores conservaron siem pre
la inm ediata v ig ilan cia del BOLETIN, y el ca r­
go de director general del mismo se consideró
como uno de los de mayor responsabilidad.
El BOLETIN SALESIANO, a pesar, y quizá g ra ­
cias a su modestia y austeridad, ha sido una
revista de gran e ficacia form ativa, por cuanto
lleva ipor el mundo entero el ideal de apostolado
social moderno, según el espíritu de nuestro
lundodor.
Cuando la frivolidad ha invadido tantos sec­
tores de la scciodad y las revistas han tenido
que recu rrir a lo que podríamos llam ar “ snobisi.u ” liiord iio y tip o gráfico , a ese “ m eter por
ios o jo s” las ideas que molestan a nuestra en­
ferm a generación (piedad, sa crificio , c a rid a d ...),
quizá el BOLETIN SALESIANO ha pasado a ser,
ante la consideración de algunos, una revista
ele orden secundarlo.
Sin em bargo, le han quedado fieles las m ejo­
res de sus antiguas am istades: los verdaderos
Cooperadores Salesianos.
Y ios Superiores Mayores lo han apoyado siem ­
pre.
Precisam ente para esto: para que continuara
siendo -lo que Don Bosco quiso que fuese: “ Orga­
no de unión entre los m iem bros de la gran FamiJia Salesian a, redactado con la mayor correc­
ción, editado con decorosa m odestia, pero siem ­
p re dentro de un estilo y de un atuendo que
d ije ra de por s i: Estoy destinado a lectores que
aman a las alm as y se dedican a su salvación,
ya b a jo una regla y una profesión redlgiosa,
ya deede su posición en el mundo; pero sienupre
ron 01 mismo esp íritu , el espiritó do San- Fran­
cisco de S ale s.”
El BOLETIN, a si, Don Pedro Ricaldone lo ha
bendecido y alentado. Sabia él que los tiempos
cam bian y que el apostolado ha de m archar a
la vanguardia del progreso, del verdadero y sano
progreso.
Por las circunstancias especiales del mundo,
el año 1943 dispuso que las ediciones dei BO-

....................................... .

IIMMMMIIIimtthM

(VIens de la página anterior)

m iento rio Ui artesanía y de la agricu ltu ra! No
sólo cultivaba y enseñaba a cultivar las alm as,
sino tam bién el a g ro , con nuevo y reproduc­
tivo sistem a de rotación, procurando, para evang ellzrció n de los humiWcs, e! pan del alma y
l 1 del cuerpo, acompañando el m ejoram iento es­
piritual con el m aterial.”
Y conchive el exim io prelado:
“ Gratitud debemos todos al insigne Rector Ma­
yor do los Salesianos por e sta luminosa o b ra, y
a la Central Catequística Salesiana, porque, tra­
duciéndola 8 nuestra lengua, ha enriquecido la
biblioteca catequística española.”

LETIN en las distintas lenguas com enzaran a ha­
cerse, fuera de Italia, en determ inadas naciones.
La edición de España fué la prim era que re­
cib ió este honor y esta responsabilidad.
El IV Sucesor de San Juan Bosco ha seguido
siem pre con paternal cuidado y dándole las más
evidentes pruebas de su interés y de su preocuclón para lo g ra r que el espíritu de la revista se
conserve integro .
Nos consta que, número tras núm ero, lo lieía
en estos anos de tan graves preocupaciones. Y
no solo é l, sino también los dem ás Superiores
M ayores.
Y sabemos tam bién, por haberlo escuchado de
sus labios y por poseer testim onios escritos de
su puno y 'leira, que el fondo y contenido de
nuestra revista ha m erecido siem pre su más sin­
cera aprobación.
Quien conozca el carácter del IV Sucesor de
Don Bosco, de fé rre a e n e rg ía , revestida de pa­
ternal dulzura, conocerá también cuánto valor
pueda tener su aprobación.
Don Pedro Ricaldone, en el secreto de todas
nuestras dificultades, sabia muy bien e l esfuer­
zo , algunas veces heroico, que ha supuesto el
sostenim iento de la revista en estos años duros
para ia m ayoría de las personas y de las ^ r a s
de Dios.
Y uno de los grand es deseos por él repetida­
m ente manifestados fué siem pre el aum ento, no
precisam ente de la tirada del BOLETIN, sino el
de los Cooperadores Salesianos españoles, que
trae com o consecuencia natural el otro aumento,
según lo afirm ó en carta expresam ente d irigid a
a ellos y publicada por nosotros en el número
de abril de 1947, y según lo dem ostró lanbié;>
cuando, al concluir la segunda gu erra mundial,
pudo com probar el aumento de tirad a en com­
paración con el año 1939.
Que el pensamiento del am or que el llorado
Don Pedro Ricaldone tuvo al BOLETIN anim e a
todoís a difundirlo y a sostenerlo con cariño y
e fic a c ia , p ara bien de la obra común a toda
nuestra Fam ilia: la redención de la juventud y
nuestra santificación en las em presas de Caridad.

CALENDARIO SALESIANO PARA 1952
S e publica este año b a jo una nueva modalidad
que no dudamos ha de ser del agrado de todos.
Responde además a la consigna que ha de h acer
vibrar el a m b i c ie SaiesJano durante el próxi­
mo año: el Sagrado Corazón de Jesú s, que quie­
re reinar sobre España desde su trono de Amor
del Templo Nacional Expiatorio det Tibidabo en
Barcelona, escenario elegido para los más s o iCTTrnes actos del próximo Congreso EucaristicO'
internacional.
No falte en los hogares de nuestros lectores.
Adcruiéialo en las
Salesianas o directainente a la S E Í, Alcalá, 164, apartado 9 .1 3 4 , Ma­
drid, que lo rem ite a reembolso de cinoo pese­
ta s, sin más gastos.

16 —

i

EFEMERIDES
-------

DON

SECULARES

BOSCO

PA SO

A

A S O a paso, D o n B o s c o ib a dando
fo rm a y s is te m a a su O b r a . E l es”
p íritu e ra y a antig'uo en a q u e lla hu­
m ild e C a s a P in a r d i. D e s d e e l p rim er m o­
m en to h a b ía a len ta d o a llí e l e sp íritu d el
S e ñ o r.
H a s ta e l año 1 8 5 1 lo s m u ch a ch o s orato n ia n o s, q u e co m ía n y d orm ían en el
O ra to rio , n o h a b ía n d isp u esto de u n lugar
d eterm in a d o para la r e fe c c ió n : ca d a uno,
re c ib id a su ra ció n , s e b u s c a b a un h u eq u ecito dond e c o m é rs e la e n paz y g ra c ia de
D io s .
E n d ich o año, D o n B o s c o log ró proveer­
le s d e m o d e s tís im a s m e s a s d e b a jo de aun
m ás m o d e sto co b e rtiz o . E l año 1 8 5 2 in tro ­
d u jo o tra n o v e d a d : d e jó d e d is trib u ir ios
2 5 cé n tim o s q u e d a b a a ca d a m u chachp
por la s m a ñ a n a s para e l d esa y u n o , y en su
lu g ar le s proveyó d ia ria m e n te de u n sa b ro ­
so p a n e cillo , pues h a b ía o b serv a d o que
algu nos, en vez d e pan, s e co m p ra b a n go­
lo sin a s.
A sim ism o s u stitu y ó la s v ie ja s ca z u ela s
por e s c u d illa s d e m e ta l, y añad ió un p rinci­
pio e n la s co m id as de ju e v e s y d om ingos.
D o n B o s c o h a c ía cu a n to e sta b a en su
m ano p ara m e jo r a r e l a lim e n to de su s m u­
ch a ch o s. S o p a y pan s e re v ía n en abun­
d a n cia y a d is c re c ió n . M a s no q u ería que se
lle v a s e n pan fu e r a d el re fe c to r io .
E l C o m en d ad o r C o tta su g irió la id ea de
d ar a lo s jó v e n e s lo s c lá sic o s g n s s in t ( 1 )
d e T u r ín , ert v e * d e pan. L o probó D on
B o s c o d u ra n te u n o s d ía s, p ero d e s is tió al
v e r q u e n o le s s a tis f a c ía , p u es al no te n e r
m ig a d eb ía n co m erlo s m uy le n ta m e n te .

P

E N 1851

-------

PASO...
A sim ism o fu é en 'e s te año cu an d o el
S a n to com en zó a e s ta b le c e r por e s c r ito a l­
g u n as re g la s de d iscip lin a . L a d istrib u ció n
do los o ra to n ia n o s in te rn o s s e h a cía ' según
la s s a la s d o rm ito rio . N o h a b ía to d a v ía cla ­
s e s n i ta lle r e s . A cad a d orm ito rio se d e sti­
nó un clérig o o uno de lo s jó v e n e s má^
fo rm a lito s p ara que h ic ie s e n de a s is te n te s ,
y en to d o s s e colgó u n a ta b lita con los
a v iso s g e n e r a le s . H© aquí a lg u n o s :
® C a d a jo v e n d eb e o b e d e c e r al a s is te n ­
te o a q u ien h a g a s u s v e c e s , e l cu al debprá d ar c u e n ta de cu a n to s e h a g a o diga
en el d orm ito rio .
® N o d eb e d a rs e e n tra d a en e l d orm ito­
rio a n in g u n a p e rso n a , aunqu e s e a parien­
te , sin p e rm iso . L o s jó v e n e s de un dorm i­
to rio no d eb e n p a sa r a o tro sin esp ecia l
p e rm iso de los S u p e rio re s .
• T o d o s d eb e n p ro cu rar d a r b u en e je m ­
plo a su s co m p a ñ e ro s, p a rtic u la rm e n te en
la fre c u e n c ia d e S a c ra m e n to s , a ce rcá n d o ­
s e a e llo s al m e n o s ca d a q u in ce d ía s.
^
P o r la m a ñ a n a , h e c h a la s e ñ a l de le­
v a n ta rs e , cad q uno s e v e s tir á con la m á­
x im a m o d e stia , o b serv a n d o a b so lu to sile n ­
cio.
^ S e re co m ie n d a la ca rid a d fr a te r n a , y,
por c o n s ig u ie n te , q u e s e so p o rten co n pa­
c ie n c ia los d e fe c to s d e lo s co m p a ñ ero s sin
d e s p re c ia rlo s j'am as n i o fe n d e rlo s .
Y co n c lu ía a s í :
N . B . : E s t e re g la m e n to s e le e r á con
c la rid a d lo s p rim ero s d om ing os d e cad a
m e s en to d o s lo s d o rm ito rio s.

fD e fa s
(i)

B arritas de pan delgadísimas j

m or largas.

M e m o r ia s B io g r á fic a s ,
IV , c a ^ t u fo X X IX .)

V olu m en

E S N U E S T R O D E B E R E L P E R S Ü A D IR N O .S , E N P R I M E R L U G A R ? D E L A N E C E S ID A D
T D E L A E F I C A C IA D E L O S O R A T O R IO S F E S T I T O S T T R A B A J A R P A R A Q U E S E .M UL­
T IP L IQ U E N P O R T O D A S P A R T E S E S T O S OA.SIS D E S A L V A C IO N P A R A L A JU V E N T U D .
S O L O A S I P O D R E M O S D E C I R Q U E H E M O S C O M P R E N D ID O Y T R A T A D O D E I.M IT A R
E L C E L O Q U E A N IM A B A E L C O R A Z O N D E DON B O SC O .
DON

PEDRO

R IC A L D O N E

— 17

CRONICA

DE G R A C I A S

ALICANTE.— Virgen Santísima Auxiliadora
y Amontísima Madre mía: por mediación de
Son Juan Boeco te pedí dos gracias, cpie tú
me has concedido plenamente. Como mués*
tra de gratitud envío una limosna pora la
Obra Salesiana.—/. Just
Doy gracias a Moría Auxiliadora por ha*
ber salido bien de tm a operación, y envío
una limosna p ara un pupitre de los Escue­
las Salesianas, según lo había prometido.—
Una suscriptora.

Por un lavor alcanzado por mediación de
María Auxiliadora, doy una limgsna p ara los
Escuelas Sahsianos.— Una derota agradecida.
LAS PALMAS DE GRAN CANARIA. — El
día 28 de moyo próximo posado, precisa­
mente en plena Novena a nuestra Madre
Moría Auxiliadora, luí acometido de rm do­
lor extraño e indefinido, que a juzgar por
la agudeza y persistencia revestía caracte­
res alarmantes. Conducido a la Clínica, la
primera impresión de los médicos iué la de
que se trotaba de alguna perforación de intes­
tinos o de estómago. Hechos los análisis y
exploración del coso, el pronóstico de 1=8
doctores fue el de una oclusión vesicular,
con signos de insuficiencia hepática inicial,
agravado todo por una anem ia hipexcrónica
normocltoria. Por lo que aconsejaba la ope
rarfón inmediata. Con toda confianza acudí
a] siervo de Dios Don Felipe Rinaldi, comen­
zando una Novena, que los niños también
hicieron por su porte. Han pasodo seis me­
ses; el dolor desapareció, y al presente no
siento molestia alouna. Agradecido, publico
lo gracia.— A. Y S. D, B.
VALENCIA.—Habiendo, mi hermano, sufri­
do una operación de estómago, le sobrevi­
nieron complicaciones, de tal modo, que a
las catorce horas era y a m ás del otro mun­
do que de éste: la sangre no le circulaba,^
mo tenía pulso, y su cuerpo estoba casi to­
talmente omoratado. Se Ip aplicaron pode­
rosos ontiblótlcos, que de nad a hubieron ser­
vido. o mi entender, si la Sontísima Virgen
no hubiere dirigido loe acontecimientos de
tal m anera que, después de ponerle yo una
estompa de María Auxilladoro, bajó repentinomente la fiebre,, oue era un constante
peligro p ara su vida. Hago público mt agra­
decimiento a Moiío A’’xilIadora. i’í’ ci*” do
constar que puse por intercesor o Don Rúa.
ANTEQUERA (Málaga).— Teniendo que pre­
sentarse en Cádiz, a exámenes de matrona,
una hermana mía, y no oueriendo buscar
otra Tecomend'''*ióh. me dlHoí.
ptres
recee, a su Virgen Santísima Auxiliadora,
18

esperando que Ella le ayudara a dar con
pie seguro ese nuevo paso b l . s u correrá.
Y sin m ás comencé una noveíia con esta*
intención. No pudo ser mejor la recomendaCióit, pues obtuvo ima nota brillaiite en su
examen. Agradecido a tan buena Madre, e n ­
trego ima limosna p ara su culto, al par que
exhorto a todos a confiar en ella eá cuantos
apuros se hallen.— /uan Arcmda, S. D. B.
MADRID.—^Agradecidísima a la Santísima
Virgen Moría Auxiliadora, a quien encomen
dé el éxito de los exámenes de mi hijo, po­
niendo por intercesor al Siervo de Dios don
Felipe Rinaldi, en honor del cual h’cimos una
fervorosa novena, cumplo la promeso de pu­
blicar la gracia en el BOLETIN y de enviar
una limosna p ara su culto.—Leonor Méndez
d e Pablos.
SAN JOSE DEL VALLE (Cádiz).—Hebiendo
ofligido al pueblo uno epidemia en la cual
murieron algunas personas, y eheontráidonos en ca sa tres enfermes graves, regué a
Moría Auxiliadora nos auxiliase en tan gran
aptiro, prometiéndole recoger de limosnas,
que es lo que m ás cuesta, cuanto pudiera
pora su culto, v publicar la gracia en el
BOLETIN SALESIANO. Hoy. y o fuera de pe­
ligro los tres, cumplo mi promesa exhortan­
do a todos o acudir a tan bondadosa Madre
en todas sus necesidades.—ísobej Núñez Domínouesr.
CARMONA (Sevilla).—Con motivo de cele­
brarse en esta ciudad un triduo p ara honrar
al Beato Domingo Sovio. *depositaron su ima­
gen en este mi Convento de Madre de Dios,
con el fin de llevarlo al día sigu'ente «n
procesión a la tolesta PH<^rol. Hrnde se le
daría el culto del triduo. Encontrábame ape­
nadísima do no poder solucionar un asunto
material; pero cu ya paite prindpal e ra espi
ritual e interesante naro mi alma. Invoqué
Inmediatamente al Beato Domingo Sovio, pro­
metiéndole publicar el favor, difícil de con­
seguirlo y sin ninguna esperanza. Antss del
mes todo se oUemó, obteniendo el fcivor pe­
dido. Cumplo mi promesa, no solamente por
agradecimiento, sino pora propagar la dev^
ción al Beato Domingo Sovio.—Sor Patrocinio
Vían. O. P.
ALICANTE. — Habiendo estado dos veces
enferma una hermana mío, y siendo, en opi­
nión de los médicos necesaria u»>a int*"-*^cióü quirúrgica, empecé una n o v «ia a Moría
Auxiliadora, ofreciéndole una limosna y pu
blicor la g ra d a en la Revisto si la enfermo
mejoraba. Hoy cumplo agradecida mi pro­
m esa. pidiendo a la Virgen le conserve la
salud.—Ocrajen Fot®.

1

Los hijos, huérfanos de tan grande Padre, rodean el humilde lecho donde acaba de
fallecer el IV Sucesor de San Juan Bosco.

El féretro que contiene los restos mortales del Revdmo. O. Pedro Rtcaldone, en el mo­
mento de ser colocado en el coche que los llevará al Cementerio, en medio de una Im­
ponente manifestación de duelo.

El amplio presbiterio del Samuarlo-Besillea de M ari* Auxiliadora, cuyo « a g r tid M U ^ ^
to y íastuosa ornamentación se deben principalmente a la energía y al teeón del í a l l e ^
Rector Mayor de la Congregación Saleslana. durante las solemnísimas ceremonias túnebrra
S r a d “ e» sulra«,o dé su alma, cou asistencia de las primeras a ^ r t d a d ^
1»J l ^ .
varios señores Obispos, el Capitulo Superior de los Saleslant» y el Generaliclo de las Hijas
de María Auxiliadora, y una Inmensa masa de ciudadanos aue quisieron rendir un n ^
menaje postumo de amor y de gratitud al gran bienhechor de la ciudad de Turin a
de largos años, pero muy especialmente en los de la segunda guerra mundial, cuando el
IV Sucesor de San Juan Hosco dirigió pesonal y eílcazmente la defensa pasiva de una de
las más populares zonas de la capital del Piamonte. salvando centenares de vidas i n t e n ­
tes y evitando que el fuego devastador de los bombardeos aéreos destruyera completa­
mente edificios benéficos, tales como el Hospltsd del Cottolengo.
Oficia el sagrado rito el Revdmo. Sr. D. Renato ZlggloUl. Prefecto General de la Con­
gregación Saleslana. asistido respectivamente de diácono y subdiácono, por loe Muy Re­
verendos D. Florencio Sánchez, Inspector de la Inspectoría Tarraconense (España) y don
Ju an Resende. Inspector del Brasil.

BOLETIN
Apartado

SALESIANO
9.t34, — M A D R I D

Texto

Ei Revdmo. Señor

Don

PEDRO

RICALDONE

Rector Mayor de la Congregación Saleslana. Superior de la Familia es­
piritual de Don Bosco s IV Sucesor del Santo, entregó su espíritu al
Creador el dia 25 de noviembre de 1951.
El BOLETIN SALESIANO le dedica este número, y pide a sus lectores
una oración por el alma del amadislmo Padre.

R .

I .

P .

SUMARIO
£ I l Y s u c e s o r de S a n J u a n B o s c o a i*o pudiendo hablaros, os dejo tres recuerdos;
Vivamos siempre y todos en el corazdn y en el espíritu óe san Juan Boseo.
Vivamos siempre y todos en el espíritu y en la pureza angelical de Jíiaría Auxiliadora.
Vivamos siempre y todos en el Corazón de Jesús, sobre su cruz, en las llamas de
su amor, que nos hará eternamente felices en el cielo.
A todos os bendigo de todo corazón; os pido pen ón por las faifas cometidas y os
asegnro que si el Señor, en su boudad. me acoee en el cíelo, todos los días rogaré
por vosotros y por todas vuestras intenciones.
Turin, a las 15 horas dei 22 de noviembre de 1951.»

— 7

• M I M Il -. M r ii 11 M . M ' M - i i l i M I - M K L ' M i r j I

M I M M W N I K I lI t M I M V iM I M iU M iM I I I W I I I W M iliit M I I I M in U tM W

RESU M E N B I O G R A F I C O DEL
RVMO. DON PEDRO RICALDONE
In

t.t h l - I J i M M I I M K M iM - l< M M M - M 'I ^ I I I li l 'M M i l M > M > » lliriiM tM I .M IMI>M l i M : h l i l l l l M M : iilt M I M il l l i l i M l i M l i M I M I M T

Nacimiento y prim eros años
El reverendísimo don Pedro Ricaldone habla
nacido en Mirabello (M onferrato, Italia) e l 27 de
ju lio de 1370.
Sus padres se'llam aban Luis y Cándida R aller i. Don Ricaklone conservó siem pre un em ocio­
nado afecto a su pueblo n atal, y em pleó en
algunas ocasiones su nombre como seudónimo
en algunos escrito s de tipo apologético popular.
Ni que decir tiene que halló en el seno de
su fam ilia el m ejor am biente para una educa­
ción cristian a sólida y profunda. Su piadosísima
madre sacaba de la prolongada oración hecha
en casa, mañana y tarde, sobre el duro suelo;
de la asistencia d iaria a la Santa Misa y de la
Comunión casi d ia ria , inspiración y fuerzas para
el e je rc ic io de las más nobles virtudes domés­
ticas y de la caridad hacia los pobres y menes­
terosos.
No menos aleccionador y eficazm ente educa­
tivo era el ejem plo dél padre, hom bre de re ­
cias virtudes varoniles, a quien sus conciudada­
nos eligieron repetidas veces alcalde de la po­
blación, a la cual él prestó los m ejores servi­
cios.
En esta escuela, la m ejor escuela, ciertam en­
te ; la escuela de un hogar cristia n o , se formó
ese tem ple de acero , revestido de paternal c a ­
ridad, que a los ochenta y un años cumplidos
form aba toda^'ia la ca ra cte ristica de don Podro
Ricaldone y ha sido una de las cosas adm irables
que han hecho de él una verdadera gran figu­
re de la actualidad mundial.
Encuentro con San Juan Bosco
Cursados los estudios prim arios en su pueblo
n atal, el niño Ricaldone ingresó como alumno
Interno en el Colegio Salesiano de Alassío, pa­
sando poco después al de B orgo San M artino.
Aquí tuvo la dicha de conocer al Fundador
de la Congregación Salesian a, de quien tenia
que ser ei cuarto sucedor y a quien habría de
representar por veinte años.
El Santo era ya é>^cíano, y sus fuerzas decHnaban h a d a el ocaso. Sin em bargo, llevado de
aquel su extraord inario am or a la juventud, no
perdonaba fatig a ni sacrificio con tal de hacer
el bien a las almas de los niños y jóvenes que
(a Providencia ponia a su paso. Uno tr a s ,o tr o ,
los alumnos del Colegio de Borgo San Martino
fueron pasando por la habitación de Don Bosco.
Le tocó el turno al pequeño R icald one... Cuan­
do el niño se halló a solas con el Santo se sin­
tió súbita e irresistiblem ente atraído por aque­
llo su bendad paternad; le m anifestó su inte­
8

—

1

Ll

rio r, escuchó sus preciosos con sejos, y en su
alma quedó grabado para siem pre aquel hechi­
zo, que fué en aum ento con los años y con el
conocim iento dei incom parable Apóstol de la Ju­
ventud.
Ricaldone volvió a ver a Don Bosco e l año
1582, en T u rin , cuando, juntam ente con los de­
más alumnos de su Colegio, asistió a la solem­
ne consagración de la Iglesia de San Juan Evan­
gelista. ■ ¡Quién hubiera podido sospechar que
aquel muchachito de doce años, desconocido y
mezclado en tre centenares de otros niños asis­
tentes al grandioso acto, iba un dia a ser el fau­
tor principal y el presidente de otros muchísi­
mos actos parecidos, pero de mayor importan­
cia y grandiosidad, cuales han sido en la histo­
ria de la Congreg'ación los llevados a cabo por
Don Pedro RicaQdone en los densos años da su
rectorado!
En las filas de la Congregación
Seguram ente San Juan Bosco, a quien ol Se­
ñor dotó d e un indudable poder profético, vió el
porvenir de aquel niño com o habla visto o i de
otros muchos- de sus jóvenes a quienes la ProSIdencia quiso asociar a su m agna em presa de
tedención.
Verla cómo habría de com enzar sus estudios
eclesiásticos, prim ero en el Sem inario diocesano
de Casal M onferrato, para continuarlos después
ert ol año 1889 en el Instituto Internacional SaIctsiano de Valsaldce, comp>añoro de dos grandes
Siervos de Dios, esto e s , el príncipe polaco don
Augusto Czartoryski y don Andrés B eltram i. Pa­
ra las alntas que vhren en intim a unión con el
Señor, sus caminos son siem pre rectos.
En España
La predilección que los Superiores S^ ósianos,
a p»artjr dcl Fundador, han manifestado a nues­
tra P a tria , España, hizo que el Siervo de Dios
don Migue] Rúa, prim er Sucesor de Don Bospo,
enviara a don Peslro Ricaldone el año 1890 a
Sevilla. No e ra tcdavia Sacerdote Don Ricaddone,
pero el tam bién Siervo de Dk>s don F riip e RinaW í, que se hallaba por aquel entonces al fren ­
te de la Obra Salesiana en España, le lanzó de
lleno aJ apostolado, decidido quizá por ilustra­
ción de lo alto , a fo rja r en él la gran figura de
su sucesor y del hombre providencial que la
Congregación necesitarla
momentos difícU lsimos de la historia del mundo.
El 2 3 de ju lio de 1892, siendo todavía estu-

diante de Teologi-a, don Pedro Ricaídone comen­
zó a acofTípañar sem analmente ^ Padre Atzeni
al Oratorio de la Santísim a Trinidad, en Sevilla.
Joven, lleno de celo y rico en dotes de mente
y de corazó n , lleg^ó a ser en brexe el alma del
O ratorio, conquistando tal ascendiente sobre
aquellos quinientos muchachos, que apenas canto
su prim era m isa, don Felipe Rinaidi no dudo en
descargar sobre ol novel Sacerdote toda la di­
rección de una obra que habría de llegar a ser
bajo el impulso de Don Ricaldone un modelo de
actividad y de eM cada afo stó licas.
En 1901, el Siervo de Dios Don Migue Rúa,
al mismo tiem po que llam at^ a Turin a Don
F tíip e Rinaidi, dividía las Casas de E sp rín en
tres inspectorías o Provincias, llamadas Céltira,
B élica y Tarraconense, y nom braba para Supe­
rio r o ln sp cc to r.d e la B é lica a Don pcdro Ricaldcjne, erigiend o en Casa IrKpectoriEil £l Oraterdo de la SatUisima T r in id ^ en Sevilla, do­
lado ya de Escuelas Elementiiles y Profesionales
coa áum nos externos e internos.
la -n u e v a Inspectoría contaba con siete Casas
y con 86 religiosos. El prim er pens^niento de
Don Ricaldone fué aumervíar el personal, y para
ello suscitó abundantes y generosas vocaciones,
abriendo en la Casa de E cija un Aspirantado, que
luego se trasladó a M ontilla. ¿Consiguió su fin?
Plenam ente. Diez años más tarde la Inspectoría
tenia d en SalOjiano> m ás, jóvenes, entusizstas,
bien form ados, que hicieron posible La am plia­
ción de las Casas existentes y la ^>ertura de
otras nuevas.
De los tiem{>os d e,D on Rkaídone como In s­
pector de la Inspectoría B ética data el entusias­
mo y la organización d e los Antiguos ÁKimnos,
a quienOs dedicó especi.ai interés como asimismo
a los Ccoperadorcs Salesianos.
Ante la maravillosa caparidari agrícola de la
región -andaluza, promovió el interés por su valo rlz a d ó n , poniendo sy especializada competen
cuando, al concluir la segunda gu erra mundial,
pudo com probar el aumento de tirad a en com­
paración con el año 1939.
Que el pensamiento del am or que el llorado
Don Pedro Ricaldone tuvo al BOLETIN anim e a
todoís a difundirlo y a sostenerlo con cariño y
e fic a c ia , p ara bien de la obra común a toda
nuestra Fam ilia: la redención de la juventud y
nuestra santificación en las em presas de Caridad.

CALENDARIO SALESIANO PARA 1952
S e publica este año b a jo una nueva modalidad
que no dudamos ha de ser del agrado de todos.
Responde además a la consigna que ha de h acer
vibrar el a m b i c ie SaiesJano durante el próxi­
mo año: el Sagrado Corazón de Jesú s, que quie­
re reinar sobre España desde su trono de Amor
del Templo Nacional Expiatorio det Tibidabo en
Barcelona, escenario elegido para los más s o iCTTrnes actos del próximo Congreso EucaristicO'
internacional.
No falte en los hogares de nuestros lectores.
Adcruiéialo en las
Salesianas o directainente a la S E Í, Alcalá, 164, apartado 9 .1 3 4 , Ma­
drid, que lo rem ite a reembolso de cinoo pese­
ta s, sin más gastos.

16 —

i

EFEMERIDES
-------

DON

SECULARES

BOSCO

PA SO

A

A S O a paso, D o n B o s c o ib a dando
fo rm a y s is te m a a su O b r a . E l es”
p íritu e ra y a antig'uo en a q u e lla hu­
m ild e C a s a P in a r d i. D e s d e e l p rim er m o­
m en to h a b ía a len ta d o a llí e l e sp íritu d el
S e ñ o r.
H a s ta e l año 1 8 5 1 lo s m u ch a ch o s orato n ia n o s, q u e co m ía n y d orm ían en el
O ra to rio , n o h a b ía n d isp u esto de u n lugar
d eterm in a d o para la r e fe c c ió n : ca d a uno,
re c ib id a su ra ció n , s e b u s c a b a un h u eq u ecito dond e c o m é rs e la e n paz y g ra c ia de
D io s .
E n d ich o año, D o n B o s c o log ró proveer­
le s d e m o d e s tís im a s m e s a s d e b a jo de aun
m ás m o d e sto co b e rtiz o . E l año 1 8 5 2 in tro ­
d u jo o tra n o v e d a d : d e jó d e d is trib u ir ios
2 5 cé n tim o s q u e d a b a a ca d a m u chachp
por la s m a ñ a n a s para e l d esa y u n o , y en su
lu g ar le s proveyó d ia ria m e n te de u n sa b ro ­
so p a n e cillo , pues h a b ía o b serv a d o que
algu nos, en vez d e pan, s e co m p ra b a n go­
lo sin a s.
A sim ism o s u stitu y ó la s v ie ja s ca z u ela s
por e s c u d illa s d e m e ta l, y añad ió un p rinci­
pio e n la s co m id as de ju e v e s y d om ingos.
D o n B o s c o h a c ía cu a n to e sta b a en su
m ano p ara m e jo r a r e l a lim e n to de su s m u­
ch a ch o s. S o p a y pan s e re v ía n en abun­
d a n cia y a d is c re c ió n . M a s no q u ería que se
lle v a s e n pan fu e r a d el re fe c to r io .
E l C o m en d ad o r C o tta su g irió la id ea de
d ar a lo s jó v e n e s lo s c lá sic o s g n s s in t ( 1 )
d e T u r ín , ert v e * d e pan. L o probó D on
B o s c o d u ra n te u n o s d ía s, p ero d e s is tió al
v e r q u e n o le s s a tis f a c ía , p u es al no te n e r
m ig a d eb ía n co m erlo s m uy le n ta m e n te .

P

E N 1851

-------

PASO...
A sim ism o fu é en 'e s te año cu an d o el
S a n to com en zó a e s ta b le c e r por e s c r ito a l­
g u n as re g la s de d iscip lin a . L a d istrib u ció n
do los o ra to n ia n o s in te rn o s s e h a cía ' según
la s s a la s d o rm ito rio . N o h a b ía to d a v ía cla ­
s e s n i ta lle r e s . A cad a d orm ito rio se d e sti­
nó un clérig o o uno de lo s jó v e n e s má^
fo rm a lito s p ara que h ic ie s e n de a s is te n te s ,
y en to d o s s e colgó u n a ta b lita con los
a v iso s g e n e r a le s . H© aquí a lg u n o s :
® C a d a jo v e n d eb e o b e d e c e r al a s is te n ­
te o a q u ien h a g a s u s v e c e s , e l cu al debprá d ar c u e n ta de cu a n to s e h a g a o diga
en el d orm ito rio .
® N o d eb e d a rs e e n tra d a en e l d orm ito­
rio a n in g u n a p e rso n a , aunqu e s e a parien­
te , sin p e rm iso . L o s jó v e n e s de un dorm i­
to rio no d eb e n p a sa r a o tro sin esp ecia l
p e rm iso de los S u p e rio re s .
• T o d o s d eb e n p ro cu rar d a r b u en e je m ­
plo a su s co m p a ñ e ro s, p a rtic u la rm e n te en
la fre c u e n c ia d e S a c ra m e n to s , a ce rcá n d o ­
s e a e llo s al m e n o s ca d a q u in ce d ía s.
^
P o r la m a ñ a n a , h e c h a la s e ñ a l de le­
v a n ta rs e , cad q uno s e v e s tir á con la m á­
x im a m o d e stia , o b serv a n d o a b so lu to sile n ­
cio.
^ S e re co m ie n d a la ca rid a d fr a te r n a , y,
por c o n s ig u ie n te , q u e s e so p o rten co n pa­
c ie n c ia los d e fe c to s d e lo s co m p a ñ ero s sin
d e s p re c ia rlo s j'am as n i o fe n d e rlo s .
Y co n c lu ía a s í :
N . B . : E s t e re g la m e n to s e le e r á con
c la rid a d lo s p rim ero s d om ing os d e cad a
m e s en to d o s lo s d o rm ito rio s.

fD e fa s
(i)

B arritas de pan delgadísimas j

m or largas.

M e m o r ia s B io g r á fic a s ,
IV , c a ^ t u fo X X IX .)

V olu m en

E S N U E S T R O D E B E R E L P E R S Ü A D IR N O .S , E N P R I M E R L U G A R ? D E L A N E C E S ID A D
T D E L A E F I C A C IA D E L O S O R A T O R IO S F E S T I T O S T T R A B A J A R P A R A Q U E S E .M UL­
T IP L IQ U E N P O R T O D A S P A R T E S E S T O S OA.SIS D E S A L V A C IO N P A R A L A JU V E N T U D .
S O L O A S I P O D R E M O S D E C I R Q U E H E M O S C O M P R E N D ID O Y T R A T A D O D E I.M IT A R
E L C E L O Q U E A N IM A B A E L C O R A Z O N D E DON B O SC O .
DON

PEDRO

R IC A L D O N E

— 17

CRONICA

DE G R A C I A S

ALICANTE.— Virgen Santísima Auxiliadora
y Amontísima Madre mía: por mediación de
Son Juan Boeco te pedí dos gracias, cpie tú
me has concedido plenamente. Como mués*
tra de gratitud envío una limosna pora la
Obra Salesiana.—/. Just
Doy gracias a Moría Auxiliadora por ha*
ber salido bien de tm a operación, y envío
una limosna p ara un pupitre de los Escue­
las Salesianas, según lo había prometido.—
Una suscriptora.

Por un lavor alcanzado por mediación de
María Auxiliadora, doy una limgsna p ara los
Escuelas Sahsianos.— Una derota agradecida.
LAS PALMAS DE GRAN CANARIA. — El
día 28 de moyo próximo posado, precisa­
mente en plena Novena a nuestra Madre
Moría Auxiliadora, luí acometido de rm do­
lor extraño e indefinido, que a juzgar por
la agudeza y persistencia revestía caracte­
res alarmantes. Conducido a la Clínica, la
primera impresión de los médicos iué la de
que se trotaba de alguna perforación de intes­
tinos o de estómago. Hechos los análisis y
exploración del coso, el pronóstico de 1=8
doctores fue el de una oclusión vesicular,
con signos de insuficiencia hepática inicial,
agravado todo por una anem ia hipexcrónica
normocltoria. Por lo que aconsejaba la ope
rarfón inmediata. Con toda confianza acudí
a] siervo de Dios Don Felipe Rinaldi, comen­
zando una Novena, que los niños también
hicieron por su porte. Han pasodo seis me­
ses; el dolor desapareció, y al presente no
siento molestia alouna. Agradecido, publico
lo gracia.— A. Y S. D, B.
VALENCIA.—Habiendo, mi hermano, sufri­
do una operación de estómago, le sobrevi­
nieron complicaciones, de tal modo, que a
las catorce horas era y a m ás del otro mun­
do que de éste: la sangre no le circulaba,^
mo tenía pulso, y su cuerpo estoba casi to­
talmente omoratado. Se Ip aplicaron pode­
rosos ontiblótlcos, que de nad a hubieron ser­
vido. o mi entender, si la Sontísima Virgen
no hubiere dirigido loe acontecimientos de
tal m anera que, después de ponerle yo una
estompa de María Auxilladoro, bajó repentinomente la fiebre,, oue era un constante
peligro p ara su vida. Hago público mt agra­
decimiento a Moiío A’’xilIadora. i’í’ ci*” do
constar que puse por intercesor o Don Rúa.
ANTEQUERA (Málaga).— Teniendo que pre­
sentarse en Cádiz, a exámenes de matrona,
una hermana mía, y no oueriendo buscar
otra Tecomend'''*ióh. me dlHoí.
ptres
recee, a su Virgen Santísima Auxiliadora,
18

esperando que Ella le ayudara a dar con
pie seguro ese nuevo paso b l . s u correrá.
Y sin m ás comencé una noveíia con esta*
intención. No pudo ser mejor la recomendaCióit, pues obtuvo ima nota brillaiite en su
examen. Agradecido a tan buena Madre, e n ­
trego ima limosna p ara su culto, al par que
exhorto a todos a confiar en ella eá cuantos
apuros se hallen.— /uan Arcmda, S. D. B.
MADRID.—^Agradecidísima a la Santísima
Virgen Moría Auxiliadora, a quien encomen
dé el éxito de los exámenes de mi hijo, po­
niendo por intercesor al Siervo de Dios don
Felipe Rinaldi, en honor del cual h’cimos una
fervorosa novena, cumplo la promeso de pu­
blicar la gracia en el BOLETIN y de enviar
una limosna p ara su culto.—Leonor Méndez
d e Pablos.
SAN JOSE DEL VALLE (Cádiz).—Hebiendo
ofligido al pueblo uno epidemia en la cual
murieron algunas personas, y eheontráidonos en ca sa tres enfermes graves, regué a
Moría Auxiliadora nos auxiliase en tan gran
aptiro, prometiéndole recoger de limosnas,
que es lo que m ás cuesta, cuanto pudiera
pora su culto, v publicar la gracia en el
BOLETIN SALESIANO. Hoy. y o fuera de pe­
ligro los tres, cumplo mi promesa exhortan­
do a todos o acudir a tan bondadosa Madre
en todas sus necesidades.—ísobej Núñez Domínouesr.
CARMONA (Sevilla).—Con motivo de cele­
brarse en esta ciudad un triduo p ara honrar
al Beato Domingo Sovio. *depositaron su ima­
gen en este mi Convento de Madre de Dios,
con el fin de llevarlo al día sigu'ente «n
procesión a la tolesta PHa int*"-*^cióü quirúrgica, empecé una n o v «ia a Moría
Auxiliadora, ofreciéndole una limosna y pu
blicor la g ra d a en la Revisto si la enfermo
mejoraba. Hoy cumplo agradecida mi pro­
m esa. pidiendo a la Virgen le conserve la
salud.—Ocrajen Fot®.

1

Los hijos, huérfanos de tan grande Padre, rodean el humilde lecho donde acaba de
fallecer el IV Sucesor de San Juan Bosco.

El féretro que contiene los restos mortales del Revdmo. O. Pedro Rtcaldone, en el mo­
mento de ser colocado en el coche que los llevará al Cementerio, en medio de una Im­
ponente manifestación de duelo.

El amplio presbiterio del Samuarlo-Besillea de M ari* Auxiliadora, cuyo « a g r tid M U ^ ^
to y íastuosa ornamentación se deben principalmente a la energía y al teeón del í a l l e ^
Rector Mayor de la Congregación Saleslana. durante las solemnísimas ceremonias túnebrra
S r a d “ e» sulra«,o dé su alma, cou asistencia de las primeras a ^ r t d a d ^
1»J l ^ .
varios señores Obispos, el Capitulo Superior de los Saleslant» y el Generaliclo de las Hijas
de María Auxiliadora, y una Inmensa masa de ciudadanos aue quisieron rendir un n ^
menaje postumo de amor y de gratitud al gran bienhechor de la ciudad de Turin a
de largos años, pero muy especialmente en los de la segunda guerra mundial, cuando el
IV Sucesor de San Juan Hosco dirigió pesonal y eílcazmente la defensa pasiva de una de
las más populares zonas de la capital del Piamonte. salvando centenares de vidas i n t e n ­
tes y evitando que el fuego devastador de los bombardeos aéreos destruyera completa­
mente edificios benéficos, tales como el Hospltsd del Cottolengo.
Oficia el sagrado rito el Revdmo. Sr. D. Renato ZlggloUl. Prefecto General de la Con­
gregación Saleslana. asistido respectivamente de diácono y subdiácono, por loe Muy Re­
verendos D. Florencio Sánchez, Inspector de la Inspectoría Tarraconense (España) y don
Ju an Resende. Inspector del Brasil.

BOLETIN
Apartado

SALESIANO
9.t34, — M A D R I D